Sus pulgares giraban con nerviosismo, viendo al hombre mayor, en frente suyo, quien estaba organizando la documentación que había recibido, Hyukjae estaba considerando si era o no una buena idea ver a su psiquiatra familiar.
Estos dos últimos meses y veinte días, han sido una falta de concentración para él, sin embargo, todo está vívidamente fresco en su mente, los recuerdos juegan con él una y otra vez.
Aquel estúpido cuerpo bien definido que siempre iba a ver desnudo cada vez que pasaba por la ventana de la cocina de su apartamento, el mismo estúpido de cabello castaño, el mismo estúpido, que lo hace ir a arreglar cualquier cosa a la cocina, solo por verlo, las mismas manos estúpidas, que él puede tomar cuando él o el otro necesita calor o comodidad, la fresca carcajada estúpida que siempre escucha, cuando hace a la otra persona reír y la sonrisa fresca y estúpida que le da por estar en este lugar.
Todo lo está volviendo loco
"Muy bien, Hyukjae," el psiquiatra habló mientras tomaba asiento en un sillón de cuero frente al paciente, arrancando un pedazo de papel de un cuaderno viejo harapiento antes de tirarlo en un cubo de basura cercano. "¿Cómo estás hoy?"
"No tengo idea", respondió con sinceridad Hyukjae, ganándose una sonrisa por parte del médico.
"Bueno, yo no te culpo. El día acaba de empezar ".
Asiente con la cabeza en respuesta, Hyukjae empezó a mirar a su alrededor en el interior de la habitación. Las paredes de color beige que los rodeaban estaban desnudas, con excepción de una ventana redonda que daba a la calle y unos diplomas que fueron suspendidas extrañamente sobre el yeso en varias posiciones torcidas. Había unas cuantas estanterías grandes a su izquierda, en su mayoría llenos de ficción melodrama familiar y pequeñas piezas de cerámica. Luego volvió su atención a la psiquiatra, quien sonreía devolvió la mirada con una sonrisa con hoyuelos descarado. "¿Estás listo para empezar?"
"Oh... sí," Hyukjae tímidamente respondió con una sonrisa gingival de las suyas. "Lo siento, doctor...”
"Por favor, Hyukjae. Llámame Jungsu ", declaró el psiquiatra. "Fui informado por tu amigo que eres bastante tímido, así que si te sientes más cómodo hablando de manera informal, no tengas miedo de hacerlo."
Hyukjae asintió en respuesta una vez más antes de mirar hacia abajo a su regazo y rascarse la panza. "Um ..."
"¿Qué tal esto?" Comenzó Jungsu. "¿Por qué no me hablas como amigo?"
"Un amigo?" Hyukjae preguntó antes de sonreír tímidamente de nuevo. "Yo... actuo de forma diferente con los amigos."
"¿En serio?" Jungsu levantó una ceja ante la información. "¿Cómo es eso?"
"Yo soy..." Hyukjae se mordió el labio por un momento, mientras trataba de reorganizar sus palabras. "Soy, literalmente, un grifo abierto cuando hablo de mis sentimientos, pero la mayor parte del tiempo soy un boca cerrada."
El médico se rió entre dientes antes de garabatear unas notas abajo. "Está bien, Hyukjae. Es por eso que estoy aquí para ayudarte. Cuanto más hable, más voy a ser capaz de sugerir lo que puede ayudarte. No tengas miedo de dejar salir todo lo que está en tu mente”.
Hyukjae frunció los labios con cautela antes de preguntar: "Incluso el sexo?"
"Sí, incluso el sexo", Jungsu sonrió. "He tenido varios pacientes me hablaba de sus aventuras sexuales, y nunca en mi vida me eh extrañado o disgustado por ello."
Oh, te vas a extrañar una vez te diga lo mío, Hyukjae mentalmente respondió.
O al menos eso pensaba cuando el psiquiatra de repente estalló en carcajadas.
"Pruébame" Jungsu desafió con una sonrisa. "Pero creo que es mejor empezar desde el principio y dime por qué necesitas..." Él miró por un momento antes de terminar. "Consejo".
"Está bien" Hyukjae asintió de nuevo antes de tomar una respiración profunda.
"Creo que me he enamorado de un hombre."