En un jardín muy hermoso lleno de flores blancas dos personas estaban sentados debajo de un árbol frondoso, se trataba de Madara Uchiha un hombre muy imponente y de gran atractivo, era uno de los hombres más ricos de Konoha; tenía una gran e importante empresa de hoteles, el soñaba con tener una gran familia, era estricto y orgulloso pero en su interior era de buenos sentimientos, quería a su esposo Hashirama un hermoso doncel, de largos cabellos de color café al igual que sus ojos, sin embargo el doncel no podía darle hijos, por más que se había hecho de todo para lograr embarazarse nada funcionaba; por ello poco a poco Madara se había enamorado de la esposa de su mejor amigo Fugaku. Sabía que estaba mal pero el amor había crecido entre ellos; Mikoto era una mujer de buen parecer, era escritora y tenía algo en común con Madara y era que ella igual deseaba tener un hijo; para ella igual era muy difícil porque su esposo Fugaku sufría de una grave enfermedad que a pesar de que en algún momento lo mataría, lo había dejado estéril; por ello un día sin darse cuenta se había enamorado locamente de Madara Uchiha el mejor amigo de su esposo. Sabía que estaba mal pero aun así ambos se amaron y desde hace un mes, Mikoto se había enterado de que estaba embarazada, era sumamente feliz pero se sentía culpable, porque su hijo no era de su esposo y ahí estaban los dos amantes sentados feliz y con cargo de consciencia por lo que habían hecho.
-Fugaku se ha dado cuenta?
-todavía no pero no tarda- Madara agarro de las manos a Mikoto, podía ver la angustia y la felicidad en ella. -estoy embarazada!
Madara la abrazo -déjame decirle yo a Fugaku sobre el embarazo además sé que él entenderá confió en eso- Mikoto negó rápidamente, conocía lo explosivo que era su esposo y por nada del mundo pondría en peligro a Madara, además ella lo había engañado y seria ella quien se lo diría.
-no, no...Eso se lo diré yo...
-no puedo permitir eso, déjame que yo lo haga
-no, por favor quiero ser yo quien se lo diga- el Uchiha ya no dijo nada y Mikoto beso a Madara quien le correspondió con mucho amor.
~~~cambio de escena~~~
Mikoto estaba llorando sentada en una silla frente a su esposo Fugaku quien no había dicho nada desde hace 30 minutos, cuando Mikoto le había entregado los resultados que se había hecho, en los que decía que estaba embarazada. Por fin vio a Fugaku enojado arrugar el papel -embarazada?!- Fugaku golpeo el escritorio levantándose y caminando como león enjaulado -sabes bien que eso es imposible!
-ya lo sé pero sucedió- dijo Mikoto temblando de miedo y llorando.
-tienes otro hombre?!- le pregunto Fugaku mirándola con desprecio, el momento de la verdad había llegado.
-s-si...-cerro los ojos asustada cuando su esposo se paró frente a ella y le grito.
-quién es?! Lo conozco?! Puedo saber su nombre?!- Mikoto respiro profundo antes de responder
-Madara...Madara Uchiha..
~~~cambio de escena~~~
En la gran mansión de Konoha Madara estaba muy angustiado por Mikoto y su hijo, por ello en su despacho se quedó mirando por la ventana cuando Fugaku, entro sin llamar al lugar –Madara Uchiha…Infeliz!! Te abrí las puertas de mi casa, te ofrecí mi amistad sincera y me pagas acostándote con mi mujer!!- Madara serio se acercó a Fugaku encarándolo
-tienes razón, soy un perro, un mal amigo pero te juro que esto no fue planeado, Mikoto y yo nos enamoramos- en ese momento Fugaku comenzó a golpear y tirar todo lo que encontró en el despacho donde estaban.
-no me hables de amor! Eres incapaz de ese sentimiento, si de verdad la quisieras la abrías respetado!
-lo se…pero fue algo más fuerte que…- Fugaku interrumpió acercándose a agarrar de la camisa a Madara
-cuantas veces no me has contado de tus aventuras…cuantas?!
-te juro que desde que Mikoto y yo comenzamos..
-no me jures nada, no te creo!- se miraron a los ojos con rabia –la ilusionaste
-claro que no...Además ahora está esperando un hijo mío y me voy a divorciar!- dijo Madara soltándose del agarre de Fugaku
-olvídate del divorcio y del hijo…jamás lo veras en tu vida!!- dicho esto Fugaku salió del despacho.
-Fugaku, en el corazón no se manda!- Madara salió siguiendo a Fugaku –yo sé que todo esto es doloroso para ti pero yo la quiero a ella al igual que al hijo que va a tener- Fugaku se detuvo y se giró para mirar a Madara.
-si vuelve a acercarte a ella…te mato!!- dicho esto salió de la mansión Uchiha dejando a Madara serio y pensativo.
Mientras tanto por la lujosa escalera de la mansión bajaba el doncel esposo de Madara.
-¿qué paso? Me dijeron que llego Fugaku- Madara reacciono y camino acercándose a la escalera.
-si...se acaba de ir mi amor- Madara tomo la mano de Hashirama al final de la escalera.
-¿Por qué? ¿Discutieron?- pregunto Hashirama algo confundido
-nada de cuidado- dijo Madara sonriéndole a su esposo
Hashirama decidió no preguntar más por ahora tenía que contarle algo a su esposo –Orochimaru me acaba de decir que ha descubierto un nuevo tratamiento para la fertilidad, es largo pero dice que da muy buenos resultados- Hashirama se puso frente a Madara -mi amor ya sé que hemos probado de todo pero la ciencia avanza y me gustaría probar de nuevo- Hashirama beso los labios de Madara y este correspondió el beso.
Madara al siguiente día marco a la casa de Fugaku pero le respondió la mujer de confianza que trabajaba en la casa –bueno ¿quién habla? ¿Mito?
-si señor Uchiha soy yo
Del otro lado de la línea -me comunica con la señora Mikoto por favor- dijo Madara
-señor, yo no sé qué paso, pero anoche vino una mudanza, empacaron lo necesario y hoy en la mañana se fueron al aeropuerto
Madara sintió un gran dolor en su pecho –a donde se fueron?- pregunto
-disque a Europa pero ni siquiera me dijeron el país.
~~~cambio de escena~~~
Madara lo primero que hizo fue acudir a uno de sus amigos, el doctor de la familia de nombre Orochimaru quien también era accionista de los hoteles.
-no dejaron ningún rastro- dijo Orochimaru mirando a Madara –se fueron a parís y luego no se sabe que rumbo tomaron- Madara estaba desesperado.
-pero se llevaron algunas pertenencias, a donde las embarcaron?
-la investigación dice que a Barcelona pero desde allí se pierden las pistas
Madara puso una mano en el hombro de Orochimaru –amigo ayúdame a encontrarlos…de verdad lo necesito
Orochimaru puso igualmente una mano en el hombro de Madara –claro Madara are todo lo que este a mi alcance- dicho esto Orochimaru salió de la oficina que ocupaba Madara para la empresa hotelera.
~~~Meses después~~~
Mikoto estaba en la sala de un hospital, acababa de dar a luz; Fugaku estaba al lado de ella, sosteniendo en una mano un ramo de flores blancas y con la otra sosteniendo la mano de su esposa la cual luego la acerco a sus labios para darle un beso.
-son un varón y un doncel- dijo Fugaku muy emocionado; Mikoto sonrió y comenzó a llorar de felicidad.
-y-y los vas a querer?- susurro entre llanto; Fugaku igual no pudo contener las lágrimas.
-como no los voy a querer? Son nuestros hijos mi amor- Fugaku le entrego el ramo de flores a Mikoto y le sonrió, de cierta forma había cumplido su sueño de ser padre antes de morir.
Gracias- dijo en un susurro Mikoto y Fugaku se acercó a besar su frente.
~~~Mientras tanto en el pueblo de Konoha~~~
Hashirama y Madara estaban sentados en el consultorio de Orochimaru, agarrados de la mano mientras Orochimaru revisaba unos resultados de fertilidad.
-tengo el placer de informarte Madara que tu esposo esta embarazado- Hashirama y Madara se abrazaron muy felices.
-gracias Orochimaru- Madara puso su mano en el vientre de Hashirama, estaba muy feliz.
-al fin lo logramos mi vida- dijo Hashirama conteniéndose de llorar y Madara sonrió acariciándole la mejilla.
-pero es mi deber advertirles que Hashirama debe tener muchos cuidados, su embarazo no va a ser sencillo- dijo Orochimaru seriamente y el feliz matrimonio asintió.
~~~cambio de escena~~~
Frente a un lago enorme y rodeado de pinos Fugaku estaba en sus últimos días acompañado por Mikoto.
-tengo que decirte que cuando sucedió lo de Madara, mi primer sentimiento fue una enorme rabia no tanto hacia a ti sino hacia Madara, fue mi mejor amigo y yo no podía creer que me hubiera hecho algo así.
Mikoto comenzó a llorar agarrando las manos de Fugaku –yo también tuve la culpa
Fugaku negó –yo nunca pude darte lo que tu querías, siempre fui un hombre a medias- Mikoto puso su mano en la mejilla
-no, no digas eso
-sé que es más que obvio que se enamoraran- Mikoto agacho su cabeza comenzando a llorar más
–no quiero que hablemos de esto- susurro Mikoto
-pero quiero que cuando yo ya no esté aquí vuelvas a Konoha y busques a Madara y si él está en la misma disposición te cases con él- Fugaku levanto el rostro de Mikoto –Madara es el padre de Itachi y de Sai
-no, tu eres su padre- ambos se abrazaron y lloraron
-yo ya no estaré más tiempo con ustedes y me iré más contento sabiendo que serán felices.
~~en Konoha~~
En uno de los jardines de la mansión Uchiha se llevaba a cabo una fiesta de cumpleaños, había globos de colores decorando el jardín, los invitados eran niños pequeños, la fiesta era a causa del único hijo de Madara Uchiha; quien cargaba al pequeño Sasuke que tenía 2 años de edad; se rumoraba que era el niño más hermoso de todo el pueblo y eso enorgullecía a Madara; Sasuke se parecía a Madara pero en su forma de ser se parecía a Hashirama.
-es muy hermoso tu hijo- dijo Orochimaru acercándose a Madara
-gracias, a pesar de lo prematuro que nació, cada día se pone más fuerte y guapo
-claro tuvo que salir como su padre- ambos amigos rieron –puedes venir un momento, necesito hablarte de algo delicado- Madara asintió y le entrego a su hijo a la niñera para luego ir con Orochimaru a un lugar apartado.
-sabes Mikoto regreso- Orochimaru dijo serio y Madara sonrió emocionado –viuda y con dos hijos, un varón y un doncel, de más o menos 6 años.
-son míos, todo coincide además Fugaku no podía tener hijos.
-¿qué piensas hacer?
-ir a buscarla- dijo firme y serio Madara mientras agradecía que el destino volviera a unirlo con Mikoto y sus hijos.
~~~Cambio de escena~~~
En una casa lujosa una mujer de cabello rojo amarrado en una coleta llamo a la puerta y una de las empleadas salió a abrir.
-buenos días ¿está la señora Mikoto?
-de parte de quién?
-de parte de Mito, ella sabe quién soy
La empleada fue a avisar a la señora de la casa y esta de inmediato hizo pasar a Mito, ya en la sala Mikoto muy feliz fue a abrazar a Mito su empleada y amiga de años.
-mi señora le juro que nunca pensé en volverla a ver, en cuanto recibí la carta me vine rápido
-te lo agradezco Mito- Mikoto acaricio la mejilla de su amiga –esta casa esta tan triste y vacía.
-pues si eso se ve, yo pensé que la iban a vender
-Fugaku era muy descuidado en ciertas cosas y dejo pasar el tiempo- Mikoto agarro las manos de Mito y la llevo a sentarse -¿te vas a quedar conmigo?- suplico.
-pues claro que si- dijo con una gran sonrisa Mito; en ese momento un doncel de 6 años entraba corriendo a la sala.
-Mamá, mamá, mamá, en mi recamara no hay cama y la tuya está muy fea- dijo el pequeño con un gesto de desagrado y Mikoto lo abrazo.
-prometieron que mañana nos van a mandar los muebles nuevos pero antes quiero que saludes a Mito- Mikoto tomo la mano su hijo y la llevo a la mano de Mito –Mito él es mi hijo Sai
Mito se sorprendió de ver al doncel que era hermoso de verdad –que hermoso niño, que bueno que tenga un lindo doncel- Mikoto con sus dedos dijo dos
-tengo dos hijos, Sai e Itachi, doncel y varón- dijo muy orgullosa
Sai aburrido beso la mejilla de su mamá –ya me voy- salió corriendo en busca de su hermano.
En cuanto Sai se fue Mikoto suspiro y vio a su amiga –n-no son hijos de Fugaku- esto sorprendió a Mito –pero ellos no lo saben…
-son de el señor Uchiha?- pregunto Mito y Mikoto asintió con una suave sonrisa, luego Mikoto se acercó más a su amiga para preguntarle algo que tenía que saber.
-Él c-como esta?
-pues como yo me fui a mi pueblo no se mucho pero bien…su esposo murió- eso impacto a Mikoto
-Hashirama falleció? ¿Por qué?
-pues cuando nació su hijito- Mikoto sonrió suavemente
-así que finalmente sí pudieron tener un hijo- Mito asintió algo triste.
~~al siguiente día~~
Madara había ido a la casa donde vivía Mikoto, bajo de su auto, vio a varias personas meter muebles nuevos y camino a la entrada de la casa encontrándose con un pequeño niño quien según vigilaba que todo estuviera en orden; Madara se acercó a él -hola
-hola- respondió el niño de cabellos negros y ojos del mismo color.
-emn yo soy Madara y tu cómo te llamas?- le pregunto mientras estrechaba la mano del pequeño quien lo miraba serio.
-Itachi- Madara contuvo sus ganas de abrazar a su hijo.
-supongo que tú eres hijo de Mikoto verdad?- el pequeño asintió y se soltó de la mano de Madara –amn podrías avisar a tu mamá que estoy aquí?
El pequeño Itachi se metió a la casa corriendo y Madara espero paciente hasta que vio salir a Mikoto junto a su hijo, ambos se miraron por segundos y luego, Mikoto se metió a la casa corriendo y Madara no pudo contenerse de seguirla.
Ambos entraron en una de las habitaciones de la casa, la cual Madara cerró con llave pues tenía mucho de qué hablar con Mikoto.
Mikoto le dio la espalda a Madara, no sabía que hacer o que decir, después de tantos años.
Madara intento hacerla girarse pero ella se alejó más mientras lloraba.
-jamás desee la muerte de Fugaku
Mikoto por fin volteo a mirar a Madara –te creo y siento mucho lo de Hashirama.
-yo también pero no fuimos nosotros quienes decidimos si no el destino- Madara acaricio la mejilla de Mikoto para después besarse con mucha necesidad y amor; se acariciaron lentamente y unieron sus cuerpos en solo uno haciendo el amor.
~~~minutos después~~~
Mikoto y Madara estaban semidesnudos abrazados –cuéntame de los niños- dijo Madara y Mikoto sonrió.
-Itachi es muy serio y tiene un carácter fuerte, Sai es más caprichoso…Fugaku los consintió mucho- Madara beso la mejilla de Mikoto.
-está bien me alegra que mis hijos tengan su carácter
-y tu hijo?- pregunto Mikoto
-Sasuke es un bebé, tiene dos años solamente pero es bueno y le hace falta una madre
-yo seré esa madre- dijo de inmediato y sonriendo Mikoto.
-yo sabía que me ibas a contestar eso- dijo Madara besando los labios de Mikoto -además en algún momento tenemos que decirles la verdad a nuestros hijos.
-sí, lo aremos pero no ahora- nuevamente volvieron a besarse muy felices de que el destino los hubiera unido.
~~~cambio de escena~~~
Mikoto había contado a sus hijos que se casaría con Madara Uchiha; a Sai le dio igual ya que su mamá le había dicho que tendría muchos lujos pero Itachi fue el que estaba en desacuerdo, el no quería que su mamá se casara porque según él, le caía mal.
Pese a todo en unos meses más en el jardín de la mansión Uchiha se llevaba a cabo una boda sencilla con los amigos más allegados a la familia Uchiha. Allí frente a un juez estaba Mikoto luciendo un vestido sencillo color blanco y Madara vistiendo un traje blanco.
-declaro en nombre de la ley y la sociedad que quedan ustedes unidos en legitimo matrimonio con todas las prerrogativas correspondientes y con las obligaciones que impone- dijo el juez –firmen el acta por favor- después de que ambos firmaran, los testigos igual firmaron.
Terminado esto Madara pidió a la niñera que le entregara a Sasuke, al cargarlo se lo dio a Mikoto y luego llamo a Itachi y Sai –desde este momento los tres son hermanos- dijo Madara con una gran sonrisa –amigos les presento a mis hijos- los invitados aplaudieron, Madara y Mikoto se besaron para sellar su amor.
~~años después~~
Itachi atravesaba por la adolescencia y Sasuke era un niño, ambos practicaban futbol juntos pero era más que obvio que Itachi odiaba a su hermano.
Mientras jugaban en un partido de futbol Sasuke obtuvo el balón por lo que seguro de sí mismo corrió para enfrentarse al portero pero Itachi corrió más rápido y le metió una zancadilla que dejo tirado a Sasuke quien al caer se golpeó la nariz por eso comenzó a sangrar mientras Itachi solo se reía.
De regreso a su casa Itachi iba golpeando a Sasuke con el balón –no sigas llorando Sasuke- al verlos llegar Mikoto asustada se acercó a los niños
-¿Qué te paso Sasuke?- Mikoto corrió en dirección de Sasuke
-nada…me caí
-mira nada mas- Mikoto tomo de la mano a Sasuke y lo llevo al interior de la casa, entonces Itachi molesto intervino.
-lo que pasa es que este idiota se mete a jugar cuando no sabe- Sasuke algo molesto se soltó de la mano de Mikoto
-si se jugar lo que pasa es que me metiste zancadilla- ambos chicos comenzaron a discutir y Mikoto ya cansada de que siempre fuera lo mismo grito.
-ya basta!!- Mikoto se llevó a Sasuke a su recamara para que Mito lo curara.
Minutos después Mikoto estaba en la habitación de su hijo mayor –lo que pasa es que Sasuke es un metiche que en todo quiere estar!
-él dice que le metiste una zancadilla…
-no es cierto y en todo caso si quiere entrar a un equipo de futbol tiene que atenerse a las consecuencias!- Mikoto rodeo los ojos y respiro profundo
-pero es tu hermano menor y es tu obligación protegerlo- Itachi frunció el ceño
-antes que nada no es mi hermano y no tiene que meterse con mis amigos- Mikoto se puso más seria
-escúchame bien Itachi, no es la primera vez que tienes este tipo de incidentes con Sasuke, un día es un pelotazo otro día es un empujón, siempre lo estas agrediendo
-es que me cae gordo!! Y sabes por qué? Porque le haces más caso a él que a mí!- Itachi le dio la espalda a Mikoto.
-cómo puedes decir eso? Lo trato de la mima forma que a ti y a tu hermano
-pero nosotros somos tus hijos y él no mamá!!
-Sasuke es un buen niño…amable..
-pues ya te lo dije me cae gordo!!- dicho esto Itachi se metió al baño de su habitación, mientras Mikoto suspiraba y salía de la habitación para ir a ver a Sasuke.
Al entrar en la habitación de Sasuke lo vio acostado en el suelo mirando a su hámster y ella se acostó igual. Sasuke la miro y ella le sonrió.
-te duele?
-un poco- dijo Sasuke algo triste
-en unos días se te desinflamara la nariz
Sasuke cabizbajo pregunto –porque Itachi no me quiere mamá?- Mikoto acaricio el cabello de Sasuke
-no es que no te quiera lo que pasa es que Itachi se siente grande y tú eres un niño- Sasuke frunció el ceño
-pero siempre me empuja, me da coscorrones, me insulta…- Mikoto lo abrazo
-tu eres un niño de buen corazón e Itachi es un tanto rebelde pero ya verás que con el tiempo se volverán amigos inseparables y por otra parte sabes que yo te adoro mi vida- dicho esto Mikoto beso la frente de Sasuke quien se animó más y sonrió, definitivamente quería mucho a su mamá.
~~~tiempo después~~~
Madara y Mikoto caminaban directo a la mejor universidad de Konoha donde estudiaban sus hijos; Madara en unos de sus viajes sin querer se había lastimado el pie por eso ahora lo tenía enyesado y caminaba con ayuda de muletas.
-entiendes ahora porque decidí poner la empresa a nombre de Sasuke?- dijo Madara y Mikoto mordiéndose el labio enarco una ceja
-no mi amor, no lo entiendo, Itachi es tu hijo mayor, tu primogénito
-si pero esos rumores que llegaron de que es un vago…-Mikoto interrumpió
-no los creo y si es cierto hay que darle otra oportunidad
-ojala que tengas razón, justamente por eso pedí la junta con el director para conocer la verdad
-tal vez sea un poco rebelde pero yo he hablado con él y me ha dicho que cumple con todo y va bien con sus materias, ya verás que es cierto- Mikoto le sonrió a Madara y este solo asintió.
-si es así, simplemente voy con el abogado y cambio el testamento- Madara beso a su esposa para que se quedara tranquila, después de esto entraron a la oficina del director.
-expulsado p-pero desde cuándo?- pregunto Mikoto algo confundida mientras Madara se mantenía serio y molesto.
-hace ya tres meses señora- respondió el director –no cumplía con el plan de estudios ni con el reglamento de la universidad, les faltaba el respeto a los profesores y a pesar de eso todavía se atreve a entrar como pedro por su casa, molestando a sus ex compañeros y en especial a su hermano Sasuke- Mikoto estaba más que avergonzada por escuchar todo eso de su hijo y Madara se enfureció mas.
Saliendo de la oficina ambos esposos están serios
-ya te dije que no pienso dejar a Itachi en el desamparo, ni tampoco a Sai por frívolo que sea pero tendrías que reconocer que los dos lo tienen bien merecido!- Madara estaba que echaba humo
-s-solo te pido que lo pienses mejor…
-ya lo pensé bien…si le dejo la compañía a Itachi en unos años no va a quedar nada!- Madara camino un poco más rápido- ya demostró lo irresponsable que es y esto no es un juego, se trata de su patrimonio y el tuyo también!
-por favor Madara dale otra oportunidad! Itachi puede cambiar
-no insistas Mikoto- en ese momento Mikoto se enojó más que nunca.
-date cuenta de que Itachi es nuestro hijo y Sasuke no!!- Madara volteo a mirarla serio
-Sasuke no será tu hijo pero mío si lo es!!- grito Madara y Mikoto tuvo miedo por lo que se calmo
-perdón, perdón…
-tienes que aceptar que Itachi no podría con tanta responsabilidad- volvieron a caminar y Mikoto conteniéndose de gritar camino un poco más rápido
-lo que pasa es que no lo quieres porque lo educo Fugaku pero no puedes hacerle eso, no va a perdonarte que siempre hayas preferido a Sasuke
-yo nunca había hecho ninguna distinción entre los tres hasta este momento!!
A lo lejos Itachi escondido veía a sus padres. Madara solo quería llegar a su casa para hablar seriamente con Itachi y Mikoto seguía defendiendo a su hijo.
-no es justo que Itachi pague por nuestros errores y no me pidas que apoye tu decisión porque no estoy de acuerdo, no pienso discutir por esto, ya sabes mi opinión, no te respaldo!!- Mikoto camino en otra dirección y Madara intento detenerla.
-espera, espera! Mikoto! –en ese momento la muleta de Madara se metió en un hoyo y un motociclista que pasaba por allí impacto fuerte contra el Uchiha votándolo a otro lado, Mikoto al escuchar el fuerte golpe volteo y alarmada corrió a donde estaba tirado Madara, lo vio, estaba sangrando de la boca y cabeza.
-Madara!!- Mikoto llorando intentaba que reaccionara el Uchiha pero fue imposible- una ambulancia! Llamen a una ambulancia!!
~~~en la mansión Uchiha~~~
En la oficina que había en la mansión, estaban sentados, Mikoto, Itachi, Sai y Sasuke mientras el abogado leía el testamento.
Pero Itachi al escuchar lo que decía se levantó furioso –le dejo todo a él- señalo a Sasuke -es injusto- dio un golpe en el escritorio –no lo acepto- dicho esto camino a la salida pero el abogado le dijo que todavía no terminaba de leer el testamento de su padre –ese infeliz no era mi padre y me alegro de que se muriera
Mikoto enojada miro a su hijo –no vuelvas a decir eso!!- Itachi la ignoro y salió de la oficina.
-entonces a nosotros no nos dejó nada?- pregunto asustado Sai
-puedo continuar?- dijo el abogado y los presentes asintieron.
Poco después, Sasuke subió a la habitación de su hermano Itachi para hablar con él.
-vienes a disfrutar de tu triunfo?- dijo arrogante Itachi –te parece justo? Siempre dijo que Sai y yo éramos sus hijos y nos dejó en la miseria, seguramente lo decía para que mi madre aceptara acostarse con él.
-perdono lo que dices porque no estas enterado pero no es verdad que mi padre los dejo sin nada, en su testamento les dejo una casa a ti y otra a Sai además estoy obligado a pasarles una mensualidad para que tú y Sai puedan seguir llevando el mismo nivel de vida- Itachi y Sasuke se miraron –además tu puedes trabajar conmigo
-¿Cómo criado?- dijo más molesto Itachi
-por supuesto que no Itachi y si quieres seguir viviendo aquí o en tu casa estas en todo tu derecho- Sasuke camino a la salida pero se detuvo para volver a mirar a Itachi –además que te quede claro que mi padre no era ningún infeliz, sino un hombre bueno y justo- se giró y salió de la habitación cerrando la puerta.
Itachi se quedó apretando sus manos en puños –desgraciado…primero muerto antes que aceptar tus limosnas- dicho esto golpeo la pared con su puño –pero el muerto vas a ser tu.
Sasuke regreso a la oficina donde Mikoto y Sai lo esperaban –hable con Itachi pero está muy enojado y con razón, mi padre no debió hacer eso…
Mikoto sonrió ligeramente –a lo mejor si no hubiera pasado lo que paso, hubiera tenido tiempo de cambiar de opinión
Sai derramo unas lágrimas y miro a su hermano –ahora que eres dueño de todo que va a pasar Sasuke?
Sasuke miro a Sai y se acercó a él –nada, nada va a cambiar todo va a seguir igual- Sasuke abrazo a Sai –además sabes que te quiero- Mikoto que miraba la escena sonrió al ver lo bueno que era Sasuke.