- Raina…-dije apretando mis dientes con fuerza, esta vez si la castigaría ¿Cómo se atrevía?
Mi pequeña hermana menor estaba fastidiándome y a sobre manera ¿todo porque? Por culpa de mi irresponsable madre ¿Qué iba a hacer ahora?
Raina tenía una hora de atraso, como cada martes y jueves cuando iba a natación. No era un problema para mi que se entretenga hablando con algunas chicas, claro que no, el problema es…que no habla con chicas, sino con un chico, un estúpido chico que hace natación con ella. Hace unas semanas Raina decidió tomar clases de natación, desde el principio me opuse, no quería que ella este en lugares propensos a conocer chicos y usando traje de baño, aun menos ¡por dios! Podía recordar esa discusión perfectamente…
# Flash back#
Llegue a casa pasada las 5 y ya suponía que Raina debía estar ahí ¿no? Ella cursaba la escuela por la mañana y a esta hora debía y tenía que estar en casa.
-¡ya llegue!-grite mientras dejaba mis zapatos y caminaba hacia el salón, allí estaba ella, con la carpeta abierta y leyendo un libro
-hola hermanito
-¿como esta a la más hermosa?-le di un beso en la frente y me tire a su lado.
-bien ¿la practica?
-mejor ni hablemos, Henry renuncio…-tire y la vi hacer una mueca -¿Qué?
-nada, era de esperarse
-¿Qué quieres decir?
-su lindo líder es todo un caso, era cuestión de tiempo para que Henry explote-enarque una ceja y ella sonrió-vamos, sabes lo que digo
-no lo sé y tu tampoco ¿de acuerdo?-camino hacia la heladera y saque una botella de jugo-¿llamo mama?
-si, dijo que está en el mediterráneo, luego manda fotos ¿puedes creer que se tome otro mes más de vacaciones?
-no sé qué te importa, ni siquiera vive aquí-dije dándole un sorbo a la botella
Raina y yo vivíamos solos desde que cumplí los 18, nuestra madre se había vuelto a casar y se mudo con él. Como era mayor decidí quedarme en nuestra vieja casa y Raina me siguió, no era algo personal pero dado que su esposo el “magnate” vivía viajando ellos nunca estaban en la casa. Aquí nos manda plata una vez al mes y llama una por semana para dar señales de vida, nada grave.
-jinki… ¿te dije que sos el mejor hermano del mundo?-me dijo acercándose y dándome una enorme sonrisa
-¿a qué viene eso?-pregunte, siempre que era tan buena quería algo a cambio
-a nada-se quedo callada un instante-solo….
-ya sabía yo…
-¿puedo unirme a un club?
-¿Qué tipo de club?
-natación-dijo emocionada
-ni de broma…-me grite y ella tiro de mi manga haciendo que derrame el jugo- ¡Raina!
.- ¡por favor! Nunca te pido nada, esto...solo esto... ¿si?
-¿hay chicos?
-¿Qué? Bueno…
-no-dije
-pero…-la vi hinchar sus cachetes, estaba molesta-de acuerdo ¡no me importa! Le dije a mama y dijo que si
Dio media vuelta y comenzó a caminar hacia el cuarto, y claro…la seguí
-detente ahí querida ¿pansas pasar pro encima mío?
-no es que piense hacerlo, intente convencerte y te negaste ¿pero sabes qué? Mama es quien decide-dijo con una sonrisa triunfante
-te advierto Raina- ella me saco la lengua y entro al cuarto corriendo ¡maldición! Una adolescente en la casa, era lo peor….
# Fin del flash back#
Luego de eso solo empezó, ahora iba dos veces por semana y por lo que escuche en sus conversaciones telefónicas…había hecho un amigo. Un maldito chico que seguro buscaba aprovecharse de ella. Hablaban varias veces al día, pasaban tiempo juntos en clase y fuera de ella ¿se piensa que no lo sé? Ella dice que solo es un “nuevo amigo” claro, como si yo le creyera, ah no…eso no pasara
Tome mis llaves y maneje hasta el club donde hacia natación, pensaba encontrarla y poner a ese chico en su lugar, el debía entender que con mi hermanita no tendría chances…
Cuando llegue a donde la gran pileta estaba, la vi, estaba en el otro extremo de la pileta sentada en el borde, llevaba su traje de baño y mojaba sus pies en el agua mientras sonreía como tonta. Pude ver a un chico en el agua sumergido, apenas se veía su cabello, no me agrado ver parte de su espalda descubierta ¿no usaba un traje de baño completo? Maldito. Ya conozco a los de su tipo, seguro espera seducir a mi hermanita con una sonrisa casual y unas cuantas palabras, pero no, esta vez no pasara, le dejare en claro su lugar.
Decidido camine hacia ellos bordeando la pileta, pase por un lado notando que no me veían ¿tan importante era ese tonto para mi hermana que no me note? Cuando estuve lo suficientemente cerca decidí hablar
- Raina…- ella giro su rostro, cuando me vio…sus ojos se abrieron en grande y borro su sonrisa, la vi ponerse de pie rápidamente
- Oppa ¿qué haces acá?
- Llevas más de una hora de retraso ¿te parece bien?-dije mirándola fijo- además… ¿Qué se supone que haces?
- Tranquilo- dijo una voz masculina que decidí ignorar- solo hablamos, no hay nada de qué preocuparse
- ¿no lo hay? Perdón, pero que mi hermanita este en la pileta después de hora hablando contigo es…motivo suficiente- dije poniendo mis brazos a mis lados y mirando al chico molesto
- Eres jinki ¿Eh? –el chico sonrió mostrando una dentadura perfecta, había algo en el que me molestaba, su rostro parecía el de un pequeño perro, o aun peor….¿un dinosaurio?
- ¿y vos sos?- solté con indiferencia
- Jong, soy kim jong hyun- solto sonriente
Estaba a punto de hablar pero algo me detuvo, el coloco sus brazos sobre el borde de la pileta y se alzo en el aire con la fuerza de los mismos, vi sus antebrazos flexionarse y luego endurecerse, el agua caía por su cuerpo mientras se levantaba majestuosamente. Con un simple movimiento coloco su pierna a un lado y trepo la piscina saliendo de esta. Me quede quieto observándolo, el llevaba solo un pequeño traje y estaba con el torso descubierto. No puedo negarlo, tiene un cuerpo increíble, su estomago perfectamente marcado, sus bíceps notorios y duros por donde el agua resbalaba descaradamente. Sus hombros y espalda eran mas anchos de lo que parecían y a pesar de su baja estatura (unos centímetros menos que yo) tenía un porte excitante que me obnubilo por un momento. Cuando se acerco pude notar su rostro con mejor detalle, era atractivo, era malditamente atractivo y eso me irrito ¿Cómo podía esperar que mi hermana no caiga por él? El chico sonreía de una forma tan seductora que me hizo sentir mareado, su cabello castaño, su pequeña cintura, todo en el era excitante
<Un maldito dios>
Pensé y al instante borre ese pensamiento ¿Qué demonios pasaba conmigo? El pareció notarlo, porque su sonrisa se ensancho. Puso su rostro de lado sin apartar la vista de mí
-es un placer- algo en su sonrisa no me gusto, no quiero tenerlo cerca de Raina y mucho menos de mí, eso no pasara…- jinki…
Tenía un muy mal presentimiento…