EN LAS PUERTAS DEL KALEIDO STAGE….
Una chica de pelo rosa, plana y ojos verdes miraba con enfado el cartel que anunciaba la obra que se iba a representar:
- Naruto Uzumaki. – dijo colocándose las manos en las caderas, decidida. – No consiento que seas un Kaleido Star. Nunca. – sus palabras rezumaban odio.
EN EL KALEIDO STAGE….
El público estaba expectante a que empezara la obra, algunas fans por el nuevo miembro incorporado al Kaleido Stage y otros por ver a Naruto.
Entre bastidores todos estaban buscando a Naru como locos, la obra empezaría en poco tiempo.
- ¿Está Naru aquí, Gaara?- dijo Shikamaru mirando a todos lados esperando que el rubio apareciera en cualquier momento.
- ¡Todavía no! – respondió el pelirrojo vestido con un traje amarillo.
- ¡Shikamaru, no está ni en el vestuario ni en el vestíbulo! – dijo Kiba vestido de soldado corriendo hacia el mencionado.
- ¿Dónde se habrá metido?
- Que chico más problemático. – dijo Temari acercándose a ellos con los brazos en jarras y encogiéndose de hombros despreocupadamente con una sonrisa.
- Temari-san, parece como si esto te gustara… - dijo Gaara metiéndose con la nombrada.
- ¡Mi instinto me dice que está en algún lugar extravagante! – dijo ignorando completamente al peli rojo.
- Entonces, ¿Por qué pareces tan feliz?
- A este paso va a llegar tarde. – dijo una niña amiga de Naruto, Tenten, sentada encima de una caja con Kurama (una foca) en su falda. – Es de lo que no hay, ¿Verdad Kurama?
- Tenten, ¿no estás aquí para ayudar a tu padre? – dijo Gaara, la mencionada se giró hacia el doncel.
- Puede que parezca que sí… pero en realidad ¡he venido a ver a Sasuke Uchiha! – exclamó mirando al hombre que estaba preparándose para salir al escenario unos metros alejado de la conversación.
- Ah, ya me lo temía… - dijo Gaara – el “Príncipe del Circo” de Francia o “Pegaso del Escenario”, entre los mejores artistas del mundo con un pasado oculto.
Gaara y Tenten juntaron hombros y poniendo ojos de cachorrito para adorar a aquél hombre dijeron a la vez:
- ¡Qué misterioso!
- ¡Pero ahora no es momento para eso! – reaccionó Gaara muy nervioso.
- Hoy es el día de apertura con Sasuke-san como co-protagonista – informó Shikamaru.
- ¡Parece que todavía no se ha dado cuenta que él es la verdadera estrella aquí! – dijo Kiba refiriéndose a Naru.
- ¡Naruto, ¿Dónde estás?! – exclamó Gaara desesperado.
- ¡Le encontré! – dijo Temari mientras todos se apelotonaban a su alrededor. La chica señaló la televisión. – ¿Le veis?
Todos vieron que Naruto estaba saltando por el exterior del edificio dónde se estaban transmitiendo las noticias y se le podía ver por la ventana.
- ¿Qué hace ahí? – dijeron todos a la vez, pasmados.
- Como los clientes han disminuido des de que Deidara-sama se fue… - empezó Shikamaru.
- …está preocupado y quiere hacer publicidad… - siguió Gaara.
- ¡Mierda! – gritó Kiba echando a correr para ponerse un disfraz de Kappa. - ¡Yo también debo ir! – dijo poniendo una pose teatral en la que se auto señalaba.
- ¡Ni se te ocurra! – dijo Gaara deteniéndole y obligándole a cambiarse de traje.
Mientras, todos estaban ajenos a la sombría mirada que le dirigía Sasuke a la imagen de Naru en la televisión.
EN LA CIUDAD….
Naru dejó de saltar en la mini cama elástica e hizo una reverencia al público que le había estado observando.
- Increíble!
- Maravilloso!
- Que guay! – gritaron personas entre el público.
- Lo siento chicos, me tengo que ir! – se disculpó Naru corriendo por las calles lanzando papeletas con publicidad de Kaleido Stage mientras daba volteretas y giros en el aire.
- ¡Oh, no! ¡Tengo que darme prisa! – gritaba mientras corría. De pronto, vio un atajo que atravesaba el parque, se lanzó a un árbol y fue saltando de rama en rama hasta llegar a la entrada del Kaleido Stage dejando a todos los que le vieron asombrados por sus habilidades.
Cuando llegó el primero en hablarle fue Shikamaru:
- Ahí está. Naru ha llegado – comunicó por su auricular.
- ¡Siento llegar tarde! – se disculpó haciendo una reverencia en modo disculpa.
- Llegas tarde – le echó en cara Gaara.
- ¿A qué juegas? – le regañó Tsunade-sama.
- Etto…. Bueno, ya que Sasuke-sama se ha unido a nosotros quería…
- ¡Piensa en lo que tienes que hacer de verdad!
- Pero estaba haciendo…
- Hasta Kurama puede hacer esas cosas.
- ¿Puede hacerlo? – preguntó Tenten con curiosidad ante la oportunidad.
“Comprendo lo que dice pero sin Deidara-sama no atraeremos a tanta gente…”pensó Naru triste. Entonces vio a sus amigos.
- ¡Siento llegar tarde!
- Supongo que no tiene remedio – dijo Shikamaru meneando la cabeza a los lados.
- Date prisa y cámbiate. – le dijo Kiba revolviéndole el pelo con cariño.
- Si! – de camino al vestuario se encontró con Sasuke-sama. – Um…Etto…. Sasuke-sama, siento llegar tarde. Me esforzaré mucho! Trabajemos bien juntos!
El hombre, que había estado de espaldas, se giró cuando Naru terminó y con una mirada que daba miedo e hizo estremecer a los presentes dijo:
- No hace falta que subas al escenario.
- ¿No hace falta? – repitió Naru en estado de shock.
- Me basto yo solo. – se giró y fue sin más dejándolos a todos parados.
Gaara y Tenten juntaron hombros y poniendo ojos de cachorrito para adorar a aquél hombre dijeron a la vez, de nuevo:
- ¡Qué guay!
- ¡Pero ahora no es momento para eso! – reaccionó Gaara meneando la cabeza enérgicamente a los lados. - ¿Qué vas a hacer, Naru?
Este se giró decidido a sus amigos y dijo con confianza:
- ¡Subiré al escenario, por supuesto! – Y fue a cambiarse.
EN LA ACTUACIÓN….
Naru y Sasuke-sama estaban en el escenario pero todas las ovaciones iban dirigidas al segundo. Naru se esforzaba al máximo y hacía brillar el escenario con técnicas originales que hicieron reír a un sorprendido público mientras que Sasuke interpretaba un papel sin vida como si fuera un robot que al darse cuenta de las improvisaciones de Naruto se fue del escenario dejándolo solo.
“¿Ha desaparecido?” pensó Naru al ver el trapecio de Sasuke sin él. “¿Dónde habrá ido?”
Se preguntó registrando el escenario con la mirada.
“¡¿Un momento? Ya se está yendo!” dijo alarmado al verle salir. “¿De verdad?” pensó al ver que se retiraba.
Lo peor fue ver que el público tan sólo se fijaba en los movimientos de Sasuke a pesar que los suyos también eran buenos o iguales.
Terminó la actuación y fue al camerino de Sasuke, muy confundido por las acciones del mayor.
- Sasuke-sama… etto… - el mencionado no se paró al escuchar que le llamaba – Un momento, ¡por favor! ¡Todavía estamos en medio de la actuación!
- Es mejor irse antes que enseñar algo incompleto – respondió el de pelo azabache.
- Pero no es justo para el público que ha venido hasta aquí…
- El público está aquí para verme a mí. – dijo con arrogancia interrumpiéndole – Un escenario dónde yo no sea el centro de atención no es útil.
- ¿No actuamos para entretener al público? – preguntó Naruto confundido. – Por eso…
- Al contrario – le volvió a interrumpir Sasuke – Yo no existo para el público, ellos existen para mí. Mis habilidades son las mejores del mundo, ellos solo tienen que verme y alabarme. De haber sabido que aquí entreteníais al público con vuestras actuaciones estúpidas jamás habría venido.
- ¿Qué hay de los niños que no entienden tus actuaciones? – preguntó Naruto impactado por las palabras de Sasuke-sama.
- Ellos no cuentan cómo público. – Naruto abrió los ojos desmesuradamente por los sentimientos que le provocaron esas palabras – No puedo creer que alguien como tú haya completado la Actuación Mística.
Esas palabras rompieron algo dentro del corazón de Naruto y tan solo este oyó el sonido que hizo al quebrarse.
- No debería haber venido. – repitió Sasuke cruelmente.
- Aunque tengas las mejores habilidades del mundo, yo… ¡Te desprecio! – dijo Naruto dolido con la mirada baja. – Sin embargo, ahora mismo eres necesario para el Kaleido Stage. Yo solo no puedo atraer al público… ¡Te lo ruego! ¡No te vayas, Sasuke-sama!
- Me da igual – frías palabras provenientes de una fría persona. – El intermedio va a terminar pronto.
Naruto estaba desesperado.
“No puede ser, ¿Qué vamos a hacer?”
- No hay elección, tenemos que suspender la obra… - dijo Shikamaru con pesar.
- Tsunade-sama, ¿Le parece bien?
- ¡NO! – Gritó Naruto cerrando fuertemente los ojos y cerrando los puños – no podemos suspenderla.
- Entonces…
- Lo haré yo solo.
Todos se sorprendieron al oír esas palabras pero confiaban en el rubio doncel así que nadie le detuvo.
- Me gustaría ver eso – dijo con ironía Sasuke.
- ¿Si termino yo solo la obra, prometes quedarte en el Kaleido Stage?
- No puedo prometerte nada. Haz lo que quieras pero pronto aprenderás que el público es tu enemigo, Naruto.
- Eso me vale. – dijo Naruto recobrando la esperanza, no todo estaba perdido… había una posibilidad y él iría a ella a por todas.
Naru se puso la ropa de Sasuke y volvió al escenario, el público empezó a murmullar al no ver a Sasuke pero aun así el rubio siguió con la actuación, salto a salto y acrobacia por acrobacia de cada personaje: el de Sasuke y el suyo. Completó el reto aunque en el salto final estuvo a punto de caer logró recuperar el equilibrio a tiempo.
Al terminar el público no aplaudió la magnífica interpretación de Naru sino que tan solo reclamaba la vuelta de Sasuke al escenario.
Después de esa actuación nadie se dio cuenta pero fue la primera vez que Naruto Uzumaki no disfrutaba el hecho de estar en un escenario y Sasuke Uchiha, quién no pudo apartar los ojos del doncel en toda la actuación, descubrió que Naruto no era un trapecista cualquiera.
Una chica de pelo rosa y ojos verdes que había estado observando la actuación bajó enfadada y decidida al escenario.
- ¡No te favorece nada Naruto Uzumaki! – el nombrado se giró hacia ella.
- ¿Quién eres?
- Sasuke Uchiha te ha rechazado como su compañero, ¿no? Por eso estás interpretando las dos partes. – el corazón de Naruto se oprimió ante esas palabras e hizo una mueca.
La chica de pelo rosa subió a un trampolín y saltó para cogerse a un trapecio. Empezó a balancearse e hizo una técnica muy difícil que consistía en dar una vuelta sobre la barra del trapecio con todo tu cuerpo:
- ¡Giro del Ángel Eterno! – dijo mientras giraba sobre su cabeza. Pero esa tan solo fue la primera, después realizó unas cuantas más dejando a Naruto sorprendido y más inseguro de lo que estaba.
Parado en su trapecio no movió ni un músculo sorprendido por la facilidad y fluidez con que la chica manejaba el trapecio.
Cuando terminó la plasta rosa se sentó sobre el columpio y dijo:
- ¿No lo entiendes? Yo seré la próxima compañera de Sasuke-sama. ¡Pero para ti es imposible, Naruto Uzumaki!
Naruto reaccionó y bajó al trampolín:
- ¿Quién eres? – gritó des de abajo.
- La segunda Deidara-sama. Voy a echarte de aquí y me convertiré en la Kaleido Star. – Naruto quedó destrozado ante esas palabras, su seguridad se fue a tomar viento.
- SASUKE-SAMA!!!! – gritó el público mientras el mencionado se lanzaba a un trapecio aterrizando sin problemas sobre este, se colgó y empezó a balancear hasta llegar cerca de donde estaban el doncel y la joven.
- He cambiado de idea.
- ¿Sasuke-sama? – dijo Naruto confundido.
- Me quedaré aquí un poco más.
- ¿De verdad? – dijo Naruto ilusionado, algo bueno tenía que pasar.
- Tal y como esperaba, Sasuke-sama, sabe apreciar mis grandes habilidades.
- Seguidme con la improvisación, - dijo antes de volver a balancearse e ir de columpio en columpio por todo el escenario mientras Naruto volvía a subirse a un trapecio y seguido de Sakura le complementaron en una actuación totalmente improvisada.
Sakura le seguía perfectamente y Naruto también estaba totalmente concentrado en la obra pero lo que nadie, tan siquiera él mismo notó era que él había cambiado. Con esa actuación empezó a dejar de disfrutar actuar en un escenario haciendo que su talento se fuera perdiendo lentamente. El público quedó embelesado por la actuación y pudieron arreglar la decepción anterior.
“Tengo que proteger el Kaleido Stage que me confió Deidara-sama!” pensaba Naruto.
“Voy a ser la próxima Kaleido Star!” pensaba Sakura con ambición.
“¿Cuál de ellos será mi compañero?” pensaba Sasuke con reciente interés por el doncel y la chica.
- CONTINUARÁ –