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Eternamente tuyo mi Angel Endemoniado por Por amor al Sasunaru y al Yaoi

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Notas del fanfic:

One-shot participante en el concurso de la Pagina de Facebook

Por amor al Sasunaru y al Yaoi

 

Notas del capitulo:

los personajes mencionados aqui pertenecen a su dueño y creador Masashi Kishimoto así como la historia le pertenece a Yuritzi Martinez 

Eternamente Tuyo Mi Ángel Endemoniado

¿Hay algo peor que la soledad? Según he oído, la soledad vuelve fuertes a las personas ¿es eso cierto? Recientemente mis padres fueron asesinados por demonios chupasangre, o mejor dicho, por vampiros. Creo que no es muy común que las personas sean asesinadas por seres como estos pero así es. Mi padrino, Jiraiya, está gravemente enfermo y cada tarde al salir del colegio voy a visitarlo al hospital como es rutina desde hace tres meses.

-chicos, tengo que darles un aviso muy importante.- Anuncio Kakashi-sensei. Yo como de costumbre no estaba poniendo atención.- a partir de mañana tendrán con ustedes a su nuevo profesor, yo tengo un asunto muy importante por resolver así que lo que resta del año él les dará clase.

En eso el timbre suena y todos comienzan a despedirse de Kakashi- sensei de una forma un poco más emotiva de lo normal, que extraño.

Ese mismo día durante la tarde corro por el pasillo hacia la biblioteca pues se me había olvidado que tenía que entregar un trabajo, ni siquiera me fijo en el camino, tengo prisa por irme de ahí. De repente choco y caigo al suelo.

-disculpa- digo mientras me sobo la cabeza.

-no te preocupes.

 

Levanto la mirada y un joven un poco más alto que yo me extiende la mano y yo acepto. Él va vestido con un elegante traje negro que hace resaltar el color carmín en sus ojos y lo pálida que es su piel. Además de eso, se ve muy serio, muy frio y nada amigable.

De inmediato sigo mi camino, “que sujeto tan raro ¿me pregunto si será familiar de algún otro alumno?”.

Al día siguiente, antes de que empezara la clase de historia, todos hablaban sobre el nuevo profesor.

-me pregunto si será alguien como Kakashi-sensei o será un anciano gruñón.

Comento Sakura.

-pues espero que sea como Kakashi-sensei o más guapo aun.

-tu solo piensas en eso Ino.

-de todas maneras nos dará historia, da igual como sea, sigue siendo muy problemático y aburrido.

-no se dé qué te quejas Shikamaru, tu eres muy inteligente.

-no soy inteligente Choji, solo no quiero quedarme aquí después de clases o durante las vacaciones.

-escuche que es alguien muy joven, ¿tú que crees Naruto?

-¿eh?

-sobre el nuevo profesor.

-¿Cuál nuevo profesor?

-¿Qué no pusiste atención ayer?

-eh…yo…

En eso entra Tsunade, la directora del colegio, acompañada del mismo sujeto con el que había chocado ayer.

-les quiero presentar a Sasuke Uchiha, su nuevo profesor a partir de ahora. Sasuke suplirá a Kakashi.

“Sasuke…”

-gracias Tsunade-sama, un gusto en conocerlos chicos, espero que nos llevemos bien.

No podía creerlo, ¿Cómo alguien tan joven podía ser maestro?

-los dejo, espero que no causen problemas.

Tsunade salió del aula y enseguida comenzaron a escucharse los murmullos de todos mientras Sasuke miraba a todos de una forma bastante indiferente.

-¿alguien desea hacerme alguna pregunta?

Los murmullos fueron remplazados por miles de preguntas.

En el trascurso de la clase trate de no mirarlo demasiado porque de alguna manera me hacía sentir incomodo, como si algo en el no fuera normal. Esa misma tarde me topé con un antiguo profesor.

-oh! Naruto!

-hola Iruka-sensei.

-¿Cómo has estado? ¿Cómo esta Jiraiya?

-bien aunque el sigue grave-dije con tristeza- pero su ánimo no cambia.

-lo siento, aunque ustedes dos se parecen mucho, igual de optimistas.

-sí, tienes razón.

-¿me haces un favor? ¿Podrías llevar esto a la oficina de la directora?

-claro.

Iruka-sensei me entrego un folder. Seguí mi camino pues la oficina de la directora me quedaba de paso. Cuando estaba por llegar vi a Sasuke entrar a la oficina.

-¡esto no puede ser! Tengo que irme ya.

Me acerque a la puerta y antes de que tocara escuche sin querer la plática entre ellos dos.

-¿y bien, que te parece?

-no hay nadie que me interese.

-eso no puede ser, debe haber alguien.

-solo hay un chico.

-¿y él es suficiente?

-aun no lo sé, tendré que probarlo y hasta entonces  no te daré nada.

-¡no me puedes hacer esto! Recuerda que gracias a mi tienes barra libre, esto es un bufete para alguien como tú.

-no te atrevas a gritarme, sabes que si yo lo decido no te daré mi sangre y te harás vieja y fea.

-está bien… ¿Quién te gusto?

-eso no te concierne.

El pánico me invadió, esa era una conversación muy extraña y todo me hacía pensar en los demonios que mataron a mis padres… ¡No! No quería pensar más en eso. Deje el folder en la puerta de la oficina y corrí lo más rápido que pude, quería irme de ahí.

Así poco a poco fue pasando la primera semana, una semana muy incómoda por dos razones; habían dado de alta a Jiraiya y prácticamente tenía que hacer todo por él, incluso ayudarle a hacer sus necesidades básicas y por el otro lado me sentía intimidado y, hasta se podría decir que acosado por Sasuke.

-chicos, dentro de una semana tendrán un examen así que les recomiendo que estudien, en especial a ti Naruto- Sentí como me sonrojaba- para ayudarte más iras a clases extras.

-pero yo no puedo quedarme más tiempo.

-no te estoy preguntando si quieres, te estoy diciendo que iras.

-lo siento Sasuke-sensei, pero no iré.

-si no vas te reprobare si pensarlo dos veces y tendrás que repetir el año, y no me interesa si tus padres vienen a pedirme que no te repruebe.

Su mirada se volvió más sombría, estaba enojado aunque no era el único, la rabia se hizo presente en mí, ¿Cómo se atrevía a hablar de mis padres?

-no se preocupe por eso porque no pasara y si tengo que repetir el año así será, no iré a clases extras.

Con paso decidido Sasuke se acercó a mi lugar.

-¿acaso quieres decepcionar a tus padres?

-…Sasuke-sensei…Naruto…los padres de Naruto fallecieron hace un año.

Comento Sakura para que Sasuke no continuara y al menos dejara de hablar de mis padres. Un profundo dolor en mi pecho presionaba mi corazón al recordar los cadáveres de mis padres desangrarse en el suelo de la cocina, sin pensarlo dos veces salí corriendo del salón.

“¿Cómo se atreve?...maldito profesor, él no sabe nada…”

 Lágrimas amargas rodaban por mis mejillas. Ya un poco más calmado me dirigí al sanitario para lavarme la cara.

-¿Naruto?...

-¿Qué es lo que quiere?

De inmediato reconocí su voz.

-solo quería disculparme, no sabía lo de tus padres.

-claro que no lo sabía…

Me seque el rostro y pase de largo, no voltee a verlo siquiera. Antes de que pudiera llegar a la puerta el me tomo del brazo y me jalo hacia él, me rodeo con los brazos fuertemente y pude respirar su aroma.

Olía a colonia y tabaco, una rara combinación pero simplemente me resulto embriagadora y muy reconfortante de alguna manera. El calor de su cuerpo rodeo el mío y sentí como si mi corazón quisiera salirse de mi pecho. Para antes de que pudiera darme cuenta comencé a llorar de nuevo, había pasado mucho desde que alguien me abrazaba así.

-vamos…no llores.

Con su pulgar limpio mis lágrimas. Levante mi mirada, buscando la suya pero cuando lo vi a los ojos si mirar era frio, como siempre y si razón eso me hizo sentir un poco triste. Sus ojos negros no reflejaban ningún sentimiento….fue en ese momento en el que me di cuenta de la cosa rara en él.

-tus…tus ojos…eran rojos cuando te vi por primera vez.

Una media sonrisa se dibujó en sus labios y comenzó a acariciar mi mejilla, al principio se sentía bien hasta que caí en cuenta de que él también era un hombre, trate de apartarme pero él me sujeto con fuerza y me beso.

Yo me quede paralizado. Sasuke metió si lengua en mi boca buscando mi lengua, podía sentir como se inspeccionaba cada rincón. De poco a poco fui cediendo a su beso y deje de poner resistencia, se sentía tan bien. Con su mano izquierda me mantenía pegado a él y con la mano derecha comenzó a desabotonar mi camisa.

-¡¿Qué haces?!

Me aparte de inmediato y esta vez no pudo detenerme. Mi mente se sentía pérdida, no podía pensar con claridad, ¿Cómo era posible que pensara que se sentía bien?

-lo estabas haciendo muy bien para ser solo un niño.

-¿pero qué estás diciendo? Esto está muy mal…-de repente entre en pánico- ¡tú eres mi profesor, eres mayor que yo y lo peor de todo es que eres un hombre!

Sasuke comenzó a reír de una manera algo forzada- te equivocas, para seres como nosotros no importa el género, solo lo que hay en sus venas.

Entre en un estado de shock total…”¿seres como nosotros?...¿lo que hay en sus venas?...Sasuke es… él es un…”

Por un par de segundos Sasuke cerró los ojos y cuando los abrió, estos eran color carmín como la 

primera vez que lo conocí.

-así es Naruto, soy un vampiro.

-tu…maldito demonio…por culpa de ustedes mis padres murieron.

Comencé a reclamarle, comencé a decirle a él todo lo que pensaba de los de su especie, comencé a expresarle todo mi odio mientras lloraba sin parar. Para cuando me quede sin aliento el me tomo de las muñecas y me empujo contra la pared.

-no vengas a reprocharme por algo que yo no hice, ¿tanto extrañas a tus padres? En ese caso, déjame que te reúna con ellos, solo necesito beberte…vamos, ven aquí…te dejare seco.

Sus ojos carmín brillaban mientras se acercaba a mí. Con una de sus manos jalo mi cabello dejando expuesto mi cuello para después comenzar a repartir pequeños besos que me hacían un poco de cosquillas y causaban una vergonzosa reacción en mi entrepierna, entonces, cuando creí que ya nada podía ser más comprometedor sentí como su mano recorría mi vientre y como con sus peligrosos incisivos mordía mi cuello.

-ahh…suel…tame…

-ya es tarde.

Sentí su cálido aliento chocar contra mi piel, era como si me quemara.

-además, ya estas duro…solo necesitas un poco de ayuda.

Sentí como mi rostro se enrojecía y la temperatura de mi cuerpo comenzaba  a subir aún más.

-cierra la boca…

Su mano se introdujo dentro de mis pantalones y mi ropa interior rodeando mi miembro. Si poder evitarlo comencé a jadear y soltar leves gemidos. Yo sabía perfectamente que lo que estaba sucediendo era como condenarme al infierno pero no quería detenerlo, el placer se estaba apoderando de mí y el placer del pecado me estaba haciendo tocar el cielo. Lentamente comenzó a masturbarme aumentando gradualmente el ritmo.

No podía pronunciar palabra, solo podía gemir demostrándole con mi creciente voz lo mucho que disfrutaba su tacto. Sasuke tomo mi rostro con la mano que le quedaba libre.

-mírame…quiero verte y quiero que me veas cuando te corras…

Abrí los ojos poco a poco encontrándome con su mirar, sus ojos carmín penetraban en mi alma. Sentí como la fuerza abandonaba mis piernas y cuando sentí que estaba a punto de derrumbarme…me corrí empapando su mano.

Sasuke saco su mano de mis ropas y lamio mi semen mientras me dedicaba una mirada lasciva. En eso, comencé a llorar y lo empuje lejos de mí.

-Naruto…-su voz tenía un timbre diferente al de antes-por favor no llores.

De nuevo me abrazo.

-te odio!-dije con amargura-¿Cómo pudiste deshonrar mi cuerpo de esta manera?

-no pude evitarlo, todos tienen un límite, incluso los vampiros y es que había estado conteniéndome desde aquel día en que chocamos…tú tienes algo que me ha cautivado por completo.

-tu especie es mentirosa por naturaleza…no puedo creerte.

lo sé y quiero que sepas algo, jamás me alejare de ti.

-Sasuke…sensei…

-dime Sasuke…Naruto.

Yo sabía que era él y sin embargo sentía que ya no importaba, el de alguna manera era diferente. Así pasaron casi siete semanas y el día de mi graduación se acercaba, el examen para el que debía estudiar al final no resulto ser de historia si no de anatomía pues cada “sesión de estudio” Sasuke estudiaba mi cuerpo, con sus manos, su boca y con la mirada igual que yo también lo hacía, aunque eso llego a remorder mi conciencia pues todo ocurría dentro del colegio, ya fuese en la sala de maestros, en el gimnasio, en la biblioteca, en el baño o las regaderas aunque nunca paso más allá de lo que había pasado la primera vez…bueno, tal vez solo un poco más. Sin embargo y de milagro, logre pasar el verdadero examen.

Durante esas siete semanas Sasuke me sorprendía más y más pues a pesar de su fría actitud él era realmente cariñoso conmigo y me protegía mucho, gracias a el supe que el vampiro que había matado a mis padres había sido asesinado por caza vampiros y que en realidad no era un purasangre si no un humano que había sido transformado en vampiro y no pudo soportar la sed de sangre, también me entere de que él le daba de beber su sangre a la directora del colegio pues esta estaba realmente obsesionada por verse joven y hermosa, y gracias a que el me comento eso pudimos sanar a mi padrino. Un día Sasuke uso sus poderes hipnóticos para hacerlo beber su sangre y así sanar.

Cuando llego el día de la graduación se hizo una gran celebración en el colegio y todos los estudiantes estaban concentrados en el gimnasio por lo que Sasuke me cito en la biblioteca. Cuando llegue ahí estaba totalmente oscuro.

-¿Sasuke…estas aquí?

-aquí estoy…

Sasuke se encontraba detrás de mí y me tomaba por la cintura.

-me asustaste…Sasuke…

-lo siento…

Sus ojos carmín iluminaban su rostro pálido y la luz de la luna lo hacía parecer un ángel, un ángel endemoniadamente provocativo que con solo pensarlo pecaba y que cada vez que me tocaba me llevaba al mismísimo paraíso.

-Sasuke, tenemos que hablar.

-¿de qué se trata?

-bueno…es solo que yo…sabes que yo no soy inmortal, mi cuerpo se ira deteriorando, el tiempo dejara marcas y aunque aún falta mucho tiempo para que pase, mi cuerpo dejara de funcionar y moriré.

-eso no pasara…-Sasuke me abrazo aferrándose a mi como si fuera a desaparecer- no si me dejas convertirte en un vampiro…déjame hacerte inmortal y quédate a mi lado para siempre, no dejare que lo que siento por ti desaparezca después de que mueras.

-yo…no lo sé, es que esa es una decisión muy difícil.

-¿me amas?

Sentí como el color se posaba en mis mejillas.

-s-si…

-entonces déjame hacerte inmortal y amémonos para siempre…

Sasuke comenzó a besarme de la misma manera apasiona en que lo hacía siempre. Todo siguió su curso, me desvistió y recorrió mi cuerpo con sus manos, beso mi cuello, después mi pezones y de vez en vez los mordía, los pellizcaba y los chupaba provocando en mi oleadas de puro deseo que se intensificaban más en mi entre pierna.

Al bajar más, se topó con mi miembro erecto comenzando después a lamerlo, luego, lo metió dentro de su boca y lo succionaba un poco. Termine por correrme en su boca y el no dejo escapar ni una sola gota, no desperdicio nada. Subió de nuevo y volvió a besarme mientras pellizcaba mis pezones y su boca esta vez sabia diferente, era una mezcla de mí y de él, sabia salado y dulce a la vez.

Sin que lo notara las cosas fueron subiendo de tono y me termine dando cuenta hasta que sentí sus dedos en mi interior.

-relájate…y disfruta…

Susurro con su boca pegada a mi cuello.

Los gemidos no paran de salir de mi boca, sentía que mi corazón iba a explotar y el calor que envolvía mi cuerpo se compensaba con lo frio de la noche. Sus dedos comenzaron a moverse hasta que de repente sentí una sensación que me llevo al éxtasis.

Sasuke sonrió y me dedico una mirada llena de deseo. Unos segundos después ya no eran sus dedos los que estaban en mi interior si no su miembro erecto. Sentí como lentamente entraba en mí, como hundía su dura carne en mi contraída y húmeda entrada haciéndome soltar sonoros gemidos.

-relájate…

Lo escuche decir de nuevo. La verdad es que me dolía, era un poco doloroso y me sentía tan feliz y mal al mismo tiempo que no pude evitar derramar algunas lágrimas. Cuando por fin pude relajarme solo me dedique a disfrutar lo que estaba sucediendo. Sasuke aumento gradualmente el ritmo y yo solo me abrace a su cuello.

-sasu…ke…me corro…

El no dijo ni una sola palabra, solo me embestía más profundo. Para cuando llegue a mi limite sentí como sus peligrosos incisivos perforaban mi cuello y succionaban mi sangre al mismo tiempo que me corría y sentía el cálido fluido de Sasuke entrar en mí y recorrer mi interior.

Escuche a Sasuke gemir lo que hizo que me excitara aún más. Era algo maravilloso, como mi sangre era succionada, como mi cuerpo se liberaba y como Sasuke me daba todo de él, sin duda era algo que quería experimentar para la eternidad y sabía que jamás me cansaría de sentir.

No me negué a que Sasuke me convirtiera en un vampiro pues esa era la única manera en la que podríamos estar juntos para siempre y Sasuke no necesitaba que yo le diera mi aprobación, él sabía que en el fondo lo deseaba.

Desde aquel día han pasado casi cien años y hasta la fecha, cada vez que me entrego a Sasuke sique siendo igual o incluso más placentero. Ahora, compartiremos la eternidad y disfrutaremos cada segundo de nuestro amor.

¿Quién hubiera imaginado que me enamoraría de un vampiro? Creo que el amor viene de quien menos te lo esperas y por tener el amor de esa persona somos capaces de perder hasta nuestra alma y nuestra vida, al final termine prácticamente vendiendo o más bien regalando mi alma al diablo y dándole la espalda a Dios, sin embargo, ambos son testigos de la historia más grande de amor pues aunque ya no tenga vida verdadera ni alma, voy al cielo cada vez que quiero y siento como las llamas del infierno queman mi cuerpo gracias a Sasuke. Aunque haya perdido esas dos cosas, jamás perdí mi corazón y aunque este no lata, se con certeza que le pertenece al amor de mi vida eterna…Sasuke.

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Notas finales:

Si la historia les gusto no olviden de apoyat al autor tanto aqui como en la pagina de facebook 

Por amor al Sasunaru y al Yaoi

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