Todo normal, aquel día él llegaba al colegio tranquilo. No le prestaba atención a nada, ni a IO que lo miraba mientras el caminaba, o simplemente… no lo notaba. Escucho como alguien reía, volteo un poco y puedo ver a YOHIOloid riendo y a IO sonrojado y con cara de que lo iba a matar.
Paso por el club de arquería, pudo ver a Usee sonriéndole, él le devolvió la sonrisa. Pasó por el buzón del club de literatura y pudo ver como Gumiya buscaba una carta, suspiro resignado al no poder encontrar alguna.
Paso en clases hablando a escondidas con Mikuo, y pudo ver por la ventana como desde el otro lado del colegio Gumiya miraba al cielo, como esperando que caiga una respuesta.
Después de sonar el timbre él se dirigió a la sala del club de literatura. Se encontró con Gumiya sentado en la mesa leyendo un libro.
-creo que los libros de gallico están llenos de una fragancia de invierno…- dijo sin mirarlo.- como nieve recién caída, se ve que su alma ha sido purificada por la helada subrealidad. Tal belleza trae consigo una matriz de tristeza…- miro a Len y le sonrió.- como tú.
-¿puedes dejar de acerté el coqueto cuando paso frente a ti?- respondió molesto, dejo su maleta a un lado y se sentó en una silla frente a la mesa y comenzó a escribir en las hojas que se hallaban ahí, listas para él. – o al menos no lo digas tan a la ligera.
Ya habían pasado casi dos años desde ese encuentro casual. Len se había con convertido en uno de los dos único miembros del club de literatura. Todos los días después de clases se dirige a esa habitación. Y actualmente se encontraba escribiendo un “bocadillo” para Gumiya.
¿Bocadillo?
Si, el presidente de 3er año del club de literatura, come libros. Era su sustituto de beber agua o comer pan. Como cada página y palabra del libro como si degustara un manjar.
-gallico es ciertamente delicioso.- dijo después de haber arrancado una de las páginas y habérselas metido en la boca. – sabes, ¿de gallico? Es un novelista que nación en NY. La película Poseidón puede que haya sido muy famosa, pero para mí su mejor trabajo fue el ganso de nieve.- se le hico agua la boca.
-estas babeando…- le dijo sin despegar la mirada de su escrito.
-oh…- se limpió con su manga.- como iba diciendo… un artista solitario, Rhayader, vive cerca de un pantano. Una jovencita, Fritha, aparece llevando un ganso. La calmada y miserable alma de ambos entra en contacto. Ambos tenían sentimientos sinceros, pero ninguno lo expresaba con palabras. Un amor tan puro…- dijo parándose y dando vueltas.- ¿lo entiendes, Len? Uno no puede decirlo a la ligera, los sentimientos genuinos se llevan hasta la tumba. Cuando cierras la boca y aguantas tienes un hermoso pero trágico ambiente.
-ten…- dijo extendiéndole el papel. – termine.
-ah.- tomo el papel en sus manos.- ¿Qué clase de historia será hoy? Realmente estoy ansioso por tu avance. – Sonrió.- a comer…- tomo un pedazo del papel y se lo metió en la boca.- los ensayos escritos a mano son mis favoritos. Los escritores de libros que leo tienen un sabor más maduro. Este sabor de ensayos escritos a mano se siente como si metieras tus manos en un libro fluyendo y bebieras de él. Es tan delicioso…
Len lo miro un momento y luego suspiro.
-¡imposible!- grito Gumiya con lágrimas en los ojos, ya iban de regreso a casa. Y tuvo que pasar escuchando a Gumiya todo el camino. – la caja de Daifuki se estrelló y mato a su primer amor. Odio este… este sabor tan raro. Es como sopa de miso con tofu y una pizca de pasta de judías rojas. ¡Es horrible!
- si es tan horrible, simplemente no lo comas.- dijo cansado.
-no puedo…- se detuvo molesto.- soy el chico literario que ama cada una de las historias de este mundo, no puedo desperdiciar comida.
-“comida” dices…- Len rio un poco. Siguieron caminando.
-cuando venga la primavera. Me graduare e iré a mi primera opción, la universidad Hokkaido.- dijo mientras echaba sus brazos hacia atrás y apoyaba la cabeza en ellos, intentando ver mejor el cielo lleno de estrellas.
-¿estudiaste?- pregunto con un toque de preocupación.
-por supuesto.- se puso en pose militar.- soy un candidato entusiasta. Incluso resolví el resumen de matemáticas ayer.
-¿eso no es para primer año?- dijo Len no tan sorprendido.
-que cruel.- lo miro un momento.- es un resumen con preguntas para 2do año.
-¿no debería ser para 3er año?- Gumiya callo un momento.- ok, pero ¿una vez que entres a la universidad que pasara con tus “bocadillos”? no esperaras que te los envié por cartas a diario, ¿verdad?- Gumiya sonrió triste.- ¿Qué?
-no te pediré eso…- cerró los ojos y suspiro.- tal vez ya no pueda comer los bocadillos que escribes para mí.- lo miro y le sonrió.- pero algún día déjame leer tu novela.
-eso es imposible para mi…- Len miro al suelo. – pe— A… A… ¡ACHU!
-se puso frio, ¿verdad?- Gumiya sonrió con burla. – regresemos.
Salió corriendo, sin dejar decir nada a Len. Llegaron a la estación de tren en el momento justo en el que el tren iba a su cerrar sus puertas. Len se fue por su lado y Gumiya por el otro.
Semejante vida, hermosa y pacífica… sin dolor miseria o desesperación. Viviendo pacíficamente. Ese es…
“mi gran deseo…”
Pensó sonriendo, mientras caminaba ya llegando a su casa.
Al otro día regreso por el mismo camino, otro día al colegio. Caminaba tranquilo hasta que escucho una voz conocida para él.
-buenos días, Usee.- dijo volteándose para saludarlo.
-bueno días…
-¿el club de arquería tiene practica durante las vacaciones de invierno?- pregunto intentando hacer conversación.
-no a diario, aún tengo que ir al hospital.- lo dijo tranquilo, eso fue lo que más sorprendió a Len.
-¿Cómo está tu madre?- pegunto nervioso.
-bueno, como siempre.- le sonrió intentando clamarlo.
-ya veo…
-¿iras a algún lugar durante las vacaciones de invierno?
-no.- respondió sonriendo.- a ninguno. Tal vez valla al hatsumode.
-¡Len!- YOHIOloid vino corriendo hacia ellos, jalando a IO.- ¿con quién iras al hatsumode?
-espera… no, YOHIO…- IO sonrío nervioso.
-bueno, ¿Por qué no vas con IO?- dijo empujándolo, Len retrocedió.
-bueno…- IO miro a otro lado.
-eh… ¿ah?- Len se sonrojo.- yo…- se encogió de hombros y miro por encima de los dos chicos. Ellos siguieron la mirada de Len.
-Len, ¿quieres ir conmigo?- pregunto dudoso Usee, ya que era el más alto.
-¿eh?- todas las chicas voltearon.
-¡yaoi!- una de pelo verde saco su teléfono y comenzó a grabar. – ahora bésense.
-vámonos…- Len siguió caminando mientras los otros 3 seguían detrás de él.
Al llegar a clase cada uno fue directamente a su silla. Len se sentó en la suya y saco su libro.
-Len, hoy estas a cargo.- le dijo Gakupo sonriendo.
-sí, gracias.- le devolvió la sonrisa y luego le sonrío a IO, el cual lo estaba viendo. Este miro para otro lado, mientras YOHIOloid reía.
Len rio un poco, a veces IO podía llegar a ser tierno.
-¡Len!- volteo al escuchar ese grito.
Era Gumiya, que estaba parado afuera de su grado, saludándolo. El abrió la ventana.
-buenos días, Len.- le dijo sonriendo.- ¿Qué sucede, estabas viendo a IO?
-tú también, ¿Qué te pasa tan temprano?- dijo Len ligeramente molesto.
-ah cierto.- lo tomo del brazo.- ven
-no voy a ir para tonterías.- Len se agarró de la pared.
-¡no es eso! Algo muy importante ah pasado.- dijo mientras lo jalaba hacia afuera.
-no-- -Len no pudo decir nada, ya estaba siendo sacado sin cuidado alguno por la ventana.
-¡vamos!- Gumiya comenzó a correr.
-no, espera…- fue arrastrado por él.
Llegaron corriendo al buzón del club de literatura.
-ah…- Len jadeo por el cansancio y luego miro al buzón.- ¿Por qué no lo has votado?
-claro que no.- Gumiya estaba como si nada.-la dulzura de las cartas, es el cupido del amor. Esa es la misión del club de literatura.
-¿de qué hablas?- tomo un largo respiro.- soy el único que escribe, de todas formas. Además, solo hubo una carta. Después de eso, ni una sola petición.
-eso crees.- Gumiya sonrío con arrogancia, como siempre lo hacía.
-¿eh?- Len se acerco sorprendido.
-¡ta-da!- Gumiya abrió el buzón, había una carta.
- no es cierto, hay una.- Len se acercó más.
-esta alegría tenía que ser compartida con todo el club de literatura.- la sonrisa de Gumiya se expandió.
-¿“todo”? si somos dos…- Len suspiro.
-Len, te fijas mucho en los detalles.- Gumiya tomo la carta en sus manos.-estoy ansioso, ahora tengo miedo de abrirlo.- tomo aire.- muy bien, lo hare.
-adelante…- Gumiya lo abrió, la miro confundido y luego se la entregó a Len.
-un momento… esto es…-miro a gumiya