¡Estoy tan emocionado! Light me mandó una carta, dice que quiere que valla con urgencia hacia allá, a su casa, me dice que no me preocupe, que no es nada grave, sólo quiere mostrarme algo, sé que soy muy inteligente, pero no me puedo ni imaginar lo que me quiera mostrar. Lo último que me pide es que valla lo más elegante y “guapo” que pueda, es muy especial.
Dejé la pequeña carta en la mesa, justo al lado de mis dulces y me voy a toda prisa a pedir un taxi, ya que, su casa está un poco lejos de la mía, pero dice que es muy urgente, así que quiero llegar lo más rápido posible.
El vendito taxi se tarda apenas unos cuantos minutos, salgo de el y le pago lo correspondiente, entro al edificio en el que vive Light, tiene muy buen dinero para ser tan joven como yo, vive en un edificio de 5 pisos de alto más la azotea, es muy elegante, pero aun así es raro, no hay nadie cerca en la recepción.
Me acerco al ascensor y para mi sorpresa están justo ahí, parados mis mejores amigos de la infancia, el peliblanco, cabeza de algodón, Near y el rubio, adicto a los chocolates (tanto como yo por los dulces), Mello, me acerco con entusiasmo hacía ellos, al verme me saludan con alegría. Parece que su relación desde la última vez que los vi ha mejorado y más de lo que esperaba.
-¡Cuánto tiempo! ¿Cómo están? ¿Qué hacen aquí?
-¡L! –Grita el pequeño Near, que tenía un traje elegante blanco– Sí, hace tiempo –Me sonríe y suelta a Mello para abrazarme– Hemos estado muy bien desde la última vez.
-Hola, L. Sí, mucho tiempo –Me dice con la misma simpatía de siempre, su traje como es de costumbre es negro pero de su mismo estilo– ¿Nosotros aquí? Pfff… en unos segundos lo sabrás.
-¿A qué te refieres?
-Near, llámalo –En serio que no entiendo nada, ¿A quién van a llamar? Si no hay nadie–
-Sí, cariño, Mello –Dice como un sargento, se va corriendo hacia el elevador, esto si es raro, al parecer con el “cariño”, su relación va muy bien– Ya casi.
-Vamos, ¿Qué pasa, chicos?
-Shhh –¡Me silencia! ¡Él no me puede silenciar!– Sólo espera y ya verás.
-Esperar ¿Qué? –El ascensor se abrió, juro que no lo podía creer– ¿Qué… qué es esto? –Mi vos cada vez se hacía más aguda y silenciosa, la impresión me lo provoco–
-Sólo entra ahí con Near.
Subí aun impresionado sobre el aparato eléctrico, era hermoso lo que veían mis ojos, aunque fuera algo muy sencillo de hacer me emocione, el ascensor estaba repleto de post it con pequeñas frases, aun de ser pequeñas eran hermosas, unas decían “Te amo”, “Te quiero”, “Eres lo mejor”, “¿Qué piensas?”, “¿Te gusta?”, “TKM”, “I Love You” y unas que otras pequeñas frases como “Moriría por ti”, “Me eres muy especial”, “¿Qué me dirás?”, “Te cuidare por siempre”, “No sabes cuánto te he amado” y la frase más larga y letra por letra en cada uno decía “¿Quieres ser parte de la historia que complete mi vida?”, esas palabras me estaban volviendo loco, temblaba, me tuve que recargar en una de las tres paredes para no caer, tanto Near como Mello me miraba con una sonrisa de ángel ¡Ellos lo sabían!
-Adiós, L. Y suerte –Me dijo Mello antes de que Near presionara el botón que diera para el primer piso–
Aun seguía leyendo y memorizando cada uno de los post it que estaban en el lugar, mi respiración al igual que los latidos de mí corazón se habían acelerado, sentí que mis ojos se comenzaban a cristalizar pero en ningún momento derramaría ni una lágrima. Near me miraba entre preocupado y feliz por mis acciones.
-¿Qué piensas de todo esto? –Me saco de mis pensamientos–
-Que… es hermoso, nunca creí que… esto en verdad me pudiera pasar.
-¿A qué te refieres con eso?
-Near, soy… correspondido –Así mis ojos se cristalizaron un poco más, pero aun no salían las lágrimas– Esto me está haciendo muy feliz, pero ¿Por qué vamos al primer piso? Sí Light vive hasta el quinto.
-Ash… eres impaciente, sólo calla y observa –Y como si fuera brujo el ascensor se abrió, enfrente de él estaba mi pelirrojo amigo Matt–
-Dios, ¡Matt!
-No hay mucho tiempo, ten –En mis manos me entrego un batido de fresa, mi preferida, Light era el que más lo sabía en todo el mundo– Felicidades, adiós, L.
Matt movía su mano de un lado a otro, llevaba un traje rojo obscuro, aún tenía sus goggles y guantes puestos, él y Mello son tal para cual. El ascensor se cerraba lentamente, yo como podía comencé a tomar el batido, Near había presionado el botón que daba al segundo piso, me miraba aun con una sonrisa, estaba en shock, así que no podía tener una conversación tan clara con él.
El aparato se volvió a abrir en el piso indicado, tras la puerta estaba mi “gemelo” de ojos carmesí, él tenía unos 5 globos de helio, no lo podía creer, esas cosas están súper caras.
-¡Beyond!
-¿Qué tal, L? –Ni siquiera me dejo contestar y ya tenía los globos en mi mano– Sigue disfrutando, hay más, adiós.
-Gracias, adiós, B.
Maldecía al ascensor, ¡No me dejaba hablar ni un minuto con mis amigos! Pero la verdad ahora el punto no eran mis amigos, era quien estaba organizando todo esto, sentía escalofríos por todo lo que estaba recibiendo, le soy especial, ¡Me es especial y creo que ni lo sabe!. Subimos al tercer piso, Near parecía que no quería hablarme, no es porque estuviera enojado conmigo ni nada por el estilo, sino porque creé que necesito pensar, todo esto es muy rápido.
Tras la puesta de este piso estaba mi mejor amiga, Naomi, ella sí que lleva más tiempo que no la veo, ¡Se había ido a Los Ángeles, Estados Unidos!, ella entre sus manos tenía unos cup-cakes de fresa, cajeta y chocolate, ¡Diablos, Light sabe muy bien que amo esto!
-Naomi –Le di una sonrisa de felicidad por verla–
-L, te extrañe mucho, pero no tienes que perder el tiempo, ve con quien te organizo todo esto, nos vemos –Me sonríe de igual manera y en mi mano libre me da la bandeja con los cup-cakes–
-Adiós –Digo con cierta tristeza en mi vos, ¡Diablos que si la extrañe!, pero me siguen repitiendo lo mismo, tengo que ver al dueño de esto–
Realmente ya no sabía ni en que pensar, me estaba aterrorizando y sonriendo de la felicidad, esto nunca me lo espere del chico atractivo e inteligente de Light… Light, ahora, ¿Qué le contestare? ¡Lo sé, lo sé! ¡Es más que obvio! ¿Pero que le puedo hacer además de solo corresponderle?--- ¡Estúpido ascensor, me corta mis pensamientos!
Ahora tras las puestas está el amigo de Light, la verdad es que en muy pocas ocasiones he hablado con él, Teru Mikami, según por parte de Light, es un chico con el que además de pasar un buen rato es muy inteligente, tanto como nosotros.
-¿Tú eres L, no? –Asentí– Felicidades, te has ganado a Light Yagami –Lo dice como si lo conociera desde hace años, yo lo conozco desde que éramos niños–
-Gracias, Mikami.
El me entrego dos cosas, un florero lleno de rosas azules, sabe perfectamente Light que me gusta el azul y una cajita del mismo con el dulce contenido de dulces y chocolates de marcas caras, ¡Tendré que pagárselo de un modo u otro!, la verdad mantener el equilibrio con todos su regalos era difícil, así que Near me tuvo que prestar sus manitas para ayudarme a cargar todo esto.
Presiono el botón para el quinto piso, ya me comenzaba a marear y a sentir nervioso, Near me miraba aun un poco preocupado.
-¿Te encuentras bien? –Me pregunto–
-¿Eh? ¿Yo? S-sí, ¿Por qué?
-Te ves nervioso.
-¿En serio?
-Tranquilo, es sólo Light Yagami, el chico que conoces desde hace años, nada del otro mundo.
-Lo sé, pero es que estoy tan sorprendido, ¡Me corresponde! ¡Light Yagami me corresponde! Nunca creí que esto me llegara a pasar, eso, es todo.
-Pues ya lo estás viendo, ya, tranquilo, el ascensor se va a abrir y es el último piso, ¿Entendido?
-Entendido.
Por última vez las puertas del ascensor se abrieron, se podía ver una luz ya más natural que provenía del exterior del edificio, era obvio, estábamos en el penúltimo piso. A un solo piso de mi amado. A un solo piso de Light.
En este piso nos recibió Kiyomi Takada, la conozco, pero muy poco al igual que Mikami Teru. Ella llevaba consigo una bolsa que le podía decir gigante, obviamente era un regalo.
-Hola, L. Hay alguien que te espera afuera –Me dijo tranquila, me percate que ya todos mis amigos y conocidos estaban ahí, para ver mi salida y reacción con Light–
Cada quien tomo cada uno de los regalos, casi como si se los regresara, el miedo me comenzó a invadir, subí lentamente las escaleras con miedo, no entendía miedo de que pero era miedo, sentí que mis ojos nuevamente se cristalizaron, pero ni una lagrima salía aun, me comencé a sonrojar cuando vi la silueta de Light, tenía su mano extendida hacia mi como para corresponderle, comencé a caminar a paso más rápido, entusiasmando, ya no quería dudar.
Cuando estuve frente a él me paralice, no sé por qué, pero lo hice, sólo tome su mano, luego sentí como me abrazo, yo aun estando en shock le correspondí, lo quería tener cerca de mí, separo el abrazo y me miro.
-¿Cómo has estado?
-Eres un tonto, no me preguntes eso, mal, muy mal, te extrañe mucho, ¿No crees que tenerte lejos 6 meses me va a ponerme mal?
-Yo también te extrañe, ¿Recibiste todo lo que te mande?
-¡Por supuesto! Es lo mejor –Mis ojos se cristalizaron más, no podía sacar ni una bendita lagrima– ¿Cómo… cómo se te ocurrió hacer todo eso?
-Por ti lo vale, ah sí, casi se me olvida, ven –Tomo mi mano– Quiero mostrarte algo.
-¿Qué es?
-Mira para allá –Me dijo que mirara para arriba de donde había salido.
Era un enorme cartel, el cual lo sostenían Misa Amane y Matsuda Touta, decorado de la manera más hermosa posible y con letras grandes decía “¿Quieres ser mi novio?”, me quede mirando el cartel por unos minutos, Light se comenzó a preocupar del que no reaccionaba, me volteé a toda prisa y lo abracé por el cuello, recargue mi cara en su hombro y comenzaron al fin a salir lágrimas de felicidad, era el fin, al fin se habían escapado.
-¡L! ¿Qué... qué pasa? –Dijo en tono preocupado y abrazándome con fuerza–
-Sí quiero –Conteste, pero creo no me oyó, pues dijo “¿Hum?” – Que si quiero, quiero ser tu novio. Te amo, Light Yagami, Te amo y me hace tan feliz que sea correspondido.
De la nada, todos nuestros amigos salieron y nos comenzaron a aplaudir, estaba muy feliz, que comencé a reír con nerviosismo y con lágrimas en los ojos, era algo muy penoso, pero no lo podía evitar, Light me rodeaba mi espalda con su brazo, todos nos felicitaban, hasta Misa y Matsuda.
-Y tú me haces feliz al aceptar todo esto, te juro que esto no será pasajero, que nuestro amor durara tanto como nuestras vidas, te amo, L, y mucho.
-Light –Seguía riéndome nervioso, volteé y lo vi a la cara– Te lo juro, yo también te lo juro –Y con un pequeño salto bese sus labios–
Comencé a oír más aplausos de parte de todos, estaba siendo tan feliz, yo tenía mis manos regodeando su cuello y acercándolo más hacia mí, mientras él tenía los suyas en mis caderas, tratando de levantarme un poco más. (Nota: Es que si se dan cuenta, L por lo encorvado que esta es más bajito que Light, pero realmente tiene la misma estatura).
Mi alegría más grande el día no fueron sólo los regalos, ni que mis amigos estuvieran presentes en todo, ni siquiera el beso me estaba poniendo tan feliz como por la original razón. Estoy muy feliz porque soy correspondido, es verdad, nunca lo creí, nunca creí que esto en verdad llegara a pasar, creí que Light nunca llegaría a ser como yo, ahora lo sé, me equivoque.
Eso ya no importa, ahora sólo importa que estoy aquí, con él, disfrutando lo que nunca creí disfrutar, al igual, que es mi primera relación.
-Te amo, Light.
-Y yo a ti, L.
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La cartita de Light:
“Ryuzaki, hace ya rato que no nos vemos, quisiera mostrarte algo y con muchísima urgencia. Tranquilo, no es nada grave, sólo te pido una cosa, ve lo más elegante y guapo que puedas, esto te va a fascinar y quiero que sea especial, oh, casi lo olvido, no te dije donde, ven a mi casa, sube por el ascensor.
Atte. Light Yagami.”