Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Nuestro último beso por Haruka Eastwood

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Los personajes de Naruto y N.S son propiedad de Masashi Kishimoto sama y la historia es cien por ciento mía. 

Notas del capitulo:

Hola!! Bueno aquí les traigo un pequeño shot, el cual espero que sea de su agrado :3 y si es así me lo hagan saber.

NOTA: Contiene una pequeña cantidad de spoiler del manga.

Título: Nuestro último beso

Resumen: No es una despedida, solo es el comienzo de un todo…

Categoría: Naruto

Clasificación: Mayores de 13 años

Advertencias: Muerte de un personaje.

Género: Romántico. Drama.

Por: Haruka Eastwood

~ * o0O0o ♦ o0O0o * ~
Nuestro último beso

Capítulo único: No es una despedida

Naruto Uzumaki Pov

Tras la guerra contra Kaguya, todos creímos fervientemente que la paz volvería a reinar, también creímos ciegamente que ya todo estaría bien, incluso yo, por lo que ahora me estoy arrepintiendo, pero tenías que venir con tus malditos aires de grandeza queriendo proclamarte Hokage, no solo eso ¡Pretendías asesinar a personas que significan mucho para mí! ¿Y todo por qué?

—Yo cargare con todo el odio ¡Naruto!

Gritaste en el momento en que te dispusiste a atacar con toda tu fuerza, dispuesto a matarme, ¿por qué no puedes entenderme? ¿Por qué simplemente no dejas a un lado tu maldito odio y regresas a la aldea? Mejor dicho ¿Por qué no regresas conmigo?

Apreté los puños, te mire decidido y decepcionado, entonces contrarreste todos y cada uno de tus ataques que pretendían liquidarme. Porque tu única meta es que el valle del fin fuera realmente donde diera mi último suspiro de aliento…

Sabes Sasuke… un día como hoy, pero de hace diecisiete años llegue a este mundo, viví una vida de mierda, repleta de desprecio, abusos y humillaciones, aun así no odio a los que me negaron la felicidad, solo seguí adelante y demostrando que merecía estar aquí, no solamente “sobreviviendo”, sino atreviéndome a vivir. A pesar de todo lo que me rodeaba siempre te observaba, en muchas e incontables ocasiones me tente a hablarte, a llamarte por tu nombre y a ser más que tu amigo.

Pero nunca me atreví, tan solo observaba tu ancha espalda mientras te marchabas no una vez, sino cientos de veces, avanzando a paso firme y orgulloso mientras me dejabas con la palabra en la boca, porque según tu “yo no era un digno rival para ti”. Y jamás lo fui, ¿o me equivoco?

¿Eso me detuvo? No, yo nunca me rendí contigo, no quería caminar atrás de ti como un perro siguiendo a su amo. Yo anhelaba caminar a tu lado como un igual y me esforcé por lograrlo. Sé que no soy un genio, sé que me cuesta aprender las cosas, que muchas veces me equivoco y que no hago bien lo que otros consideran sencillo, pero me esforcé y lo conseguí ¡Me reconociste! En ese entonces te fuiste de mi lado, te busque e intente que regresaras a este, tu hogar. Vamos, ahora sé que no era por la aldea, era por mí… yo te necesitaba, aun te necesito.

Llegue a creer que todo lo que hice era inútil, ya que al final te miraba mientras te marchabas como otras tantas veces, contemplando nuevamente tu espalda y tu orgulloso andar, tan altivo como siempre, tan tú.

En esta guerra hemos demostrado que tú y yo somos invencibles, que somos el complemento del otro, y que si estamos juntos comportándonos como una unidad en vez de como dos individuos, podríamos superar cualquier adversidad por muy difícil que esta sea… entonces…

—¡¿Por qué?!

Te grito pero parece un susurro lastimero, más que un grito, la verdad estoy desesperado ¿Por qué la persona que más me importa es por la que menos puedo hacer algo? ¿Por qué? ¡¿Por qué?! Siempre supe que era imposible que tú y yo estemos juntos, ya que en muchos aspectos nuestras personalidades chocan entre sí dando un resultado caótico de todo esto.

Lo pienso y me centro en tus ojos, esta batalla está a punto de llegar a su fin, ya no tengo fuerzas para seguir luchando, al menos ya no por ti, es entonces que mi expresión cambia a una decidida, mi mirada ya no vacila, ya no hay duda de absolutamente nada, porque se perfectamente lo que tengo que hacer… Debo matarte aunque eso signifique destruirme a un nivel que jamás entenderás.

—Es inútil que preguntes Naruto.

Quedamos frente a frente mientras avanzas hasta mí, rodeado de un aura letal, viéndote gallardo e imponente, pero sé perfectamente bien que te encuentras en las mismas condiciones que yo, estas cansado y tu chakra no durara mucho más tiempo. Tu mirada fija en mi me reta, al parecer ambos pensamos en acabar con la vida del contrario, y no puedo evitar sonreír ante ti.

—Ven.

Te incito mientras te hago una seña con la mano para que te acerques, me devuelves la mirada, solo que por fracciones de segundo esta se vuelve melancólica, aun así logro verla a la perfección… tan clara, tan real que duele.

—Perdón…

Susurraste por lo bajo, pero el sepulcral silencio me permite escucharte. No lo creo, no te creo, me quedo pasmado, inmóvil, mientras te observo acércate a mí con tu catana desenvainada y me atraviesas el corazón. Tus fuertes brazos me sostienen para evitar que caiga al suelo y todo lo que hago es aferrarme a ti, poso mi mirada en mi pecho y confirmo que realmente he perdido… estoy a punto de morir.

Te escucho sonreír y correspondo de la misma manera, tu mirada se llena de dulzura, te observo detenidamente mientras que de la comisura de tus labios resbala un hilo de sangre. Imitas mi reciente acción, observas tu pecho… posas tu mirada detenidamente en mi mano que sostiene un kunai, mismo que te acaba de atravesar a la altura del corazón. Pero tu mirada no es de asombro… ¿acaso ya te lo esperabas?

—Te amo.

Musito contra tu oído para después volver a mirarte a los ojos, enfrentando tu negra mirada que se clava sobre la mía, noto un ligero asombro y un inusual brillo a tu alrededor. Por instantes mi alma se llena de felicidad, entrecierro mis ojos, pero de golpe los abro al sentir tus labios presionando sobre los míos, sin dudarlo correspondo tu cálido contacto, tan dulce, tan gentil… si me amabas entonces ¿por qué? No te entiendo.

Las lágrimas comienzan a salir sin control mientras te sigo correspondiendo, tu mano me acaricia la mejilla como si intentaras calmarme… ¿me estas consolando acaso? No lo hagas cuando eres tú el causante de mi dolor, simplemente me conformo con que ya no me hagas más daño.

—Te amo —susurras entre en beso, logrando que separe mis labios de la impresión, momento que aprovechas para profanar mi boca y recorrerla hábilmente en busca de mi lengua, la cual invitas a jugar con la tuya, entrelazándola con lujuria.

Sé que tus palabras son tal malditamente sinceras y eso duele... me duele porque sé que no podre estar nunca más a tu lado, porque no llegaremos al mañana, nunca habrá un nosotros, jamás podremos compartir momentos felices juntos. Todo lo que quería era amarte como ahora… Sasuke.

—¿Por qué ahora que estoy a punto de morir vienes y me besas… por qué me dices que me amas? ¿Por qué?

Estoy desesperado, las lágrimas recorrer mis mejillas sin control, todo lo que anhelaba era ser feliz, seguir mi camino ninja a tu lado, convertirme en Hokage para protegerte y proteger a la aldea…

—Porque fui un idiota, un grandísimo idiota que siempre te ha amado y que se cegó por sus deseos de venganza, por su odio… creí que mi hermano me había arrebatado lo que más amaba en mi vida, a mi familia. Pero la verdad era que aun te tenía a ti, porque tú eras y eres lo que yo más he amado…pero ahora…

Su voz sonaba cada vez más apagada, más afligida, le dolía tanto o incluso más que a mí. Ambos fuimos culpables, tenemos la culpa de nunca haber dicho lo que sentíamos, tal vez y solo tal vez todo hubiera sido diferente, pero eso es algo que se ha quedado en el pasado, algo que ya no seremos capaces de saber…

Escucho su dificultoso respirar, tan decadente como el mío, ya no nos queda tiempo, nuestras vidas se van extinguiendo en brazos del contrario. Lo único que me alegra es que sea en brazos de la persona que más me ama y más amo.

—Eres un idiota… pero también eres el idiota al que amo.

—Lo sé… y perdóname… ¿puedes hacerlo?

Su voz parece que implora por ser perdonado, se quiebra ante mí; basta con que lo mire para que se dé cuenta que no hay necesidad de pedir disculpas. Repentinamente todo a mí alrededor es silencio, como si solamente estuviéramos él y yo, nos miramos cómplices y unimos nuestros labios una vez más, una última vez. Era un contacto diferente, sentí tantas emociones entremezcladas, su amor, su arrepentimiento, lo sentí todo de él y a la vez nada. Porque un efímero contacto basto para decir todo lo que no pudimos con palabras.

Entonces ocurrió, Sasuke cerró los ojos para ya nunca más abrirlos, por fracción de segundos sentí todo su peso recaer sobre mí.

—¡Sasuke! —grite con el último aliento de vida que me quedaba.

Me deje caer a su lado, con dificultar lo abrace y mis ojos se cerraron, tal vez en esta vida no pudimos estar juntos, pero en la otra si lo estaremos, porque tú ya me estas esperando, sonrío porque por primera vez no te hice esperar para caminar junto a ti. Mientras avanzamos tomas con delicadeza mi mano y te observo sonrojarte. “Tenemos una eternidad juntos… mi teme”

Ya no existe lo que se llama tiempo para alguien como nosotros que ha abandonado este mundo terrenal, de odio, de guerra… todo eso ya quedo olvidado. Y es ahora que comprendo, que aquel último beso solo significó un comienzo.

~ * o0O0o ♦ o0O0o * ~
Fin

Notas finales:

Bueno espero que les haya gustado, cualquier duda, queja, tomatazo o piedrazo favor de dejarla en un rw que con gusto contestara el sexy de Sasuke Uchiha XD

- Se puede saber por que tengo que hacer tu trabajo... mujer inútil - refunfuña el azabache que entra sin permiso a mi cuarto. 

- Es tu castigo por no dejarme dormir anoche, mira que tu y Naruto tienen una gran resistencia física, pero yo si debo dormir y creeme que con sus gemidos me fue imposible. 

- Tsk - exclama con un enorme sonrojo - callate y si te ayudare. 

- Gracias Sasuke kun XD 

Bueno, nosotros nos despedimos y les deseamos un excelente día/tarde/noche.

Haruka Eastwood y Sasuke Uchiha


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).