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[KAISOO] El Manual Del Cazador por JoSaeng

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Notas del fanfic:

Un oneshot raro. 

Notas del capitulo:

Fantasía, romance, angst leve. Vampiros y cambia formas. Espero les guste. 

El manual del Cazador.

 

 

 

KyungSoo se detuvo por un momento. Necesitaba solo unos segundos para volver a recuperar sus fuerzas.
Sin duda, esta estaba siendo una noche larga. El vampiro al que debía cazar era realmente ágil. Pero no más que él.
El director Park le había aconsejado aceptar a un compañero de caza, pero él se negó rotundamente; ya que, su compañero era precisamente el vampiro perdonado, Kim JongIn. Primero muerto, antes de aceptar a un despreciable demonio de sangre como compañero.

Su orgullo le había abandonado por un momento, y el cansancio verdaderamente le había hecho arrepentirse de su decisión. Si tuviera a ese compañero, la caza de hoy habría sido más rápida.

Negó con la cabeza, y se obligó a continuar con su búsqueda, mientras suplicaba en su interior que la dosis de bonneung que bebió antes de salir, fuera suficiente para controlar sus instintos. El felino que lo dominaba, no debía salir esa noche, aún debía encontrar a ese vampiro.

Se detuvo cuando sintió un aroma conocido. Miró hacia su alrededor.

Los pasillos oscuros de la academia parecían estar más silenciosos de lo normal. Ningún ser vivo estaba ahí; sin embargo, recordó que los vampiros no se caracterizaban por tener respiración, ni menos un corazón latente, como el de él (era una de las pocas características que se enorgullecía de tener aún. Las orejas y el instinto, no eran cosas que le agradaran en absoluto).

—¿No se supone que ya tendrías que tener al vampiro?

La voz que resonó con fuerza, era más que conocida para él, aunque solo lo haya escuchado una vez, en la oficina del director Park, con esa oración casi retorcida saliendo de sus labios "Soy Kim JongIn, un vampiro. Encantado". Desde entonces, KyungSoo había pensado que se trataba de una broma, una broma muy absurda; ya que no era gracioso.

Pero cuando el director Park le explicó la situación, supo que no era una broma, ni nada por el estilo. Kim JongIn, era necesario, tanto para el deber, como en lo sentimental. KyungSoo no comprendió el significado de esas palabras.

Cuando él miró al vampiro, se dio cuenta de que este tenía entre sus manos el cuaderno azul en donde tenía ciertos apuntes. Más que nada, en ese diario relataba su odio profundo a los vampiros, y cómo matar efectivamente a uno.

Sus mejillas se ruborizaron de la ira que estaba comprimiendo en su interior. Ese cuaderno, estaba entre sus cosas personales.

—No te enseñaron que husmear en pertenencias ajenas es de muy mala educación, ¿Cierto? —siseó, con el fin de controlarse, pero no lo lograba. Ahora mismo, él quería saltar sobre él, y arañarle el rostro—. Pero, ¿Qué más podría esperar de un chupasangre?
—"Demonio de sangre", me gusta más. Me hace sentir más malvado —dijo, haciendo referencia a lo que había leído en el cuadernillo de KyungSoo—, sin embargo, muchos de tus métodos son demasiado inusuales. Me hicieron sentir miedo por un momento.
—Si vuelves a tocar mis cosas, te haré sentir mucho más que eso.
—¿Cómo debería tomar eso? —pronunció el vampiro con una sonrisa peligrosa. Ojeó una vez más el cuaderno, ganándose una mirada fulminante de inmediato—. Espera, eres mitad cambia-forma, ¿No te convierte eso en un vampiro?
—Déjame en paz. Jamás seré un vampiro.
—Es una lástima que alguien reniegue de sus propios orígenes. Pero en fin. Vine aquí porque pensé que necesitarías ayuda y también para entregarte tu pequeño manual.
—¿Manual? —respondió él.
—Parece ser el manual de un cazador, o un diario de vida de un chico con mucho instinto. ¿La luna llena está próxima, verdad?

El vampiro preguntó lo último con un tono completamente sereno, pero KyungSoo no lo tomó así.

Por supuesto que no era así. Era una pregunta retórica. Incluso irónica. El vampiro lo estaba provocando.
JongIn sabía lo que sucedería en la próxima luna llena. No importaba cuánto bonneung bebiera. Ese "antídoto", jamás podría borrar de raíz sus instintos. Todo estallaría una vez que llegara la luna llena.

—No es algo que te importe, ¿O sí?
—Jamás he visto a un gatito en el filo de la luna llena, sería interesante. No me lo perdería.
—Bastardo —siseó KyungSoo, dándole la espalda al vampiro.

Unas horas después, se dieron por vencidos.

Definitivamente el vampiro había logrado escapar. Eso enfureció más a KyungSoo, estaba tenso por sentir la cercanía de JongIn. Uno de los motivos por los cuales no lo quería como compañero, era precisamente ese. Estar cerca de él, le traía sensaciones que, si bien nunca antes había experimentado, le resultaban bastante familiares. Negó con la cabeza para quitarse esas absurdas alusiones.

 


***

 

 

—¡Lo quiero lejos de mí!

Fue lo primero que dijo al entrar a la oficina del director. No le importó quién pudiese estar escuchando, definitivamente no estaba de humor para rodeos. Quería su libertad de vuelta.

—Debes admitir que un compañero como él, podría ayudarte mucho.
—Lo admito. Pero no lo quiero —se apresuró a contestar—. El muy maldito incluso se burló de mí por la próxima luna llena.
—La verdad, precisamente de eso quiero hablarte.

El tono de voz serio del señor Park, hizo que KyungSoo se tensara. Tomó asiento de inmediato, jugó con sus dedos para conservar la calma.

—Ese vampiro te protegerá para tu primera luna llena, sabes perfectamente que el bonneung, no te servirá esta vez. Cambia-formas puros vendrán esa noche, y yo no podré protegerte.
—Yo puedo protegerme solo.
—Sabes que los felinos no suelen ser compasivos en el celo. Menos con los no dominantes.
—¿Por qué habla de mí como si fuera un objeto?
—A la hora de los instintos KyungSoo, ellos no pensarán en tu forma humana, o en tus sentimientos. Vendrán y listo. Quiero protegerte. Deja que JongIn cuide de ti.
—¿Por qué debería confiar en él? ¿En un vampiro?
—Lo conozco. Él no es como los vampiros que acostumbras a cazar, por algo lo he aceptado en la academia. ¿No confías en mí?

Era egoísta que él le preguntara eso. Él lo había criado desde que llegó a sus manos, luego de la masacre con su familia. Lo entrenó y explotó sus capacidades, más al notar que KyungSoo mantuvo el veneno del vampiro que lo mordió, transformándolo en algo distinto.

Él era un cambia-formas, pero conservaba en su interior algo de la sangre del vampiro que la mordió. Había logrado mantenerse con el extraño antídoto que su tutor conseguía para él, "bonneung"... Pero había cosas del instinto que ni siquiera la pócima podía controlar. Por ejemplo, el tema de sus orejas.

Había estado en su forma felina muy pocas veces, lo suficiente como para recordar siquiera el color de su pelaje.

Sabe que sus ojos cambian de color constantemente, y eso ocurre según cuál sea su ánimo. Lo mismo sucede con sus orejas. No son muy grandes, pero sin duda resultarían llamativas para los demás. A diferencia de sus ojos, sus orejas solo se daban a notar cuando experimentaba emociones más fuertes. Como ira, o la vergüenza. Siempre intentaba luchar contra eso, odiaba cómo lucía con un par de pequeñas orejas felinas sobre su cabeza.

—Sabes que los cambia-formas se enamoran solo una vez en la vida, ¿Verdad? —preguntó el señor Park, sacando a KyungSoo de sus pensamientos.
—Claro que lo sé... Pero, dudo que eso pueda salvarme de ser un cambia-formas, así que no perderé el tiempo en buscar "romance", cuando puedo dedicarme a encontrar una solución a mi problema.
—Es triste cuando alguien reniega de su propio origen.
—Yo no era un cambia-formas, señor Park —dijo con lentitud—. Yo era un humano. Común y corriente. Normal. Y ese vampiro destrozó mi vida.
—El día en que aprendas a vivir con tu existencia, podrás liberarte del peso que llevas. Sin embargo, tu deber o el que tú mismo consideraste un deber... No puedes dejarlo de lado. Los estudiantes de esta academia, jamás sabrán lo mucho que sacrificas por su seguridad. Atrapa a ese vampiro, junto con tu compañero.

Y finalmente, no pudo convencer a su tutor para que alejara a JongIn de su lado.

 

 

***

 

 

—¿Por qué siempre en la noche? Eso es tan film de horror —dijo JongIn mientras seguía a KyungSoo.
—Se supone que debes ayudarme y no ponerme en evidencia. Si el vampiro está aquí, ya supo de nosotros por tu voz.
—Oh, por eso descuida. El vampiro ni siquiera ha pisado este lugar. No está aquí.
—¿Cómo lo sabes?
—Conozco a ese vampiro. No está aquí.
—¿Lo conoces?

Ahora todo se había transformado en silencio.
KyungSoo también conocía al vampiro, en cierto aspecto. ¿Qué tanto se puede recordar a los siete años?

—¿Cómo lo conoces? —KyungSoo cambió su pregunta.
—Digamos que, fuimos conocidos.
—Habla claro.

JongIn mordió su labio. Definitivamente ahora estaba atrapado.

—Él fue quien me convirtió en lo que soy ahora. Eso es todo.
—Se supone que cuando eres mordido por un vampiro, puro en su caso... Debes quedarte con él por siempre. ¿Cómo se les llama a esos vampiros?
—Compañía —respondió JongIn.
—¿Qué se supone que hiciste entonces?
—Escapé —admitió sin rodeos— Park me ha ayudado mucho, pero el día en que me atrapen, probablemente me asesinará.
—Si es tan arriesgado para ti, ¿Por qué estás aquí?

Y ese fue el fin de la conversación.

No podía decirle aún el verdadero motivo. No antes de la luna llena, en donde probablemente KyungSoo se conectara con sus instintos y finalmente recordara. JongIn esperaba por eso.

El vampiro no estaba en la academia, por lo menos no esa noche. Kai lo sabía a la perfección. Mantenía un lazo con ese vampiro, siempre sabría si se encontraba cerca.

Las razones por la cuáles había insistido en ir esa noche a la Academia, era porque deseaba estar a solas con KyungSoo. Podría hacerla recordar de alguna forma.

—Escucho algo —dijo él, deteniéndose por un momento.
—No huele a un vampiro.

Ambos se miraron por escasos segundos, antes de notar que se trataba de un cambia-formas.

—¿Qué se supone que hace aquí? —preguntó KyungSoo, con cierto temor en su voz.
—Casi estamos en vísperas de Luna Llena, ¿Qué crees que vino a buscar?
—Oh...

Antes de que él pudiese responder algo, JongIn le tomó del brazo y comenzó a correr. No les tomó mucho llegar hasta el final del pasillo. El vampiro tomó una dirección desconocida, hacia el sótano de la academia.

—¡Perfecto! —dijo al ver un enorme armario de despensa, en el cual fácilmente podrían caber ambos.

KyungSoo no pudo pensar en nada. Su mente recién reaccionó cuando vio a JongIn cerrar la puerta del armario. Él se pregunta el por qué tenía que escoger precisamente un lugar tan angosto.

Cuando abre su boca para preguntar algo, el vampiro lo evita colocando su mano sobre los labios de KyungSoo. Lo mira fijamente, susurra un inaudible "Silencio".

Él jamás había estado tan cerca de un vampiro. No sabía si se trataba de la situación, o la estrechez contra el cuerpo ajeno; nunca se había tomado el tiempo de observar con atención el rostro de JongIn. Él ahora también lo miraba, deseando en su interior que él pudiese recordarle.

JongIn quita su mano de los labios de Soo, él suspira. Intenta calmarse, avergonzarse no sería bueno ahora.

—¿Por qué escondernos? Deberíamos enfrentarle.
—Admiro tu valor, definitivamente no has visto a un cambia-formas en vísperas de luna llena. Es un tigre de dos veces tu tamaño.
—Lo sé.
—Entonces  eres un gatito realmente muy valiente.
—Dime así otra vez, y te aruño.
—¿No reconoces este armario?

Él le miró incrédulo, por la manera brusca en la que cambió el tema de conversación.  

¿Por qué habría de reconocer un sitio en el cual nunca había estado?

—No sé de qué me hablas.
—Lo supuse —JongIn suspiró—. Aún así, ¿No sientes que nos conocemos?
—Podrías alejarte —él coloca sus manos en el pecho ajeno, con el fin de hacer algo de distancia. Era inútil—. Vamos, no quiero avergonzarme.

Se arrepintió de inmediato de las palabras que pronunció. JongIn solo le observó, con el fin de hacer que el corazón de KyungSoo palpitara más fuerte.

"Quizás, después de todo si me recuerda".

—¿Por qué te avergonzarías? Creí que me odiabas. —murmuró.
—Ya no lo sé.
—¿Cómo debería tomar eso? —preguntó, y se mantuvo en silencio al igual que KyungSoo. Finalmente, solo sonrió—. Entonces, ¿Estaría bien si tomo tu silencio como una respuesta?

Antes de que él pudiese responder, sintió sus labios sellándose nuevamente. Creyó que JongIn había puesto su mano sobre su boca otra vez, pero, la sensación era distinta.

"Es suave... se está moviendo sobre mis labios."

A pesar de la oscuridad presente, él pudo ver muy de cerca el rostro del vampiro.

"Son sus labios"

JongIn atrapó su labio inferior y él jadeó. La boca del vampiro se sentía húmeda y cálida. Despertaba mil sensaciones nuevas —o quizás no tan nuevas—, dentro de él.

Aún no cierra los ojos, con la oscuridad rodeándolos, casi no es necesario.

Cuando intenta poner resistencia, el vampiro atrapa sus manos en el aire, las deja sobre su cabeza, con el fin de hacer que él se quede quieto. No tiene más alternativa, lo supo cuando notó que sus instintos estaban fuera de control. Nunca tuvo la necesidad de otros labios, JongIn lo volvería loco.

Casi no podía seguir el ritmo impuesto por el vampiro. Intentaba tranquilizarse, pero los suaves y decisivos movimientos de JongIn no lo dejaban. El vampiro lo inmovilizaba con una mano, y con la otra, solo jugaba con su cabello, provocándole exagerados escalofríos y estremecimientos. Creyó realmente que ese era el límite que el inmortal podía pasar... Eso, hasta que sintió la mano traviesa de JongIn recorriendo su pecho. Abrió sus ojos con desesperación. Si él seguía, desataría los instintos que él buscaba controlar; pero por otro lado, él no quería dejar de sentirle cerca.

No sabía por qué estar cerca de JongIn le traía sensaciones tan familiares. Ronroneando por dentro, se dejó hacer ante las caricias del vampiro.

"Kai, te extrañé", "Kai, no te vayas", "¿No podrías llevarme contigo?"

Pequeños recuerdos llegaron a su mente...

Cosas que supuestamente debería haber olvidado. Descubrió que estar así junto a JongIn, le traía a la mente los recuerdos del pasado. Por lo que decidió, continuar con el beso... Aunque se perdiera de sí mismo.

Vio en su mente una clara imagen. Era el vampiro que ahora la estaba besando, jugaba con él. ¿Por qué lo conocía?
Eso quería saber...

"—Cuando sea mayor, ¿Nos casaremos?
—Por supuesto."

¿En dónde habían quedado las promesas?

Él lo amaba. Aún cuando JongIn era más de dos siglos mayor que él. Ese no sería un problema. KyungSoo era un chico sano, podría crecer... Y luego estar a la altura de JongIn, para poder amarle. No era del todo cierto, nunca podría haber llegado a su altura, aún seguía siendo pequeño.

Pero entonces recuerda esa noche...

Cuando el vampiro lleno de sangre, mató a su familia... JongIn también estaba ahí, él intentó salvarle. Todo fue rápido. La mordida, su cuello sangrando... Su cuerpo entre los brazos de JongIn, corriendo a toda velocidad una noche tan fría como esta.

KyungSoo se transformaría en una "Compañía" para el vampiro que lo mordió. Sería infeliz toda su existencia. JongIn no podía permitir eso... Después de todo, él pensó que había sido su culpa. Su repentino interés por el pequeño, habían llevado al vampiro sangriento a destruirlo todo, por envidia.

JongIn también  mordió a KyungSoo esa noche. Succionó el veneno y lo mantuvo en su cuerpo, para tomar él la maldición a la que Soo había estado condenado.

Sin embargo, no todo fue perfecto. Una parte del veneno de Kai, mutó en KyungSoo. Si bien, fue para mejor... El pequeño no pudo recordar nada una vez que abrió los ojos. Eso le destrozó, pero el vampiro comprendió que un día, quizás... Él podría recordarle.

Y así sucedió.

Una vez que el beso terminó, KyungSoo suspiró.
No se dio cuenta de las pequeñas lágrimas, ni de la mirada brillante de JongIn.

—Yo... Yo...

Pero JongIn no le dejó continuar.

Amarró sus brazos en el cuerpo de KyungSoo. Después de todo, 13 años sin él, habían sido una tortura.

Él terminó aceptándole, y perdonándole de todo... Porque recordó, que su corazón y su vida, estaban amarradas de alguna forma a la existencia del vampiro. Antes de la luna llena, él encontró a su amor eterno, más bien...

Recordó a quien fue siempre su amor eterno.

Descubrió también que su odio a los vampiros, no era suficiente como para odiar a JongIn. No podía.

—Dijiste que nos casaríamos —murmuró, apegado al cuerpo del vampiro—.  No cumpliste tu promesa.
—¿Te parece bien si intento compensarte por el resto de la eternidad?

Sin duda, era un gran plan.
Mejor que cazar vampiros.
Un día, la matanza de vampiros mantuvo vivo a KyungSoo.

Ahora JongIn se convertiría  en una nueva razón, y ya que su manual del cazador no lo prohibía, realmente no vio obstáculo posible para amar al único hombre en su vida.

 

 

Fin (?) 

 

Notas finales:

Probablemente no se haya entendido, 
Quizás haya segunda parte, con la luna llena de KyungSoo. 
Gracias por leer.


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