Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Beso de halloween. por La-banana-del-yaoi

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

espero les guste, es cortito pero bueh

Notas del capitulo:

espero les guste <3

—Lo haré, esta noche en verdad lo haré.


Kagami estaba decidido, sin lugar a dudas lo haría, esa noche le robaría un beso, sí, lo haría, pues desde hace tiempo que ansiaba una oportunidad. ¿A quién le robaría un beso? A nadie más ni nadie menos que el gran emperador Akashi Seijuuro. ¿Cuándo tomaría esta oportunidad el osado bakagami?, pues en la fiesta de Halloween, la cual se daría a lugar esa misma noche.


Taiga estaba muy ansioso, tenía miedo, y los nervios le carcomían. ¿Qué pasaba si el pelirrojo le rechazaba? Sin duda sería un gran problema, pero, ya no esperaría, esto era un ‘todo o nada’ por parte suya. Esa noche, por fin lo haría, por fin le robaría un beso… era arriesgado sin duda, pero ¿Cómo culparle, si estaba perdidamente enamorado de Akashi?


Y antes de que se diera cuenta, la noche llegó, era la hora, ahora no podía flaquear.


—Buen disfraz, Kagami-chii —dijo Kise, sonriendo—. Me alegra que hayas venido.


Kagami estaba disfrazado del fantasma de la ópera, le sentaba muy bien el traje y la máscara le daba ese genial ‘aire misterioso’ que intrigaba a todos.


Sin decir más, Kagami le dedicó una buena sonrisa a su rubio amigo, entró a su casa, la fiesta estaba ya empezada, la música sonaba a buen volumen y todo era sonrisas y alegría. Festejar Halloween era muy divertido, más con una gran fiesta de disfraces –sin mencionar que Kise, con su popularidad, siempre lograba conseguir ‘casa llena’-.


Kagami se adentró en la fiesta, abriéndose paso, buscando a Akashi, y lo encontró pero no estaba solo, un enorme titán estaba junto a él. Kagami frunció el ceño, simplemente no toleraba que Murasakibara estuviera cerca del emperador, pues Taiga sabía las segundas intenciones que aquel peli-morado llevaba consigo.


—Vaya Kagami, veo que viniste, ¿Qué se siente tener algo de competencia? —Taiga volteó y vio que Aomine estaba parado al lado suyo, con una sonrisa burlona en su rostro. Él era la única persona en toda la fiesta que conocía los sentimientos de Kagami hacia Akashi. Le apoyaba, era un buen amigo.


—Cállate, no lo digas en voz alta —murmuró geniudo.


—Ya, ya, lo lamento —Aomine suspiró—. Sabes, te ayudaré.


—¿Cómo? —Kagami estaba intrigado.


—Ya verás —Aomine le guiñó un ojo, y se fue. Al poco rato volvió con Kise, ambos sonriendo parecían haber hecho unos planes juntos—. ¡Escuchen todos!, ¡Vamos a jugar 7 minutos en el paraíso!, ¡traigan una botella, pueden unirse los que quieran!


Kagami se sonrojó un poco, ¿en serio iban a jugar eso? ¿Qué pasaba si le tocaba con alguien que no era Akashi? Estaba preocupado sin duda, pero, cuando volteó a ver a sus amigos, entendió que no debía desconfiar en lo absoluto.


—Distraeremos a Murasakibara-chii, cuando te demos la señal entraras al closet con Akashi-chii —susurró Kise al oído de Kagami, este asintió rápidamente.


Dicho y hecho. Todos se sentaron para jugar, Murasakibara se sentó al lado de Akashi, pues no deseaba apartarse de él. Cuando Akashi vio a Kagami, sonrió levemente. Taiga sintió un golpecito en el corazón, Akashi estaba disfrazado de vampiro, se veía malvado pero al mismo tiempo tierno, deseaba abrazarlo, pero se contuvo a sí mismo. Aomine se sentó al lado de Murasakibara.


—¿Puedo sentarme aquí? —le preguntó Kise a Akashi.


—Claro Ryota, anda, toma asiento.


Atsushi hizo una mueca, observó a Kise con desprecio, pero este se hiso el omiso y logró interponerse entre Akashi y Atsushi.


El juego comenzó, colocaron la botella en el medio y empezaron a girarla. Algunos estaban felices y otros no. Luego de que unas tres parejas pasaran, Kise le hiso una señal ligera a Kagami.


—Oye Atsushi, ¿puedes ir por unos dulces? Están en la cocina —Atsushi estaba aburrido, cuando Aomine le hiso esa petición, observó a los que habían sido seleccionados, como no era ‘su Aka-chin’ uno de ellos, se levantó tranquilamente y se fue a la cocina.


Aomine y Kise sonrieron victoriosos. La pareja que iba a pasar fue detenida rápidamente.


—Bien Akashi, parece que es tu turno.


—Así es Akashi-chii, anda, ve y espera adentro.


Akashi aturdido y empujado sorpresivamente, entró al closet sin muchas quejas, era obvio que no haría nada que no quisiese. Kise vendó los ojos de Akashi, y cerró la puerta del closet.


—Anda bakagami, es tu oportunidad, no lo arruines, tienes siete minutos.


—Gracias.


Kagami rápidamente se levantó, se aproximó al closet y entró. Akashi se estremeció levemente por el sonido de la puerta abriéndose. Taiga la cerró, y ambos quedaron el uno frente al otro, ninguno pronunciaba palabra. Quizá era por los nervios que sentía Kagami, pero no se animaba a decirle a Akashi que era él quien estaba frente suyo. No podía decirlo.


—¿Quién…? —preguntó él.


Kagami no respondió. Tomó el pequeño cuerpo de Akashi, lentamente le atrajo hacia sí mismo, le abrazó. Sus manos rodearon la cintura de Akashi. Una de sus manos subió, acarició la mejilla de Akashi, aun si sus ojos estaban vendados seguía teniendo una cara preciosa. Con su pulgar delineó los rosados labios del divino emperador.


“Por dios… anda, no seas estúpido, ya lo tienes, hazlo, hazlo ¡hazlo maldita sea!”. Kagami estaba paralizado, no sabía ni que hacer, y trataba de apresurarse, no desperdiciaría la oportunidad.


Todo o nada, eso se había dicho, y lo apostaría todo. Tomó un gran respiro, se inclinó un poco y lo hizo, tomó los labios de Akashi, los tomó de una sola vez.


Lo que sintió Kagami era indescriptible, besar a la persona que te gusta es el mejor sentimiento. Pero, no solo era un beso a la persona que le gustaba, de verdad sentía como si le amara, pues apenas sus labios hicieron contacto con los de Akashi, sintió que los fuegos artificiales explotaban, que el mundo se detenía, y claro, que su corazón se aceleraba a mil por hora.


Y no solo eso ¡gran sorpresa que se llevó!, ¡Akashi estaba correspondiendo!


Akashi le abrazó, le besó de igual forma. Su beso fue increíblemente largo, Kagami sintió que el tiempo volaba.


Mientras tanto, afuera, Atsushi había vuelto de la cocina, y cuando notó que ni Kagami ni Akashi estaban, se puso furioso, se acercó al closet a pasos agigantados. Kise y Aomine se lanzaron en sima de él y lo detuvieron contra el suelo.


—¡Déjenme! ¡Déjenme! ¡Mi Aka-chin! ¡Mi dulce Aka-chin está con ese aprovechado! —gritó enojado. Pero Kise y Aomine no dijeron nada, estaban más concentrados en contener a semejante grandote, era sumamente difícil, de verdad que la fuerza de Atsushi era descomunal.


Pasaron los siete minutos.


Kagami salió primero.


—¿Qué le hiciste a Aka-chin? —gritó Murasakibara.


—Nada —mintió sonriente—. ¿No es así Akashi? —Akashi salió del closet, y al ver todo el lio siguió la corriente.


—Es verdad, no hicimos nada.


Atsushi supo que mentían, pues con solo ver el rostro de Akashi, podía verse el hermoso sonrojo que adornaba sus mejillas.


Pero, el titán sabía que no podía decir nada más, si hacía escandalo todos se molestarían con él, se tragó su orgullo y se marchó a otro lado, debía calmarse o explotaría.


Kagami y Akashi se miraron, al estar de frente, con lo ocurrido todo era diferente, estaban un poco avergonzados pero no arrepentidos. Kise y Aomine se fueron a otro lugar, y ellos salieron al jardín.


—La próxima vez… solo pídelo —murmuró Akashi.


—Akashi… yo…


—Me gustas, Kagami…


—M-Maldición… —Kagami desvió la mirada.


—¿No te gusto? —Preguntó Akashi, algo confundido por esa reacción.


—No es eso, me gustas… pero quería decirlo yo primero.


—Parece que gané de nuevo —Seijuuro sonrió ampliamente y tomó la mano de Akashi.


—Feliz Halloween Akashi.


—Feliz Halloween Kagami.

Notas finales:

Se que es corto pero bueh, fue para quitarme la ansiedad, quería escribir algo de ellos <3

Nos leemos a la proxima


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).