Sentía que el aire que entraba en sus pulmones no era suficiente, sentía un agudo dolor en su pecho, todo el cuarto a su alrededor se hundía en la oscuridad, no veía nada, no escuchaba nada, no sentía nada, acaso estaba muerto? Que le aseguraba que aun seguía con vida? El sabia que desde que Zelo, SU Zelo se marcho, su alma, su corazón y sus ganas de vivir también lo hicieron.
Aquello no era un sueño, era la realidad, era su realidad, sabía que no debió haber engañado a JunHong de esa manera, que era cinismo de su parte ponerse celoso y armarle un escándalo cuando lo veía cerca de otros, cuando Zelo lo veía engañándolo, el menor se hacía el tonto, Bang sabía que Zelo sufría con sus acciones pero seguía haciéndolo, seguía hiriéndolo.
Zelo siempre le había dicho, “no importa si me engañas, solo me basta con que me ames y siempre regreses a mí", pero cualquiera sabe que todos, absolutamente todos, tienen un límite y Zelo no era la excepción a la regla y más si Bang era tan descarado como para no intentar siquiera disimular sus infidelidades, como para no dejar de coquetear incluso frente a Zelo.
Cuantas veces HimChan no le había dicho "Bang cuida a Zelo, después te vas a arrepentir" y que le respondía él? "tranquilo HimChan, Zelo solo me ama a mí", que estúpido era al creer esa mentira, que estúpido por su autoengaño , ahora veía como SU Zelo mostraba una hermosa sonrisa a lado de aquel que, según Bang, se lo robo, Zico aquel líder de Block B.
Fue Zico quien estuvo al lado de Zelo cuando este se encontraba sumido en la infinita tristeza gracias a Bang, fue Zico quien seco sus lagrimas, fue Zico quien curo sus heridas, fue Zico quien le saco sonrisas, fue Zico siempre Zico el que estuvo al lado de ayudándolo a seguir adelante cuando Zelo ya no tenía fuerzas y él? En la cama revolcándose con alguien que jamás volvería a ver.
Quería a Zelo a su lado, quería ver su sonrisa al despertar todas las mañanas, quería ver sus hermosos y enormes ojos llenos de ese brillo de inocencia que tanto amaba, quería sentir sus besos, su piel, su aroma, quería sentirlo completo, quería escuchar su voz, su risa, incluso quería escuchar sus berrinches.
Sabía que era egoísta, querer de regreso a Zelo cuando él lo hizo sufrir tanto, cuando el mismo lo alejo de su lado y lo lanzo a los brazos de Zico.
Lo amaba se dio cuenta, tarde pero se dio cuenta, ahora sabía que Zelo era el aire que necesitaba para vivir, que Zelo era el sol que lo iluminaba todas las mañanas, que Zelo era su todo, era quien con un beso le hacía sentir miles de emociones juntas, que con unas palabras era capaz de erizar su piel y hacer latir desbocado su corazón.
-Zelo, por favor regresa, vuelve a amarme- dijo mientras lagrimas caían por su pálida mejilla y sollozos salían de su garganta.
-hyung?- dijo una voz a sus espaldas, una voz que Bang reconoció a la perfección.
-Zelo?-se giro- Zelo!
Sin pensarlo corrió y lo envolvió en un abrazo, escondiendo su cara en el hueco entre su hombro y su cuello, aspirando su dulce aroma.
-por favor perdóname, fui un completo idiota, tarde me di cuenta de lo que significabas para mí- Zelo sentía su hombro mojándose.
Zelo igual lo amaba, si, le había hecho daño y él intento olvidarlo en los brazos de Zico pero fue este quien le abrió los ojos.
:::FLASH BACK:::
-Zelo podemos hablar- dijo Zico sonriendo.
-Claro que ocurre?- Zico lo tomo de su mano.
-Creo que es hora de que vaya con Bang- Zelo abrió más sus ojos.
-porque?, que hice mal?, dime y así lo cambiare pero no me dejes- Zico negó lentamente.
-no Zelo no me malentiendas- acuno su rostro entre sus manos-tu sabes mejor que nadie que aun amas a ese idiota insensible de Bang y el a ti, se dio cuenta tarde pero se dio cuenta.
-pero yo te...-Zico puso un dedo sobre sus labios para callarlo.
-No Zelo, no te confundas más, nos queremos pero no nos amamos y lo acepto, por eso ve con él, deja que el hable, que se confiese, ya será tu decisión si lo perdonas- Zelo abrazo a su ex ahora mejor amigo.
-gracias Zico, muchas gracias- Zico lo beso, era un beso de despedida, lleno de cariño y lleno de la promesa de que si lo necesitaba ahí estaría para apoyarlo.
:::FIN FLASH BACK:::
-hyung yo...no sé si pueda soportar más dolor de tu parte, no creo soportar más engaños- Bang negó rápidamente apretando más su abrazo.
-Jamás JunHong, jamás te haré llorar de tristeza jamás, las únicas lagrimas que rodaran por tus mejilla serán de felicidad, jamás dejare que otros labios que no sean los tuyos toquen los míos, no dejare que otra piel sea la que roce con la mía a parte de la tuya- Zelo se aferro a la camisa de Bang y este lo pego más a su pecho-no dejare que otro aroma que no sea el tuyo me embriague, no dejare tampoco que sean otros ojos, otra sonrisa la que vea al despertar ,no dejare que otra voz me despierte en las mañanas.
-Bang Yong Guk…- dijo tímido.
-JunHong te amo más que a nada, lamento todo el dolor que te cause-lo beso lenta y tímidamente.
-hyung yo, bueno...te amo también - Zelo se puso todo rojo, Bang sonrió, deseaba besar esos labios, perderse en esa piel.
-JunHong ven- dijo mientras lo jalaba para besarlo.
Lentamente acariciaba el cuerpo del menor bajo la camisa de este, aquella piel blanca que tantas veces había tocado, probado, mordido, acariciado, ahora lo hacía con amor, ternura, deseo, tratando de trasmitir lo que sentía, no podía expresarlo con palabras, nunca había sido bueno con ellas, por eso se lo demostraría con acciones.
Le quito la camisa mientras lo besaba, podía sentir como el pecho del menor bajaba y subía con rapidez, quería sentirlo por completo, que gritara su nombre al llegar al éxtasis, quería dejar en claro lo que sentía por él, que solo era de él, que nadie lo alejaría de su lado.
Dejo su boca y bajo por su cuello besando, lamiendo, mordiendo, los gemidos que salían de la boca del menor lo estaban volviendo loco, siguió bajando por el pecho y se entretuvo en los rosados botones erectos del menor, los mordió y los lamio, Zelo se sentía en el cielo.
Poco a poco sus pantalones comenzaban a ser ajustados y a estorbarles, Bang dejo los pezones de Zelo y siguió bajando hasta llegar al ombligo, repartía besos por el níveo pecho del menor.
-hyung hace calor- dijo Zelo entrecortadamente.
-Lo sé…- dijo simplemente y volvió a su trabajo.
Bang llego al inicio del pantalón, mientras lo besaba, comenzó a desabrocharlo, lentamente lo bajo hasta quitárselo por completo, podía ver la excitación del menor debajo de su bóxer.
Sin esperar Bang se quito la ropa y quedo en las mismas condiciones que el menor, ambos estaban en bóxer, con las respiraciones aceleradas, mirándose con deseo.
De nuevo el mayor ataco los labios del menor, quien correspondió con la misma intensidad, Bang le quito el bóxer al menor y se quito el suyo, Zelo ya no podía esperar más, lo quería sentir por completo.
Bang sabía que debía preparar a su pequeño, de lo contrario le haría daño y era lo que menos quería, Zelo se encontraba hundido en el placer, cuando de pronto sintió el primer dedo, se tenso y soltó un gemido de incomodidad, Bang seguía besando su pecho, el segundo dedo hizo su apararición, la velocidad de las penetraciones comenzó a darle paso al placer, el tercer dedo y Zelo soltó un gemido de puro placer, cosa que a Bang éxito de sobremanera.
Pensaba como aquel mocoso solo con sonidos podía excitarlo de tal manera, sin dejar la penetración con los dedos comenzó a besarlo de nuevo, de la nada saco los dedos y Zelo se quejo, Bang comenzó a reír.
-Tranquilo amor, ya viene lo que tanto hemos deseado- dijo Bang al oído de Zelo, con una voz tan gruesa y ronca que Zelo se sentía desfallecer.
-Vamos hyung, hazme tuyo- aquellas palabras fueron la llave para abrir la cerradura que mantenía encerrada a la bestia en el interior de Yong Guk.
Se posiciono en la entrada del menor y de una sola estocada lo penetro, Zelo grito, sentía dolor pero no se comparaba con el placer, lentamente Bang inicio con el vaivén, los gemidos de ambos retumbaban en todo el cuarto, Zelo estaba aferrado a la espalda de Yong Guk sentado sobre él, mientras este con una mano lo tomaba de la cintura y con la otra lo masturbaba.
La velocidad y las penetraciones iniciaron suaves y lentas, después fueron rápidas, salvajes y sin ritmo, Zelo se sentía feliz, se sentía amado, sentía que Bang era ahora suyo.
Bang sentía que pronto llegaría, pudo haberse acostado con muchos y muchas pero nadie le hizo sentir lo que su pequeño le hacía sentir en esos momentos, su aroma era su droga, su voz era su música, su piel era su perdición.
-Hyung m-me ven-vengo!!- dicho y hecho, el menor se vino en la mano del mayor.
Bang al sentir las paredes de su pequeño ceñirse alrededor de su miembro y luego de unas cuantas estocadas más se vino dentro del menor, ambos soltaron gemidos de placer, se miraron a los ojos, ambos tenían los mismos sentimientos, se amaban y no temían gritarlo a los 4 vientos, que el mundo se enterara.
Ambos cayeron rendidos en la cama, con las respiraciones agitadas y sudados, Bang acomodo a su Zelo encima de su pecho y los tapo a ambos con la sabana, veía como los ojos de su pequeño comenzaron a cerrarse, lo volvió a besar y fue correspondido.
-JunHong naekkoeya~ - Zelo sonrió.
-Yong Guk hyung naekkoeya!- se abrazo a él y ambos quedaron dormidos, felices, enamorados.
El mayor ahora sabía que había sido un completo idiota por casi perder a su pequeño, a la luz de sus días, a su estrella por las noches, a su droga, a su todo, a su Zelo, a su pequeño JunHong.