THREE DAYS TO LOVE
DEATH NOTE ( LIGHT x L )
ONESHOT
La inmensa habitación era negra, más aún con ese gusto de L por la oscuridad, no era de sorprenderse que no tuviera ni una sola foto suya, su rostro inspiraba miedo con esas inexpresivas facciones y esos ojos profundos que no tenían igual. Las ventanas estaban cubiertas por largas cortinas de seda guindas, el piso adornado con una alfombra ploma que se veía perfectamente con la cama de dos plazas iluminada por una araña. Parecía la habitación de un hotel, esos que solo los empresarios y gente importante pueden pagar. Sorprendentemente no había desorden pues al tratarse de dos hombres viviendo juntos en un lugar como ese se podía pensar en dicho estado.
-Ya duerme maldito raro- se quejaba un pobre chico de cabello castaño, poseedor de un increíble “poder”, si así se le podía llamar, pero más parecía una maldición, maldición que extrañamente no recordaba.
Tres días seguidos sin conciliar el sueño ya lo estaba volviendo loco, todo gracias a su nocturno compañero de cuarto que por lo visto jamás descansaba -debe ser por tanto dulce que se mete, su sangre ya debe ser azúcar- pensaba Light sin percatarse de que alguien lo observaba.
-AHH!! ¿QUÉ MIERDA HACES?!!- saltó del susto. El azabache ya estaba a pocos centímetros de su rostro con una expresión de asombro. ¿Cómo rayos llegó ahí sin que se diera cuenta? Un segundo está en la alfombra sentado observando la laptop y en el otro invadiendo su espacio personal
.
-Una investigación sobre como los asesinos pueden estar tranquilos en las noches- era su imaginación o lo estaba provocando… porque lo logró. No importaba lo que hiciese el castaño, no borraba esa idea que tenía L de que él era Kira, y cada vez que lo mencionaba o llamaba así, Light se ponía de un muy mal humor. Aunque con cada día que pasaba ya lo tomaba como una de sus burlas.
-Si no me dejas dormir te amordazaré y amarraré a la cama, tú elijes- lo amenazó con aire victorioso, obviamente elegiría la primera pero no obtuvo una respuesta -¿qué sucede?.
-Yagami-kun… mi cabeza está llena de malos pensamientos- (con el dedo en la boca) O_O
-CALLATE!! No vuelvas a decir eso- a la distancia se notaba lo rojo que estaba Light, no esperaba tal respuesta, ya tenía miedo de dormir cerca de él -¿qué esperas? apaga eso- señaló la laptop.
L se levantó, bajó la tapa del aparato y se metió a la cama -gané- rió internamente el castaño. Para su mala suerte ese solo sería el comienzo de una serie de acontecimientos que escaparían de su control, ni su gran intelecto, ni la Death Note lo salvarían del azabache.
El molesto sonido del despertador interrumpió el grandioso sueño que L estaba teniendo -maldición- estiró sus brazos perezosamente y se dispuso a levantarse, muy pocas veces lograba tener un sueño agradable, la mayoría eran pesadillas sobre cómo sería su vida si no existieran los dulces. Paso a paso casi arrastrándose llegó al baño, pero antes de poder entrar algo lo detuvo -oh casi lo olvido- giró con molestia levantando su mano -sigo atado a Yagami-kun… será un problema- observó el otro lado de la cadena, tenía que aprovechar el hecho de que el castaño siguiera dormido, aunque desde ese ángulo el rostro de Light tenía un brillo atrayente.
Un buen rato se quedó observándolo hasta que la realidad lo golpeó, si lo jalaba un poco más cerca del baño podría entrar sin dificultad, todo eso antes de que despertara, la idea de tener al chico en la puerta esperando a que terminara no era para nada deseada. Tomó aire y se propuso lograr su objetivo, se acercó sigilosamente, tambaleando.
En un descuido, con la mano rozó el sedoso cabello del otro causando una risa pequeña en el azabache -mmhhm jum jum no d… debo reír- se calmo retomando la postura. No podía jalarlo de las piernas, eso solo lo cabrearía -nop, mmm… el brazo- se acercó más, tan solo los separaban centímetros. Levantó un poco las sabanas, buscando su brazo, pero algo totalmente inesperado paso, Light giró asustándolo, L retrocedió un poco tropezándose con las sabanas y consecutivamente cayendo.
-WAAAA!!-algo mitad suave mitad duro amortiguo su peso. Era el pobre castaño.
-AHHHHHH!! PERO QUE MIER…- Light definitivamente estaba cabreado, ya ni podía estar tranquilo en las mañanas -ESTAS MUERTO!!- tomó las muñecas del azabache y lo apresó contra la cama.
-ESPERA!! n…no te enojes… yo solo quería…- L ocultó su cabeza entre las sábanas intentando hablar pero fue interrumpido, el fuerte agarre de Light le estaba haciendo daño. A pesar de eso se sentía culpable.
-QUÉ??... QUÉ QUERÍAS??- preguntó con la poca paciencia que su cansado cuerpo aún tenía, pronto se agotaría y su compañero rogaría por piedad.
-Eh?… nada- la mirada que le dirigía el castaño fue suficiente como para cambiar los pensamientos de L, al diablo con sentirse culpable. Zafó el agarre y empujo al otro quitándolo de encima.
-Tsk… si no quieres que te grite al menos déjame dormir en las mañanas, ya tengo suficiente con que toda la noche te la pases haciendo ruido- no pudo contenerse, hace tiempo que quería mostrar su enojo y la falta de sueño empeoraba las cosas.
-Quieres dormir? Ja… mientras estés encadenado a mi no lo harás- su frialdad al decir esas palabras fue como un reto para el otro.
-Sigue soñando… no me interesa lo que hagas, pero esta noche yo dormiré, te guste o no- no importaba el precio, sería capaz de cortarle la mano a L solo para poder cerrar los ojos.
-No pasará… es más, juguemos un juego- una interesante idea se le ocurrió en ese preciso momento -se que odias perder tanto como yo- no cabía duda de ello -así que te reto.
-Jugar contigo? no me hagas reír, no podría caer ante tus estúpidas provocaciones no obstante, un reto es un reto, acepto- no tenía ni la menor idea de que se trataría tal reto, pero no lo dejaría ganar.
-Bien Yagami-kun, el juego es simple: dejaré de comer dulces por tres días, si lo logro yo gano y tu no duermes, pero si pierdo te dejaré dormir- las cartas estaban puestas, solo faltaba que el otro aceptara.
-Que comience el juego…te advierto Ryuzaki, no me detendré hasta que pierdas.
-Esperaba eso de ti, Yagami-kun- una sonrisa malévola se posó en sus rostros, solo uno ganaría y estaban dispuestos a todo para ser los vencedores.
-- DÍA 1 --
Después de los sucesos de la mañana, ambos chicos retomaron la rutina habitual, esperar afuera del baño a que el otro terminara, voltearse mientras el otro se cambiaba, bla bla bla, cada día era como una tortura. Pero L se negaba rotundamente a desencadenarlos hasta que se probara que Light no era Kira. Aún había muertes seguidas pero no se podía asegurar nada.
Entonces surgió una idea en la cabecita de Light, esperó a que L se distrajera y le mandó un mensaje a Misa. Ella haría lo que sea por él, realmente Light es un maldito pero bueno Misa también es muy crédula…
-Misa necesito que me ayudes en algo. Hice un trato o algo así con Ryuzaki, luego te explico. Bien lo que tienes que hacer es comprar muchos pasteles, chocolates, todo lo que sea dulce y los pongas en nuestra habitación.
-Light
-Sí, lo hare. Ahora ve por los dulces.
El plan era perfecto, solo rogaba porque la distraída rubia no hiciera una estupidez. Una sonrisa malvada apareció en su rostro, ganaría el juego ese día, era imposible que L se resistiera a una habitación repleta de dulces.
. . .
-¿No vas a comerlos?- Light estaba todo sorprendido y cabreado, su plan fallo.
-No. Buen intento Yagami-kun pero no tengo pensado en darte la victoria en el primer día- la verdad era que por dentro se moría por lanzarse a esos deliciosos y exquisitos dulces con chocolate, fresas, caramelo derre… “mrd tengo que salir de aquí”
-Pero míralos, sé que no puedes resistirte- lo observó con picardía.
-Tengo fuerza de voluntad- ahh!! eso sí que hacia perder la cabeza al castaño.
. . .
En la noche L se vengó por aquella tortura, su contra-ataque era simple: heavy metal a todo volumen.
-- DÍA 2 --
Light no pudo ni siquiera pensar, la música invadía cada espacio de la habitación. Suficiente, así que desde que despertó comenzó con su nuevo plan. El cual involucraba a Watanuki, la supuesta mano derecha de L.
-Buenos días Watanuki, me preguntaba si podrías traerme un pastel, ver a Ryuzaki comiendo todos los días, me ha dado las ganas de probar un bocado.
-Eh? Sí, ya se lo llevo- el pobre hombre estaba sorprendido.
-Gracias, lo esperare con ansias- esa sonrisa no era normal. O_O
Tal y como lo supuso, ese momento de descuido por parte del azabache era muy oportuno, debía de darle las gracias a la bendita laptop. Se sentó en la silla de al lado y esperó el pastel. No pasó mucho tiempo y el hombre estaba parado colocando ese delicioso manjar en la mesa -perfecto, hora de actuar.
-Este pastel se ve tan delicioso, ¿no lo crees Ryuzaki?- tarde o temprano caería.
-¿Sigues con eso?, no funcionará, ya ríndete- era muy jocoso ver los intentos fallidos de Light.
-No me subestimes- lo estaba provocando de nuevo, y extrañamente le gustaba -sé que quieres un poco- con el dedo retiró la crema batida y empezó a lamerlo seductoramente.
L se quedó petrificado ante tal escena -muy apetitoso- si seguía haciendo eso, no podría resistirse. Realmente lo subestimo. Tenía que mantenerse firme -cálmate, es solo Yagami-kun, no es la gran cosa… mierda si lo es- Light no paró, ya lo tenía. Levantó la cereza que decoraba la rodaja de pastel y comenzó a morderse los labios. ¿Por qué no llegar a otro nivel?, con la otra mano limpia saco más crema y la untó en la cereza.
-Shit!- por accidente soltó la cereza y cayó en la silla.
-¿Qué pasó?- giró L, ante tanta belleza tuvo que girar la cabeza para soportarlo.
-Ayúdame- el azabache lo observó todo ruborizado, de todos los lugares donde pudo haber caído el fruto tenía que ser en medio de sus piernas.
-N…no puedo, está ahí- señalo el lugar todo avergonzado.
-Mierda, no seas cabro y ayúdame!- el comportamiento de L lo jodia.
-¿Por qué no lo haces tú?- le reclamó.
-Mira mis manos!- estaba cabreado y sus manitas llenas de crema batida.
-Ya! Ya! Cálmate- buscó en todo lado algo que sirviera, no pensaba poner la mano en ese lugar -bingo- el tenedor que Light no utilizó le serviría.
Se agachó lentamente, era todo un desafío hacer que el tenedor perforara la cereza. Para su mala suerte no eran los únicos en el lugar, una adorable rubia los observaba escondida tras la puerta. Sus mejillas rojas como un tomate y su mirada puesta en esos dos -KIAAA!! Light y Ryuzaki… ¿dónde está mi celular en momentos como este?, estúpida cámara, SII!! DELICIOSO YAOI- pues ya se dieron cuenta, Misa es fujoshi.
-Solo apúrate y tómala, no tenemos todo el día- “espera… ¿qué están haciendo?” pensaba Misa.
-Yagami-kun está muy resbalosa- “mi mente me está jugando bromas”.
-Ah! cuidado- L pinchó a Light con el tenedor “diablos mejor los dejo solos”. Era muy vergonzoso para Misa espiarlos, así que cerró la puerta y se fue.
En la noche era el turno de L para joder a Light. De hecho le tenía una sorpresa, constaba en quitar la cama de la habitación para que el castaño sufriera las consecuencias de la tortura que tuvo que soportar con lo de la cereza.
. . .
-Tadaa, te gusta?- entraron a la habitación, L se moría de risa y Light lo miraba molesto. Habría venganza.
-- DÍA 3 --
Ese día Light le pidió ayuda otra vez a Misa -la tercera es la vencida- sacó su celular y le mando un mensaje.
-Misa, ¿recuerdas lo que te pedí el otro día?, pues necesito algo más. Compra un traje de cupcake y póntelo. Pasarás todo el día con nosotros.
-Light! ¿porqué no me dijiste lo tuyo con Ryuzaki?, yo quiero saber.
-¿De qué hablas? Como sea apúrate.
-No puedo. Misa tiene sesión de fotos y una entrevista para una revista.
-No puede ser. Está bien.
-Si quieres lo compro y te lo llevo, pasaré por ahí antes de la sesión.
-Bien. Supongo que servirá.
. . .
Una vez con el traje, se lo puso con la excusa de que quería ir al baño, se encargaría de Misa después por comprarle un traje tan para chica. Era su última opción. Tenía una cara terrible, esos días fueron muy cansados. Ganaría si o si.
-Mh mh jajajajaja ¿qué haces con eso?- se burló, intentando contener la risa
-No fue mi culpa- se sentía como un idiota.
-Te contaré un secreto, ya estoy harto de no comer dulces y realmente muero por uno.
-Gané!!- gritó de la alegría.
-Déjame terminar- una sonrisa psicópata apareció en su rostro -eres el dulce más tentador que eh visto.
-Eh?? O_O hey Ryuzaki cálmate- retrocedió topándose con la pared.
-Tengo que probarte mmmm- comenzó a besar su cuello.
-Suéltame! AHH!- la mano de L no estaba quieta, con maestría entro en el traje y acaricio la entrepierna del castaño -EYY!! ERES UN MALDI… UGH MH- un beso apasionado lo calló. Con sutileza le quitó la prenda de cupcake dejándolo solo con sus boxers.
-No te resistas Yagami-kun- continuó con el beso. Por lo visto Light ya estaba caliente y volteó las cosas, porque pasó sus manos por el cabello de L atrayéndolo más y más. Comenzó a tocar por todas partes al azabache. Estaba decidido a ser el seme.
L: “Me besó como si no hubiera un mañana, en esos momentos no pensaba, todo lo que me hacía era tan rico, derretirme en sus caricias era exactamente lo que haría.”
-AHH! AQUÍ NO!!- hacerlo en el baño no era algo que quisiera -VAMOS A …LA C..CAMA!!- ¿qué mierda decía? Mi boca se movía sola, las palabras salían al gusto de mi cuerpo.
-Bien- me levantó y me puso en su hombro, ¿tanta fuerza tenía? si no hacía deportes ni nada solo escribir en su librito ese.
-Hey! Yo puedo ir solo- me quejé, es muy raro ver a un chico que solo tiene puestos sus boxers cargando a un azabache con apariencia freaky, sip lo acepto.
-No seas malagradecido- me dio una nalgada. Ok el si iba en serio. Aunque eso hacía que me excitara más –así que te gusta cuando te golpeo, estas duro- esas palabras no ayudaban.
-Cállate!!- le mordí la espalda, el gruñó y me lanzó al piso, siendo arrastrado por las cadenas me siguió.
-Oh Ryuzaki no debiste hacer eso- se tiró sobre mí colocando su rodilla en mi maldita entrepierna. A todo esto jadeaba y volteaba a todo lado para saber en qué lugar sería tomado. Nada más y nada menos que mi biblioteca, llena de documentos e información de los casos en los que había trabajado.
-Te dije la C-A-M-A idiota- aunque hacerlo ahí también sonaba excitante.
-Vamos, es lo mismo, de todas maneras te iba a dar contra el piso- O_O ¿ósea que lo había planeado?, ¿desde cuando Light quiere hacerme esto?.
-¿Acaso eres idiota? Cómo puedes decir eso! Eres un verdadero idiota!!- lo provocó, sí, pero ahora le tenía miedo.
-Dices idiota demasiado, ¿en qué ayuda eso?- se lamió los labios y me besó, sentía como un hilo de saliva bajaba por mi barbilla, sus besos muy desesperados y llenos de pasión.
-Nh mg- nos detuvimos para respirar y el comenzó a quitarme toda la ropa hasta dejarme igual que él. Empezó a lamer mis botones, saben a lo que me refiero ¿no?, inclusive hasta los mordió, eso solo estremecía en sobremanera mi cuerpo.
Con rapidez le quité sus boxers, él me daba pequeños besos en el hombro jugando con mi cabello. Cuando logré liberar su miembro, mi ser no podía creerlo. Era grande y necesitaba atención. Tenía en mente algo pero comencé a masturbarlo con mi boca, ya que meterlo en mí sería una terrible idea. Soy un ser muy pervertido y libidinoso, y Light sentiría todo este deseo acumulado.
-MHH UGH RYUZAKI!- dijo mi nombre en gemidos, solo me provocaba -ERES BUENO EN ESTO!!
De un momento a otro introdujo uno de sus dedos en mi ya deseoso trasero, eso fue horrible, una dolorosa sensación se apodero de mi cuerpo, tanto me dolió que accidentalmente lo mordí. Sacándole un grito, otro gran error, me quitó los boxers mojados y me levantó sentándome en el escritorio. Se acercó y frotó nuestras erecciones, yo lo abrazaba con fuerza, mientras mis gemidos nos acompañaban.
Ya no era solo un dedo, se convirtieron en tres, tres deliciosos y jodidos dedos que me hacían sentir de lo mejor. Y ya se imaginan mi disgusto cuando los sacó. Estaba dispuesto a amenazarlo para que los dejara ahí. No hubo tiempo. De una sola estocada metió su polla en mi interior. Ok era mucho mejor que los dedos, a los pocos segundos ya estaba moviendo mis caderas invitándolo a que me embistiera. Y valla que lo hizo, al principio lento y después rápido, pero no como quería.
-MÁS!! DESGRACIADO FOLLAME MAS FUERTE!! SÍ!! OHH MIERDA ASÍ!!- llegó al punto, ese bendito punto, doy las gracias por tener tanto placer.
-REALMENTE… ERES… CO…CODICIOSO RYUZAKI!- su voz me derretía.
-OHH LIGHT!! ERES TAN… BUENO!!- estaba satisfecho, no podría estar más feliz o si?
Light sabía que no esperaba más, así que me dio una sorpresa. Me levantó de la mesa, mis piernas rodearon su cintura, no quería que dejara mi interior. Entonces me empujó contra la repisa llena de libros, no lo soltaría. Abracé su cuello y lo besé con lujuria, él me correspondió y continúo con las embestidas.
El sonido de nuestros cuerpos juntarse era muy morboso y sucio, sería terrible que alguien nos encontrara en tales actos. Y eso le daba un toque de adrenalina a las cosas. Apretaba mi trasero y le daba pequeños golpes. Fue demasiado, con salvajismo me dio las últimas estocadas antes de venirse dentro de mí y yo en medio de nuestros cuerpos salpicando mi esencia en los libros. Ahora cada vez que entrara ahí recordaría TODO.
. . .
Ese momento para mí fue muy especial, después de tener sexo brutal con Ryuzaki las cosas se pusieron diferentes. Nuestro juego dejó de tener sentido. Ahora teníamos un nuevo trato, placer en las noches lo suficiente como para cansarlo y dejarme dormir en paz. Los primeros días Ryuzaki salió perdiendo, en las mañanas no podía ir hacer mis cosas, puesto que según él, lo dejaba cuadripléjico, creo que exagera. Ayer solo nos quedamos hasta las 5 de la mañana, no es mucho. (¬¬ si, no es mucho)
-- L –
-¿En qué piensas?- me preguntó con su hermoso rostro.
-En si realmente eres Kira- me encanta joderlo.
-Maldito bastardo, ya estoy harto- sip ese es mi Light.
-No te enojes, solo estoy jugando- sonreí abrazándolo.
-Pues te costará caro, hoy no estoy de ánimos.
-¿Qué? pero yo… Light no seas así- le rogaba haciendo puchero, sin mi dosis diaria de Light no podía estar tranquilo.
-Ohh tampoco te gustan las bromas- me engañó -ya en serio, tengo algo mejor para ti.
-¿Una sorpresa?- sonreí pícaramente.
-Sí, sonríe- ehh?, el flash me dejo ciego. Se acercó a mí y tomo una foto -es para ponerla aquí- sacó un marco de foto, eso es muy gay jajaja ¿de qué estoy hablando? –por fin tendrás una foto en este lugar.
-No me gustan las fotos pero esta es… interesante- ciertamente lo era.
-Ya lo recuerdo, quería decirte otra cosa muy muy importante.
-¿A estas horas?- Light ya se acostumbraba a mi ritmo.
-No podía esperar- entonces ¿por qué no lo dices ya?
-Pues dime.
-Te amo- mi corazón se detuvo, es la primera vez que lo dice. No pude contenerme y me abalancé sobre él. Quiera o no para mí esa frase era un pase para obligarlo a “hacerme sentir bien”. Pues yo… también lo amo.