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EL GRAN INOCENTE SEGUNDO AMOR DEL MUNDO CONTRA LA GRAVEDAD. por akariyuki

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Notas del capitulo:

Hola aqui les traigo el primer cap, realmente estoy muy emocionada, ojala les guste...

Hogar Usami:

-¡A desayunar!- Grito Misaki mientras colocaba los últimos dos platos en la mesa y se sentaba a que llegaran los zombies. Pasaron 2, 4, 6, 8, 10 minutos y nadie bajaba, Misaki se estaba impacientando apunto de tomar un jarrón de agua fría cuando baja el primero de sus cuatro hijos.

-Takeshi- Dijo Misaki con lágrimas en los ojos, era primera vez que uno de sus hijos se levantaba tan temprano, siempre tenía que esperar mínimo media hora.

Takeshi: Era un chico de 17, réplica exacta de su padre, mismo cabello plateado, mismos ojos morados, misma actitud de “Si porque yo digo”, un completo pervertido, flojo y despreocupado, pero al mismo tiempo era amable (cuando se lo proponía), directo, tierno y un poco acosador.

Takeshi se sentó a comer. No paso mucho tiempo, quizás unos tres minutos para que bajara el tercer hijo.

-Oh querido hermanito, bajaste tan lento que me comí tu desayuno- Dijo Takeshi con un tono burlesco.

-No me interesa- Dijo Ryu.

Ryu: Un chico de grandes ojos verdes aunque sin brillo alguno, una mirada un tanto sombría, de cabello plateado, algo sádico, le gusta vestir de negro y es por esa misma razón que todos en su curso hablan mal de él sin conocerlo, aunque no le presta la menor importancia, a sus cortos 16 años ya sabe la realidad, el mundo es mierda.

Ryu se sentó en la mesa al lado de su hermano con una cara de pereza.

Tomo el tazón con café dispuesto a tomar cuando se da cuenta de que está vacío.

-¿Q-ué mier?- dijo Ryu al ver su tazón vacio o quizás con unas cuantas gotas al final.

-Te dije- Sonrió Takeshi.

-Mr. Acosador, te tomaste mi desayuno- Dijo Ryu con un aura sombría, mientras Takeshi tenía una sonrisa de victoria. Pero la sonrisa se esfumo cuando Misaki le dirigió esas miradas de madre, “una más y te corto las pelotas para asegurarme de que no vuelvas a follar en tu vida” y Takeshi asintió como perrito asustado.

Cuando baja el segundo hijo, el mellizo de Takeshi aunque su polo opuesto completamente.

Yu: 17 años igual que su hermano, los mismos ojos morados aunque con el cabello Castaño como el de su madre, tierno, adorable, era un Angel en comparación a su hermano, suave, delicado, tranquilo, pero con un pequeño (gran) problema, nadie notaba su presencia por ser tan tranquilo y calmado.

Bajaba a paso rápido a sentarse en la mesa, y dio un largo suspiro cuando noto que su desayuno estaba intacto, luego miro a su hermano el cual con suerte si tenía la mitad de su omelet.

-Estas son las consecuencias de vivir con un hombre de la prehistoria- Dijo Ryu mientras comenzaba a comer lo que quedaba de desayuno en su plato.

-Acostúmbrate, esto va a ser así hasta que me gradué y vaya a la universidad-Dijo Takeshi

-Eso va a ser en… ¡No!, yo ya habré muerto para cuando ocurra ese milagro- Dijo Ryu de manera nostálgica.

Mientras Yu comía normal sin alterarse por las constates discusiones de sus hermanos, ya estaba acostumbrado a su peculiar familia en especial con su padre, un conejo pervertido que buscaba cada situación para aprovecharse de su madre.

-¿Por qué hacen tanto ruido?- Bajaron los dos faltantes, el conejo pervertido aprovechador de Misakis y el hijo menor de 15 años, ambos con un aura oscura que asustaba a todos los presentes.

-Nadie interrumpe el sueño del gran Usami Akihiko- Dijo el mayor, a Misaki le tiritaban las piernas y sudaba frío.

Akihiko bajo más que rápido y cargo a Misaki al estilo princesita.

-No me importa lo que hagan, pero, puede ser en su habitación- Dijo Ryu de manera fría.

-¡Pero a nosotros nos serviría una clase de educación sexual!- Dijo Takeshi.

-Yo apoyo a Ryu- dijo frio Yu

-Yo apoyo a Takeshi- Dijo Ren el menor de todos.

Ren: Un chico de 15 años de ojos bicolores (morado/verde), no tan pervertido como Takeshi pero pervertido, no cree en el amor por lo que es un rompe-corazones de ukes, es de cabello castaño, tiene fan club aunque en realidad no le importa ninguna de las zorras de falda corta.

-Todo está dicho, me llevo a su madre- Dijo Akihiko mientras tiraba un rollo de billetes a la mesa- Repártanselo y úsenlo para lo que quieras, ropa, comida, peluches, condones, pero no droga ni tragos, ustedes saben les doy la libertad- Dijo eso y se llevó a Misaki a rastras.

Hoy se empezaban las clases y no había mucha emoción por empezar de nuevo en la mierda de clase.

Los cuatro hermanos terminaron de desayunar con tranquilidad ignorando los sonidos que se oían de la habitación de los peluches, trenes y juguetes.

Una vez listos se cambiaron y se fueron a clases aunque no sabían que sus vidas estaban a punto de cambiar…

Casa Kusama:

-Hijos de… ¡Mí Maldición!- Grito un demonio enojado despertando a más de la mitad del edificio, pero no a sus hijos.

-Hiro-san si sigues gritando así nos echaran del edificio- Dijo un Nowaki que salía de bañarse con solo una toalla en la cintura haciendo que el tsundere con el cual estaba casado se le subieran los colores al rostro.

Hiroki tomo seis libros de la estantería y se fue a la primera habitación que se encontraba al lado del comedor, todo estaba en paz hasta que.

-¡Shin te llevo llamando más de media hora!- Dijo Hiroki mientras le tiraba tres de sus libros a la cabeza de su hijo menor pero este solo se dio vuelta se acomodó y siguió durmiendo, Kamijou de más enojado coloco el parlante de su hijo, tomó el micrófono.

-¡¡¡¡¡¡¡¡TE ESTOY DICIENDO QUE TE LEVANTES!!!!!!!!!!!!!!!- EL pobre chico se levantó asustado y un chorro de agua fría lo recorrió por completo.

Shin: El mismo cabello castaño de su madre, era la ternurita del colegio, de grandes ojos azules como el mar, era muy suave, muy cariñoso muy apretable, pero pobre del que lo hiciera enojar, hace tiempo un hombre mayor lo empezó a perseguir en la calle y no encontró nada mejor que patearlo en la entrepierna, estampar su cara contra el piso, y que se lo tuviera que llevar al hospital y a él lo interrogara la policía, solo tiene 15 años.

-Ya me levanto- Dijo con ese tono de “si por la cresta”.

Se paró tomo su ropa y se fue a bañar.

Ahora tocaba la verdadera roca inmovible, Riki.

Riki: Riki era el mejor deportista del colegio, bastante abierto, Salió tercero como el más deseado del colegio, pero no le importo, puede ser algo frío y cortante pero es buena persona (con quien quiere), es bastante alegre por lo que la gente triste lo aburre.

Hiroki entro a la habitación de su hijo mayor la cual olía a ropa sucia por todas partes, lo primero fue tirarle libros, nada, luego tirarle agua, nada, llamarlo, nada, gritarle, nada, moverlo, nada, la alarma, nada, solo había una manera, salió más que rápido donde su vecina y le pidió el peluche gigante de payaso, entro a su casa dejo el payaso al lado de Riki y coloco música de circo.

El pobre despertó asustado, con la música, y al ver el payaso se puso a gritar mucho más fuerte, algo que nunca entendieron fue el miedo irracional de Riki hacia los payasos.

Riki salió corriendo como alma que lleva el diablo y se sentó a desayunar sudando frio.

Todos estaban en la mesa esperando a que saliera Shin.

-¡Ya me bañe!-Grito sin

-¿Por qué gritas?-Pregunto Riki

-¡Porque use el shampoo que da volumen!- Respondía el otro con una sonrisa en su rostro.

Todos desayunaron normal y los chicos al darse cuenta de la hora corrieron hasta la estación, se les estaba haciendo tarde.

Casa Miyagi:

-¡Mamá ya me voy!- Grito un chico de cabello negro y ojos grises con un gorro de panda.

-Espera Haruki- Dijo Shinobu saliendo completamente asustado, podía ser una madre un poco (muy) sobreprotectora. –Toma- Dijo dándole un gas lacrimógeno.

-Realmente ¿crees que es necesario?- Dijo Miyagi saliendo de su habitación con la camisa semi abierta.

-Si- respondió Shinobu con una mirada fría.

-Bueno yo no me meto contigo, la última vez que discutimos cocinaste-Dijo Miyagi con cara de enfermo.

-No fue para tanto- Dijo Shinobu- Apuesto a que querías que te cocinara mi hermana- Dijo con aura de depresión.

-No te preocupes, recuerda que despues de ese día no pudiste caminar durante una semana- Dijo guiñándole un ojo.

-¿Y yo soy el que necesita protección?- Dijo Haruki.

-Si- Respondieron ambos juntos.

-Bueno yo me voy- Dijo Haruki, tomo una llave y bajo corriendo.

Haruki: Ojos Grises y cabello negro, es bastante dulce, pero muy cerrado, casi no habla con nadie más que para los trabajos, es mucho más tímido que su madre, pero saco lo acosador, tiene un lado más o menos yandere y puede llegar a ser acosador, tiene el mismo don de su madre para la cocina.

 

Hogar Takano:

 

-Papá, te pido un favor, cuando tengan relaciones hagan lo posible para que no se escuche por toda la casa- Decía un joven muy parecido a Takano-san, mismos ojos filosos (aunque de color verde), piel blanca y cabello castaño oscuro desordenado.

-No- Respondió Masamune.

-Por lo menos déjame caminar- Salió un Ritsu de la habitación a penas.

-Es por eso que agradezco no se uke- Dijo el joven mirando hacia el cielo con los brazos abiertos.

-Hijo se te hace tarde- Dijo Ritsu para sentarse y volverse a parar.

-Ma, te quiero, pa, igual te quiero, pero mira como lo dejaste, parece más un zombie que un humano- Dijo el menor.

-Kei, no te preocupes, ahora te daré permiso para que cuando tenga que darle duro contra el muro a tu madre, puedas salir a darlo duro tu a alguien más- Dijo Masamune –Así que hoy no llegues antes de las nueve-

-Bien, me voy-Dijo Kei.

Kei: El único hijo de Ritsu y Takano, 17 años, de cabello despeinado oscuro y ojos filosos y verdes, es algo frío con sus emociones y no suele demostrarlas mucho, ha recibido bastantes declaraciones pero ninguna le importa, generalmente saca 10 y no le importa el resto del mundo.

-Hijo sálvame, dijo débilmente Onodera mientras Takano-san se lo llevaba a la habitación a rastras.

 

Hogar Hatori:

-Mamá- Decía un chico idéntico a Hatori moviendo a Chiaki.

-Si ¿Qué  ocurre Shizen?- Pregunto Chiaki.

-Ya nos vamos- Dijo en un susurro Shizen.

-Bien- Dijo volviéndose a quedar dormido.

Shizen: Hijo mayor de Yoshiyuki y Chiaki, completamente igual al padre, mismo cabello, ojos, piel, incluso misma personalidad fría/protectora/celosa, pero igual contenía aunque sea un poco la dulzura de Chiaki, 17 años.

-Bien, Nao nos vamos- Dijo Shizen a un chico dos años menor, que estaba sentado en un sofá lleno de dulces.

-Si- Dijo Nao.

Nao: Nao es el segundo hijo de matrimonio, es un poco despistado e inocente, siempre feliz, adicto a los caramelos, como no puede desayunar (su padre trabaja y todos saben que Chiaki no puede cocinar) come dulces en la mañana, aunque nunca engorda, si su hermano mayor es igual a Hatori, él es igual a Chiaki.

-¿Llevas celular?- Pregunto Shizen.

-Sip- Respondió Nao.

Ambos salieron, caminaron hasta la estación, cuando Nao recibe una llamada.

-¿Aló?- Pregunto Nao.

-¡¿Dónde están?, ¿Por qué no se despidieron?, ¿Desayunaron?, Díganme que no los han secuestrado!- Gritaba un Chiaki histérico desde la otra línea.

-Mamá no nos secuestraron, estamos aquí en la estación-Dijo un Nao sonriente.

-Para la otra despídanse de su mamá- Dijo Chiaki con voz infantil, a lo que Shizen le quito el celular a Nao.

-Nos despedimos, solo que tú estabas durmiendo ¡¿Qué madre no se despierta o no presta atención cuando sus hijos se despiden?!- Grito Shizen desesperado.

-Ya, tranquilo, no te alteres- Dijo Chiaki con calma.

-¿Cómo quieres que me ¡Calme!?- Grito Shizen y como si estuvieran en un cine todas las personas de alrededor lo hicieron callar.

-Ya, tranquilo, solo quería saber eso, nos vemos- Dijo Chiaki y colgó.

 

Hogar Yukina:

-¡Sho ¿Estás listo?!- Grito Kisa.

-Si- Respondió un chico idéntico a Yukina.

Sho: El único hijo de Kou y Kisa, el mismo cabello de su padre, pero sus ojos son de color más oscuro, alegre y amable aunque posesivo y celoso, un poco juguetón con las chicas, pero este año iba a ser diferente, una personita estaba por llegar a su vida.

-Qué bueno, acuérdate que hoy empieza el periodo así que llego temprano ¿ne?- Dijo Kisa de manera amable.

-Wow, y eso que hoy estas de buenas- Dijo Sho con sorpresa.

-Bueno solo te digo que ayer…-

-Tuviste sexo con papá-Respondió Sho rápido

-Si- Dijo Kisa.

-Bien me voy- Grito Sho mientras salía de la casa para tomar su bicicleta.

 

Hogar Eusegi:

-¡Muy bien hoy empieza el primer día de preparatoria para Sorato!- Decía un brillante pelirrosa.

-Shuichi callate un poco estoy intentando terminar esta novela- Decía Eiri un tanto molesto como no si la personalidad brillante de su hijo había salido igualita a la personalidad brillante de su madre.

-Yuki que frio- Decía Shuichi con un llanto falso.

-Hoy empiezo la prepa- Decía un chico completamente brillante incluso más que Shuichi.

-Sorato, por favor no seas igual que tu madre- Dijo Yuki con tono molesto.

A lo que Sorato hizo un puchero.

Sorato: El hijo único de Suichi y Yuki, quien despues de mucho tiempo acepto la propuesta del menor por tener un hijo, era de una personalidad extravagante, con frecuencia hacia locuras y se metía en problemas de una manera un tanto especial, tenía un gran talento para el dibujo, pero era algo flojo.

-Las clases están por empezar, así, los veo más tarde, hoy voy a buscar los lápices especiales, al fin conseguí reunir el dinero- Dijo Sorato mientras salía corriendo para que sus padres no se enteraran de que estuvo trabajando todo el verano en una librería.

 

 

Hoy es el día en el cual estos chico se cruzaran con la persona que tiene su hilo rojo del destino, aveces se enredara, pero el amor es capaz de superar cualquier cosa.

Notas finales:

Gracias por leer el primer capitulo de mi fic, ojala comenten, ustedes son la inspiracion para el fic, pueden dejar criticas y alomejor hasta yo me critico (estoy a favor del auto bullyng) nos leemos, subo cap todos los días y si estoy inspirada quizas dos o tres 


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