Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El mundo alterno de Yugi por Ryouka SmGa

[Reviews - 33]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Atención: Este fanfic ya había sido publicado con anterioridad por alguna autora que no recuerdo su seudónimo. Ahora que me animé a revivir este fanfic tan interesante pido al público respeto en caso de que alguno haya leido este fanfic con anterioridad.

Alacro que no me estoy robando la historia, la reescribo para compartirla a los lectores que probablemente no la hayan leido y estén interesados en seguir esta historia.

Advertecia: Esta historia es completamente ficticia, todo lo relacionado con la realidada, es mera coincidencia.

Los personajes de Yu-Gi-Oh no pe pertenecen, los derechos de utor son de Kazuki Takahashi.

La historia no es creación de Ryouka SmGa. Derechos de autor "a quien corresponda"

Notas del capitulo:

Después de haber finalizado el viaje hacia las memorias del faraón, él debe tener la ceremonia del último duelo contra Yugi y en todo caso perderlo para que pueda descansar en paz. La vida que será ahora sin que estén juntos; pero el destino lo llevará a una vida donde Atemu se encuentra cerca de él, pero nada es como parece. El Instituto de la cuidad dominó formará parte de muchas anécdotas. Llevando al menor de ojos amatistas a ver el otro lado de su propia realidad

Pov’s Yugi.

El faraón está parado frente a mí, los dioses egipcios ya fueron derrotados y mi victoria está asegurada, pero no me siento feliz,  porque él se irá. Los momentos que pasamos fueron un total enigma hasta ahora. Solo quería tener este duelo contra él por ayudar pero; no estoy nada complacido, es obvio que, mi mejor amigo, desaparecerá en cuanto yo ataque y eso será en este turno, él ya no tiene pensado seguir defendiéndose o ¿será que él está decidiendo dejarme? Sabía que tarde o temprano esto pasaría, pero no quiero, nunca quise ni aceptaré jamás. Finalmente llegó mi turno, mis lágrimas impiden que pueda ver su rostro un poco más tenue, Tea, Joey, Tristán, los hermanos Ishtar y Kaiba me observaban y de repente veían al Faraón. Bakura, en cambio, aclamaba para que ahora derrotase al Faraón, sus ánimos me ayudaron a motivarme a mí mismo, pero a la vez me hirieron, porque este ya sería nuestro final, un final que nunca aceptaré.

Fin del Pov’s

Con un último ataque, Yuugi acabó con los puntos de vida del Faraón y así arrebatarle el título del Rey de los juegos. Todos sus amigos que convivieron cercanamente a él soltaron en llanto. Yugi se arrodilló en cuanto el juego había finalizado. Atemu caminó hacia él muy orgulloso y lo alzó.-La victoria es tuya compañero- Dijo sutilmente antes de que Yugi soltara su llanto fuertemente. Luego vio a sus amigos y les sonrió sinceramente, de un momento a otro miró la antigua piedra donde el ojo de Horus llegó a separar esas dos almas dentro del cuerpo de Yugi.-Soy el antiguo faraón que encerró los poderes de la oscuridad, mi padre Aknamkanon, mi nombre es Atemu.

En ese momento la puerta donde el ojo do Horus se habría lentamente dejando escapar una poderosa luz, deteniendo a Atemu, tea y los demás sufren y se quejan por la partida del tricolor mayor. Era inevitable hablar fuerte al decirle lo importante de su amistad al antiguo faraón, los momentos que pasaron juntos y a penas sentían que se conocían a pesar de llevar varios años sabiendo de su existencia. Finalmente Joey terminó consolándose a sí mismo y a los demás con unas frases que ni Seto Kaiba imaginara fueran tan nobles. Así Yugi finalizó despidiéndose del faraón, sus miradas se intrigaron. Era más que evidente que ninguno quería separarse, ya se consideraban como hermanos. Al cruzar al otro lado, el resplandor aumentó, cegando a los presentes. Fue muy extraño porque Yugi, cuando abrió los ojos, se dio cuenta que no estaba en aquel antiguo espacio egipcio, se encontraba en una habitación blanca, con un ruido como de aparatos de hospital y una ventana abierta revoloteaba las persianas que estaban cerca de un sofá verde al que miró fijamente. Alguien entra a la habitación. Por la reacción de Yugi, reconocía muy bien a esa persona, aunque curiosamente le dolía todo el cuerpo, casi estaba inmóvil. La persona que había entrado era Tea, vestida de enfermera. Luego de monitorear un poco los aparatos, se da cuenta que el paciente estaba despierto, abrió los ojos de la sorpresa y salió apresurada de ahí, asustó a Yugi. Luego, ella regresó con un hombre de bata. Igual Yugi sabía de quien se trataba.

-Pegasus, ¿qué estás haciendo aquí?-El doctor se sorprendió al principio porque el chico lo había reconocido- ¿qué? ¿cómo sabes mi?... ah debiste haberlo leído en mi bata- revisó los censores de las máquinas a las que el menor estaba atado a la cama. Luego se sentó en la esquina de la cama y sacó una libretita de su bolsillo de su bata y llevó a cabo ciertas preguntas.- Bueno, Joven Mutou, ¿cómo se siente?, ¿le duele algo? ¿siente alguna sensación que lo haga sentir raro?

Yugi negó rotundamente a todas las preguntas, el doctor terminó por checar de pies a cabeza al menor, cuando se volvió a recostar en la cama que lo conectaba a algunas máquinas aún, preguntó los hechos y el por qué estaba ahí. El doctor lo miró un poco desconcertado y triste

- Bueno, antes que nada, le hemos avisado a tus padres que has despertado. La historia está así, hace tres años, tú y tus padres iban a mudarse a esta ciudad, a Ciudad Dominó, pero el viaje fue un desastre, hubo un accidente en el que tú saliste muy lastimado. Yuugi no comprendía y no recordaba absolutamente nada. El doctor preguntó de nuevo las anteriores preguntas obteniendo la misma respuesta, hasta que se le ocurrió algo distinto.- ¿recuerdas algo específicamente de lo que has vivido?- Yugi respondió.

 

-Sí, lo que recuerdo es que yo, jugaba juegos de cartas, duelo de monstruos, era el mejor, de hecho yo era el rey, y tenía un artículo mágico, que me concedió un deseo, quería un verdadero amigo, y convivimos de lo más espectacular, pero… él se tenía que ir, y con mi ayuda debía lograrlo, él ya no pertenecía a nuestro mundo y se marchó. Pegasus apuntó todo en la libreta y al final determinó que su sueño lo había hecho caer en una realidad inexistente, él, reprochó que todo eso era real, pero al ver de nuevo a su alrededor volvía su confusión.

-Joven Mutou, bueno, ¿puedo llamarte Yuugi?-El chico asintió y terminó de escuchar al doctor-Todo lo que viviste en el dichoso duelo de Monstruos, no fue real, es como si estuvieras soñando en otra vida, tus recuerdos se suprimieron a eso, solo un sueño. Yuugi no quería creer lo que el adulto decía, pero ¿qué más da? A lo mejor odo sí era producto de un sueño casi eterno. El doctor se levantó y le sonrió  Yuugi para que se tranquilizara.- No te preocupes, ya estás de regreso, tus padres estarán muy felices de verte.-Le alborota el cabello y sale de la habitación. Yuugi estaba acomodado en la cama recordando cada duelo que había tenido con su compañero aunque aún no tragaba la idea de que eso solo fue un sueño. Más tarde, la enfermera que estaba al pendiente de Yuugi, entró con una charola con alimentos, en seguida se sonríen mutuamente. La enfermera Tea había dejado la charola en las piernas del chico.

 

-Gracias Tea, se ve delicioso- Tomó el cubierto que estaba a un lado de un plato con un poco de guisado y a un lado había una galleta de avena y un cartoncito de jugo.

La chica se impresionó, jamás había hablado con el muchacho en cama y ahora él actúa como si la conociera de hace muchos años.-¿cómo es que sabes mi nombre?...-Yuugi confundido no respondió y tomó su jugo alzando una ceja, luego Tea se respondió a sí misma-Oh! El doctor te debió haber dado mi nombre.- Yuugi ya no quiso meterse en tantos líos pero aún tenía algunas dudas qué aclarar. Empezando el por qué Tea estaba ahí con él.-Bueno pues a mí me tocó cuidarte, y desde entonces cada día he estado al pendiente de ti. De hecho hace un rato que llamé a tus padres para que vinieran a verte- Yuugi comprendió y agradeció. Terminó de comer y Tea alzó la charola de sus piernas, se retiró y Yuugi volvió a acomodarse en lo que esperaba a sus padres. No pasó mucho tiempo cuando se oye a varias personas caminar por el pasillo muy apresuradas. En seguida, se abrió la puerta de la habitación del hospital. Entraron dos adultos. Una mujer de cabello Castaño y corto y un hombre con la misa forma de cabello que Yuugi. Ambos personajes comenzaron a sollozar y se acercaron lentamente a su pequeño hijo.

 

Papá de Yuugi: Querido hijo, estás bien, ya estás bien.-Se limpia las lágrimas que estaban corriendo por su cara.

Mamá de Yuugi: mi niño, mi hijo qué bueno que ya despertaste. No sabes qué tan preocupados nos tenías.

PY: sí, y todo es mi culpa, al no tener cuidado al conducir, todo por andar carrereando al otro automóvil. Si hubiese sido más consciente tú no estarías aquí.- Los padres de Yuugi estaban arrodillados en frente de la cama acariciando a su hijo como la joya más cara del mundo. Yuugi sentía pena, y empático, respondió.

-Tranquilo papá, ya estoy bien.

MY: no te culpes por todo, lo importante es que Yuugi ya está con nosotros y espero que ya estemos juntos de nuevo. Tu abuelo va a estar muy feliz de saber la Buena nueva.- Ambos adultos abrazaron a Yuugi y él cálidamente recibe el abrazo.

Pasaron unos cuantos días para que a Yuugi lo dieran de alta, en ese transcurso de tiempo, Su padre había arreglado una cita con el director de la Institución escolar de Cuidad Dominó y le explicó la situación del muchacho y la necesidad que tenía para meterlo a la escuela para recuperar sus estudios perdidos.

Los padres de Yuugi lo llevaron a casa, a la casa que se mudaron cuando pasó el accidente de Yuugi. Su madre lo guio a su habitación, se veía muy emocionada por mostrarle su pequeño espacio. En la cama estaba un uniforme escolar de color azul u una corbata color azul. El chico se probó el uniforme, estaba hecho a su medida. Bajó de su habitación y les mostró a sus padres. Ambos se sentían muy felices por ver ahora a su hijo en casa. Cenaron y después de agradecer por la comida Yuugi subió a su habitación. Se encerró y caminó hasta su cama hasta tumbarse, las lágrimas no lo dejaron un buen rato. El hecho era que todo lo que pasó con el faraón no existió jamás, su hermano mayor, su compañero de aventuras. Solo era un producto de su imaginación. Inevitablemente recordó cada duelo que tuvieron juntos. Desde el duelo con Pegasus en el reino de los duelistas hasta el torneo que Seto Kaiba había organizado. Poco a poco Yuugi se fue quedando dormido, con la ilusión de volver a ver al faraón; pero esta vez fue imposible

A la mañana siguiente Yuugi se había colocado su uniforme y su padre le ayudaba a empacar algunas cosas. Os esfuerzos de Yuugi por mantenerse de pie fueron inútiles. Al bajar de las escaleras, su cabeza era una bomba, le punzaba y el dolor intolerable. Su padre lo cargó y lo recostó en el sillón y su mamá levó el medicamento que el Dr. Pegasus había enviado para cualquier dolor que el pequeño tuviera.

Los árboles se veían majestuosos al pasar el camino en automóvil. Algunos cerezos caían con el viento de la mañana y otras hojas les hacían compañía- fue muy extraño que las mismas personas que estuvieron en aquel sueño, en la “vida real” también se hayan encontrado a mi lado- Estaban llegando a la entrada del instituto. Su padre bajó su maleta y el director de la escuela les dio la bienvenida. Luego les dio un pequeño recorrido por toda la escuela, mostrándole las habitaciones en donde los jóvenes se quedaban, el gimnasio, los laboratorios y de más. Luego los llevó a su oficina y los acomodó en lo que se le asignaba una habitación al joven Yuugi.

-Espero que la escuela haya sido de su agrado y que tú puedas sentirte cómodo aquí, Yuugi. Tu habitación es la 201- El director le entrega la llave a su padre y les sonríe a ambos- Cualquier cosa, ya sabes dónde encontrarme.- los escolta hasta la habitación de Yuugi. Su padre y Yuugi, estaban impresionado por las instalaciones. En cuanto el director se marcha el padre de Yuugi lo abrazó fuerte y le sonríe.

 

-Hijo, quiero que estés listo para esto. Prepárate todo lo que tengas que prepárate, tu madre y yo te apoyaremos.-besó la frente de su hijo y sacudió su cabello, en la orilla de la puerta termino de despedirse- Te veremos dentro de tres meses.-salió de la habitación y en cuanto sale chocó con un chico de pelo blanco.

-Disculpe, ¿Sr. Mutou?- el hombre asintió extrañado.

 

-Soy Ryou Ishtar, el director me ha mandado llamar para que esté acompañando a su hijo por el resto del día ya que estará en mi grado.

 

-Muy bien joven Ishtar, adelante- sonríe algo confiado y se marcha.-Ryou tocó en la habitación y entra exaltado.

 

-Toc toc… ¿Mutou?, estás ahí…-Yuugi se da la media vuelta y sonríe cuando ve definidamente la silueta del chico se sorprende y queda helado.-Hola, ¿cómo estás?, Bienvenido, mi nombre es Ishtar Ryou y bueno te acompañaré el resto del día, ya que has llegado un poco tarde y has perdido algunas clases.

 

-Está, está bien, gracias Ishtar- Yuugi se confundió porque creía que el apellido del albino era otro-pero por favor, llámame Yuugi- sonríe y deja sus cosas como estaban cuando llegó. Salieron de la habitación y Ryou se tomó la molestia de detallar más el recorrido para Yuugi, ambos platicaban tranquilamente.

Ya era bastante tarde y a Ryou le comenzó a dar hambre entonces le preguntó al chico nuevo si deseaba que fueran a comer, el tricolor asintió y en ese momento se encontraron con Malik. Venía caminando hacia ellos y los saludaba.

-Hey, primo, hasta que te encuentro, ¿estás con el chico nuevo?...

 

-Sí, déjame presentarte a Mutou Yuugi, parece que le gusta que le digan nada más Yuugi.- Yuugi sonrió por la pequeña presentación de Ryou. Aunque estaba aún más confundido por haber escuchado que Ryou y Malik eran primos.

 Caminaron hasta la cafetería y ordenaron tres hamburguesas con papas fritas y unos jugos de manzana. Se sentaron cerca de una ventana donde daba una corriente de aire muy agradable.

 

-Entonces... ¿Son primos?- Yuugi da el primer paso para hacer la conversación.

 

-Así es, no somos familia cercana que digamos pero sí, somos primos. Nos conocemos desde que éramos bebés y siempre hemos estado juntos.-Malik responde a la pregunta inicial

 

-Oh! Qué interesante ¿siempre juntos?

 

-Sí, bueno, así hemos vivido, y bien ¿qué me puedes decir de ti Yuugi?-Ryou tomo unos sorbos de jugo y lo veía fijamente con sus ojos color capuchino.

 

-Etto, amm bueno yo hace unos años, me mudé aquí pero tuve unos problemas de salud y no había podido asistir a clases hasta ahora, de hecho aún no puedo hacer muchas cosas.

 

-Vaya, espero que mejores- Malik da un mordisco a su hamburguesa, en seguida un rubio de ojos color miel se les acercaba.

 

-¿qué hay chicos?-El rubio tomó unas cuantas papas fritas de la bandeja de Ryou- ¿Quién es él?- sonriente y con un poco de comida dentro de su boca se sentó a un lado de Yuugi.

 

-Hola Joey- Yuugi saludó, en seguida se tapó la boca y sonrojo, Ryou y Malik se miraron mutuamente y sorprendidos miraron después al tricolor. Joey estaba igual.

 

-¿EH? ¿cómo es que sabes mi nombre?...

 

-Etto, es que lo debí haber.. amm sospechado porque amm tuve un sueño  y tú apareciste en él. Yuugi estaba con la mirada agachada mientras escuchaba a Joey alagando el sueño de lo impresionado que estaba.

 

-Sorprendente, ¡qué curioso! Y ¿Quién más estaba en tu sueño?

-Bueno..- Yuugi alzó el rostro y lo miró apenado, con el rabillo de sus ojos amatistas logró ver algo que nunca creyó que vería de nuevo. Atemu había entrado a la cafetería, estaba con sus manos dentro de los bolsillos del pantalón, el corazón de Yuugi se detuvo un segundo. Después de él entraron juntos Yami Bakura y Yai Marik intimidando a los alumnos que estaban estorbándoles.- ¿qué están haciendo ellos aquí?

 

Ryou y Malik voltearon, y cuando vieron lo que Yuugi había visto voltearon preocupados. Joey tampoco volteó con mucho agrado.

 

-No Yuugi, no te arriesgues, no debes mirar así a esos tres, son la peor escoria de  esta escuela…

 

-¿qué? ¿a qué te refieres con eso Joey?- Yuugi confundido preguntó. En seguida, salió un chico de pelo castaño y ojos azules.

-Ellos son los chicos de tercero, si te das cuenta, Yuugi, hay distintos colores de corbatas en los uniformes, el de nosotros es azul cielo porque somos de primer grado, los de segundo grado tienen una de color verde azulada, los de tercero tienen corbatas azul marino y los de cuarto grado son los de la corbata violeta. Y ellos son Atemu, a él le llaman Yami, luego el que es parecido a mi es Bakura y el que se parece a Malik es Marik y el chico más alto es Seto y son de la familia Kaiba, todos son primos y son bastante poderosos, pero son de lo peor, lastiman a los estudiantes, son despiadados y tienen una muy mala reputación.- Ryou detiene su relato porque parecía que Yuugi estaba muy asustado

-No puedo creerlo- Yuugi miró sorprendido al albino y al moreno.-No creo que Atemu, él no es malo….

-Realmente no lo conoces Yuugi…-Malik sorbió un poco de jugo. Yuugi agachó la mirada y ya no comió lo que le quedaba.

 

-Bueno ¿te acabarás eso?-Yuugi negó con la cabeza y Joey tomó la bandeja y comió feliz el trozo de hamburguesa y el resto de las papas. Más tarde, ya siendo de noche, llegando a su habitación, se había despedido de sus “nuevos” amigos y caminó por el pasillo hasta llegar a su pieza, cuando iba a entrar se da cuenta que su vecino era Atemu, intentando abrir su puerta ignoró al menor, hasta qué él hizo contacto con él.

 

-¡Hola, compañero!, soy amm bueno es raro, pero... Soy Mutou Yuugi y espero que seamos buenos amigos, estoy en la habitación de junto- sonríe y extiende su mano para saludar al mayor.

 

-¿Qué? No me molestes enano, lárgate, fastidioso chico nuevo…- entró a su habitación y se encerró, Yuugi entristeció mucho, el Atemu que él había conocido en su sueños solo estarían es sus recuerdos nada más. Entró a su habitación y se encerró, se recostó y lentamente se fue quedando dormido.

Notas finales:

Queridísima audiencia, espero que esta historia haya sido de su agrado, y en caso de que la hayan leído con anterioridad pido que comentes este primer capítulo. ¿quieres que lo continúe?

Bueno, a toda la udiencia le deseo una linda mañana, tadre o noche, ya será dependiendo le la hora en la que me estén leyendo!!

Saludos en donde quiera que estén!!!!!

Pd: en las notas del fanfic dejo todas las aclaraciones de este fanfic.

SmGa


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).