Sehun no había despegado su vista del psp en horas, lo único que le interesaba era pasar de nivel en su nuevo videojuego, era fin de semana y no tenía nada que hacer, bueno tal vez había una pila de cuadernos en su escritorio esperando por él, pero hasta entonces el chico rubio estaba en la casa de su mejor amigo, Baekhyun, este último miraba concentradamente unas partituras sentado frente al piano.
-Sehun ¿podrías bajarle el volumen a esa cosa? ¡No logro concentrarme! – Dijo Baekhyun apartando la vista de la hoja llena de dibujos incomprensibles para Sehun.
-Tal vez deberías descansar un rato hyung, sé que quieres probar mi súper videojuego ultra espectacular que me costó bastante dinero pero al fin lo compre, uggghh! Perdí. – Sehun dejo la consola a un lado y observo a Baekhyun sentado a unos metros de él, de solo mirarlo el corazón se le aceleraba, hacía años que eran amigos, desde que él tenía 5 y su amigo pianista 6, siempre lo había observado practicando, lo miraba a escondidas por la ventana, y luego se acercaba a decirle que era un desperdicio practicar tanto porque los músicos nunca ganan dinero, pero la verdad, es que al pequeño le encantaba ver a su amigo tocar el piano.
Pocos años atrás se había dado cuenta que el cariño que sentía por Baekhyun era más que un simple cariño de amigos, siempre lo había encontrado guapo, y no era el único, su amigo era muy popular en la escuela, no muy inteligente pero si un gran artista, y a las personas le gustaban los artistas, incluso si los critican, mientras tanto Sehun no tenía ningún talento, no era inteligente, siempre se metía en problemas y tenía un grave problema de control de ira, lo cual le gano muchos pases a dirección más unas cuantas suspensiones.
-Eres un idiota Sehun, deberías dejar de meterte en problemas, tu madre se va a preocupar cuando te vea así- Le dijo un Baekhyun de 13 años cuando fue a buscar a su amigo a dirección después de que este se metiera en una pelea.
-Me estaban molestando hyung, ¿Qué querías que hiciera? ¿Quedarme callado y dejarlo pasar? Por favor, nadie molesta al gran Sehun- dijo un Sehun de 12 años mirando hacia el frente con aires de superioridad.
-Como digas – contesto el otro.
Y así fueron pasando los años, Baekhyun mejorando cada día sus habilidades en el piano, cantando con una hermosa voz, captando la atención de muchas personas, teniendo muchas novias, y novios, siendo él. Por otro lado Sehun seguía igual de problemático, las peleas eran algo natural en su vida diaria, los ataques de ira se hacían más frecuentes y por ende más problemas llegaban, si no fuera porque Baekhyun lo obligo a ir a terapia tal vez andaría en las calles lanzando golpes a diestra y siniestra.
Sehun veía como Baekhyun brillaba al pasar los años, como todos admiraban a su amigo, y él se sentía orgulloso de que el artista fuera su mejor amigo, pero el brillo de Baekhyun comenzó a cegarlo alrededor de los 14 años, y alimentaba su corazón dándole energía para palpitar al ritmo de un tren cada vez que veía al otro caminando hacia él, no le importaba no ser el único que se sentía así, muchos morían por Baekhyun, no le importaba que todos admiraran a su amigo y él se quedara tras él , como una sombra, siendo el lado opuesto del chico talentoso, lo único que quería es que su amigo lo mirara, y lo mirara mucho, que le prestara atención, que le diera esa sonrisas que solía hacer a los chicos y chicas de quienes se había enamorado, pues su amigo era muy enamoradizo, y Sehun quería que Baekhyun al menos por un segundo, por un pequeño segundo, lo mirara a él como si estuviera enamorado.
Por eso hacia tantas tonterías, solo para buscar su atención, por eso se metía en problemas, para que el mayor se preocupara de él, pero sabía que su amigo lo veía como a un hermano, cuantas veces se había aguantado las ganas de decirle “Hey no llores, ¡YO TE AMO!” cada vez que el mayor llegaba con el corazón roto luego de una ruptura amorosa.
Pero ahí seguía el, admirado a Baekhyun, sonrojándose cada vez que lo veía tocando el piano, espiándolo cada vez que ensayaba su canto, escuchando su voz, y ahora con una pequeña esperanza , porque Baekhyun estaba soltero, no lo había estado hace mucho tiempo, y lo que es mejor, no tenía a nadie en mente , “no me puedo enamorar, ahora voy a entrar a la universidad y debo esforzarme para cumplir mi sueño” le dijo una vez cuando estaban hablando del tema, pero Sehun aún tenía la esperanza de que en un hueco de su corazón quedara un espacio, no importa que sea pequeño, para él y sus ataques de ira.
-Hey Sehun, Sehun! ¿Me estas escuchando?, ¡bájale el volumen a esa cosa!- volvió a repetir Baekhyun cuando vio que su amigo se le quedaba viendo sin decir nada.
-Ah? – dijo el rubio saliendo de sus pensamientos – ¿qué cosa?
- ¡Al videojuego! ¡Por Dios!, últimamente andas algo distraído, deberías dejar de jugar cosas que te matan las neuronas y comenzar a estudiar para tus exámenes- Baekhyun volvió la mirada a sus partituras – Ni siquiera sé por qué estás en mi casa, sabes que estoy preparándome para mis audiciones y no tengo tiempo de ir a holgazanear contigo, ¿Por qué no vas a la casa de otro a pasar el rato?
-¿Quieres que me vaya? Pensé que te gustaba estar conmigo…- dijo Sehun en un tono lastimero.
-No quise decir eso- Baekhyun miro al rubio- No me pongas esa cara de perrito que no te sale para nada, mejor ve donde Rin, de seguro ella no está haciendo nada.
-¿Rin?! ¿¡RIN!?, debe estar haciendo sus cosas japonesas con su familia japonesa, no tiene tiempo para mí- dijo Sehun, volviendo su vista al videojuego.
-Es una pena, sabes, los dos hacen buena pareja, creo que le gustas- dijo Baekhyun con una sonrisa maliciosa.
- Por Dios Baek! Se nota que tienes la cabeza en otro lado, ¡Rin es gay!, digo, ¡lesbiana! ¿Es que no lo haz notado?- dijo Sehun con una voz desesperada
- Pero de que te quejas si tienes una cara de niña- dijo Baekhyun burlándose de su amigo
Sehun le lanzo un cojín del sofá que le llego directo en la cabeza a su amigo, despeinándolo y haciendo que este se ría de la cara que puso el mayor.
-Deberías relajarte un rato Baek, por que no vienes para acá, te prestare mi consola, sé que quieres jugar- digo Sehun levantando las cejas.
-Sabes, me convenciste, jugare un rato, siempre me llevas al lado oscuro rubio teñido- Baekhyun se puso de pie y se sentó junto al menor en el sofá, le quito la consola y comenzó a jugar , tenía la vista clavada en la pantalla, como si su vida dependiera de aquel auto de carreras.
Sehun lo observaba , observaba el cabello despeinado y la nariz refinada, la piel blanca y los labios rosados, y sentía como el calor subía a sus mejillas y su corazón se aceleraba, “Contrólate Sehun, contrólate”, repetía en su mente, pero no aguanto mucho, se puso de pie, tomo su chaqueta, miro a su amigo que estaba sentado observándolo con una mirada confusa, se disculpó diciendo que tenía que hacer la tarea ( mala excusa, puesto que nunca hacia la tarea), y se fue lo más rápido que pudo de la casa de su amigo, “eres un idiota Sehun” se repetía en el camino a casa, “hacer la tarea, que excusa más tonta!, yo nunca hago la tarea!”. Al llegar a casa subió corriendo a su habitación, lo único que quería era dormir para calmar un poco su corazón, mala idea, ya que en sus sueños lo único que hubo fue el rostro de su mejor amigo.