Era la media noche y un par de cuerpos perlados en sudor se entregaban a su pasión, en la recamara del futuro consorte del rey Saralegui un par de amantes se entregaban a su amor, los que habitaban aquel palacio se habían percatado de tal situación, todos estaban enterados de la situación de esta pareja, y compartían y aprobaban su idilio, un rubio de ojos esmeralda se fundía ente las candentes caricias de un azabache que no dejaba de besarle y poseerle con desespero y angustiosa necesidad por ser completamente uno solo.
Wolfram
Ahhh…ahhh… Yuuri, Yuuri… ahhh…ahhh mas… quiero más… ahhh…ahhh Ohhh querido mío ahhh… ahhh… te amo, te amo
Yuuri
Mi amado demonio de fuego ahhh… eres la razón de mi vida, te amo… te amo ahhhmmm ammmm… ahhh… siempre será así, nunca… Nunca existirá quien te saque de mi corazón vida mía…ahhhmmm….ahhh…Ohh…Wolf, Wolf… Wolfram ahhhmmm.
Los amantes se entregaban a su idilio con loca desesperación, los besos cargados de pasión y abuso en los colmillos; sangrando sus labios inferiores, las profundas y potentes estocadas que hacían gemir de dolor y placer al rubio junto con aquellas caricias, las uñas del oji esmeralda arañando la espalda del azabache , mientras este lo marcaba por todas partes con sus labios creando un sinfín de moretones y chupetones, la blanca piel de aquel demonio de fuego era reclamando como del azabache, nunca nadie más podría tomar a este bello ser, solo era exclusivo del príncipe Shibuya.
Wolfram
Ahhh…ahhh… me… me corro Yuuri…ahhh….ahhh
Yuuri
Wolfram….ahhhmmm Wolfram, te amo…ahhhmmm…
Ambos amantes culminan su éxtasis llegando juntos al clímax, el moreno sale con delicadeza del cuerpo del rubio quien esta jadeante tratando de acompasar sus respiraciones, Shibuya se abraza a su bello demonio y le besa el hombro mientras lo llega a su cuerpo, esta tanto o más agitado que el rubio, era la media noche y aquel par se habían entregado como ya era su costumbre desde hacía años, mas esta vez fue diferente, en esta ocasión ninguno de los dos quería separarse ni un solo milímetro el uno del otro, querían permanecer juntos y que no llegara el día de mañana.
Wolfram
Entonces… ¿así es como termina esto?
Yuuri
¡¡No, no, no, no!! No lo repitas mi amor, jamás, jamás terminara nuestro amor
Wolfram
¿¿¡¡Cómo puedes estar tan seguro!!?? Aun y a sabiendas de que mañana ya no me pertenecerás nunca más
Yuuri
¡¡Eso jamás!! Siempre seré tuyo, y tú solo serás mío, nadie, nadie puede separarnos
Wolfram
Estúpido como puedes decir eso si mañana te casas con él
Yuuri
Eso es solo porque no tengo opción, pero… yo a quien amo y siempre amare será a ti, a ti mi vida, solo a ti
Wolfram
No alarguemos mas esta agonía, mañana pertenecerás a él y no existe nada ni nadie que pueda impedirlo, así me lo digas, así me lo jures, tú te casas con ese aun sabiendo cuanto te amo, aun sintiendo este amor por mí, te casaras y eso lo decide todo.
Wolfram se levantaba del lado de Shibuya y empezaba a colocarse sus ropas dando por completo la espalda a Shibuya, quien se levantó al momento y se aferró a su cintura mientras recargaba su cabeza en su espalda, el rubio respiraba hondo para no empezar a llorar, era duro, era terriblemente doloroso decirle adiós a ese de quien siempre ha estado enamorado ese que desde que se conocieron se entregaron sus almas en una dulce sonrisa y un fuerte apretón de manos, ese que fue y será siempre su único amor.
Wolfram
¡¡Ya basta Yuuri!! Esto solo lo hace más difícil para los dos Yuu… ¿¿ ¡estas… estas llorando!??
Yuuri
Perdóname, perdóname mi amor, perdóname por ser egoísta y no querer dejarte nunca perdóname, pero es que te amo, te amo, no quiero, no quiero ni querré jamás a Sara, lo odio, lo odio, por obligar a mis padres a casarme con él, lo odio por alejarme de ti, no mi vida, sin ti me muero, no me dejes, no me dejes Wolfram, por favor, no me dejes
Wolfram
Yuuri… yo… también te amo, te amo, pero no hay nada que podamos hacer, si no te casas Saralegui se levantara en armas y destruirá el reino de Shin Makoku, no podemos contra su basto ejército, así seamos Mazoku no tenemos el poder, ni las fuerzas militares para enfrentarlo, después de su invasión hace 300 años del reino de Shimarron el grande fue reducida la milicia Mazoku y ahora somos minoría, no solo lo hacemos esto por ti, o por mí, debes hacerlo por el reino, por tus padres, por todos, tienes que casarte con Sara, aunque esto me parte el alama debes, tú debes contraer nupcias con aquel cretino.
Yuuri
Pero yo te amo a ti, a ti, y por una vez en mi vida quiero ser egoísta, quiero ser caprichoso, quiero aferrarme a lo único que de verdad me importa y eso es tu amor, no puedo, no quiero, no quiero que me dejes, te amo, Wolfram, te amo.
Wolfram y Yuuri sufrían por decisiones tomadas por los padres de azabache que en un momento de presión financiera y política tuvo que dar como esposo a su muy amado hijo al rey de la potentada nación de Shimarron el Grande, un joven de ojos miel que desde que conoció a Yuuri en los jardines del palacio Pacto de Sangre quedo embelesado por el alma pura y bondadosa de este y sin dudarlo ni un solo segundo y aprovechando el poderío del cual es dueño hostigo y obligo al padre de Yuuri a comprometerlo y darlo en matrimonio a este rey.
Yuuri
¡¡¡Ya sé que vamos hacer!! Ven mi vida vístete pronto
Wolfram
¿¿¡¡Que pretendes hacer Yuuri!!??
Yuuri
Ya lo veras mi amor, ahora date prisa y vístete
Yuuri se viste rápidamente y hace que su amante demonio se vista también, en eso Shibuya asoma su cabeza por la puerta de su habitación para que nadie los vea, aunque eso era algo innecesario, puesto quienes sabían de su romance habían ordenado dejar despejados los pasillos de palacio y solo se limitaran a vigilar las entradas y los alrededores de este, permitiendo así que Wolfram entrara a la recamara de Yuuri sin ningún problema, siempre había sido así desde niños, y eso seguía aun ya de jóvenes.
Yuuri toma de la mano a Wolfram y salen de la habitación, el azabache guía al rubio por los pasillos del palacio, sin saber este que es lo que pasa por la cabeza del príncipe Shibuya, entran a una enorme habitación que está plagada de tesoros, gemas preciosas, joyas exquisitas y armaduras espectaculares, Wolfram aún no comprende que hacen allí, mientras Shibuya empieza a rebuscar entre todas estas una pequeña cajita la abre y sonríe ampliamente mientras el oji verde esta recargado en la puerta de la gran habitación cruzado de manos contemplando a su ocurrente amante.
Wolfram
Yuuri, ¿Qué rábanos estamos haciendo en la recamara del tesoro?
Yuuri
Listo ya los tengo, ven mi vida, ya encontré lo que buscaba
Wolfram
¿Y ahora a dónde vamos?
Yuuri
¡¡Ya lo veas mi amor!!
Yuuri toma la mano de Wolfram y antes de salir le besa en los labios, correspondiendo a este el rubio se abrazaba al cuello del príncipe; quien le dedica una dulce sonrisa y le miraba con esos ojos tan negros y profundos que lo atrapaban noche a noche llevándolo al Eliseo con aquellas destellantes miradas.
Salen de la recamara del tesoro y pasan a hurtadillas por el salón del trono evadiendo a los escasos guardias que aun deambulan por palacio, un oji castaño logro ver a aquel para escabullirse por los pasillos, sonrió divertido al ver a ese par siempre juntos y cometiendo aquellos disparates que solo a ellos se les ocurría, decide seguirlos cuando su escolta personal y el hermano mayor del rubio se percataron también de la travesura de ese par, todos amaban a ese dúo y lo que más deseaban era que estuvieran por siempre juntos, más sabían que esa quizás sería su última noche por lo que les permitieron hacer lo que quisieran.
Yuuri lleva a Wolfram hasta el recinto sagrado donde se llevaría el día de mañana la ceremonia, y se desposarían el príncipe Shibuya y el rey Saralegui, los ojos de Wolfram se inundaron en lágrimas y un fuerte dolor le oprimió el pecho, él no quería estar en ese lugar y bruscamente se suelta de la mano de Shibuya, mas este lo atrapa una vez más entre su mano y lo lleva hasta el altar.
Yuuri
¡¡NÓ!! No huyas mi amor, quiero que estés aquí porque justamente es aquí frente al Shinou que eh de jurare mi amor eterno.
Wolfram
¡¡ ¿Qué dijiste Yuuri?!!
Yuuri
Mira mi amor, estas son las sortijas usadas por generaciones en nuestra dinastía, cuando se unen en matrimonio estos son los anillos que usaran mis padres cuando se casaron, mi madre me los regalo para cuando encontrara a esa persona y me uniera para siempre a ella, esa persona eres tú, y jamás dejare que sea de otra forma, aquí y ahora, juremos nuestro amor y desposémonos se mi esposo Wolfram, hagamos un juramento de amor eterno frente al Shinou.
Wolfram
¡¡Yuuri!! Pero y el compromiso de mañana… tú te debes casar…
Yuuri
¿No me amas Wolfram? ¿No deseas jurarme tu amor eterno?
Wolfram
¡¡¡Por supuesto que te amo!!!
Yuuri
Entonces hagámoslo, tal vez mañana me tenga que casar con ese idiota pero jamás lo llegare a amar, solo te amo a ti y por eso que esta noche juraremos nuestro amor eterno.
Murata
En ese caso hagamos las cosas como es debido Shibuya
Ambos amantes voltearon a donde aquel oji castaño que salía de detrás del altar vestido con su túnica ceremonial como sumo sacerdote del templo y detrás de este la Sacerdotisa del templo de Shinou, quien traía en manos un velo y un ramo de flores, para la pareja del príncipe. También ingresaron al recinto los hermanos mayores del rubio quien se quedó tanto o más sorprendido que Shibuya pues no pensó que también ellos estuvieran de acuerdo con todo ello, otra que también estaba allí fue la madre de Shibuya quien con lágrimas en los ojos aprobaba aquel acto de amor.
Murata
Bueno, veo que ya estamos todos, así que comencemos
Lady Chery
¡¡¡Momento!!! Mi querido hijo así no puede hacer esto, denme 5 minutos por favor
Wolfram
¡¡ ¿Hahaue, tú también?!!
Lady Chery
No todos los días se casa mi hijo en secreto con nuestro príncipe verdad, por supuesto que tengo que estar presente
Miko
Ven aquí hijo, déjame también acomodar tus ropas un poco, sé que esto es lo mejor para ti y el y se lo mucho que se aman es por eso que siempre voy a apoyarte mi vida, eres mi muy amado hijo y sé que mañana lo que harás será por amor a tu pueblo y a nosotros tus padres, es por eso que hoy en esta bella noche estoy dándote mi bendición para que te unas a quien tanto amas.
Yuuri
¡¡Mamá… muchas gracias te quiero!!
Después del pequeño y sorpresivo retraso por la llegada de los invitados especiales a aquel juramento de amor, el Sumo Sacerdote Murata Ken dio inicio a la ceremonia, invocando al espíritu del Shinou, junto a la bella sacerdotisa Urilke quien estaba tanto a más feliz por la pareja que a pesar de todo se amaban y deseaban dar sus botos ante el Shinou
Murata
Yo, el sumo sacerdote del templo del gran Shinou, protector y salvador de nuestro amado pueblo, hoy en esta noche doy fe y testigo del amor que estos dos jóvenes Mazoku se profesan, aceptando su juramento de amor como eterno y verdadero, uniendo su corazón en un solo latir, en un solo sentir, si hay alguien en esta sala que tenga algún impedimento por el que este emotivo juramento y entrega de amor no se realice … que se guarde sus comentarios o lo sacamos a patadas del resiento.
Por un momento y al escuchar aquello ultimo los amantes que estaban en el altar estuvieron tentados a soltar una enorme carcajada más por ser un momento solemne aguantaron sus impulsos por reír a todo pulmón, Wolfram con ayuda de su madre fue colocado un hermoso traje blanco con incrustaciones en cristales e hijos de oro que hacían juego junto a el bellísimo velo que la sacerdotisa le entregase con un ramo de hermosas rosas blancas. Yuuri como todo un príncipe y con ayuda de su madre que se imaginaba que algo así haría su hijo preparo todo con anticipación y le llevo un frac negro que resaltaba sus ya tan oscuros ojos y lo hacían lucir como todo un rey .
El consejero real estaba allí presente junto al hermano mayor de Wolfram el peli lila lloraba emocionado por tan bella muestra de amor y aun y a sabiendas de que el día de mañana se casaría con Saralegui para ellos la verdadera ceremonia nupcial se estaba llevando a cabo en esos precisos momentos.
Murata
Muy bien las sortijas por favor.
Murata pide a Yuuri las sortijas y las sumerge en una pileta de agua, los anillos son purificados por el Shinou, después de esto el sumo sacerdote se los hace entrega respectivamente a los amantes, Yuuri toma el que deberá colocar a su querido demonio y Wolf el que deberá darle a su amado Príncipe.
Wolfram
Esto… p-pero… ¿Qué digo?
Murata
No te preocupes por eso, di lo que sientes por Shibuya las palabras saldrán por si solas solo déjate guiar por tu corazón
Wolfram
B-Bueno…a… p-p-pues… yo…
Yuuri
Mi amor, lo are yo primero ¿está bien?
Eran evidentes los nervios y la emoción del momento que estaban mermando la confianza y entereza del rubio para no caer en las lágrimas, Shibuya ama tanto a su Demonio que odiaría verle llorar aunque estas fueran de mera felicidad, detesta verlo llorar por lo que el dirá su juramento para darle así un poco de tiempo a su amado y serene su corazón, además de que ya no puede esperar para profesarle su amor eterno a este Mazoku de bellas orbes esmeralda.
Yuuri toma entre sus manos las de su amado y les besa con adoración, las madres de ambos están a punto de llorar, sus ojitos están tipo “Remi” es decir cristalizados con las lágrimas contenidas, esperando el momento justo para empezar a llorar como magdalenas por el infinito amor que se tienen sus mutuos hijos.
Wolfram se siente emocionado hasta las lágrimas no puede evitar derramar una que otra lagrimilla cayendo justo en el anillo que Shibuya introducía en su dedo mientras le dedicaba una mirada llena de amor y empezaba con su juramento
Yuuri
Yo, El Príncipe Yuuri Shibuya, futuro Vigésimo Séptimo Maou, en esta noche juro ante el Shinou, ante el sumo Sacerdote y todos los presentes que se reunieron aquí, te amo, te amo con todo mi corazón, mi mente y mi alma, Juro hacerte infinitamente feliz, ser tu remanso de paz en aquellos días difíciles, tu refugio y abrigo en los momentos de desolación, te juro ser tu escudo para protegerte de cualquier mal, tu espada para defenderte ante todo el que se interponga a nuestro amor, ser ese manantial del cual sesíes aquella necesidad por ser amado, ser todo para ti pues tú lo eres todo para mí, en esta noche aquí juro serte fiel y amarte solo a ti, mi corazón ya no es mío pues te pertenece, mi alma habita en su alama y mi mente solo puede contemplar una vida eterna solo a tu lado, te amo y juro que siempre y por siempre será así. Te amo Wolfram Von Bielefeld.
Wolfram está que se muere de la emoción, está temblando y se muerde los labios para no llorar más esto es inútil pues ríos de cristalinas lagrimas emergían de sus ojos, Yuuri no puede evitar tomar la barbilla de su amado demonio y besarle, en eso un golpecito en su cabeza lo hace reaccionar, voltea a ver al causante de su molestia; Murata Ken sumo Sacerdote le dice con el dedito que no, por lo que Wolf ríe un poquito calmando sus emociones.
Wolfram toma el anillo que es para Yuuri y le da un beso y lo coloca en la mano de su querido príncipe, está nervioso y tembloroso no sabe que decir cuando le besa rápido para tomar valor y hacer pues así su juramento.
Yuuri
¿Y por qué a él no le corriges?
Le recrimina en voz baja a Murata este le mira y le da otro zape y le contesta
Ken
Por qué él es el novio y cállese, soy ahora el sumo sacerdote y yo sabré a quien corrijo
Wolfram vuelve a reír un poquito al ver aquella escena mientras sostenía con fuerza la mano de Yuuri entre sus manos y mirándole fijamente a los ojos a su azabache inicia así con su juramento
Wolfram
Yo, Lord Wolfram Von Bielefeld, orgulloso Mazoku, hijo de la casa Bielefeld doy aquí ante todos los presentes y en este santo recinto y ante mi ser amado mi juramento, Juro ante el Shinou amarte a ti Yuuri Shibuya por el resto de mi vida y si hay otra más allá de esta, también en esa te he de amar, yo he nacido en este mundo con el único propósito de conocerte y entregarte mi corazón, mi alma, mi mente, todo mi ser, solo tú eres el dueño absoluto de mis días y mis noches, de mis pensamientos y sentimientos.
Jamás habrá alguien que logre arrancarme del corazón este inmenso y absoluto amor asía ti, así pasara el tiempo y aun y en contra de ti o de mí, siempre te seguiré amando, aun cuando este amor me condene, no importando el suplicio que deba pagar por tal osadía, no importando que penurias tenga que enfrentar por defender mi amor, juro que te amare, seré por ti y para ti, tu escudo y tu espada, tu más fiel soldado y el más fiero guardián, seré tu amante, tu amigo, tu cómplice y por qué no tu verdugo si así me lo pides, seré todo para ti pues tu eres todo para mí, Juro ante Shinou que no habrá nada que nos separe aun y aunque el día de mañana seas arrebatado de mi lado siempre te amare.
Estas últimas palabras llenaron de dolor y a la vez de júbilo al azabache quien al terminar Wolfram su juramento lo estrecho entre sus brazos, en eso; de aquella pileta de agua clara un resplandor se hace presente y en los anillos un grabado se marca donde se lee en escritura antigua “ estos son los que yo amo” y después sus nombres en el de Yuuri se graba el nombre de Wolfram y en el de este el de Shibuya, ambos amantes sonríen con alegría el Shinou ha dado su aprobación a su enlace y mas no obstante este se hace presente impactando a todos allí.
Urilke
Shinou Heika…
Shinou baja hasta donde aquel par y tomando sus manos entre las suyas el mismo bendice su unión.
Shinou
Yo Shinou, reconozco como único esposo a Yuuri Shibuya para mi amado descendiente, declaro esta unión como verdadera. Los que hoy se unen ante mi nadie les ha de separar, Shibuya Yuuri puedes besar a mi amado descendiente yo los declaro esposos.
Yuuri y Wolfram están que no se lo acaban de creer, más la dicha que sienten es infinita y se entregan a un beso apasionado y cargado de amor, Shinou sonríe y regresa a su pedestal desvaneciéndose en un rayo azul, mientras Murata se ajustaba sus lentes y sonreía
Murata
Así que no te aguantaste las ganas y decidiste aparecer, sigues siendo un criajo Shinou Hehehehe
Urilke
Príncipe Yuuri, Lord Bielefeld, el Shinou ha sido quien ha unido sus vidas y los acepta como esposos, no existe en nuestra fe ley más absoluta que la del Shinou y si él ha dicho que los considera esposos entonces, el acto de mañana deberá ser cancelado
Yuuri y Wolfram se miran con alegría más saben que eso no lo pueden hacer, Yuuri refugia entre sus brazos a su ahora esposo Wolfram, mientras idean un plan para poder evitar aquella boda o las represalias en contras de Shin Makoku.
Gwendal
No podemos hacer tal cosa, el futuro de Shin Makoku aun y aunque Shinou Heika los reconozca como esposos Su alteza debe casarse con el Rey Saralegui.
Wolfram
Es verdad, este juramento era entre Yuuri y yo, no tiene por qué afectar nuestro amor el próspero futuro de Shin Makoku, aun y si esto represente que tengamos que sacrificar nuestra unión
Yuuri
Pero Wolfram, el Shinou no dará su bendición a ningún otro enlace que al nuestro, no puedo, ni quiero contraer nupcias con Saralegui.
Wolfram
Pero es tu deber para con tu pueblo, entiende lo.
Yuuri
No, No, No, yo solo te amo a ti y no acepto este compromiso con Saralegui
En eso todos bajan la cabeza pensativos cuando en eso hablan las madres de ambos esposos
Lady Chery
Es verdad, Yuuri debe casarse pero… podemos hacer lo mismo que Shinou Heika, solo reconocer como su esposo a Wolfram
Miko
Además, la boda de mañana no cuanta, pues en Shin Makoku existen tradiciones que no se pueden romper, por lo que, tu mi querido hijo no puedes desposarte de nadie más, pues Wolf-chan ahora es tu esposo y no existe nada que pueda disolver una unión bendecida por el Shinou
Wolfram
¡¡¡Pero Hahaue!!! Si Yuuri y yo damos la noticia el rey Saralegui podría…
Lady Chery
Exacto hijo mío, su unión será un secreto, al igual que será un secreto el que la boda de mañana será una farsa
Miko
Sip, será actuada, solo nosotros aquí presentes sabemos la verdad y mientras esto siga así el futuro del reino estará a salvo ¿o acaso eso no es lo que pensabas Yuuri?
Yuuri baja la cabeza, en efecto eso era. Él pensaba convertir a Wolfram en su esposo en secreto y engañar a Saralegui con una falsa boda por el bien de su reino. Wolfram le mira enternecido y feliz de que él sea su único amor y haría cualquier cosa porque siempre sea así, hasta el engañar a un rey tan poderoso y peligroso como Saralegui. Todos en el recinto quedaron de común acuerdo que el día de mañana se haría una falsa boda y que el único esposo de Yuuri era Wolfram, al igual que para Wolfram el único seria Yuuri.
Después de esto la pareja real salió del recinto de Shinou y se encontraron con una grata sorpresa, todos los leales soldados de palacio al igual que las doncellas y mucamas del reino hicieron un pequeño banquete para celebrar sus nupcias, al parecer y después de todo, todos en palacio ya sabían que Yuuri y Wolfram se amaban por lo que agradecieron el detalle y celebraron con todos su unión, para Wolfram tanto como para Yuuri esto resultaba ser verdaderamente un sueño del que no quisieran despertar, no era la fastuoso boda que hubiera querido darle el príncipe Mazoku a su amado, pero si una muy feliz y rodeado de sus más fieles y leales amigos, estuvieron celebrando hasta las 5 de la mañana, puesto que a pocas horas se llevaría a cabo la representación de aquella farsa; por lo que todos aun y en contra de su voluntad se despidieron de los recién casados y se dedicaron a preparar todo para la supuesta boda del rey Saralegui con el príncipe Shibuya.
Todo fue dispuesto como debía ser, todo perfecto para aquella puesta en escena que sería la actuación más difícil de un príncipe y el espectáculo más doloroso para un leal y orgulloso Mazoku de fuego, al ver como su amado era arrebatado de sus brazos por aquel de ojos miel.
Yuuri y Wolfram se despidieron y se alistaron para aquel momento tan doloroso, no sin antes repetir aquel juramento de amarse por siempre y para siempre.
Wolfram
Amor, se fuerte mi vida, esto es por nuestra nación mi cielo, estaré aquí para apoyarte amor
Yuuri
Wolfram, mi vida, no quisiera que esto pasara, pero ya no hay vuelta de hoja verdad… mi amor… y si el…
Wolfram
Me temo que deberás hacerlo
Yuuri
¡¡Pero vida!!
Wolfram
Lo sé, pero es necesario, al menos una sola vez.
Yuuri
No quiero, no quiero que me toquen otras manos que no sean las tuyas, que me besen otros labios que no sean los vuestros, solo deseo tus caricias y tus besos, tuyos y de nadie mas
Wolfram
Mi amor, será el último sacrificio por nuestro reino después de esto no deberás acceder a ello si no lo deseas, sé que será difícil no solo para ti también para mí, odio tener que compartirte con alguien más, que te toquen, que te amen, no lo soporto, si por mi fuera lo carbonizaba en ese momento
Yuuri
Si, Si, quémale mi vida destrúyele y redúcele a cenizas, no quiero, no quiero casarme con el
Wolfram
Tonto, vidita mía pero si no te casaras con él, ¿Qué no eres ya mi esposo? Solo a mí me pertenecerás, y solo mi esposo serás, nadie más podrá nunca separarnos ¿recuerdas amor?
Yuuri se aferraba a la cintura de su demonio de fuego, mientras gruesas lágrimas caían en el hombro del rubio, Shibuya no amaba a Saralegui y aun y aunque todo fuera una farsa seguía siendo igual de doloroso.
El Rey Saralegui hacia su entrada al santo recinto, donde el sumo sacerdote los esperaba, Yuuri era guiado al matadero según el por su Padre, para ser entregado al monarca pues así lo estipulo, tomando el papel de consorte del rey Saralegui.
El Oji miel estaba frente al altar esperando ansioso por su llegada, mientras a un par de pasos de este un rubio de ojos esmeralda estaba vestido con su uniforme de gala cual digno soldado, Yuuri le dedica una leve sonrisa que es confundida por el Rey como que si fuese dirigida asía el, el rey le sonríe y Yuuri gira su rostro a un lado, el padre de este piensa que su hijo está nervioso, por lo que le toma con fuerza la mano y lo guía asía el altar
Wolfram está que se muere por dentro, es obvio para todos los presentes que el noble Mazoku está que quiere calcinar al Rey Saralegui, más por el bien de Shin Makoku debe aguantar y reprimir esos instintos pirómanos.