Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

You por Homeless

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Espero que os guste, me dedique profundamente a ser sincera, quiero dejarles parte de cada una, dejen comentarios por favor. Se le quiere. Homeless

Tan solo quería que su sonrisa se quedara allí sin prejuicios, sin retención, sin promesas ni compromisos.

Quería que este dolor en mi me abandonaste, eligiera a otro ser.

 

Su hermoso rostro cambia tan fuertemente que no puedo identificar lo que siente… ya no.

Extraño esos días donde la tomaba la mano con fuerza, y ella me la estrujaba viendome con esos hermosos ojos color café.

 

Pero sus ojos han cambiado su forma, su amor, su esperanza. No puedo verlos, no me permite observarlos con definición para conectarme a sus sentimientos.

Los aparta de mi vista, y eso me destroza el corazón.

 

Ahora solo puedo ver como ellos se quedan viendo un punto fijo, a pesar que yo esté allí, que yo luche cada día por hacerle saber cuanto es, cuanto hago, cuanto he dejado.

¿No le interesará todo eso? De seguro piensa en tanto, se queda en su mente, apartando todo lo que puede estar a su lado… hasta yo.

 

Fué hace 2 años que descubrí que ella me gustaba, cuando ella tenía esa sensación de temor y ansias de saber, de decirme que alguien tan peculiar como yo le gustaba que me dijera en ése susurro casi audible de un: “tú.. me gustas” y esa sensación en mi piel del no saber que responder.

 

Lo recuerdo perfectamente, aunque seguramente ella lo haya olvidado.

¿A dónde se habrá ido…? Ahora solo tiene el tiempo necesario para decir cuánto odia el mundo, cuánto detesta lo que le rodea, y cuánto le aburre la existencia.

 

Yo estoy allí para ella, sacando mi mejor humor del más recóndito lugar, solo para tí, y … Nunca lo ves.

Piensas que ese dolor que sientes es solo tuyo.

No.

Alguien más toma ese dolor que no te pertenece.

Y recae en mí como una munición.

¿Será que ya me tomaste como algo más? Algo que sabes que siempre estará allí… No significa que te quite importancia.

Antes no sentía esto. Este odio ante esa compostura de amargura. Esas ganas de querer huir de tu efusiva mirada, dejandome atras. Y yo, como solo consigo hacer lo que mi corazón dicta, te persigo.

No es un deber que hago, es lo que me nace hacer.

 

Dime ¿Te nace tenerme en tu memoria? ¿o solo tienes tiempo para ver qué horrible es el maldito universo?

Seguro no lo entiendes, me tomas como enamorada, como optimista.

Si, sigo enamorada de ti, sorpresivamente, nada de todo lo que me has dicho que me ha dolido ha sido tan duro como para alejarme.

Es tan raro, tan extraña sensación.

 

Anhelo que vuelvas… Como yo te recuerdo. Como de quién me enamoré.

Vuelve… por favor, no me dejes sola aquí. No me obligues a alejarme de tí, Caroline.

 

“Acaso… ¿Tú no me ves, como yo te veo a tí?

 

-¿Qué pasa? ¿Y esa mirada? - me preguntaste de costumbre. Crees que cambio mucho de humor, pero la realidad es muy diferente.

-Nada -contesté. No sé como decirte todo lo que pienso de tí.

-¿Estas segura, Mary? 

-Si, tranquila. 

Te volteaste, hablando con tu grupo del salón, un par de chicas que de seguro te divierte escuchar. Te ries arrugando la nariz, y doblando tu cuerpo, cuando te comentan un chiste cruel, que por consecuencia, a mi no me da la suficiente gracia. 

No es que tenga buen sentido del humor, lo tengo, solo que no el mismo que tú. 

Antes te hacia reir... Me acuerdo que me mirabas con curiosidad, con ganas de saber que pensaba. Pero eso ya quedo en el olvido.

Crees conocerme, cuando me has olvidado. 

Solo estoy allí parada junto a ti, y supones que eso es suficiente.

No sé que decir, mi mente se pone en blanco cuando estoy contigo. 

-¿Y.. cómo te fue en tu clase? -me lo dijiste con ese gesto de obligación, como si hasta tu te cansarás de que no diga nada. 

-Normal supongo... No es mucho -intente seguir, pero algo más llamó tu atención. Te volteaste y seguiste divirtiendote con otros, con "tus falsos amigos" pero que seguro les das mas interés. 

Bajé la mirada, siendo callada por el incomodo silencio ante mí. 

Sonó el timbre, algunas veces me fastidiaba que sonara, otras, era una salvación ante no tener que sentirme como un peso para ti. 

-Tengo que entrar a clases, adiós -me dijiste rápidamente, dejandome con una velóz mirada. Seguiste adentro, hablando con ellos. 

Tan solo seguí a mi salón en silencio... No puedo seguir con esto. 

¿Será que algún día te importará por qué estoy así? Lo dudo ahora que no lo has hecho desde hace meses...

Quiero volverte amar como lo hice ayer... 

Pero no sé quién debe empezar...

No me olvides, Caroline, por favor.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).