Paso #1: Resígnese, lo que usted quiere es algo imposible. Búsquese a otra persona que le llame la atención y déjese de insistirle a alguien que no le pasaría la hora ni aunque estuviera en agonía.
–Vamos, Shikamaru! Él es tu amigo. Yo se que tu puedes hablarle bien de mi, ¿por que no quieres hacerlo?
–Esto es muy problemático. Ya te lo dije, Sasuke no te corresponderá, ¿Por qué eres tan cabezota?
– ¡Porque de verdad me gusta! – bajó la mirada, ruborizándose un poco y sonriendo bobamente – Nadie había sido tan bueno conmigo en el lugar donde trabajo… yo… quede instantáneamente flechado al ver sus ojos, fue como si nuestras miradas se conectaran por muchas horas, de veras
–…Pero si sólo te ayudo a recoger los papeles que se te cayeron, y sólo fueron unos segundos. No exageres.
–¡Joder, no rompas mi momento romántico!
El chico de la coleta soltó un largo suspiro, y luego miro a su mejor amigo con compasión.
–No quisiera tener que hacerte entrar en razón, pero si no lo hago yo, nadie lo hará – tomó a Naruto de los hombros y lo miró fijamente – Te estas creando muchas ilusiones, ves esperanzas donde no las hay y ya hasta crees estar enamorado
–¡Lo estoy! – aseguro el rubio, con el seño fruncido
–Sólo lo has visto una vez y nunca has hablado con él. ¿Cómo puedes estar enamorado de una persona que apenas conoces?
-¡Es amor a primera vista, dattebayo! Además, tú si lo conoces, y eso cuenta como si yo lo conociera – sonrió ampliamente. La resignación no era una opción para el rubio
–El es homo-fóbico. ¿Qué crees que hará cuando te le confieses?
–Umm… no lo se. ¿Me partirá la cabeza en dos?
–Hasta es capaz de tirarte sal si se entera que eres gay y que gustas de él.
– ¿Sal? ¿Pero eso no se usa con los demonios?
–Exactamente
– ¡Shikamaru! ¡Eso no fue cortés, dattebayo! – el hombre de coleta soltó una leve risita, mientras que el rubio se cruzaba de brazos fingiendo enojo
–Lo siento. Volviendo al tema anterior, te aconsejo que te olvides de él – Naruto bajo la mirada, parecía un poco decepcionado – Oye, ¿Qué no te gustaba Sakura?
–Si… pero luego me encontré con Sasuke y fue como un ¡BAM! ¿Me entiendes? – sonrió ampliamente ante el recuerdo de ese maravilloso día
–No, no te entiendo, pero puedo hacerme una idea – respondió el castaño con mirada aburrida
Shikamaru se acercó a la puerta del departamento del rubio, volteo a verlo y le sonrió levemente.
–Nos vemos luego, Naruto
– ¡Hasta pronto, Shikamaru!
Aunque no lo demostrara, el chico de coleta estaba preocupado por su amigo. Sabía lo cabezota que era y no tenía idea de que otra forma podía ayudarlo, porque también conocía muy bien a Sasuke, y no conocía persona en el mundo con la mente mas cerrada que la del joven Uchiha. Si el rubio se proponía conquistarlo sin importarle sus advertencias, entonces seria un largo y problemático camino para él.
Cuando el departamento quedó inmerso en el silencio, Naruto volvió a retomar asiento en el sofá del pequeño living. Sobre la mesita de centro todavía reposaba ese libro que había comprado la semana pasada, debajo de varios papeles mas para que su invitado no pueda verlo.
Suspiró largamente, mientras veía el libro entre sus manos, con indecisión.
“Pasos para enamorar a un homo-fóbico”, rezaba en la tapa, con la imagen de un chico arrodillado frente a otro, ofreciéndole flores pero siendo ignorado por el otro.
Si ese libro era para ayudarlo a conquistar a un homo-fóbico, entonces, ¿Por qué en el primer paso le decía que se resignara? ¿Acaso era una broma o… tal vez el autor quiso poner a prueba su voluntad? De ser así, no había nadie en el mundo más persistente y con voluntad de sobra que Naruto.
Tal vez, la idea del libro es ver hasta donde puede ser capaz de llegar una persona enamorada. Si, eso debía ser.
Oh, Sasuke debía prepararse, ¡porque el casanova numero uno del mundo se encargaría de conquistarlo!