Pasaron dos meses más y Jonghyun llegaba perdido de borracho casi diario, Kibum desde aquella última vez decidió no volver a despertar a Jonghyun.
Un día frio de noviembre salía de compras como cada viernes, su embarazo aun no se le notaba, según Jinki, por que claro esta que nunca perdieron el contacto, el bebé no quería darse a conocer o sentía el rechazo de su padre, ese día frio conoció a Minho.
Kibum estaba sentado en una banca frete a la heladería sobándose su vientre, pensaba las posibilidades de recuperar su relación con Jonghyun, perdido en su mundo que no se dio cuenta cuando un chico alto de cabellos café como el chocolate y ojos grandes como dos esferas se acero se sentó a su lado, fue hasta que vio una lata de café caliente frente a el.
-Tómala te congelaras, me llamo Minho- dijo con su voz grave
-No, muchas gracias, no puedo tomar cafeína- y era cierto durante el embarazo no podía tomar café -Me llamo Kibum-
-¿Eres madre primerizo?- Kibum abrió los ojos como platos
-¿Cómo lo sabe?-
-Yo también seré padre, mi novio será madre o padre como sea y por razones desconocidas cuando me acerque a ti mi pulso se acelero, como cuando estoy acariciando la pancita de mi novio- dijo mientras veía el cielo.
Kibum derramo lagrimas, el no sabia que era sentir esos mimos, llevaba meses peleado con Jonghyun y el no lo tocaba para nada -¿Quieres tocar?- pregunto dudoso
-Oh! Mi Dios pero no llores- le seco las lagrimas -Claro que me encantaría-
Kibum se desabrocho su saco rosa y tomo la mano de Minho para acercarla a su vientre, el joven masajeo la barriguita de este en círculos y sintió una leve patada.
-Amor llegó…- El joven que llegaba no término su frase pues se quedo viendo tal escena.
-Yo… Perdón, no es lo que cree lo juro, lo siento y tomo sus cosas para irse- Kibum estaba que lloraba, era la peor persona quizá ellos pelearían.
-ALTOOOOO- grito el joven de cabello rojo
El rubio empuño sus puños y se volteo, se tiro de rodillas al piso, coloco sus manos a un lado de sus rodillas y bajo la cabeza –Por favor joven perdóneme, no fue mi intención, por favor no pelen por una basura como yo- ambos chicos estaban en shock
Minho corrió a levantarlo y el chico mas joven le acaricio el rostro y le dio una cachetada -Por favor no vuelva a denigrase así-
Kibum en otro momento hubiera reaccionado como un león pero estaba tan cansado de su propia vida que se desvaneció.
-Oh Dios que hacemos Minho- el chico mas joven se preocupo
-Tranquilo Taem, llama una ambulancia y busca en su bolsa algún teléfono- Y así fue encontró el teléfono rosa de la diva y marco el numero dos que era el marcado rápido para Jonghyun.
-¿Si dime Bummie quien se te atoro por el culo?- Un molesto Jonghyun contesto al otro lado de la línea.
-Dis.. Disculpe ¿conoce al joven Kibum?- una pequeña voz se hizo presente
-Claro, es mi esposo ¿quien es usted?-
-Yo.. Yo señor llame al numero de emergencia del joven Kibum por que el se ha desvanecido en el centro comercial y ahora esta en la clínica del centro de Seúl-
-¿Que ha dicho? ¿Cómo que se desvaneció? ¿A que hora paso?- Jonghyun estaba muy desconcertado
-Bueno pues el esta ahora siendo atendido por el medico, pero han pedido que un familiar este con el, pero el no tiene a nadie como familia en su agenda-
-Voy para allá- Jonghyun salió de su oficina maldiciendo y emprendió la marcha al hospital, paso por esa florería cerca de la oficina donde solía trabajar Kibum y recordó por que el chico no tenia a su familia.
>Flashback<
-Buenos Días quiero un ramo de flores para un enfermo- saludo Jonghyun al chico que le daba la espalda.
-Por supuesto, ahora mismo- Kibum se dirigió a la entrada y escogió un ramo de rosas rojas muy bonitas.
Jonghyun quedo anonado con su hermosura y que decir de Kibum que estaba encantado de atenderá ese hombre, se le quedo mirando y noto que el otro hacia lo mismo.
-Muchas gracias- se acerco para leer su gafete que colgaba de su overol -Kibum-
-De nada, vuelva pronto- simple pero esas palabras llevan consigo mil emociones
Ese día Jonghyun no pudo dormir bien, pensando en la delicada figura del joven florista, su sonrisa que lo transportaba a la luna misma, sus ojos oscuros como la noche pero con ese brillo que solo una estrella es digna de tener, su voz pronunciando cualquier palabra, Jonghyun se dijo a si mismo que debía tenerle con el, debía protegerlo.
Al otro día paso antes de irse a la oficina a comprar un ramo de claveles con el pretexto de adornar su oficina pero en verdad solo quería ver al chico, así pasaron seis meses en que empleado y cliente se conocieron y salían a citas antes de formalizar, cosa que fue dos meses después, pero hubo algo que no consideraron, los papas de Kibum no aceptaron su decisión por lo que lo corrieron y Jonghyun se prometió esa noche nunca dejar al chico rubio solo.
>Fin del Flashback<
-Dios que estúpido he sido- se dijo mientras corría por el pasillo que daba a emergencias