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-¡SAL DE AHÍ!-
Miré el techo de mi habitación por enésima vez
No tenía idea de cuánto tiempo llevaba encerrado, recostado sobre la cama mirando el aburrido techo blanco
-¡ALEKSEY!-
Bufé y me palmeé la espalda mentalmente por haberle puesto seguro a mi puerta
-¡TIRALA VIKTOR!-
El estruendo de algo muy fuerte golpeando la puerta de mi habitación me sobresaltó
-¡ABRE LA PUERTA O TE JURO QUE VIKTOR LA TIRA!-
Rodé mis ojos y terminé levantándome y arrastrando mi cuerpo para abrirles
No quería tener que explicar por qué mi mejor amigo había arrancado la puerta
-¡Veo que estás vivo maldito!-
Miré fijamente a Denis, con las uñas de sus manos negras y ese cabello rubio platinado que le llegaba hasta media espalda, él me devolvió la mirada desde sus ojos grises, con evidente reprobación
-Llevas una jodida semana faltando a la universidad-
-Sabes por qué- repliqué retrocediendo y arrojándome sobre mi cama
-¿Y qué importa si esa zorra se fue?-
-Me abandonó- corregí con molestia
-Báh, como si la necesitaras-
-En un mes cumplíamos un año- murmuré volviendo a mirar el techo
-Bueno, mejor que todo haya pasado ahora-
-¿Disculpa? Mi novia me dejó- entrecerré los ojos
¿Acaso a Denis no le llegaba suficiente oxígeno al cerebro?
Viktor se sentó junto a mí en silencio, él era el más lógico de los tres y agradecí su presencia
Probablemente si no hubiese venido Denis y yo estaríamos gritándonos
-En algo tiene razón, al menos te dejó antes de los exámenes-
Lógica mi trasero…
-Gracias Viktor eso es tan conmovedor-
Mi alto amigo se encogió de hombros, consiguiendo verse un poco inocente. Usualmente conseguía hipnotizar a la gente con su mirada negra pero él ni siquiera lo notaba… era como si no le importase nada que los demás pensaran
-Es la verdad, si estuviésemos en exámenes…-
-Me hubiese conseguido una licencia-
Para algo tengo un tío y un primo médico…
-Basura, lo que tienes que hacer es salir-
-No quiero salir-
Quiero volver con Irina, quiero borrar de mi cabeza la imagen de mi novia subiéndose a la motocicleta de un sujeto horroroso lleno de tatuajes y que probablemente en la vida ha visto clase y decencia
-¿Y qué? ¿Te quedarás aquí pudriéndote en vida mientras afuera está la diversión?-
-¿Algo así como frente a tu casa?-
El rostro de mi amigo se volvió rojo y apartó su mirada
Oh, siempre es tan divertido molestarlo con su amor platónico
Nada más cliché que enamorarte de tu vecino… excepto que este sea hétero y tenga novia hace años…
-No seas idiota-
-La quiero de vuelta-
-No, lo que tú quieres de vuelta es la vida que habías planeado con ella-
Miré feo a Denis pero él sacudió su mano mostrando su perfecta manicure
-Acéptalo, incluso habías comenzado a pensar en cómo se verían sus hijos… pe-ro-que-as-co-
-No todos podemos ser gays como tú- refuté
Una sensual sonrisa se extendió por su rostro
-Claro que sí, y créeme, te iría muy bien… a ti también bonito-
Técnicamente Denis se arrojó sobre Viktor, pero él se mantuvo inmutable excepto porque alzó una ceja
De cualquier forma estaba acostumbrado a las demostraciones de afecto de Denis y si intentase detenerlo solo conseguiría una semana de quejas incansables…
-¿A qué vinieron?-
-DAH- el rubio rodó sus ojos
-Claramente vinimos a sacarte de este lugar, ningún amigo mío va a estar como damisela consumida por la tristeza porque la zorra de su ex lo dejó-
Llevé una mano a mi rostro
-No es una zorra-
-Querido, cuando te dejó él la vino a buscar a tu casa, si eso no es ser zorra entonces yo soy un macho recio en busca de algunas putas-
El tono de voz grave que puso me sacó una sonrisa
Maldito seas Denis, es imposible enfadarse contigo
-Moriré antes de verte con alguna-
-No lo creas-
Miré con incredulidad a Viktor
¿Acaso él tenía información sobre Denis?
-¿No?-
¿Denis con una chica?
¡Pero si desde el instituto que andaba besándose con chicos!
-El alcohol me vuelve increíblemente hétero- le miré inflar falsamente sus bíceps y volví a sonreír
-Ya, en serio-
-En serio prefiero a los hombres pero una vez estaba tan ebrio que terminé en la cama con una chica… quiero pensar que su cabello negro y una decena de tequilazos me llevaron por el mal camino-
Se limpió una lágrima imaginaria y yo intenté imaginarme a ese chico delgado y con uñas que variaban entre el mismo rosado y el negro… con una mujer
-No me hagas tener pesadillas- me estremecí
-Búrlate pero nadie está libre de pecado… bueno excepto tú y tu flor no marchita-
Fue mi turno para sonrojarme
La decisión de que Irina y yo perdiésemos la virginidad en nuestra noche de bodas… ahora sonaba patética en mi propia cabeza
-¡DEBEMOS LLEVARTE POR EL CAMINO DEL BIEN!-
Volví a mirar a Viktor, él estaba sonriendo, con Denis aún colgado de su cuello
Por un instante me pregunté si ellos…
“OLVIDALO”
-¿Del bien?-
-Del sexo BIEN intenso- aclaró
-No-
-¿QUÉEEE?-
-No pienso acostarme con una desconocida-
-O desconocido- agregó con una sonrisa perversa
-Lo siento Denis pero mis gustos no van por ahí-
Él bufó
-Por favoooor, tus gustos no van hacia ninguna parte, si realmente te calentaran las mujeres habrías intentado acostarte con la modelo que tenías de novia-
-¡Estoy enamorado de ella!-
Denis me miró fijamente
-A menos que estés hablando del amor a Dios, no vas a convencerme que jamás quisiste tirártela-
Lo pensé detenidamente, habían sido once meses con ella, en más de una ocasión estuvimos solos, besándonos por mucho tiempo… pero
Pero siempre había querido que fuese especial…
“¿No te has puesto a pensar que ella sí quería ir más allá?”
-¿Me dejó para acostarse con ese sujeto?- salté aún más indignado
-Si te sirve de consuelo yo habría intentado prenderte hasta que no pudieses detenerte ni frente a tus padres-
Ignoré el comentario obsceno de Denis y me centré en la furia que me provocaba imaginar a mi ex novia con ese vagabundo
-No me lo creo…-
Ahora quería que me dejaran solo para volver a sumergirme en mi miseria
-Querido, hay más allá afuera que esa chica, que de hecho me caía mal, era tonta y creída, una excelente combinación para modelo pero pésima para tu ehhh futura esposa-
Rodé en mi cama e intenté cubrirme pero Viktor me quitó el cobertor de las manos
-Vamos Alyosha, no estoy seguro de qué tan enamorado estabas de ella pero no ganarás nada encerrándote en tu habitación, si ella se fue debe ser porque no era la persona indicada para ti-
Ahhh, Viktor como siempre sabiendo qué decir en el momento indicado
-Gracias-
-¿Y cómo es que a mí no me haces caso?-
-Me ofreciste sexo y llamaste zorra a Irina- repliqué fingiendo molestia
-La verdad es una cruel perra codiciosa-
-Si claro-
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Era una maldita pésima idea, lo había sabido desde que dejé que Denis me convenciera de asistir a la fiesta de la facultad de ingeniería
No estaba dispuesto a coquetear con nadie después de que la imagen de mi novia abrazada a ese asqueroso sujeto quedase grabada en mi mente
¿Cómo pudo abandonarme solo por sexo?
Apreté el vaso en mi mano sin darme cuenta y suspiré al ver a mi amigo rubio bailando con el presidente de la facultad
Desearía tener la confianza suficiente para arrojarme por cualquier chica que llame mi atención, pero incluso cuando comenzó lo de Irina fue ella quien se acercó primero
La fiesta ya había alcanzado el punto en que varios desconocidos se besaban por doquier, no encontré a Viktor así que decidí textearle rápidamente a Denis
“Excelente fiesta, me iré primero”
Viktor no solía beber alcohol debido a sus entrenamientos de basketball así que podría llevarse a Denis… si es que ese presidente no lo hacía primero
El estacionamiento frente a la facultad estaba vacío, pero pasé eso por alto concentrado en la miseria de mis recuerdos con una chica que me había dejado sin pensarlo
Incluso había llegado a pedirle matrimonio para nuestro aniversario…
Joder…
Me quedé de pie frente a mi vehículo, sin poder creerme que había estado construyendo castillos en el puto aire
-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!- pateé la rueda de mi bmw y abrí la puerta con violencia
-Niños bonitos como tú no deberían estar solos-
Algo se empujó contra mí con la fuerza suficiente para dejarme inmóvil contra los asientos de mi propio auto
-¿Qué…?-
-Vamos a divertirnos un poco-
Manos desconocidas comenzaron a acariciar mi torso, jalando de mi camisa
Mi instinto actuó, pateando e intentando deshacerme del sujeto que se presionaba sobre mí, pero la fuerza de este era mucho mayor
-¡DEJAME!-
-Vamos, al final te va a gustar-
Seguí sacudiéndome con toda mi fuerza hasta que recibí un puñetazo en el rostro, el golpe consiguió aturdirme lo suficiente y él me movió para que mi brazo derecho quedara inmóvil bajo mi cuerpo y dobló mi otro brazo sobre mi espalda
-Me encanta tu lucha, vamos, sigue intentándolo-
La humillación de saber que él era más fuerte y podía hacer lo que quisiera bastó para llenar mis ojos de lágrimas, pero me negué a soltar una sola
Iba a escapar, como fuera
Si solo hubiese asistido a las clases de defensa personal que Viktor me sugirió…
Si al menos tuviera la fuerza del imbécil vagabundo por el que Irina me dejó…
-¡DEJAME!-
Seguí insistiendo, hasta que él comenzó a enfadarse y tiró de mi cabello despiadadamente
-Hueles delicioso-
-Me das asco- siseé
-Entonces apártame-
Continué luchando pero era como intentar mover una pared de concreto, sus manos vagaron por mi cuerpo provocándome náuseas, cuando llegaron al cinturón que ataba mis pantalones tragué duro
-¡DEJAME! ¡DEJAME! ¡DEJAME!-
-¡CALLATE MALDITA SEA!-
El golpe sobre mi espalda me quitó todo el aire de mis pulmones y me dificultó respirar
-Si pusieras de tu parte tal vez no te dolería niño bonito-
Escuché un cierre deslizándose y reprimí una arcada
¿Qué no era suficiente lo que había pasado por la chica que amaba?
¿Ahora iba a ser violado por un repugnante?
Bravo vida… definitivamente eres una perra
-¿Qué..?-
La voz sorprendida del sujeto me llegó lejana, pero de pronto no tuve a nadie presionándose asquerosamente sobre mi cuerpo
Me giré rápidamente, viendo el perfil de un chico inclinándose sobre algo o alguien con una mirada peligrosa
-¿Podrías ser más patético?- siseó con furia
Observé con incredulidad como con una sola mano alzaba al enorme sujeto que me había atacado y sin piedad comenzaba a golpearle
Palidecí cuando la sangre apareció y salpicó a ambos
Los golpes resonaban en el estacionamiento de forma desagradable, a medida que mi “salvador” continuaba, el otro se veía más y más inconsciente, pero no parecía querer detenerse
Cuando el rostro del sujeto se volvió irreconocible y dejó de quejarse decidí intentar detenerle
-Hey… ya es suficiente-
Acomodé mi ropa lo mejor que pude pero él me ignoró
-¡Para!-
Sostuve su brazo con mis manos, arrepintiéndome al sentir los músculos tensos
Claramente yo jamás tendría ese nivel de masa muscular, hasta Denis me repetía lo envidioso que estaba de mi figura
Como si pudiese alegrarme porque él me estaba diciendo eso
-Ya es suficiente- repetí mirando fijamente los ojos color ámbar del chico
Él me analizó lentamente, de pies a cabeza y pese a que había estado a punto de ser violando hace cinco minutos, mi mente no quiso que vomitara
-¿Estás bien?-
El cuerpo de mi agresor cayó contra el suelo con un ruido seco, indicando que lo único que le mantenía de pie era la misma fuerza del chico frente a mí
-Sí-
-¿Quieres que te lleve a tu casa?-
Fruncí el ceño
-No soy una damisela en apuros, puedo manejar mi propio auto- espeté con frialdad
Él alzó una ceja y un piercing relució en ella
Ahora que le veía mejor… era el mismo estilo que ese vagabundo…
Apreté mis manos enterrándome las uñas en las palmas
-¿Seguro?-
-Ya te dije que sí- usé todo mi autocontrol para no gritarle que se largara, después de todo me había ayudado
Pero mi orgullo estaba jodidamente herido
Volvió a analizarme y esta vez le ignoré y me incliné para atrapar las llaves de mi auto
-¿No piensas llamar a la policía?-
-¿Qué?-
-Intentó violarte, tienes que denunciarlo-
Imaginé a mi padre mirándome con desaprobación por no defenderme y a mi madre consternada porque tendría que ocultar ese hecho con ayuda de su relacionador público
No… no podía hacerlo
-Ya lo golpeaste ¿no?, creo que ya entendió el mensaje-
La rabia se reflejó en sus ojos pero enterró sus manos llenas de sangre en los bolsillos de sus jeans
-Como desees- había reprobación en su voz
¿Y a mí que me importaba lo que pensara alguien como él?
-Adiós-
Cerré la puerta y encendí el vehículo sin hacer contacto visual, maniobré con la mayor seguridad que pude fingir y realmente no sé cómo llegué a mi casa
Solo dejé el coche estacionado en la entrada y caminé como un zombie a mi habitación
En cuanto puse un pie en ella caí de rodillas sobre la alfombra, con el cuerpo temblando y las lágrimas contenidas que había estado reteniendo con tanta fuerza fluyeron por mi rostro
Rabia…
Jamás había sentido tanta rabia en mi vida
¿Por qué me pasaba a mí?
¿No era el campus malditamente seguro?
“Niño bonito”
Me repugnaba su voz y el tono con el que había dicho aquello
Arrastré parte del cobertor de mi cama y me quedé recostado sobre la alfombra, deseando retroceder el tiempo y no haber cedido a las peticiones de mi mejor amigo
“Tal vez ahora no estaría maldiciendo a un sujeto que me ayudó y que en el proceso terminó de pisotear mi orgullo”
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