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Syntax ERROR (KEO) por RobyKlass

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Notas del capitulo:

Muy bien, VIXX is back, junto con una cancion increible y muy triste, y adivinen.

Para los que han leido "Despierta en el presente" sabran que me encanta lo tragico.

Asi que la idea en parte se dio por si sola, con la letra, el video y mis ideas tragicas, todo eso logro este fic, que espero que disfruten.

Admito que ODIO los primeros capitulos de los fics que escribo, porque realmente no se como empezar una historia porque tengo la mala costumbre de crear el desarrollo y el final, menos el inicio, pero les prometo que pronto los capitulos seran mas largos y estaran mejor redactados.

-¡No toques eso! -el castaño de cabello revuelto prácticamente le quitó el combustible de la mano al pelirojo cobrizo, sin ningún cuidado, lo cual era peligroso para ambos jóvenes científicos.

-¡Ten más cuidado tu! -le reclamo el otro más que molesto.

-Déjame a mi, por favor TaeKwoon -le suplicó el menor haciendo una mueca de piedad. Algo a lo que el mayor no pudo resistirse.

-Ponte los guantes primero...-le ordeno con cierta empatía.

-¡No los necesito! -Junto con esas palabras infantiles y sacarle la lengua de forma burlona, se volteo dejando al mayor rodando los ojos ¿no podía ser más maduro? No, no sabía si era posible, pero , si fuera más maduro, este "novato" no hubiera ni pensado en trabajar con él.

Esa era la vida de TaeKwoon, uno de los químico-mecánicos más conocidos a nivel científico, o como la gente le llamaba ,"Leo", proveniente de la palabra León, ¿a que se debía eso? Pues a que tratar con él era toda una lucha, era terco, muy serio y sólo le importaba su trabajo, no la persona que le ayudaba.
Aunque el del verdadero trabajo era el joven Jae Hwan, uno de los chicos más inteligentes que pudo haber conocido, becado por varias Universidades, y el ayudante de Leo, el cual esperaba llegar a ser igual de grande, aunque la mayor parte del trabajo era de ambos, algo que el mayor envidiaba de este "niño prodigio", era su capacidad de que podía llegar a una conclusión en minutos en un momento de "estupidez", a diferencia de TaeKwoon, que pasaba semanas pensando para llegar a esta.
Lástima que sólo él fuera conocido, todo lo que inventaban, todo lo que descubrían, todo el crédito del trabajo de ambos, iba para Leo, el cual a veces se sentía mal por Jae Hwan, quien debía soportar su mal humor y más encima, que nadie reconociera su esfuerzo y descubrimientos. Lo peor era saber el deseo que tenia el menor de ser conocido no por comportarse como un idiota, si no por que realmente era inteligente, pensaba tan rápido, y era tan...único en todo, y saber que solo porque el nombre Leo sonaba en todas partes por ser el científico mas conocido e inteligente de ese año, él era considerado nada por su trabajo. Pero era de los pocos, que le tenia fe de que algún día llegara su momento, y que el mundo conociera a "Ken", el científico serio con el leve parecido al luchador del "estúpido e inhumano" -como el mayor lo consideraba- juego de los Street Fighters, pero prefería compararlo con Ken Haria que con el de aquel videojuego.

-Veamos como va AX 44 -pronuncio el chico con una sonrisa, ¿como podía sonreír tanto cuando su vida era sólo trabajo?.

JaeHwan levanto una tapa de un tubo sacado de un auto, y vertió el peligroso químico en este, Leo sólo observaba que no le pasara nada, rogaba que ese enorme robot -o al menos la cabeza de este- despertara, si era así, podrían proceder a esculpirlo y a llevarlo más allá. Querían lograr un humano a la perfección, era el sueño de ambos. Pero de manera distinta, si el que estuviera mandando hubiera sido Jae Hwan, este se iría a la genética y buscaría la forma de crear un humano con el interior con los órganos comunes, pero el que mandaba era Leo, y lamentablemente, su fuerte era mas la mecánica que la biología, que formaba curiosamente parte de química, y química era otra de las especialidades de Leo.

-¿Como va? -pregunto el mayor indiferente.
-Bien -le respondió con voz temblorosa, lo cual le extraño pero no le importó del todo.

Apenas término, tapó el tubo y procedió a presionar un botón sacado de una tablet vieja, notaron como al instante la cabeza de este robot abrió los ojos de golpe, era sólo un cráneo de metal mal hecho, pero era de facciones tan humanas que con sólo ponerle piel encima, pasaría desapercibido como una cabeza humana.

JaeHwan y TaeKwoon no respiraron hasta que la cabeza comenzó a moverse lado a lado, analizando el lugar y movió la boca, como intentando hablar, pero aún no le daban cuerdas vocales, pero el que lo intentara, de por si ya era un éxito.


-Ay por Dios ...¡Esta tratando hablar! -exclamo el cobrizo opaco, aún no podía creerlo. - Te dije que le faltaba la proteína -le dijo el joven Jae Hwan- es un robot humano, en parte la necesita -.
A penas volteo, un abrazo por parte del cobrizo lo sorprendió, parece que en verdad estaba feliz, y eso alegraba a Jae Hwan.

-Dios ¡Estamos a unos pasos del futuro!  -exclamo.

Estaba feliz, estuvo 9 meses creando su cerebro, había ignorado hasta la Navidad, pero no importaba, esa Navidad la había pasado con Jae Hwan y este le había regalado un chip de memoria, que era exactamente lo que necesitaba ese robot, para recordar. Aunque igual se sintió mal, por haber olvidado ese día y no haberle dado nada, sólo una sonrisa sincera, la primera que le mostró a un ayudante.

Aunque en realidad, el menor podía trabajar perfectamente sólo.

- Eres el mejor -le dijo esté en su oído con la voz llena de alegría, era la primera vez que lo escuchaba así.

Y era suficiente para él.

-Es tu proyecto -JaeHwan lo abrazo de la cintura, correspondiendo al fuerte abrazo -Has logrado el éxito de nuevo -.

Y como siempre pasaba, a Leo se le partió otra parte del alma, a pesar de que la voz sonaba indiferente, creía con todo su ser que él sufría, querer ser conocido por sus logros y dárselo a alguien que ya tiene toda la atención en el mundo científico, todo a cambio de nada.

No sabía que responder ante eso, se separó de él, ya era su cuarto proyecto juntos, pero a pesar de que todas las alabanzas se sentían bien, el joven más inteligente de los 2 debía aguantar ver como se llevaban el crédito de su esfuerzo, de su trabajo.   -No...este proyecto es de los 2...-. -Si...lo es...pero sólo soy tu ayudante, aún me falta un año para titularme ...mientras, todo lo que hagamos, será tu obra, no la mía nil a de los 2...
Aún dudaba mucho de que ese chico infantil podía saber tanto del mundo, era muy inteligente, muy realista , y eso le dolía, porque sus pucheros, sus caras tiernas, sus....

"Espera... ¿En serio  pensando así sobre él?"

Suspiro, quitando esos pensamientos, de que él chico era atractivo, era muy atractivo, pero no podía comentarlo, no sería ser el científico serio y sin sentimientos que demostraba ser ante el mundo.


Sus brazos dejaron su cuerpo con pereza, algo extraño en él, como si le quitaran algo, una pieza faltante, y no lo entendía.

- ¿Hay que anotarlo? -pregunto JaeHwan dejando la cintura del otro, para acercarse a una mesa llena de piezas y químicos raros, lo único normal que había era un cuaderno y un lápiz.

-Obviamente -la voz del mayor se sentía monótona de nuevo, con una alegría disipada casi a la perfección.

El castaño río ligeramente, mientras anotaba con cuidado la letra para que de entendiera. Dejo el lápiz de lado y releyó lo que escribió asegurando de que se entendiera al menos una palabra y que la "d" no se confundiera con "cl".

-Listo -.

-¿Ya esta registrado? -pregunto.

-Sip, ya se anotó el paso hacia el futuro -le dijo entre pequeñas risas poco notorias. Leo se asomó a ver lo escrito, y se percató de unas manchas cafés, escarlatas las más frescas.

-¿Que son esas manchas en el historial?.

-El combustible de ácido orótico -le comentó este.

-Pero... -este se tomo la molestia de verle la mano, no había algo raro en estas. O eso podía ver.

El más joven tenía el corazón a mil, con el mayor en su espalda podía sentir su respiración en el cuello de este, le estaba dando escalofríos y estaba logrando que se pusiera nervioso.

-Voy a apagarlo -le aviso antes de alejarse de este para dirigirse al robot que lo veía expectante.

Leo no se movió de su lugar, es más, lo extraño ver las marcas de las palmas de JaeHwan en la mesa, con el color carmín en la mesa, ennegreciéndose, haciéndose más oscuro.

-Oye, novato -el menor volteo a ver al cobrizo- muéstrame tus palmas -.

-¿P-Porqué? -sonó preocupado, nervioso, como si lo hubieran pillado en pleno acto ilícito.

-Sólo hazlo -no tuvo ni siquiera sonar preocupado, porque no lo estaba, sólo quería saber que era lo que estaba manchando el lugar. Y como JaeHwan estaba consciente de lo que el cobrizo le provocaba, cayo y no le quedo otra que obedecerlo, le mostró sus palmas.

Estaba sin piel, hasta con algunas llagas horribles, ensangrentadas y con restos del químico en la piel escocida, una imagen horrible, y Leo lo sabía, pero ya era algo tan normal que más que asustarse, lo fastidiaba, porque sabía que tenía ese pequeño detalle de que vez que se dañaba haciendo algo peligroso con químicos o materiales cortantes o ardiendo, sólo podía curarlo.

-En serio, deberías dejarme hacer a mi lo peligroso -gracias a Dios estaba acostumbrado a que "Ken" se lastimara, de hecho, lo primero que hizo al llegar al laboratorio, fue cortarse con un pedazo de metal oxidado, que mas encima, le infecto la piel, lo curioso, fue que el mostrara algo de preocupacion por la herida, y cuando lo contrato, siguio preguntando por esta hasta que sano. Sacó de su bolsillo unos algodones y algo de pobidona - Dame tu mano -.

-¡No! -la voz volvía a ser tierna e infantil, acompañado de un puchero

-Se supone que tu debes estar sano para las investigaciones y las presentaciones de nuestros experimentos.

-¿Y de dónde sacaste eso? -.

-¡Es obvio! -le dijo.

-Ugh ...-no le quedo otro que cogerle la muñeca con fuerza para luego girarla y tener mejor visión de la herida. No espero ni fue delicado, simplemente quitó la tapa y luego dejo el líquido caer como si llenara un vaso de agua.

Eso no dolía, sentía el líquido caer, pero cuando empezó a pasar el algodón por su mano sin ningún cuidado, no pudo dejar escapar un quejido de dolor, que el algodón le rozará la carne viva era insoportable, le escocia y le ardía de una forma inimaginable. Pero parecía ni importarle al mayor. Porque a pesar de todo, de que lo curaba, lo hacía con pesadez, como hartó de que siempre se limitaba al contacto humano y ahora se veía obligado a curarlo para no estropear el trabajo.

- Lo siento -pronuncio el menor con la voz hecha un suspiro - de seguro te soy una molestia-.

- Vaya que lo eres -respondió cortante, dañando un poco los sentimientos del castaño.

-Soy un ...-antes de que terminara de pronunciar las palabras, se las robo de la boca y las cambio.

-Eres un torpe -le respondió- si no fueras tan inteligente ni te habría contratado.  

Palabras como cuchillos, pero tenía que decirlas, hasta que el chico decidiera reaccionar, lo malo es que Leo se confiaba mucho del poder de la gente encima de otra, quería hacerlo reaccionar y dejara de ser torpe pero no era así, sus palabras le solían al menor, quien si fuera otra persona, acabaría con todo su trabajo.

-Te prometo que...cuando me titule, dejare de molestarte.

-¿Estas loco?¿Y quien me ayudara en todo este desastre? -le respondió, pocas personas tenían esa habilidad de decir las cosas con rojo burlón sin demostrarlo en su rostro. 

JaeHwan suspiro, no podía cambiarlo, no podía evitar quererlo, porque si, así era, habían estado trabajando juntos durante 3 años, y desde hace 2 que el menor se había enamorado de la persona para quien trabajaba. Y a finales del primer año, se enteró de que le gustaba, ¿como?. Había tenido pesadillas sobre eso,  muy recurrentes y cada vez peores, y se estaba acostumbrando a ello.


<< -¿Sabes al menos que es lo que haces? -.

-Si...-

-Te pueden descubrir-.

-¡No me importa!¡Si no lo tendré conmigo, viviré para él!.>>

-Olvídalo...-pronuncio el castaño. Tomo aire y levanto su cabeza nuevamente con esa sonrisa tan encantadora -Te invito un café.

-¿Ahora? -la voz monótona de Leo volvió en su totalidad - No podemos darnos ese lujo...no luego de tener tantas cosas que hacer con AX 44...

-Anda ...-JaeHwan puso su mano en el hombro de Leo agitándolo con suavidad mientras ponía un puchero de esos que derretían a cualquiera, y Leo era un humano cualquiera, uno inteligente pero un cualquiera

-Hemos estado encerrados 9 meses, ¿ te has bañado al menos en ese periodo de tiempo?.

Ese comentario logro sonrojar al mayor, en realidad ya se había olvidado cual fue su ultima interacción social con el mundo exterior, pero estaba tan obsesionado con AX 44 que poco le importo, ademas no estaba solo, tenia a "Ken", Dios, ese nombre le quedaba como anillo al dedo.

-No seas estúpido ...-logro responder ganándose una risa inesperada por parte de JaeHwan.

-Vamos, sácate esa bata y tomemos un café como gente normal y no como un par de científicos locos ¿Si? -volvió a hacer un lloriqueo tierno de niño pequeño, logrando ablandar al fuerte Leo.

-Ugh...¡Esta bien, vamos por ese maldito café!- gruño molesto, molesto con el chico por ser tan endemoniadamente convincente con sus caritas, y consigo mismo por caer ante estas mismas sin razón aparente. 

-¡Wiiii! -JaeHwan sin pensarlo 2 veces, se encimo a abrazarlo de repente, acción que sorprendo al otro pero que por reflejo correspondió apegandolo de la cintura -¡Te quiero, hyung, en definitiva eres el mejor!.

Algo le pasaba, y no sabia que era, ¿porque el corazón del mayor latía con tanta fuerza ante esas palabras? No lo sabia, realmente estaba raro, no quería dejar su cintura y no tenia ni idea del porque, pero solo podía admitir algo, ningún asistente antes le había acomodado tanto como lo hacia el novato, era mejor que todos esos viejos que querían seguir su trabajo, pero no, podía confiar en ese inteligente idiota, en ese tierno imbécil. Pero había un problema, estaba desarrollando algo más hacia este. Sin dejar de abrazarlo, le hablo con voz monótona con mucho esfuerzo.

-¿Hay algo mas...que tengamos que ponerle en el cerebro?-.

-Si...sentimientos- y por un momento, Leo deseo ser ese robot.

Notas finales:

Espero no haberlas defraudado mucho, realmente no sirvo escribiendo primeros capitulos.

Pero a medida que desarrolle la historia, ire mejorando.


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