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COMO LA NOCHE Y EL DÍA [BAEKYEOL] por bebaektome

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Notas del fanfic:

ORIGINALLIKE NIGHT AND DAY DE EXOBUBZ

PAREJA: BAEKYEOL

GÉNERO: ROMANCE, POCO ANGU, COMEDIA, RECUENTO DE LA VIDA.

CLASIFICACIÓN: PG -13 DESPUÉS M

TAMBIEN EN: BEBAEKTOME.LIVEJOURNAL.COM

LOS PRINCIPIOS DE BYUN BAEKHYUN

 

El retraimiento era algo en lo que pocas personas encontraban confort. Muchos se perdían en el concepto y el saberse solos y en soledad, pero algunas veces flores raras gustan de florecer en lugares donde otras no lo harían. Si las personas tuvieran que describir a Byun BaekHyun, el introvertido y aislado de la clase, "flor" hubiera sido la última cosa que pensaran a sobre el chico.

En lugar de una flor, probablemente hubieran lo hubieran descrito como una mala hierba, creciendo neciamente entre las grietas del concreto, lo que describiría perfectamente las normas de la sociedad.

No era como si Baekhyun fuera raro físicamente. Incluso muchos habían admitido que si él no estuviera tan involucrado con lo alternativo, Byun Baekhyun podría hacerse pasar por el chico más atractivo de los alrededores. Sin embargo Baekhyun no era de los que se conforma. A él no le importaba cuando las chicas se quejaban sobre lo poco que podían ver su a ojos cuando hablaba con ellas (si es que realmente necesitaba hablar con ellas). Ese no era su problema ni tampoco ellas deberían de preocuparse demasiado por ello.

En un sentido mental, Baekhyun no era estúpido. Su inteligencia no era la principal razón por la que era un marginado social. Su posición en la tabla de calificación era la promedio. Si realmente hubiera querido, él hubiera podido escalar esa tabla y quizás hasta asegurar un lugar en los primeros 10 puestos, pero francamente, él no le importaba que su nombre estuviera asociado con otras personas que ni siquiera le importaban.


A Baekhyun no le preocupaban muchas cosas. Todo a su alrededor era aburrido, como un lápiz sin punta, y el odiaba los lápices de madera que necesitaban ser afilados. Baekhyun usaba lápiz mecánico.

Si las personas fueran países, Baekhyun era para Estados Unidos después de la primer guerra mundial: un aislado. Todo mundo podría pelear sobre qué país representaban, ya fuera Gran Bretaña, Francia o Rusia. A Baekhyun no le importaba. Todos eran países europeos. Él era Estados Unidos y no quería nada que ver con ellos.

Ni siquiera entendía cómo fue que poco a poco se fue cerrando a las demás personas, pero antes de que se diera cuenta, Baekhyun se sentaba solo durante las comidas con nada más que su música y su celular haciéndole compañía. Tan raro como pueda sonar, así le gustaba.

Nadie intentaba hablar con él realmente, al menos que no tuviera otra alternativa, porque aunque él no fuera cercano con ninguno de sus compañeras, alguna veces acordaba ayudarlos con matemáticas o ciencias. Sus calificaciones en esas materias decían “tonto”, pero todos sabían que solo era porque Baekhyun nunca le importó hacer las tareas o poner algún esfuerzo en los exámenes.

En realidad, Byun Baekhyun era inteligente, solo que nunca se preocupó por compartir esa información.

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Porque alguien podría alguna vez tener algún interés en él, Baekhyun nunca lo entendería.

Durante el descanso, se sentaba solo en la esquina del salón escuchando su celular con los audífonos sus oídos, cuando una sombra larga aparecía sobre él. Por un momento, Baekhyun ni siquiera lo noto. Le tomó un golpecito en el hombre para atraer su atención.

Lo que vio delante de él lo tomó desprevenido. Él había visto al individuo seguido alrededor de la escuela, no era difícil que pasara desapercibido por tu tamaño y Baekhyun sabía que él era un jugador de básquetbol por todas las conversaciones escondidas que escuchaba. Aparte de eso, Baekhyun no podía descifrar cual era el propósito que el gigante tenía con él. Si él era como todos los demás, Baekhyun tenía una idea de que podría ser.

“¿Matemáticas o ciencia?” dijo platónicamente mientras solo se molestaba en retirar el audífono de uno solo de sus oídos.

“Una cita”

Quedándose en blanco por un segundo, le tomó a Baekhyun un minuto procesas lo que el gigante pudo haber inquirido. “Cita….” Repitió murmurando. “Es Jueves…”

“Eso no es lo que quise decir”, dijo el atleta gigante.

Como que Baekhyun quería golpear y quitar esa sonrisa de la cara del joven. Ese estúpido probablemente cree que es divertido, pensó. Creyendo que era solo una broma jugada por un sucio deportista, Baekhyun rodó sus ojos y regresó su atención a su celular. Pusó su audífono de regreso y aumentó el volumen a lo más alto.

Asumió que el gigante aún seguía tratando de decirle bromas porque a pesar de que Baekhyun estaba ignorándolo, el alto y profundo tono de su voz todavía podía de alguna forma escucharse a través de los gritos en la música en los oídos de Baekhyun. Cuando la voz amortiguada del gigante se detuvo, Baekhyun agradeció silenciosamente a los dioses y esperó pacientemente porque el joven se removiera del espacio de la burbuja de Baekhyun. Sin embargo, la sombra nunca lo dejo.

Sus ojos estaban fijos en la mesa, mientras perdía el tiempo distraídamente con el celular, cuando la mano del gigante deslizó una nota.

Quiero tener una cita contigo, decía.

“No”. La respuesta fue inmediata. “Por favor vete” Baekhyun agregó mientras empujaba la nota lejos.

Unos segundos después, aún podía ver al gigante parado encima de él, hasta que de repente una mano bajo y jalo gentilmente su audífono izquierdo. “Soy Park Chanyeol” se presentó el joven. “Estoy en el equipo de básquetbol”

Y mientras Park Chanyeol se introducía, Baekhyun lo ignoró. Internamente atragantándose con el pensamiento sobre el basquetbolista tratando de abrirse camino presumiendo para dar una buena primera impresión. Aunque estaba un poco interesado en lo que el chico tenía que decir, a pesar de todo la cantidad de importancia que le daba Baekhyun mientras el deportista seguía hablando era poca.

A la mitad de la efusiva presentación del gigante, Baekhyun miro para el otro lado y se paró, interrumpiendo a Chanyeol. Cuando la sonrisa del deportista titubeó por un momento para preguntarle incómodamente al castaño a donde iba, Baekhyun no dio respuesta, rápidamente tomo su celular y dejó el salón.

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Después de la confesión, Baekhyun trató de regresar a sí mismo. No fuese como si todos los días recibiera una confesión, pero al final, él sabía era una de esas situaciones donde la gente se desafiaba para que se confesará al chico raro de la clase. No era la cosa más amable, y eso era parte de la razón porque Baekhyun odiaba la escuela más que el mismo infierno. Y mientras trataba de reprimir en lo profundo de su mente el evento que había pasado en el salón, cambio de canción en su celular y regreso deliberadamente a la indiferencia

Antes de su encuentro con el gigante jugador de básquetbol, Baekhyun nunca había prestado la atención suficiente al jugador como para notarlo. Sin embarque, desde entonces, empezó a tomar nota del joven más y más de lo que le hubiera gustado. En los corredores, cuando algunas veces se sentaba contra la pared y jugaba a las damas en línea, empezó a ver al gigante frecuentemente en el área mientras hablaba y conversaba con hombres y mujeres por igual.

Chanyeol era una mariposa social, pero lo que Baekhyun no podía entender era porque Chanyeol no podía ser una mariposa social en áreas de la escuela donde Baekhyun no estuviera presente. Muy seguido Baekhyun se sentía paranoico y odiaba eso. Por mucho que disfrutara concentrándose en sí mismo, odiaba esa sensación de paranoia solo por el hecho que enfatiza el egoísmo en el mismo que de repente pensaba que todo el universo giraba alrededor de él.

Había dejado de lado el evento ocurridos en el pasillo. Por todo lo que sabía, el deportista podría haber estaba ahí desde antes de su confesión y Baekhyun (siempre ocupado en su celular) simplemente no lo había notado.

El introvertido deseaba dejar de notar al gigante. Para la tercera vez que accidentalmente hizo contacto visual con Park Chanyeol, decidió reubicarse, moviéndose a las escaleras donde las personas raramente se aventuraban opuestamente a los pasillos durante los descansos entre clases.

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No había muchas personas a las que Baekhyun consideraba como “amigos”, pero estaba Kyungsoo. El hecho de que ellos fueran amigos era una broma en el sentido que las personas seguido pensaban que ellos eran polos opuestos, pero en realidad, Kyungsoo era tan pesimista y odioso con todos como Baekhyun. El presidente del cuerpo estudiantil era el mejor actor que el castaño tenía la suerte de conocer y de alguna vez convertirse en amigos.

Cuando Baekhyun le platicó al presidente electo del cuerpo estudiantil, acerca de la confesión del jugador de básquetbol, dos semanas después mientras se sentaban en el techo, el chico con expresión de piedra solo resopló mientras terminaba su cigarrillo. “Eso es jodidamente lamentable”
“¿Tú crees que fume algún tipo de droga?” Baekhyun dijo, contribuyendo a la conversación mientras miraba a la nada, en el horizonte.

“No, pero hizo esa tontería por una apuesta” Kyungsoo dijo seguro mientras eliminaba la colilla de cigarro aplastándola contra el concreto. “Yo tampoco hubiera caído en la trampa”

“Nadie tiene buen sentido del humor en esta escuela”

“Todo es drama o una porquería” Kyungsoo agregó, sacando un pedazo de goma de mascar de uno de sus bolsillo traseros. “Luego está la broma ocasional por los inmaduros. Es totalmente ridículo”

“Odio esta maldita escuela, Kyungsoo…”

“Joder, yo también odio este hoyo de mierda”

Baekhyun se rio de la ironía. “Dime de nuevo, ¿Porque eres el presidente del cuerpo estudiantil?”

“Para que otro hoyo de mierda acepte mi trasero dentro de su establecimiento y así pueda obtener un certificado de mierda y un trabajo de mierda y vivir una vida de mierda” El chico masticó su goma por un momento antes de girar su cabeza y soplar en la cara de Baekhyun. “¿Podrías decir que fumé?”

“No”.

“De acuerdo,” Kyungsoo suspiró mientras se levantaba del suelo sacudiéndose cualquier posible resto de suciedad en sus pantalones. “Tengo que regresar al salón de gobierno estudiantil ya que habrá una junta sobre las quejas de los estudiantes esta semana. Jode mi vida y jode a todas esas que personas que no pueden resolver sus jodidos asuntos con cada uno sin tener que quitarme mi tiempo”

“Te veo después”, Dijo Baekhyun, levantando en señal de despedida.

“¿Todavía no te vas a casa?” preguntó el chico mientras se arreglaba. “La escuela terminó. No sé porque querías pasar tiempo aquí cuanto tiene la opción de irte”

“No tengo ganas de irme a casa” Baekhyun se encogió de hombros.

“Entonces, ¿Quieres un cigarro para pasar el tiempo?” Ofreció Kyungoo.

Sacudiendo su cabeza, Baekhyun negó amablemente. “Yo no fumo”

“Bien, porque ya no tengo ningún otro cigarro” Kyungsoo sonrió. Cuando terminó, metió sus manos en sus bolsillos “Te veo luego”

“Ok”

Después de que Kyungsoo lo dejo solo, Baekhyun dejó que sus párpados se cerrarán y solo quería descansar sus ojos por un rato. Sin aviso, el sueño vino a él envolviéndolo con el deseo de descansar por un periodo de tiempo más largo permanentemente. La agradable sensación del cálido ambiente debajo de la fresca sombra de la pared donde se recordó inevitablemente lo arrullaron y la próxima cosa que Baekhyun supo, fue que se levanta al final de un atardecer color naranja.

Inmediatamente checó si alguna parte de su piel estaba quemada por el sol. Cuando todo parecía en su lugar, Baekhyun dejo salir un suspiro de alivio antes de levantarse lentamente del suelo. Tomando su celular, lo checó y se dio que su batería murió. Adormilado, Baekhyun murmuró una maldición mientras metía su celular en su bolsa trasera y cuidadosamente enrosco sus audífonos y los puso en su bolsillo delantero.

La escuela era inquietante cuando no había ni un solo alumno presente. Hasta Baekhyun se sentía un poco incómodo con el silencio fantasmal del edificio mientras caminaba por los pasillos y escaleras. Incapaz de entrar al salón donde había dejado su mochila, Baekhyun decidió dejarla ahí hasta el día siguiente. De todas formas no iba ir a ningún lado.

El castaño camino con sus brazos cruzados a la salida del edificio, sintiendo unos ligeros escalofríos que le recorrían todo el cuerpo. Cuando pasó por los relojes colgados en las paredes, se percató que era casi las 6:50 de la tarde.

Con la escuela entera como un desierto desolado, después de un rato Baekhyun se encontró acostumbrándose a lo misterioso y solitario del ambiente. A la mejor era porque había regresado a la nueva regla sobre casi arañar la muerte cuando una mano tocó su hombro justo cuando había alcanzado las puertas frontales de la escuela.

Cuando el mundo está cubierto en oscuridad, cualquiera persona y cosa parecía una amenaza. Las luces a lo largo del camino y las que estaban sobre las puertas de la escuela solo le daban a todo un toque horripilante que no le gustaba para nada a Baekhyun. Cuando sintió la mano, brincó a un lado por puro reflejo, su corazón listo para salirse del pecho y dejar atrás el resto de su cuerpo muerto.

Bajo amarillentas las luces tenues, Baekhyun tenía problemas para lograr que sus ojos se enfocaran en la figura que lo había espantado. No fue hasta que escuchó la voz profunda a través de sus oídos que Baekhyun recordó ligeramente a quién pertenecía. Cuando se dio cuenta que era el jugador de básquetbol de hace unas semanas atrás, sintió como sus hombros se relajaron antes de dejar escapar el aliento y dar vuelta sobre sus talones para seguir con su caminata fuera de la propiedad de la escuela.

Sin embargo, a pesar de cargar una mochila de lona grande, no le tomó mucho tiempo al jugador de piernas largas el alcanzarlo. Baekhyun odiaba el hecho de que su celular no tuviera batería, ya que le quitaba la posibilidad de mostrarse realmente ocupado en algo. Justo cuando sintió que el gigante se acercaba, sacó sus audífonos del bolsillo y los colocó en sus oídos mientras mantenía la conexión en sus pantalones, pretendiendo que no podía escuchar.

Cuando el deportista finalmente lo alcanzó, Baekhyun se abrazó incluso más apretado para protegerse del viento nocturno, pero también para dejar en claro que el solo se necesitaba a sí mismo, no a un atleta de la escuela siguiéndolo todo el camino hasta la parada del autobús dos cuadras abajo. Pero cuando los dos empezaron a caminar al mismo ritmo, Baekhyun cerró sus ojos por más de un segundo y medio cuando sintió que el error de su vida estaba por suceder: Una conversación.

“Intenté llamarte varias veces, pero creo que no me escuchaste.”

Abriendo sus ojos, Baekhyun mantuvo su meta firme, intentando enfocarse en llegar a la parada de autobús. El no respondió o hizo comentario alguna sobre lo que dijo el gigante. En su lugar aceleró el paso, pero decidió que no le gusto como el viento lo estaba golpeando más fuerte de lo que prefería, haciendo que se enfriara un poco más que antes. Al final, mantuvo el mismo ritmo, decidiendo aguantar la compañía de este último por un rato.

“¿Qué haces aquí tan tarde? Me sorprendí al verte todavía en la escuela. La práctica terminó un poco más tarde de lo usual eso explica porque aún sigo aquí.” Dijo el joven alto, riendo embarazosamente como si no notara el hecho de que Baekhyun no quería hablar con él. “No recuerdo ninguna otra actividad escolar que sea a esta otra aparte del Básquetbol. ¿Estabas siendo un acosador acechando la escuela por la noche?”

La broma pasó desapercibida y Baekhyun no encontró al joven divertido. Mirando al gigante en blanco, Baekhyun esperó que su fría expresión hubiera transmitido el mensaje. Con toda gente que había conocido antes descubrió que si los miraba con una mirada vacía, sus ojos con delineado grueso serían mal interpretados, a menudo dejando saber las personas que tenían que dejar de molestar, y así en lo consiguiente permitiendo a Baekhyun estar solo.

El jugador de Básquetbol era una historia diferente. Aun notando la falta de voluntad de Baekhyun para conversar con él, Park Chanyeol continuó con la conversación unilateral que estaba teniendo. “Ok, Entendiendo que no quieres hablar conmigo” dijo el gigante, metiendo sus manos en los bolsillos delanteros de sus shorts deportivos.

Girando su cabeza a la izquierda, y dando otra mirada una vez más, Baekhyun encontró los ojos del gigante, apenas notándolos bajo las luces de la calle. Su rostro se suavizó, desvaneciendo un poco su expresión fría.

“Para ser honestos,” dijo chanyeol, mirando al cielo que gradualmente se oscurecía, “no sé qué hago aquí caminando contigo. Mi casa está en la dirección opuesta.”

Baekhyun retuvo las ganas de reírse en la cara en del joven, y tuvo éxito.

“Supongo que yo sólo quería… en realidad no lo sé” El castaño miró mientras el jugador agitaba su cabello húmedo (probablemente por bañarse en los vestuarios) y regresó su mirada a él. “Yo solo te vi y ¿me sentí obligado a venir?”

Bajando su mirada, Baekhyun movió sus ojos lejos.

“No sé si me recuerdas, pero soy Park Chanyeol,” dijo el gigante, presentándose nuevamente. “Tu como que me rechazaste hace unas semanas. Hmmm no sé exactamente qué más decir”

En silencio, Baekhyun creo una respuesta que incluía contestarle al joven que dijera nada más y se retirara. Justo cuando estaba a punto de cruzar la calle, sintió que Park Chanyeol tocaba su hombro y lo giraba.

“Quizá - No estoy seguro - pero creo que tienes la impresión que yo había estado bromeando aquella vez que fui a ti ese día” dijo muy serio “No sé qué hice para darte esa impresión, pero no fue mi intención. Estaba siendo totalmente serio. Tu realmente me gustas”

Los labios de Baekhyun se abrieron un poco. Recuperando su compostura, rápidamente cerró la boca. Trató de girarse nuevamente y caminar hacia la parada de autobús al otro lado, pero Chanyeol era persistente en dejar claro lo que sentía.

“Sé que no estás escuchando nada. Vi tu teléfono en tu bolsillo de atrás”, dijo. Mirando a Baekhyun como si fuera un adulto dando un sermón a un niño. “No sé qué hacías tan tarde en la escuela, pero me alegro porque estamos juntos aquí. Lo repito de nuevo en caso de que no lo hayas escuchado las segunda vez que lo dije, Soy Park Chanyeol. Sé que tú eres Byun Baekhyun, solo para dejar claro que no te estoy confundiendo con alguien más.”

El joven más bajo se quedó incrédulo a pesar de que era claro que el gigante tenía su atención. Después de un momento, Chanyeol continuó soltando el hombre de Baekhyun cuando estaba seguro que este no se iba a ir corriendo a la mitad de sus palabra de nuevo.

“Cuando te invite a salir, no estaba bromeando. Nadie me está forzando a hacerlo” Chanyeol insistió, aunque Baekhyun aún estaba dudoso. “Debí de haberte lo dicho en lugar de haberlo escrito en un pedazo de papel” murmuró. “Quizá por eso te fuiste. No lo sé. Si esa es la razón, lo siento, pero como lo dije antes, lo dijo en serio”

Después de un rato sin respuesta, Chanyeol arrugó su cejas mientras levanto su brazo a su nariz. “¿Huelo mal?” preguntó, pensando que la falta de interacción de Baekhyun tenía algo que ver con el olor de su cuerpo.

No sabe por qué, pero Baekhyun dejo salir un sonido. Se hubiera convertido en una pequeña risa si no hubiera tomado compostura una fracción de segundo tarde, terminando con un cortado “heh”. Su cara se retorció y Chanyeol accidentalmente vio la curva de su boca moverse hacia arriba antes de que el castaño se obligara a componer su rostro.

Antes de que Chanyeol pudiera aprovechar ese pequeño rayo de esperanza y jugar en las grietas del armazón introvertido, el autobús llegó al otro lado de la calle. Después de un segundo ambos miraron al vehículo, Baekhyun miro a Chanyeol y parpadeo.

“El autobús está aquí”

Chanyeol sonrió sutilmente, pensando sobre todas las cosas que el castaño pudo haber dicho en su corta caminata, el tenía que haber dicho lo obvio justo antes de separar sus caminos. Baekhyun comenzó a cruzar la calle señalando al conductor que iba a subir, mientras Chanyeol observada la figura oscura de Baekhyun agrandando la distancia entre ellos. Cuando Baekhyun llegó a la mitad de la calle, se quitó los audífonos y miró al jugador de básquetbol.

“Yo no soy realmente tu tipo” dijo en el tono de voz más casual que Chanyeol jamás había escuchado, pareciendo como que el joven bajo lo estaba rechazando una vez más.

Sin embargo, mientras el atleta miraba el chico punk a quien todos habían rechazado por ser demasiado indiferente introvertido, él sonrió ampliamente, pensando en lo ridículo que era que el castaño dijera que no era el tipo de chico para el jugador de básquetbol.


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