Happy Birthday my first love
-No, no, no. –El peli plateado ya llevaba una hora negándose.
Taemin estaba totalmente desesperado. ¿Cómo se suponía que su amigo consiguiera pareja si se la pasaba metido en su casa? No salía a fiestas por qué no sabía bailar. Era pésimo, tenía dos pies izquierdos. Las pocas veces que lo había convencido de ir a alguna había terminado haciendo el ridículo frente a toda la gente.
No, esto no podía continuar así. Simplemente era demasiado vergonzoso que su hermano no sabía bailar.
-Por favor. ¿Sí? El profesor es amigo mío, te prometo que te tendrá mucha paciencia. –Taemin no se rendía, el continuaría rogando todo lo que fuera necesario.
-No. –Jonghyun incluso negó con la cabeza y ambas manos. -¿Qué edad crees que tengo? ¿Te parece que alguien de mi edad necesite clases? –Jonghyun estaba totalmente indignado. El era plenamente consciente de que era un accidente con piernas cuando bailaba pero definitivamente no iba a tomar clases.
-Vamos, no estará solo. También irá JinKi. –JinKi, el mejor amigo de Jonghyun siempre estaba con él, en las buenas y en la malas. Incluso no era bueno bailando, no era tan malo como Jonghyun, pero no era bueno.
-No creo que JinKi haya aceptado -¡Si! Ahora Jonghyun estaba dudando.
-Acepto en cuanto le dije que las clases no serían tan largas y podría aprender a bailar de lo mejor en poco tiempo.
-¿En serió? –Lo tenía, Kim Jonghyun había perdido.
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Y entonces, aquí estaba. Él, solo y su pobre alma.
Taemin le había dicho que lo mejor era llevar una botella de agua para beber después de la clase. Le dijo que hiciera lo que hiciera no bebiera durante la clase. También le había aconsejado llevar una pequeña toalla para el rostro. Jonghyun no lo entendía, Taemin era muy consciente de que él no sudaba, nunca, hiciera lo que hiciera Jonghyun nunca sudaba.
Aun así con todas esas cosas Jonghyun hizo caso a su hermano y llevo una toalla, agua, obviamente iba vestido con ropa deportiva, pero dado que esa mañana hacia un poco de frio decidió llevar el más grueso que tenia.
Estaba fuera del lugar en donde sería las clases, no pensaba entrar si JinKi, eso sería demasiado vergonzoso.
-¡Hey! Jonghyun-ah, ¿Estás listo?
-Claro, solo te esperaba.
-¿Por qué? Debiste haber entrado sin mí. La clase está a punto de comenzar, nos vamos a perder la presentación. –JinKi comenzó a entrar.
Ojalá –No creo que comiencen cinco minutos antes. –Definitivamente esperaba que lo hicieran.
Subieron al segundo piso que era donde serían las clases y solo entraron y Jonghyun se quedo con la boca abierta.
El lugar era muy amplio y las paredes que el consideró el frente y atrás estaba llenas de espejos. Él solo había visto ese tipo de lugares en las películas, la verdad es que nunca le entusiasmo aprender a bailar.
A un lado, en una pared en la que no había espejos estaba un sofá negro de lo más atractivo, sobre éste se encontraban a dos maletas y podría apostar a que eran de las dos personas que se admiraban frente al espejo.
Jonghyun de lo más confundido caminó hacia el sofá mientras JinKi como buen compañero se acerco a saludar a los chicos que ya estaban ahí.
Dejó su pequeña maleta y se caminó hacia JinKi, antes de que pudiera llegar a él, salió -de una puerta que nunca noto en la pared- un chico rubio, alto y totalmente hermoso.
Vestía unos pantalones cortos totalmente untados al cuerpo color negro, una playera sin mangas e igualmente pegada a su torso.
Jonghyun al verlo inmediatamente trago saliva, el chico era totalmente encantador, tenía todo lo que cualquiera pudiera desear, un cuerpo perfectamente moldeado por lo que seguramente eran años de práctica, un rostro divino adornado con algunas pecas bellísimas, unos ojos hechizantes de forma felina y una boca en forma de corazón.
Era el final, Jonghyun había caído completamente por aquel chico y estaba a punto de hacer el peor ridículo frente a él.
De pronto, en un segundo la mirada de aquel chico rubio se cruzo con la suya y sonrió. Ese encantador chico le sonrió y seguramente ahora Jonghyun tenía una estúpida sonrisa en su rostro por que no podía pensar debido a los fuertes latido de su corazón que hacían retumbar a su cabeza, todo lo que podía hacer era escuchar a su corazón totalmente agitado en su cabeza.
-Buen día. –Sonrío de nuevo. –Mi nombre es Kim KiBum y seré su profesor. –Su voz, Dios, su voz era maravillosa. –Por favor, para comenzar quiero que todos se sienten en un círculo se presenten.
Jonghyun como la mascota mejor entrenada se sentó ahí, en el mismo lugar en donde estaba parado babeando, poco a poco los demás se sentaron a sus lados riendo disimuladamente.
-Comencemos contigo, señalo a JinKi, que era el primero a la derecha de donde KiBum se había sentado.
-Mi nombre es Lee JinKi y estoy aquí debido a que mi bobo amigo no sabe bailar y tiene pavor de venir solo. –dijo todo honestamente. Jonghyun iba a colgarlo cuando salieran de ahí.
KiBum señalo al siguiente.
-Mi nombre es Heechul, yo soy bueno bailando pero Hae –señaló a su amigo el cual estaba a la izquierda de KiBum. –quiere aprender técnicas nuevas.
-Muy bien. –volteo mirar a Jonghyun. –Tu turno –guiño un ojo y Jonghyun se convirtió en un charco de baba.
-Yo... –trago saliva. –Mi nombre es Jonghyun y no sé bailar. –Dios, eso había sido tan vergonzoso.
-No te preocupes Jonggie, soy muy paciente –volvió a sonreír.
Su sonrisa era la más coqueta, después de eso Jonghyun no escuchó nada mas, solo le robaba miradas a KiBum para recibir las hermosas pero disimuladas sonrisas de peste.
-Ahora que todos nos conocemos –se levanto, -necesito que todos tomen un lugar. Comenzaremos oficialmente la case de hoy.
Jonghyun inmediatamente tomo un lugar al fondo para no hacer el ridículo frente a KiBum.
-No, Jonnghyun-ssi –lo llamó. –Tu lugar será al frente, para que pueda observarte.
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Dios, KiBum era un completo descarado. No llevaba ni una hora de haber conocido al peli plateado y ya estaba intentando que no se separara de él.
KiBum no era así, comúnmente era muy reservado, aun en sus clases solo se dedicaba a enseñar la técnica, pero ahora, todo era diferente, este chico era diferente. Jonghyun era tan hermoso que a KiBum le dolía por tocarlo.
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Las clases comenzaron, puesto que eran las primeras solo serían calentamientos, para que el cuerpo de todos se fuera adaptando al pesado trabajo de bailar de manera correcta.
Comenzó con un ligero estiramiento, o eso parecía. Poco a poco los estiramientos comenzaron a ser más difíciles. Mientras parecía que KiBum no estaba esforzándose nada Jonghyun ya había comenzado a sudar a mares y no llevaba ni 20 minutos de clase.
Kibum indico que extendieran los brazos hacia arriba mientras se paraban en el dorso del pie. Jonghyun intentaba, de verdad intentaba hacer los ejercicios bien, pero era realmente difícil cuando el modelo a seguir era KiBum.
Jonghyun podía ver como todos esos músculos fibrosos se estiraban mientras un pequeño rastro de sudor bajaba por ellos.
KiBum tenía el cabello ya un poco mojado pero su expresión no era cansada, al contrario, estaba disfrutando mucho aquello.
Después de tres ejercicios más Jonghyun se rindió y corrió al sofá por su botella de agua. Como si estuviera en el desierto bebió toda la botella de un solo trago y dejo que algo se escapara por las comisuras de la boca. Al terminar de beber aun no podía recuperarse, su respiración aun era difícil, pero no quería rendirse, quería seguir con los estiramientos ya que el pensamiento de decepcionar al rubio lo afectaban.
Continúo con los estiramientos tratando que el cuerpo de KiBum no lo distrajera, aunque era un poco imposible.
Con dificultad llego al final de clase.
-¡Bien! –KiBum apago la música de fondo. –Es todo por hoy. Espero verlos en la próxima clase y recuerden practicar en casa para que todo este tremendo esfuerzo sirva de algo –dijo sonriendo mientras miraba a Jonghyun.
Por alguna extraña razón Jonghyun tenía un muy fuerte dolor en su costado izquierdo, cada vez era más fuerte y no podía caminar bien.
-Jjong, ¿Estás bien? –JinKi se acerco a él.
-La verdad no, me duele mucho el costado izquierdo. –Dijo Jonghyun en un gemido.
-¿Puedes caminar? –esa era la voz preocupada de KiBum.
-Si –intento hacerse el valiente, -¡Auch! No, no puedo, -no lo logró.
-Puedes irte JinKi, yo cuidare de él hasta que el dolor se le pase y lo acompañare a casa. –KiBum tranquilizó a su amigo.
-¿Está bien? ¿Es algo grave?
-No, en realidad se pasara dentro de poco. Es debido a que bebió mucha agua mientras se ejercitaba y no está acostumbrado.
-Menos mal, -JinKi se tranquilizó. –Lo dejo a tu cuidado. –JinKi sonrió y se despidió. –Recupérate Jjong. –Salió corriendo.
-¿Taemin no te dijo que no bebieras agua? –KiBum lo ayudo a recostarse en el sofá y comenzó a limpiar el sudor de la cara de Jonghyun. –No debiste traer ropa tan gruesa, ahora te estás asando. La próxima solo trae algo para cuando salgas, solo si hace frio.
-¡Au! –Jonghyun se quejo. –Está bien. ¿Cómo sabes que soy hermano de Taemin?
-Usas los mismos tenis que él –Era muy observador. –Es eso, o dormiste con él anoche. –Intento decirlo indiferente aunque la idea le daba risa. Era obvio que Jonghyun y Taemin eran hermanos. Además Taemin le había dicho su nombre y él era el único Jonghyun.
-Iuuuu, asco. Si, Taemin es mi hermano.
-Lo sé. –Kibum aparto un mechón del cabello de la cara de Jonghyun. –Eres muy guapo.
El dolor de su costado, su vergüenza por no saber bailar y hacer el ridículo frente a KiBum, todo se le olvido. Solo podía pensar en las palabras que salieron de la boca del perfecto rubio, sus labios y como lentamente la cara de KiBum se acercaba a él.
Sintió unos suaves labios sobre los suyos, de nuevo su corazón latía tan fuerte que solo podía escuchar eso en su cabeza. Se sentía como si su carrazón fuera a salirse.
Esos labios eran el cielo, eran tan perfectos que se atrevió a dar un paso más y metió su lengua dentro de la boca de KiBum esperando que este no lo empujara y lo mandara al diablo. Contrario a sus predicciones Kibum subió a horcajadas al cuerpo de Jonghyun acomodando su perfecto trasero sobre el ya muy despierto miembro del peli plateado.
-Mmmm –lo escucho gemir cuando sus miembros se rozaron.
La temperatura era tan alta en ese lugar, Jonghyun comenzó a sentirse caliente en todos los puntos correctos.
-Jonghyun, -dijo rompiendo el beso, -por favor, por favor dime que esto no será solo una jodida de una vez. Yo, de verdad, de verdad no entiendo que me pasa contigo, yo solo siento que si no te toco comenzaré a sentir dolor.
Jonghyun sonrió. –No solo te prometo que esto no será una jodida rápida, te prometo que después de esto te atare a mí tan duro que te será imposible olvidar que existo. –Jonghyun en un movimiento rápido se coloco sobre KiBum.
KiBum se saco la playera por la cabeza inmediatamente. Revelando un torso tan blanco que Jonghyun no pudo evitar inclinarse y comenzar a lamer desde el cuello hasta el feliz camino de vello que iba del ombligo hasta debajo de la cinturilla del pantalón.
Con la boca Jonghyun desabrocho el pantalón de Kibum y le saco la ropa interior.
-No sé qué creas de mi en este momento, pero quiero decirte que definitivamente no hago esto todos los días. –Jonghyun bromeo.
KiBum enredo sus brazos en el cuello de Jonghyun y lo atrajo para un ardiente beso en donde la lengua de Jonghyun se tomo el tiempo para aprender de memoria cada zona en la boca del rubio.
Jonghyun impaciente rompió el beso y bajo a pene ya despierto del rubio que escurría pre semen, Jonghyun se lamio los labios para después degustar un dorada gota de la punta del hermoso pene de KiBum.
KiBum se retorcía y gemía rogando por que Jonghyun se lo llevara completo a la boca. KiBum era de lo más erótico mientras estaba excitado y listo para ser jodido.
-Jonghyun, por favor. –Rogó ahora con pablaras.
Jonghyun se metió todo el penen de KiBum en la boca y lo saco. Metió tres dedos a su boca lubricándolos con el pre semen y saliva de su boca. Inmediatamente después volvió a meterse el miembro de KiBum a la boca creando un sellado al vacio que tenia a KiBum en el cielo. Introdujo un dedo en la entrada rosa de KiBum mientras sentía como el pene del rubio bajaba por su garganta y KiBum solo podía gritar y gemir. Lo estaba llevando a la locura.
Cuando ya tenía los tres de dos dentro de KiBum, Jonghyun comenzó a masajear los testículos del rubio y no tardó mucho para que este explotara en su boca dándole a degustar la más sabrosa semilla. KiBum era delicioso por dentro y por fuera.
-Jjong –KiBum gimió sintiendo los dedos de Jjong dentro de él. –Quiero, necesito más. –De retorció.
-Si eso es lo que quiere mi bebe, eso tendrá. –Jonghyun sonrió con tanta ternura que el corazón de KiBum se volvió loco y su estomago se lleno de mariposas.
Lentamente Jonghyun se introdujo dentro del cuerpo de KiBum, era tan bueno, se sentía tan lleno que era inexplicable, solo deseaba que Jonghyun se quedar ahí por siempre.
Cuando Jonghyun comenzó a moverse definitivamente perdió la cordura, tenía un ritmo delicioso que tocaba cada una de las fibras sensibles dentro de KiBum.
El rubio gritaba y pedía por más olvidándose de todo pudor.
Jonghyun se sentía en el cielo dentro del apretado cuerpo de KiBum, sabía que no iba a durar mucho pero iba a disfrutar cada segundo. En un momento KiBum apretó y Jonghyun sin poder contenerse mas se vino dentro del cuerpo del rubio soltando un fuerte grito.
Poco después KiBum se corrió por segunda vez manchando ambos torsos.
-Te amo –jadeo Jonghyun. –Se que puede sonar estúpido por que hace solo unas horas ni nos conocíamos pero yo…
-También te amo –dijo KiBum uniendo sus labios de nuevo.
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-¿Entonces su regalo de este año será una carta? ¿Y de dónde vas a importar el papel? –Taemin sabía que el regalo de su cuñado necesitaba ser obligatoriamente caro.
-Solo va a ser una carta sencilla en donde escriba todo lo que tengo en mi corazón. –Jonghyun se detuvo un momento. -¡Dios! Va a ser tan vergonzoso. –Se cubrió el rostro.
-Estoy seguro de que si lo haces bien, mi querido cuñado lo apreciara.
Jonghyun sonrió enamorado, aun después de todos estos años podía pensar en KiBum y sonreír como idita. –Si, lo sé. El es tan hermoso por dentro como lo es por fuera.
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KiBum entro a la casa que compartía con Jonghyun desde que decidieron vivir juntos y se encontró con una carta en centro de la sala.
Al terminar de leerla se dio cuenta de que sus lagrimas había comenzado a caer, era una carta hecha por Jonghyun, en ella había escrito todos sus sentimientos y había dejado su corazón.
Jonghyun, su Jonghyun verdaderamente lo enamoraba día a día con cada detalle. Incluso él esperaba un regalo caro, pero Jonghyun los sorprendió dejando una carta con una hermosa dedicatoria al final…
“Happy Birthday my first love”