Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Mi único dueño [BaekYeol] por BaekPrincessPuppieTocino

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Hola bebés.
Quisiera decir que este es el primero de quizás dos o tres capítulos, dependiendo de la recepción que tenga este y el decenlace que ustedes esperen.

Fanfic basado líbremente en una serie de canciones y cada una, las más importantes, seran quien de el titulo a cada capítulo.

Créditos a mi preciosa Clau_Iru por betearme, ordenar y corregir el desastre que siempre le envío.

 

Notas del capitulo:

Enjoy the mayo.

Please don't

Nos sentamos uno junto al otro en el auto. Solos los dos, tal como pediste, mientras conduzco con una mano y sostengo la tuya con la otra. 

Siempre he sostenido tu mano… desde que nos conocimos hasta ahora en que tú la eliges a ella, sin embargo tú miras tranquilamente por la ventana sin dejar de apretar nuestros dedos entrelazados como si no estuvieses a punto de abandonarme luego de obligarme a ser tu segunda piel por años. Como si este fuera un día cualquiera, como si este fuese un paseo en coche cualquiera, como si no me hubieses obligado a necesitarte y ahora estuvieras a punto de apartarme de golpe.

Mi vista está fija en la carretera, pero te veo ocasionalmente por el rabillo del ojo.

Viéndote así… tan sereno… tan… tan frío… obligándome a permanecer junto a ti incluso en este momento. Pidiéndome lo imposible aún sabiendo cómo me siento y que me destruyes. Porque sabes que tu perro es incapaz de negarte absolutamente nada y aunque le pidieras oficiar la ceremonia, lo haría con gusto y con una sonrisa sólo con tal de verte satisfecho… Sin embargo, y aunque conozco la respuesta, mi lado masoquista, ese lado que se niega a comprender la realidad y que insiste en que esta lo golpee con más fuerza cada vez, no puede evitar preguntarse.

“¿Esto es en verdad lo que quieres? ¿En serio eres tan cruel en realidad y yo siempre preferí no verlo hasta ahora que en que me lo estás restregando en la cara?”

Creo que lo dije en voz alta porque te giras, me miras y yo te miro fugazmente antes de volver a centrarme en la carretera, más por temor a verte enfadado que por temor a descarrilar y acabar volcando. Mi cara está completamente neutra y sé que frunces ligeramente el ceño porque ambos sabemos que antes de subir al coche, me ordenaste expresamente que sonriera, y yo aprieto los labios de impotencia porque, aunque quiera complacerte, es esto o llorar y acabar con un triple homicidio el día de tu boda. Sin embargo a ti parece no importarte porque ni siquiera el dolor tras mis ojos serios quita esa resplandeciente sonrisa de tu boca cuando separas los labios ligeramente para hablar.

“Sé lo que quieres decir pero, por favor, no lo digas.” Murmuro interrumpiéndote, perdido entre las líneas blancas que separan las vías.

 Ya he tenido suficientes advertencias… Suficientes recordatorios de que “Hoy todo se acaba”, que “Hoy cumples tu sueño” y que “Quieres a tu mejor amigo contigo”,así que fuerzo una sonrisa lo suficientemente creíble como para dejarte satisfecho y que vuelvas a mirar por la ventana con esa sonrisita hermosa mientras golpeas el suelo del coche con la punta del zapato en ese gesto ansioso que delata tu doloroso entusiasmo y, recién cuando lo haces, es cuando yo respiro, dejando escapar el aire que retengo y  volviendo a concentrar mi atención en llegar a nuestro destino, apretando ligeramente tu mano y tratando de transmitirte en silencio todos los sentimientos que estallan en mi interior… todo este amor que en pocas horas serán nada más que sentimientos vacíos y aún más unilaterales.

Aprieto tu mano como último recurso… con la esperanza de que veas cuánto te amo, ¡QUE VEAS CÓMO MUERO POR TI! Que abras los ojos y veas quién realmente te ama hasta perder la cordura… cómo último recurso para que me ames….


Pero los minutos pasan y tú no me ves.


No abres los ojos.


Y definitivamente… sigues sin amarme.


Y  yo… quiero alargar cada minuto, cada segundo, tratando de retenerte junto a mí de la forma que sea porque… te estoy perdiendo. Segundo a segundo te estoy perdiendo y estos son los últimos momentos que el perro pasa junto a su amo antes de que este lo abandone a un lado de la carretera, muy lejos de casa.

La desesperación pica en mis venas hasta hormiguear las yemas de mis dedos; los dedos que te tocan. Desesperado por alargar los últimos agónicos segundos en que aún te tengo, pero el camino vacío se abalanza sobre mí como queriendo devorarme. Recordándome que… esto no es un  sueño…

Mis dedos se aprietan contra el volante.

De verdad estoy a tan solo segundos de perderte definitivamente.

Después de dar vueltas y vueltas, llegamos a esta casa que me es tan familiar y tengo que hacer acopio de todo mi coraje para que mis lágrimas no caigan. No quiero avergonzarte. No este día que es tan importante para ti, pero… Después de pasar un largo día para encontrar este lugar, siento como si realmente estuviera perdido.

La casa de tu abuela…

Para distraerme de ese vértigo que amenaza con tirarme al suelo cuando cruzamos el pórtico uno junto al otro, trato de pensar que seguro YiXing estará saltando en una pata por cumplir su sueño. En serio que trato de enfocarme en eso para no… sentirme tan asquerosamente miserable. Para no sentir el desvanecimiento. Para no vomitar de las nauseas que me retuercen el estómago con cada paso.

Tú sigues junto a mí… sonriendo y apretando mi mano como si nada entre nosotros pasara o hubiese pasado alguna vez, como si nunca hubiese sido mío, como si no hubieses amanecido entre mis brazos aquella misma mañana… porque en este momento sólo soy tu amigo. Soy tu mejor amigo. Soy tu perro fiel y tengo que permanecer junto a ti hasta el final.

A cada paso el aire se me escapa. Sé que lo notas pero no haces nada. Sé que no vas a hacer nada, pero mi corazón late cada vez más rápido, queriendo escapar como el cobarde que es antes de ser destrozado.

Mi pulso se acelera.

Las nauseas aumentan.

El traje, el aire, las estúpidas decoraciones asquerosamente bellas y perfectas me ahogan.

El altar aparece en mi campo visual cuando llegamos a la locación indicada y comienzo a temblar.

Aún falta para que la ceremonia comience… ni siquiera están aquí todos los invitados… pero no puedo evitar que mi respiración se corte y mi cuerpo frene en seco, rehusándose a seguir con esto. Rehusándose a seguir con esta mentira antes de que se vuelva una verdad absoluta.

Me estoy ahogando en serio y tú sólo jalas de mi mano sin molestarte siquiera en mirar hacia atrás para descubrir el motivo de mi congelamiento momentáneo.

Esa es tu advertencia.

La última.

Quieres que me comporte.

Quieres que tu perro se comporte y es entonces, cuando comienzas a recibir y a saludar a los invitados, que lo veo todo tan claro e inminente.

“Por favor, no. Lo que sea menos esto. Por favor no me abandones.”

Mi cabeza parece a punto de estallar pero mi cuerpo no reacciona a nada más que seguirte, caminar, parar y sonreír cuando tú lo haces.

Quiero gritar porque me estoy ahogando… pero sigo estático junto a ti, que sigues sonriendo feliz porque este es el mejor día de tu vida. Emocionado porque vas a casarte con tu sueño. Orgulloso porque por fin alcanzaste tu meta. Complacido porque tu perro se comporta tal y como corresponde.

Pero dejarte ir no es tan fácil como parece. ¡No es tan fácil como quieres hacerlo ver! ¿Por qué haces esto? ¿Es necesario estar en primera fila? ¿Es necesario que me jales de acá para allá como a tu sombra?

Claro…

Casi lo olvido…

Se supone que soy tu mejor amigo…

Pero… necesito respirar.

Me alejo al no ser capaz de verte dejarme y tú aprietas los labios y frunces el ceño con ese adorable gesto de cachorrito que yo tanto amaba… Que tanto amo…  Que sabes que amo… pero aunque jales mi mano y me mires de esa forma,las lágrimas eventualmente caerán y yo necesito limpiarlas ahora, sin que las veas y te molestes aún más. Prefiero que te molestes porque, contra tus órdenes, te dejo solo cuando me ordenaste no hacerlo, a que te enfades por ser débil y no resistir, quebrándome patéticamente frente a ti… No quiero que te asquees y te avergüences aún más de mí. Sé que siempre te avergonzaste de lo patético que era…  Finjo ir al baño y tu gesto desaparece, sin embargo, sin mirarme me tiendes algo con la mano dándome de inmediato la espalda antes de seguir recibiendo a tus invitados sin tu perro junto a ti; sea lo quesea, yo lo cojo, escapando sin mirar.

El perro se encierra en el baño a llenar sus pulmones con todo el aire que va a necesitar para no morir asfixiado durante toda la ceremonia, sintiendo las lágrimas escapar con gemidos ahogados que se roban el poco aliento que trato de recobrar.

La imagen que me devuelve el espejo es miserable.

Vas a molestarte si me ves así, lloroso y con los ojos hinchados.

Rio derrotado porque incluso en un momento así, en que me arrastras a presenciar en vivo y en directo cómo me destruyes al punto de tenerme encerrado en un baño llorando como un niño…. Aún me preocupo por ti antes que por mí.

Y la verdad es que siempre estarás antes que todo.

Aprieto los puños y los restriego con rabia contra mis ojos ¿Por qué el perro sigue deseando más de lo que su dueño quiere darle?

Recién entonces noto entre mis manos lo que anteriormente me entregaste; lo miro consternado por unos segundos y no puedo evitar volver a explotar.

Es un pañuelo de seda.

Es el pañuelo de seda que adornaba la chaqueta de tu traje.

Vuelvo a reír porque seguro que sabías perfectamente lo que tu perro haría luego de escapar, perono sé si debo usar el pañuelo para consolarme o tirarlo ahora mismo a la basura como un inútil gesto de rebelión.

¡Imaginen!

¡El perro se rebela contra su amo!

¡JA!

Eso… es estúpido… Tan estúpido que ahora sí que siento deseos de romper en carcajadas porque por supuesto que no voy a hacerlo. No cuando fuiste quien me lo dio. Así que simplemente lo acaricio contra mi mejilla y trato de impregnarme de tu aroma, fingiendo unos últimos segundos que todo esto no es verdad y que en realidad eres mío. Sólo mío. Apuesto a que también te esperabas esto… Apuesto que este pequeño regalo es tu forma de mantenerme controlado, dándome una pequeña parte de ti como una dosis de droga a un drogadicto para mantenerlo pendiente pero sosegado el tiempo que dure.

Pero… ¿Por qué el temblor no desaparece?

Vuelvo a restregar mi mejilla contra la tela, pretendiendoestar loco y aferrarme a ti, pero… mi cuerpo no me escucha.Mi cuerpo sigue siendo el de este perro fiel que te obedece como un autómata aún incluso por sobre los deseos de su propio corazón. Ese corazón que quiere resistirse… pero mi cuerpo es más inteligente (o más estúpido) y acaba por simplemente embriagarsecon tu aromaantes de juntar el coraje necesario para abrir esa puerta y enfrentarse a la realidad.

Una lucha entre mi corazón y mi cuerpo.

Mi corazón gana… al menos unos segundos antes de tener que salir y ponerle cara, una cara sonriente, al peor día de mi vida y el mejor de la tuya.

¿Qué mal harán unos pocos segundos de sueño? ¿Unos pocos segundos de imaginación corriendo al compás de las emociones reprimidas?

No quiero despertar jamás.

No me obligues a despertar.

El perro se revela… pero no contra su amo, sino, contra las órdenes de su amo… Por unos segundos el perro quiere desobedecer a su amo y fingir  que aun lo tiene. Que no va a ser abandonado.

Es un sueño hermoso en el que aún te tengo.

“Por favor… Por favor no me abandones”. Suplico con los dientes apretados, solo en este baño, en un intento desesperado porque oigas mi llanto y entres por esa puerta y mandes al diablo la boda de tus sueños y… me digas que me amas…

… que me amas sólo a mí.

Pero eso no pasa… sólo hay un leve llamado desde el otro lado de la puerta y tengo que salir pronto para no avergonzarte.

La música comienza y tu mirada me obliga a posicionarme en ese lugar especial que escogiste sólo para mí.

Primera fila y el tiempo se escapa entre mis dedos tan rápido pero, al mismo tiempo, con una lentitud agónica…

TaeYeon noona se ve preciosa y no voy a negarlo. Eres un hombre afortunado según tus propios parámetros… y ella finge verte como si sólo tú existieras. Son iguales. La pareja perfecta. El uno para el otro… mientras que este perro te observa desde su palco, atento y dolorosamente expectante del momento exacto en que vas a abandonarlo.

Duele.

Cada segundo del inicio de tu nueva vida soñada me significa una nueva puñalada en el centro del estómago.

“Regresa...” Susurra una voz desesperada en mi cabeza. Supongo que es la voz del perro que te ama con locura y aún se niega a obedecerte y permanecer quieto donde le ordenaste sentarse.

“No vayas junto a ella. ¡Por favor… Regresa!”

“No la esperes de esa forma”

 “¡NO LE SONRÍAS DE ESA FORMA! ¡COMO… como…. Como si la amaras…!”

Mi mente grita pero mi cuerpo no se mueve. Mis ojos siguen mirando tu sonrisa resplandeciente y tus ojos brillantes. Estás cumpliendo tu sueño mientras que en mi corazón sólo tu fría, cruel y egoísta  esencia permanece. Tal como te conocí, tal como te amé, tal como me abandonas y tal como te seguiré amando.

Frío. Eres frío.

Eres frío pero te amo.

“Por favor… ¡No! ¡Por favor, no me abandones! ¡REGRESA!”

“¡REGRESA!  ¡VUELVE CONMIGO!”

“¡REGRESA! Por favor… No aceptes… Por favor, no… no digas “Sí”…”

Pero… ¿De qué sirve gritar internamente?

Tu cara me lo dice…

Es el mejor día de tu vida y yo…

…yo me doy por vencido justo cuando algo hace “CRACK” dentro de mí.

Si era esto lo que pretendías conseguir sometiéndome a esta tortura… pues… lo conseguiste…

Ahora lo veo tan claro.

Nunca quisiste abandonarme… querías obligarme a permanecer junto a ti hasta destruirme lo suficiente para que te dejara ir por voluntad propia. Quebrantarme, Abrumarme con mi propio amor.

Tu sonrisa me lo dice; esa sonrisa hermosa que ya quisiera yo que fuera sólo para mí.

Tus ojos brillantes que se arrugan de felicidad; felicidad por estar con una persona que no soy yo. Una persona que definitivamente no soy yo. Una persona pequeña, de manos diminutas, cabello largo brillante y que puede darte la imagen que deseas.Que puede darte hijos y a la que puedes lucir sin vergüenza o miedo a ser juzgado. Una muchacha hermosa, respetada, famosa y elegante que no es ni torpe ni estúpida… que no es como yo. Aunque ella no te ame… Aunque tú no la ames.

Mis ojos se abren aterrados por lo que acabo de decidir.

Te miro nuevamente y al completo, sin poder evitar el calor sofocante que abruma mi pecho porque te ves tan precioso o incluso más que la primera vez que te vi; el día que nos conocimos.

“Te amo” Susurro rendido, sin hablar y apenas moviendo mis labios.

La realidad de esta nueva decisión me golpea y es que…

“Voy… a dejarte ir”

Aprieto el pañuelo impregnado de ti entre mis puños. Simplemente voy a retener la esencia restante, así que ve con ella.

“Se feliz”

Con esta nueva resolución, alcé la cabeza justo antes del “sí”.

Voy a dejarte ir.

Nuestras miradas se cruzaron en el segundo en que tus labios se separaron para aceptar y oficializar el comienzo de la vida que siempre deseaste y ese segundo, en que tus ojos chocaron con los míos, se volvió una eternidad. El tiempo se detuvo y yo… yo te sonreí radiantemente y de corazón, una sonrisa sincera, dándote el empujón que necesitas para seguir porque… te habías quedado congelado, viéndome en shock con tus preciosos ojitos delineados y yo… sin dejar de sonreír… con esa sonrisa tonta que tanto te avergüenza y que siempre has dicho que me hace ver estúpido… gesticulé lentamente con mis labios, asegurándome de que entendías cada palabra que mi boca articulaba sin dejar de mirarte con todo ese inmenso amor que sabes que este perro tiene para ti.

“Te amo con toda mi fe, sin medida… Te amo y te seguiré amando por siempre…. Mi amor. Mi único dueño. Mi amo. Mi BaekHyun.”

Ve… y se feliz…

Notas finales:

Espero que les haya gustado ^^ 
déjenme sus impresiones y si desean la continuación.
Nuevamente, créditos a mi linda Clau_Iru bebé.

Besotes y mordidotas!!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).