Baekhyun miraba hacia el estante y suspiró, maldiciendo en silencio por su baja estatura. Agarrando el taburete, lo acercó y se paró en el, todos los libros que necesitaban ser puestos de vuelta, estaban en sus brazos.
Con más esfuerzo del necesario, en su mayoría por ser bajo, Baekhyun logró poner todos los libros en su lugar. Por suerte para él, ninguno de los otros libros en su carreta necesitaban que él se parara en el taburete. Más tarde, puso su carreta de vuelta, saludando a sus compañeros de trabajo y fue afuera para almorzar. Verdad era, que él no estaba realmente hambriento. Él solo necesitaba salir por un rato.
Byun Baekhyun llevaba trabajando en esa librería por un tiempo. A él le gustaba leer y seguro que trabajaría con libros todo el día, pero no era el trabajo de sus sueños, no por un largo tiempo. Sus compañeros de trabajos eran flojos, su jefe era rudo, y él honestamente no ganaba lo suficiente como para soportar toda esa mierda. Con un suspiro, él iba en la fila de la cafetería a la par de la librería, con la esperanza de ahogar su miseria en su amargo, pero rico, café negro.
La fila era corta, y pronto iba disminuyendo hasta quedar solo él y la persona que estaba enfrente de él. Baekhyun estaba contemplando lo que iba a comprar cuando la persona de enfrente se dirigió hacia él, café caliente y todo.
Él gritó mientras saltaba hacia atrás, el agua hirviendo filtrándose a través de su camisa y quemándolo.
“¡Oye, mira por donde caminas!” Baekhyun dijo a la persona enfrente de él.
La persona era levemente más alta que él, con camino a lado y cabello café, y suaves rasgos faciales que le recuerdan a Baekhyun, algo, a los de un conejo. Él estaba actualmente solo parado ahí, luciendo más bien tonto; su boca estaba completamente abierta y sus dedos seguían curvados sobre su taza de café que seguía en su mano.
“Y-yo realmente lo siento…” él jadeó, tomando otro paso hacía Baekhyun. “¡No me di cuenta que estabas ahí!”
El más bajo lo miro de arriba abajo, mientras hacía una nota de su obvio acento.
“Solo… olvídalo” él respondió con un suspiro. “Fíjate la próxima vez, ¿está bien?”
Baekhyun solo caminó luego de eso, sin molestarse en pedir su café.
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“Oye, ¿qué ha pasado contigo?” una odiosa profunda voz preguntó mientras Baekhyun entraba a la librería. “¿Encontraste a un monstruo de café?”
Tomó un momento para mirar al dueño de esa profunda voz, un hombre monstruosamente alto con el nombre de Chanyeol.
“No, un chico extranjero corrió hacía mí y luego derramó su café sobre mí.” Él contestó, mirando hacía su camisa. “Ahora cállate y por favor consigue realmente algo para trabajar.”
Baekhyun pasó el resto de su tiempo de almuerzo tratando de lavar la mancha de su camisa, silenciosamente agradecido que él no haya usado una camisa blanca ese día. Se las arregló para lograr quitar la mayor parte de la mancha, pero ahí seguía una gran mancha mojada y él seguía oliendo a café.
Él podía escuchar a las personas hablando a sus espaldas, susurrando sobre qué pudo haberle pasado, y parando al momento en que él se giraba o los miraba. Que mundano, vidas sin valor que esas personas tenían.
Ese día solo resultó ser en general malo, y hasta el fin, Baekhyun tuvo que usar todo su auto-control restante para evitar golpearles a todos en la cara. A pesar de lo mucho que odiaba este trabajo, ese era su único trabajo y él no podía permitirse perderlo.
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“Me gustaría llevarme este libro” una suave voz llegó a los oídos de Baekhyun, quien estaba del otro lado del mostrador. “Por favor”.
Él miro hacia arriba inclinando su cabeza y tomo el libro, antes de dejarlo caer en un sonido sordo sobre la mesa. Ahí, parado frente a él, estaba el mismo chico que derramó el café sobre él, el día anterior.
“Oh, ¡yo esperaba correr hacia ti de nuevo” el otro sonrió, poniendo una mano sobre el mostrador. “Mi nombre es Zhang Yixing, no tuve la oportunidad de presentarme correctamente ayer.”
“Byun Baekhyun…” él masculló torpemente, aceptando la mano del otro a pesar de lo sucedido ayer. “Um, es un gusto conocerte.”
“¡Igualmente!” él exclamó, sonriendo causando que unos adorables hoyuelos aparecieran en sus mejillas. “Y realmente lo siento sobre ayer… ¿Me permitirías recompensarte?”
Baekhyun solo asintió, decidiendo que no había posibilidad de que fuera peor de lo que sucedió ayer.
“¡Genial! Vendré a recogerte mañana, ¿está bien?” Yixing continuó feliz. “¿A qué hora sales del trabajo?”
“Cinco…” Baekhyun respondió, estaba un poco preocupado de que fuera o no una buena idea.
“Está bien, ¡te veo mañana, Baekhyun-ssi!” él se despidió emocionado de Baekhyun y se volteó para irse pero no antes sin darle al otro su número.
El chico bajo solo lo vio irse antes de ver hacia abajo y mirando lo que había comenzado su conversación en primer lugar.
“¡Espera! ¡Olvidaste tu libro!” él llamó después al otro. Ya era muy tarde, sin embargo, Zhang Yixing se había ido de largo.
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“Oye, ¿listo para irnos?”
Baekhyun miró hacia arriba para ver a Zhang Yixing una vez que él estaba parado enfrente de él, con una amplia sonrisa y hoyuelos profundos.
“Uh, solo dame un momento…” él masculló mientras se apresuraba a ir a la parte posterior para agarrar sus cosas. “Está bien, vam-“
Él paró en medio de la oración mientras veía a Chanyeol sonriendo hacia él amplia y horripilantemente.
“Ooh, alguien tiene una cita” él más alto exclamó en una forma cantarina y burlándose.
“¡N-no!” Baekhyun tartamudeó. “¡E-esto no es una cita!”
Con la cara de un rojo brillante, él agarró una de las muñecas de Yixing y empezó a jalarlo fuera de la librería.
“¡No olvides de usar protección!” Chanyeol gritó mientras los otros salían por la puerta.
Una vez afuera, Baekhyun soltó la muñeca del otro, seguía con un gran sonrojo.
“Yo… Yo realmente lo siento por eso…” él murmuró, mirando a cualquier lugar menos a Yixing. “Él solo es un idiota…”
“No te preocupes” Yixing dijo encogiéndose de hombros. “¡Vamos!”
“¡Espera! ¿A dónde iremos?” él más bajo gritó mientras el otro lo empujaba escaleras abajo y metiéndolo en su carro.
“¡Es una sorpresa!”
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Después de una hora manejando, Baekhyun empieza a cuestionarse si realmente debió de aceptar esto.
“Oye, ¿estamos perdidos?” se volteó para preguntarle a Yixing, quien seguía viéndose sonriente como siempre.
“¡Por supuesto que no!” El otro contestó, sin dejar de mirar hacia delante. “Estaremos ahí pronto.”
Baekhyun realmente comenzaba a dudar sobre eso, ya que parecía que estaban en medio de la nada. La luz de la ciudad ya había desaparecido en la distancia y ahora no había nada más que oscuridad. Y solo cuando él pensó que podía confiar en Yixing, él escucha el chisporroteo del motor.
“¿Qué fue eso?” Él susurró, ligeramente aterrado.
“Nada, nada en absoluto.” El otro respondió mientras el carro patinó y paro en medio de la carretera. “oh mierda…”
“¿Por qué paramos?” Baekhyun preguntó, moviendo su cabeza para mirar a todas direcciones. “Esto no puede estar bien, ¿verdad?”
“… Uh” y por primera vez desde que se conocieron, Yixing se miraba inseguro de sí mismo. “Yo, um… Yo olvidé llenar el tanque de gasolina…”
“¿¡Tú que!?” Baekhyun gritó, antes de empujar la puerta abierta del carro brutalmente.
“Oh, y sí, estamos perdidos.” Yixing agregó, calmado, con una sonrisa.
El más bajo gimió y salió del carro antes de cerrar la puerta detrás de él. Él debería de haber sabido que esto era una mala idea…