Capitulo 1, te encontré.
Hacia tanto calor que era difícil el caminar por las calles sin estar sudando. Siwon andaba con prisa por el centro de la ciudad. Estaba lleno de gente, por lo cual era muy difícil moverse. Decidió ir a un café que estaba cerca del lugar, para regalarse un poco en su agitado día. Se sentó en la primera mesa que encontró libre y ordeno un café.
A dos mesas de donde se encontraba el divisó a un chico de más o menos su edad. Solo con mirarlo quedo atónito; le parecía perfecto. Tenía una figura delgada y fina, su piel era banca con un tono aperlado, su cabello era ligeramente largo con un tono negro profundo. Quedó completamente hipnotizado cuando este se giro y mostró su rostro. Perecía de cerámica, sus detalles eran delicados y detallados; en especial sus delineados labios.
No se había dado cuanta cuando sus ojos se conectaron pero no quería separarlos. Había algo en su mirada que comenzaba a ponerlo ansioso, sentía la necesidad de acercarse a él lo más posible.
El joven se levantó provocando que Siwon volviera a la realidad. Salió del café y se adentro entre la multitud de personas. Siwon tardo un poco en reaccionar, pero se levanto de un solo golpe. Sacó un poco de dinero y lo puso sobre la mesa para después poder salir corriendo tras el joven. Lo buscaba desesperadamente en la mirada.
¿Quién era él? ¿Por qué se aleja? ¿Qué es lo que estoy sintiendo?- se preguntaba a si mismo sin dejar de buscar al otro.
Solo ve tras el... - Escuchó en el interior de su cabeza como una respuesta.
Entonces logro verlo a lo lejos, caminaba lentamente, alejándose. Siwon corrió tras él, de vez en cuando chocaba con unas cuantas personas, recibía quejas y protestas de parte de estas. No le importaba eso por el momento, solo se centraba en su objetivo. Nunca antes se había sentido así; tanta curiosidad, ansias y esa extraña necesidad de tener a esa persona cerca de él. Se adentraron a un callejón que daba a un lugar solitario. Sin la presencia de tantas personas era fácil para Siwon seguir al joven, por lo cual comenzó a caminar tras él más discretamente. Ni siquiera se fijaba a donde iba, simplemente continuaba siendo guiado por el instinto.
Se detuvieron frente a un pequeño edificio de tres pisos que encajaba perfectamente con lo siniestro de aquel sitio. Justo antes de que el misterioso joven entrara se giro para ver a Siwon, quien aun estaba allí parado sin decir palabra, le dedico media sonrisa y se adentro en aquel lugar.
Siwon estaba dispuesto a entrar pero se detuvo en seco cuando vio un letrero de neón apagado encima de un pequeño cartel con la leyenda de "Bar Gay". Volvió en si cuando termino de leerlo dando un salto atrás por la sorpresa. ¿Qué estaba haciendo? no tenía ni la más mínima idea de donde estaba. No entendía el por qué había seguido a aquel chico ni aquel extraño sentimiento que le brotaba del pecho. Se alejo del lugar y comenzó a asustarse un poco. Regresó (por suerte, ya que no sabía dónde estaba) a la avenida principal para así poder marcharse a casa.
No podía dejar de pensar en lo que había pasado. Pasaron un par de días y aquel misterioso encuentro no salía de su mente. Recordaba cada detalle perfectamente, el rostro de aquel chico, sus labios, la forma en que se alejaba y su intensa mirada. No podía pensar en nada más.
Al cuarto día no podía soportarlo más, por fin se decidió a volver a ese bar para encontrarse con él. Dudaba el hecho de encontrarlo allí pero debía intentarlo. Solo le bastaba con verlo otra vez.
Mientras iba en camino comenzó a cambiar de opinión. ¿Por qué quería encontrarlo tan desesperadamente? ¿Que era todo aquello que sentía?
Amor.
¿Amor? No, no, no, no... Yo no puedo haberme enamorado de otro hombre... ¿o sí?... En todo caso, no sé quién es, ni su nombre siquiera. Entonces... ¿qué me está pasando? ... ... ¿amor a primera vista?... - pensaba Siwon mientras seguía su camino.
¿Es por eso que su corazón le pedía a gritos el que se vieran de nuevo? Pero aquella idea era radical, siquiera pensarlo le parecía absurdo. El tema de la homosexualidad nunca se le había pasado por la cabeza. Había salido con muchas chicas antes y jamás en su vida había visto a un hombre de esa manera.
Ya estaba completamente arrepentido de lo que estaba haciendo así que se dio media vuelta y se dispuso a volver a casa. Levantó la vista al cielo y suspiro frustrado de sí mismo. Entonces logro divisar un cartel rosado que sobresaltaba entre los demás; con palabras blancas y brillantes decía: "el amor es simplemente amor y nada más"
Eso le logro abrir los ojos. Era cierto, al final nada importaba, solamente lo que el corazón le dictaba. Quién era él para negar sus propios sentimientos. Al fin y al cabo no perdía nada con intentarlo.
Sin más entró al local en cuanto lo vio. Esta vez estaba abierto, ya eran pasadas las diez de la noche así que eso era normal.
Miró el lugar atentamente, las luces eran bajas pero todo podía verse con claridad; las paredes eran color azul zafiro y todas las mesas y sillones eran blanco puro. Del lado derecho había una amplia barra de bebidas, al lado contrario, después de unas mesas, estaba un pequeño escenario con un gran piano sobre él. No había muchos hombres allí, solo unas cuantas mesas estaban ocupadas.
Fue directamente a la barra y se sentó en una de las sillas altas que estaban allí. Rápidamente aprecio un joven castaño para atenderle.
- ¿te sirvo algo?- dijo este.
- Emmm... si por favor, vino blanco. - respondió Siwon nervioso.
- Eres nuevo aquí, ¿verdad?... parece que este no es tu ambiente... - dijo el chico mientras le pasaba una copa. - Por cierto, soy Donghae...
- Un placer, mi nombre es Siwon.
- Deberías volver a casa... estoy seguro de que este no es un lugar adecuado para ti.
- lo sé... pero... estoy buscando a alguien - inquirió Siwon aun con nervios.
-¿quién?
- No lo se... es solo que...
Las luces fueron apagándose dejando solo el escenario iluminado. Un chico salió de un lado del escenario y comenzó tocar el piano. Al escuchar la melodía Siwon se emocionó, apresar de que no estaba sido bien interpretada sentía que aquella melodía le intentaba revelar algo maravilloso.
Entonces logró verlo, estaba sentado justo enfrente del escenario. Aquella misteriosa figura había aparecido de nuevo. Esta vez no iba a perder más tiempo, fue directamente a él. Avanzo entre las mesas sigilosamente y se sentó enfrente él.
- H-hola... m-mi nombre es Choi Siwon... -Dijo intentando parecer despreocupado.
- Emmm... Hola, soy Kim Heechul... - respondió este un poco confundido.
- Y... ¿vienes aquí muy seguido?...
-Acaso... ¿intentas ligarme? - dijo Heechul entre risas.
- ¿Eh?... no... Yo.... es solo que...
- lo siento, tengo que marcharme…
-¡No! ¡Espera! –Siwon tomo de su muñeca justo antes de que se levantara - ... Te soy sincero, nunca he tenido un amor a primera vista; no soy más que un hombre común pero yo no sé por qué estoy así. Puede que solo te he visto dos veces, pero siento que hay un cierto encanto en tus ojos. No tengo ni idea de lo que le sucede a mi corazón, ya no soy yo. Sé que esto es extraño pero... ¿podrías permitirme estar a tu lado?... quisiera conocerte y entenderte...
Siwon necesito mucho valor para poder sincerarse tanto. Nunca en su vida había sido tan directo; tenía que serlo esta vez, sentía que si cometía un error él se iría. Levantó la mirada para poder verlo, estaba sonrojado y sus ojos brillaban. Heechul desvió la mirada, no podía con eso, nunca antes alguien le dedico tales palabras. Era tan lindo que parecía mentira.
- Lo siento... de verdad, no soy quien crees. Si te dejo estar a mi lado saldrás herido. Lo siento. - Dijo Heechul aun sin mirarlo. Con su mano libre se soltó del agarre y simplemente se fue, dejando a Siwon con el alma en las manos.