—¡Prometo dañar a todos, hasta que mueran! —un joven gritó afuera del palacio.
«5 años más tarde»
—¡Ay MinWoo! Si supieras cuán anhelo casarme con tu rey KwangMin —YoungMin se hincaba en unos almohadones que se encontraban en el suelo.
—Príncipe YoungMin pronto se casara con nuestro rey, pronto se casaran —el doncel MinWoo sonreía, poniendo una mano sobre su hombro.
—Sólo espero, mi amor por él es bastante quizá para llenar de amor a los mendigos —sus pulseras de oro sonaban por la habitación.
—Que cosas dicealteza —MinWoo se llevó una mano a la boca para reír un poco, no se burlaba de su príncipe y amigo.
—Es verdad, ni siquiera puedo evitar ser cursi —sus empleados llevaban un poco de té.
El rey KwangMin caminaba hasta la biblioteca con sus acompañantes, con un chasquido sus guardas se fueron y él cerró la puerta.
—Emperador HyunSeong, pronto me casaré con YoungMin así que te pido un gran favor, ayúdame hacer la ceremonia —KwangMin caminaba hasta su hermano mayor se hincaba uniendo sus manos poniéndolas en medio de su rostro.
—Una vez más no soy emperador puedes llamarme príncipe hermano —HyunSeong dejaba un libro de 500 páginas donde lo tomó —. Y te ayudaré, ustedes son unos románticos de lo peor.
—Mereces el nombre, eres el hermano mayoraunque hayas rechazado el nombre y el reino —KwangMin se levantó —. Eres un príncipe sabio.
—Luego organizaremos tu prometido, bajemos a comer, deben de estar esperándonos —las puertas se abrieron pidieron privacidad así que se fueron solos hasta el comedor real.
—Pensé que no comerían —YoungMin comía algunas uvas —. Tomen asiento —pidió.
—¿Tú también comerás con nosotros DongHyun? —el doncel le preguntaba al guerrero.
—Noseñorito MinWoo, yo tengo que irme —el guerrero se había enamorado de aquel doncel, pero el doncel había cerrado su corazón.
KwangMin estaba sentado en el centro, HyunSeong en su lado izquiero, YoungMin en su lado derecho más el doncel que siempre estaba a los caprichos del príncipe.
En los pasillos principales caminaba un chico con una túnica negra y una capa del mismo color que cubría parte de su rostro, esparciendo en cada paso hielo, congelando el piso.
—Brindemos por los pocos días que nos queda paracasarnos —KwangMin y YoungMin alzaban dos copas de oro.
Las puertas de roble se abrieron y la persona que caminaba se acercaba, la realeza lo miró pero su visitante se paró en aquella mesa, los demás guardias intentaron atacarlo porque pensaron que era una amenaza sin darse cuenta se convirtieron en estatuas de hielo.
—Buenas noches alteza —su visitante dijo —. Se preguntan quéhago aquí, mi nombre es Lee JeongMin soy unhechicero.
—Sé de ti —dijo HyunSeong —. Sé que fuiste...
—Yo se los diré —puso su dedo índice sobre los labios del emperador como KwangMin lo llamaba —. Vengo en busca de venganza, será contigo YoungMin, KwangMin sufrirá.
—¿Por qué hace esto? —el rey pedía una explicación.
—Porque su padre me enamoró, me hizo creer que me amaba, me mintió —se quitó su capa mostrando su rostro llamando la atención de los guerreros y gente del servicio su belleza tenía embelesado a HyunSeong.
—¿Te acostabas con mi padre mientras mi madre tenía que recuperarse de una enfermedad? —YoungMin le gritó tirándole una copa, copa que el hechizero esquivó.
—Alteza una cosa es estar enamorado y otra ser demasiado estúpido, jamás hice lo que mencionan, pero he hablado demasiado, fui engañado hasta que su padre me desterró —dijo con rabia.
—¿Qué quieres? —MinWoo preguntóatónito mientras tranquilizaba a su príncipe.
—Quiero que YoungMin duerma por la eternidad, quiero que ustedes sufran —el hechicero se sentó a un lado del emperador —. Ustedes son producto de él, siempre me dio lastima su madre, su madre jamás se atrevió a acusar a su esposo de adulterio.
—¡¿Cómo te atreves?! —el rey golpeó la mesa —. Mi madre moría mientras se revolcaba contigo, mi madre perdía vida —JeongMin rió.
—Una vez más, jamás me acosté con su padre sentía remordimientos por estar con rey, por más enamorado que estés y te insistan estar con él puedes negarte ¿verdad YoungMin? —arqueó una ceja pero una navaja que no vio venir se posó en su cuello.
—¡Aléjate de mi familia! —HyunSeong estiró su brazo y poso el arma blanca en el cuello del hechicero que estaba lleno de collares de oro.
—Vine hacer pagar a tu familia y quita eso de misi no quieres que mate a tus hermanos —el emperador bajó el arma —. Ya es tiempo de que me vaya —el hechicero se levantó del asiento y caminó hasta donde YoungMin —. ¡Buenas noches mi príncipe! —sonrió y YoungMin tocó su cabeza mareado.
—¡Maldito! —KwangMin legritaba al hechicero —. Te mataré —tomó su espada y corrió hasta el joven JeongMin, trataba de apuñalarlo pero el hechicero movía su cuerpo esquivando el arma riéndose.
—No puedes matarme si lo haces morirá YoungMin al mismo tiempo que yo —tomó la espada y la puso en su pecho cerca de su corazón —. Anda, mátame, tu querido prometido también va a morir de la misma manera que yo.
—¡Eres despreciable! —KwangMin le golpeó con fuerzaen la mejilla volteando el rostro del hechicero, HyunSeong había sostenido a YoungMin cuando cayó dormido.
—Es hora de irme, dentro de un año vendré de nuevo para poder despertarlo tienes que darme lo que más quieras —JeongMin se dio la vuelta.