*Muy bien, Kris, tu puedes hacerlo... Te confesaras a Lay... ¡Figthing!*
Tal vez parezca serio todo el tiempo, pero él logra sacarme sonrisas y que mi corazón bombee como el galope de mil caballos (o unicornios) desembocados, ¿cómo lo hace?, aún no lo entiendo, pero desde la primera vez que sonrió para mí, mostrando ese lindo hoyuelo, no he podido apartarlo de mi mente.
Iré hacia él y le diré todo lo que he estado reprimiendo hasta el momento, pero es tan despistado que a pesar de mis miles señales, no logra verlas. He intentado acercármele de todas las formas posibles...
***FLASH BACK***
Indirectamente.
Kris se encontraba esperando en la sala de la casa de Lay, a que este terminara de cambiarse.
Irían a la fiesta que Chen organizo para MinSeok por su primer aniversario. No esperaba encontrarse con la imagen de un ángel.
Lay vestía unos pantalones azul marino entubados y una playera gris que resaltaba su esbelto y trabajado cuerpo.
– Wow, Lay... te ves... genial... – las palabras se amontonaban impidiéndole formar una oración coherente a Kris, además de la saliva que tenía que tragar.
– ¿Lo crees? – la mirada de Lay brillaba.
– Por supuesto... la persona que más quiero trae unos pantalones idénticos a los tuyos en este instante. – Kris sintió enrojecer por primera vez en su vida.
– ¿En serio? Gracias por el cumplido. Vámonos que se nos hace tarde para la fiesta. – Lay le dio una miraba llena de inocencia.
Y no, el radar de Yixing se encontraba desconectado en esos momentos.
Directamente.
Habían salido juntos, ya que Lay quería un helado y Kris se encontraba gustoso de comprárselo. Salieron de local, Lay con un barquillo dulce de tres porciones y chocolate encima y Kris con una paleta de leche. Fueron a un parque y bajo la sombra de un frondoso árbol, se encargaban de degustar plácidamente los dulces. Kris pensó que era el momento indicado.
–Lay... – llamó al pequeño, él le miro a ver encontrándose con la imponente mirada de Kris. – Me gustas.
Al fin lo había dicho, su pecho se deshizo de un gran peso imaginario y su corazón latía frenético.
–Gracias Kris, tú también me gustas... eres un gran amigo. – Lay sonrío. Era tan inocente y despistado que no entendió lo que sus palabras causaron en Kris.
La mirada de Kris se ensombreció y a kilómetros se escuchó algo en su pecho quebrarse.
***FIN FLASH BACK***
*Muy bien, Kris... iras hasta él y le dirás que lo amas, no le darás tiempo de responder porque lo tomaras de la cintura con una mano y con la ayuda de la otra, le besaras... nada brusco, será suave y lento, si corresponde, podrás sentir por primera vez a tu unicornio y será tuyo...*
*Seeeeh, suena bien todo eso, pero ¿y si no lo hace? -zape al Kris Negativo- Ya, bueno, solo decía... *
*Apoyo al Kris Positivo, pero el que no acepte también es una opción... -zape al Kris Lógico- ¡Oye! Si duelen...*
*Si no acepta, pues no sabe de lo que se pierde.*
*Kris Orgulloso, tampoco creo que sea para tanto...*
*¡¿Qué?! ¿Acaso no me ve? ¡Much@s quisieran tenerme! *
*Kris Egocéntrico, ¿tú también?*
*¡Esto es guerra! ¡No descansare hasta que sea mío!*
*Oh, no... ¡¿Quién despertó a Kris Posesivo?!*
*Bueno, bueno, bueno... dejen de pelear entre ustedes ya que todos ahora tenemos la misma misión...*
*Todos los Kris juntos: ¡¡¡DECLARARNOS A YIXING!!!*
Muy bien, Kris... tú puedes hacerlo...
1...
2...
3...
¡VAMOS!