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Vision's Terror por Leyn

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Notas del capitulo:

Hey theeeere. Aquí un ChenLay, ¿y qué quiere decir esto? (?) Así es, Chen a c t i v o.

 

Well, nada más que decir por ahora. Disfruten<3.

I.

La tópica expresión “los opuestos se atraen” posee tanto un significado verídico como uno que no lo es. Cuando se habla de atracción, siempre está manifiesta la provocación, los componentes que crean la persuasión en una persona. Todos tienen el suyo propio, todos quieren crearse uno infalible, pero lo cierto es que aquel factor que resulta inequívoco y eficaz, no es más que una cuestión propia de la inercia y que sólo algunos poseen. Algo de naturalezas. Algo que no se puede cambiar, simplemente dársele un uso adecuado.

Pero no todos lo utilizan de ese modo.

Hay quienes emplean estos privilegios para complacerse a sí mismos, entreteniéndose con sus víctimas hasta llegar al momento del hastío, donde se busca a un nuevo conejillo de indias. Y el proceso se repite, y se repite…

Es un círculo vicioso donde no hay escapatoria.

 

A menos que… los roles se cambien.

Y, de la nada, el victimario caiga en su propio juego de seducción.

 

*** 

 

Los gestos sutiles y las sonrisas provocadoras eran la base al momento de atender los pedidos de un cliente. Cada empleado del establecimiento estaba perfectamente consciente de qué debía hacer y qué límites pasar en cuanto a esto. Jamás había un fallo en los métodos que usaban, pues ellos conocían minuciosamente las causas, reacciones y consecuencias de lo que hiciesen. No había defecto alguno, la víctima siempre caía.

 

Aquella noche sentado en el taburete con sus brazos apoyados en la amplia barra de licores, Zhang Yixing no pensó que la rutina flaquearía ni siquiera un poco. Todo pintaba normal, era medianoche y el nightclub ya estaba saturado como de costumbre, con los bajos de la música retumbando en cada esquina. Los clientes estaban dispersos en todo rincón del espacioso local, siendo debidamente atendidos por el personal dispuesto.

Incluso pudo sentir la constante mirada de una mujer en él. Se paseó apenas el ápice de la lengua por entre los labios y giró su rostro un poco, lo suficiente como para realizar contacto visual con la joven que yacía cómodamente sentada en uno de los sillones dispuestos frente al pequeño escenario con el que contaba el local. Ella curvó una tímida sonrisa en sus labios rojos, aparentemente sorprendida porque le hubo notado tal como la noche anterior, pero para Yixing ya era habitual. Por eso Yifan siempre cedía a dejarlo en la barra de licores en vez de que tomara pedidos como los demás, porque sabía que Yixing también tenía esa particular habilidad de persuadir a distancia.

La mujer comenzó a enredar una onda de su cabello negro con el dedo índice, y entonces Yixing hizo lo que la costumbre y los dichos de Yifan dictaban: cruzando los brazos, permitió que las comisuras de sus labios tirasen hacia un lado, curvando una sonrisa que sonaba a incitación. Ahí terminaba su trabajo, puesto que si no había error en la estrategia, cualquiera de los otros llegaría junto la clienta a tomar su pedido en un promedio de veinte segundos. Y por supuesto que fallo no hubo, Yixing desvió su atención de ella justo cuando notó a Luhan acercársele desde el otro costado de la tarima con una pequeña libretita en mano.

 

—Lay, necesito dos medios de Absolut…—la grave voz de Chanyeol sonó; Yixing se giró hacia su ubicación y le vio acercársele con largos pasos—, uno de Kurant y el otro necesito que me recomiendes un sabor, la dama de la mesa veinte quiere que escoja para ella —dijo haciendo un pequeño gesto con la cabeza, indicándole su ubicación. Aún sentado en el taburete, Yixing alzó una ceja y observó por sobre su compañero hacia la mesa.

La mujer de largos cabellos lacios estaba aparentemente sumida en la conversación con el hombre con quién compartía mesa, así que no le notó observándole.

—Tal vez Ruby Red le guste —sugirió Yixing luego de volverse hacia Chanyeol, con una sonrisa que remarcaba sus hoyuelos—, ya sabes, últimamente nadie niega lo cítrico.

—¿Pomelo, eh? No está mal —le respondió el más alto, apoyando los codos en la barra mientras miraba las diferentes rotulaciones.

Sin decir nada, Yixing asintió levantándose del banquillo y se giró hacia las estanterías, de donde sacó las dos botellas correspondientes para llevarlas hacia el mesón, colocando con ello dos vasos de dimensión media en una bandeja metálica. Después de llenarlos con el alcohol correspondiente, agregó los utensilios necesarios a la bandeja, junto con la típica decoración que se le agregaba a los licores y dos cubos de hielo para cada vaso. El más alto tachaba su libreta de pedidos con el lápiz que colgaba del bolsillo de su camisa, sentado en los taburetes de la parte frontal del mesón.

—Ah, por cierto, ¿te enteraste de las nuevas? —preguntó Chanyeol luego de que su compañero pasara a la registradora, donde digitó una serie de números para el recibo.

—¿Sobre qué?

—Tendremos compañero nuevo —cuando la boleta terminó de imprimirse desde una de las ranuras, Chanyeol se incorporó y la cogió mientras tomaba la bandeja con los licores, depositando el recibo junto a éstos. Y dedicándole una hábil sonrisa a su compañero, se fue a entregar su pedido.

 

Yixing se quedó en silencio y alzó su vista confundido, contemplando al otro retirarse. En seguida, se dio el tiempo de devolver las botella que había sacado de las estantería, para cuando hubo retornado a la barra el más alto ya se había pasado a otra mesa.

Ya restándole importancia, Zhang apoyó ambos brazos en la encimera e hizo memoria; en efecto, Yifan no había mencionado la integración de algún empleado nuevo al club, lo que era bastante raro puesto que acostumbraba hacerlo. O al menos así había sido con los dos últimos, Jongin y Sehun, a quienes mencionó el mismo día de incorporación pero horas antes de que llegasen, justo cuando todos estaban preparando el local para abrir las puertas en una nueva jornada nocturna. No así como esta vez, que ni siquiera hubo una mínima alusión.

Tal vez simplemente lo había olvidado o prefirió dejarlo como sorpresa. Fuese el caso que fuese, ¿cómo demonios es que Chanyeol siempre se entera de todo?

 

Mientras meditaba el tema, su vista se cruzó con la de Kyungsoo que se aproximaba casi trotando, y cuando llegó a la barra prácticamente se echó en uno de los taburetes. Yixing pudo notar en él un evidente atisbo de cansancio, tan típico de todos los días, así que sin decir nada fue directo al dispensador de agua y le sirvió un vaso del fresco líquido, que el más bajo agradeció sonriente.

—En serio, nunca más me haré cargo de las mesas con mucha gente —habló, tragándose de un solo viaje el contenido del vaso y entregándole su libreta de pedidos—. Por ahora es todo… por ahora.

 

Yixing soltó una pequeña risa y hojeó el pedido de la mesa quince, eran tres páginas repletas de una letra gigante y una caligrafía que dejaba bastante que desear, incluso las palabras llegaban a salirse del entrelineo.

—Kyung, tu letra es una real basura.

—Sí, sí. Suele pasarme a menudo —murmuró Kyungsoo, dejando su vaso vacío en la barra—. En fin… ¿Supiste lo del nuevo? —Yixing se detuvo frente a las estanterías y volteó a verle. ¿Kyungsoo también? ¿Acaso él era el único que no sabía?

—Eh, algo así, Chanyeol me comentó un poco —respondió tomando unos envases metálicos de alcohol convencional, llevándolos hacia la barra—. Qué raro que Kris no haya dicho nada.

—Ya sabes, a Yifan le gustan los misterios… ¿Qué te dijo Yeol? —le preguntó Kyungsoo mirándole.

—Nada prometedor —rió Yixing, verificando los pedidos en la libreta—, supongo que a Park también le gustan los misterios.

—Seguramente… Entonces supongo que no te dijo que el nuevo es amigo de Jongin.

—¿Eh? No, nada de eso —contestó el otro, sacando desde una orilla cuatro vasos—. ¿Entonces Jongin lo supo primero?

—¿Quién sabe? A Chanyeol nunca se le escapa una, pero, como sea —resopló Kyungsoo—, creo que Joonmyun no lo tolera demasiado.

—¿Joonmyun lo conoce?

—Al parecer sí. Estábamos los tres con Jongin y de la nada surgió una discusión entre ambos por el nuevo, para ahorrarme líos cada uno se llevó un buen golpe, ya bastante tuve con la última vez.

Yixing asintió con una sonrisa mientras se giraba hacia los dispensadores una vez más en busca de los tragos faltantes. “La última vez había sido hace un poco más de una semana, por sólo casualidad no se molieron a golpes a vista de todos, y la culpa recaía tanto en la actitud pretenciosa de Jongin como en la actitud orgullosa de Joonmyun. Kyungsoo fue el encargado de calmarlos puesto que Yifan no se encontraba en el establecimiento en aquel preciso momento, y eso contaba más como un alivio que como otra cosa, porque de lo contrario ahí sí hubieran tenido reales problemas.

—Esos dos realmente no se llevan —Yixing depositó en el mesón las botellas que traía habilidosamente entre los brazos y le observó de reojo, a lo que Kyungsoo sonrió de lado asintiendo. No cabía duda de ello.

—Cierto. Y, bueno, sabiendo que el sujeto está relacionado con Jongin, no me sorprende que a Joonmyun no le agrade —rió, alzándose de hombros; cuando Yixing dejó una pequeño contenedor con hielos en la bandeja, se giró completamente hacia él, levantándose del taburete—. ¿Ya está?

—Ya está.

—Bien… —con una pereza que ni se molestó en disimular, Kyungsoo recibió la bandeja y sus labios se torcieron cuando sintió el peso jugar en contra con la resistencia de sus brazos—. Ah, definitivamente ahora sólo tomaré las mesas con dos personas —habló entre dientes, intentando mantener el equilibrio de la bandeja repleta de vasos mientras Yixing imprimía el recibo.

—Por cierto, ¿cuándo vendrá?

—¿Quién? ¿El nuevo? —interrogó; Yixing asintió, retirando el recibo de la ranura para dejarlo en la bandeja junto con la pequeña libreta de pedidos—. Llegó hace varios minutos, debe seguir hablando con Yifan y Jongin arriba, creo que Sehun mencionó algo sobre eso.

Sin nada más que agregar, Kyungsoo se volteó sobre su mismo eje y, dando pasos pausados y algo torpes, emprendió camino. La bandeja parecía tambalearse a falta de equilibrio estable, fue allí cuando Yixing sonrió para sí y se dispuso a salir de la barra para ayudarle, pero se detuvo de inmediato cuando, en medio camino, el más bajo giró el rostro en su dirección; Kyungsoo le señaló con la cabeza en dirección a las escaleras, o al menos eso creyó Zhang, los constantes movimientos de los focos de neón confundían su campo visual. Sólo para asegurarse, corrió ligeramente el flequillo oscuro que cubría mínimamente uno de sus ojos y alzó la vista.

Descendiendo lentamente desde los escalones superiores, la figura imponente de Jongin se hizo inconfundible.

Y a su lado iba alguien más.

Camisa ajustada y negra, corbata roja; Yixing tuvo que entrecerrar sus ojos para percatarse de que vestía el uniforme del club.

Yixing tensó los labios y continuó mirando, pero por mucho que lo intentó no pudo contemplar el rostro del nuevo a distancia. Para cuando se dio cuenta, su mirada se vio cruzada accidentalmente con la de Jongin quien, a juzgar por esa sonrisa particularmente torcida, le había sorprendido desde antes que Yixing lo notara. Sólo hizo falta un par de segundos más para que éste terminara de bajar a pasos rápidos, seguido de cerca por el otro joven que acomodaba el nudo de su corbata, aparentemente ajeno a todo.

 

Ya estaban frente a la barra, Jongin se volvió hacia quien tenía a su lado.

—Dae, él es Zhang —dijo, y el otro levantó finalmente su cabeza, su mirada recayó en Yixing inmediatamente.

—Kim Jong Dae —habló éste en dirección al chico tras la barra. Yixing abrió sus labios para dar paso a las palabras, pero para su sorpresa lo único que pudo emitir fue un ligero resplido, Jongdae pareció darse cuenta porque sus comisuras se curvaron hacia arriba, aún observándole. ¿Esperaba una respuesta…?

—Zhang… Yi Xing.

La música retumbaba y las luces láser se movían constantemente al ritmo de los bajos, mezclándose con los destellos de los focos de neón; resultaba complicado, pero Yixing de todos modos podía identificar en él algo diferente. Había algo en esa sonrisa torcida, en aquella mirada de pupilas oscuras, en esa actitud.

Sobre todo en esa mirada. Tan afilada y penetrante… precisa.

 

La sonrisa de Jongdae se acentuó, y pronto Yixing se dio cuenta de que el contacto visual no se rompía.

Notas finales:

Muchísimas gracias por leer... Por ahora está algo vago, y lo sé, pero supongo que pronto se aportará más información en cuanto a Jongdae y su habilidad especial con las miraditas (?).

Nos vemos~


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