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Nuevo comienzo por Lour-neko

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Notas del capitulo:

Espero que les guste!!! (lo eh vuelto a resubir)

NUEVO COMIENZO: DESPUES DE LAS BATALLAS
Hacia menos 5 semanas luego de la batalla en la primera guerra santa (next dimensión) los santos de bronce ya recuperados y salidos del hospital regresaban a la mansión kido, con excepción de Hyoga quien partió a Siberia unos días a visitar la tumba de su madre, en tanto Seiya volvió al cuarto que ocupa en el orfanato, aunque de vez en cuando vuelve a la mansión para no perderse de nada.
No faltaba mucho para san Valentín, el santo de Pegaso y Dragón tenían planes con Saori y Shunrei respectivamente, Cisne venia planeando ese día desde hace mucho, el día en que le diría a Shun lo que sentía, por otro lado Andrómeda no tenía ningún plan en mente mas que pensar en donde se encontraría su hermano.
El penúltimo día había empezado con un Shun algo preocupado, ya que su mejor amigo Hyoga le había dicho que regresaría el 12 de febrero a las 6:30 a.m. y el joven santo puntualmente puso su alarma a las 6:00 así tenia tiempo de levantarse, vestirse y preparar algo para su amigo, ya que luego de su viaje estaría cansado; eran las 6:42 y no había señales de Hyoga.
Shun espero, mientras que hacia lo posible para que el desayuno no se enfriara. Pasaron los minutos y de repente la puerta se abrió, el joven santo había caído dormido, pero al escuchar el ruido de la puerta y un par de pasos se levanto de repente. -¡Hola Hyoga! –Dice con una sonrisa
-Hola Shun ¿Qué haces levantado a esta hora?
-Te estuve esperando
-Lo siento, se acumulo el trafico en el puente
-¡ah! Debes tener hambre, ¿quieres desayunar?- le pregunta algo adormilado
-Esta bien
Los dos caballeros se dirigieron al comedor que estaba pasando un pequeño pasillo, Andrómeda había preparado café, tostadas, mermelada y algunas facturas
-Shun, no debiste haberte molestado- le dijo algo culpable el Cisne, por haberlo hecho esperar tanto -No importa, recién llegas y seguro estas cansado- le responde alegre
-y ¿Qué paso con Shiryu y Seiya?- pregunta Hyoga mientras se sienta frente a Shun
-Shiryu está durmiendo y Seiya, en el orfanato, tal vez venga a almorzar, por cierto ¿Cómo estuvo tu viaje?- dice mientras agarra su taza -Bien, sin contar que estuve como media hora sentado que ya no siento las piernas
-jajajaja ya es muy raro para nosotros sentarnos a descansar sin que venga nadie a decirnos que tenemos que ir a rescatar a Atenea o salvar el mundo, inclusive ahora me es muy raro desayunar tranquilamente- dice mientras agarra una tostada -jajajaja te entiendo, y ¿Qué hiciste mientras yo estuve en Siberia?-expresó mientras tomaba su café…
Una pausa y el tiempo pareció detenerse mientras Shun repasaba en su memoria los últimos e interminables días que transcurrieron sin su amigo, ¿como explicarle lo que su corazón sentía si ni él lo entendía? ¿Como expresarle con palabras lo que en su corazón comenzaba a brotar? Con voz temblorosa y algo inestable le respondió
-el tiempo pasó muy rápido, lo utilicé para meditar sobre antiguas guerras tratando de encontrarle el lado bueno a estas incesantes batallas -Shun –dijo algo confundido por la actitud de su amigo- ¿tienes planes para san Valentín?- exclamó con la esperanza de que la respuesta fuera un no -no, en realidad no sabia que faltara tan poco para esa fecha- dijo recuperándose luego de su anterior respuesta -Seguro que Seiya querrá hacer algo con Saori y Shiryu con Shunrei, ¿no es extraño? Yo siempre pensé que Seiya se quedaría con Miho -Lo sé, ¡yo también pensaba eso!

Los dos santos quedaron hablando, luego de desayunar, Shiryu y Seiya se aparecieron por la mansión.
–Hola, Hyoga veo que ya llegaste, bienvenido- dijo el Dragón
-Hola Shiryu
-¿y Shun?, no lo encontré en su habitación...
– Allí –señala al sillón de la sala donde se logra ver a Shun durmiendo con una manta- se levantó muy temprano para recibirme, pero después de un tiempo cayo dormido- exclama con una risita
-jaja que raro, estos últimos días no paraba de ver el teléfono revisando si llego algún llamado tuyo- dice Shiryu con una sonrisa recordando al joven santo todo el día en la sala frente al teléfono
-y Shiryu, ¿ya tienes todo planeado para el 14? – expresó divertido el cisne
-y…. tenia pensado hacer una cita doble yo, Shunrei, Seiya y Saori, pero no sé si Seiya querrá; ¿y tu? ¿Algún plan con Fler? -¿Qué? No, hace mucho que no veo a Fler y pienso que habrá quedado con Hagén
-Entonces… ¿alguno con Shun?- dice el Dragón con voz cargante
-“¿tan obvio soy?”- no…. ¿Por qué lo preguntas?- exclama con un notable nerviosismo -por nada, solo era un chiste, entonces…. ¿estaba en lo correcto?
-eh…-luego de unos momentos de pensarlo finalmente asiente
-bueno, no estoy en contra, pero... acuérdate de que Ikki podría aparecer por estos días a saludar a su hermano y… no creo que le agrade la idea de ver a su hermano pasando San Valentín con alguien… y menos con un hombre
-¡ya se! , por eso me eh estado preparando física, mental y psicológicamente para el día de “la revelación”-dice orgulloso Hyoga -Espero que también estés preparado con un buen seguro de vida, una mutual y un hospital cercano- le advierte su amigo Seiya que acababa de entrar a la cocina y por lo que se ve, había escuchado parte de la conversación
-Hola Seiya, ¿hace cuanto que estas escuchando?- pregunta Shiryu
-Desde que el pato quedo media hora analizando el mas allá- exclama gracioso el santo de Pegaso -entonces ya sabes de que va, ¿no?, caballo- dice el Dragón
-y les digo que si su conversación es “secreta” bajen mas la voz, porque desde la calle se les escucha, serpiente- dice en susurro Seiya -¿¡serpiente!? Que apodo más malo, Asno- dice Shiryu
-seguro que caballo estaba buenísimo, Lagartija- dice Seiya
-¡Asno, asno, asno, asno, asno, asno!-grita Shiryu al mismo tiempo en que Seiya dice:- ¡Lagartija, lagartija, lagartija, lagartija, lagartija, lagartija! En un momento los dos santos paran de gritar y miran a Hyoga
-¿Qué?- pregunta el caballero del hielo
-te dijimos pato y no tuviste ninguna queja- dice Seiya con un tono burlón
-y yo se porque- exclama Shiryu siguiéndole el juego a Seiya
-¿Por qué?- pregunta confundido el cisne
-¿a que no te gustaría escuchar a Shun diciéndote patito?- expresa Seiya antes de largarse a reír junto con Shiryu al ver el rostro totalmente rojo de su amigo -¡ya cállense!- grita Hyoga antes de prepararse para tirarse de un golpe sobre sus amigos
En ese preciso momento, los gritos de pelea de Shiryu y Seiya despertaron al joven Andrómeda, que pronto se dirigió a la cocina para comprobar que pasaba. -¿chicos?, ¿Qué pasa?- pregunta adormilado
-Nada Shun – responde el Pegaso
-bueno, me iré a cambiar, bajo en un rato- exclama Shun antes de dirigiré a su cuarto
-Bueno Hyoga, ¿ya tienes planeado que le dirás Shun?
-La verdad es que no…
-¡En ese caso te ayudaremos! ya sabrás lo buenos que somos en este tema Shiryu y yo
-Lo dudo mucho…
Y así los santos del Dragón y del Pegaso empezaron a planear el denominado “día violeta” (porque al juntar los cosmos de Shun y Hyoga se forma ese color), no se dieron cuenta de que el fénix estaba detrás de la ventana escuchando sus planes.

Luego de que los santos almorzaran, por la mansión apareció Ikki.
-Hyoga, sin duda tienes las peor suerte- le susurra Seiya a Hyoga que tenia cara de “por favor mátenme” -¡Nissan!- dice Shun mientras corre a abrazar a su hermano
-Hola Shun, Shiryu, Seiya y Hyoga veo que ya viniste- a este ultimo Ikki le tira una mirada amenazante -eh.. Hola Ikki- en este punto el cisne se siente hombre muerto
Lo que resto del día los santos no hicieron mas que jugar a videojuegos, mirar películas, salir a entrenar etc. , mientras Hyoga, decidió no ser muy obvio con Shun, sino todo el plan del “día violeta” habrá sido en vano. Lamentablemente ellos ignoraban lo que Ikki había escuchado (todo), y recién justamente en el día de la operación “violeta” (13/02), Ikki da a conocer lo que sabe.
Shiryu, Seiya, Shun, Hyoga e Ikki fueron al centro de la ciudad en busca de regalos para san Valentín, (por excepción de Ikki, Shun y Hyoga que iban como acompañantes).
Pasaron por muchas tiendas, pero ninguna los convenció, se detuvieron en una juguetería muy grande.
-¿y supuestamente que encontraremos aquí?- pregunto el santo de Pegaso
-no se, pero capaz que hallemos algo para acompañar el regalo- responde el dragón
-¡ah! ¡Hyoga mira!- dice Shun señalando un estante donde había un pato amarillo y blanco- ¿no es lindo?- exclama mientras lo agarra -si, ¡mira!- señala otro estante con un conejo color verde
-¡si es muy lindo!- expresa con una sonrisa
Lamentablemente Ikki queriendo parar esto, decide que es momento de hablar con Hyoga. –Hyoga, ven un momento- dice Ikki aparentando normalidad
-bien, Shun adelántate luego los alcanzamos
-esta bien- dice antes de alcanzar a Seiya y Shiryu
-bueno Hyoga, ya se los sentimientos que tienes hacia mi hermano y quiero que sepas que ¡no lo permitiré ni aun que me cueste la vida!- exclama y un gran cosmos se hace sentir
-Ikki, no pienso hacer nada malo con Shun, y si el llegara a corresponderme.- Ikki lo interrumpe- -¡cosa que no pasara ni en sueños!- cada vez ese cosmos aumenta mas
-te prometo que no dejare que nada le pase
-¡para eso estoy yo!
-Ikki… ¿Cómo puedes decir eso sin conocer lo que piensa Shun?
-¡lo conozco y mas que tu!
-bueno… ¡¿sabes que?! ¡No me importa, igualmente pienso preguntarle a Shun con o sin tu aceptación!- Hyoga sale caminando para alcanzar a sus compañeros, pero sin antes agarrar el pato que anteriormente Shun quería
Seiya, Shiryu y Shun ya en la puerta esperaban a que Ikki y Hyoga saliesen.
-¿Estas seguro Shiryu que a Saori le gustara este panda de peluche?- pregunta Seiya
-si, pero también te recomendaría comprarle algún vestido, ya que de mas sabes lo mucho que le gusta estrenar la ropa- exclama el Dragón -por cierto Shun, ¿tu que compraste?- dicen al mismo tiempo Seiya y Shiryu
-¡Esto!- saca de la bolsa un conejo color verde
-¿y para quien es?- pregunta muy curioso Pegaso
-Para Hyoga, me dijo que le gustaba y como yo tenia pensado regalarle algo, lo compre -dice con una sonrisa -Shiryu codea a Seiya- ¡Mira Seiya allí hay una tienda de ropa!
Hyoga ya saliendo de la tienda con una bolsa en mano busca con la mirada a sus amigos, hasta que ve que se dirigen hacia una tienda de ropa cruzando la calle y rápidamente cruza.
-¿este vestido le gustara?- pregunta el caballero Pegaso con un vestido color blanco con algunas rosas en la falda color azul
-si, y ¿crees que este le guste a Shunrei?- pregunta el Dragón con un kimono color verde y rosa -No lo sé, no soy una chica- exclama en un tono sarcástico Seiya
-Me encanta como me ayudas- Alude Shiryu
-No sé si mi voto cuenta, pero creo que si le gustaría- dice Shun
Justo cuando llegan a la caja para pagar los vestidos, Hyoga logra alcanzarlos.
-¡Hyoga! Pensé que te habías perdido- dice Shun con un sonrisa escondiendo la bolsa detrás de sus piernas -en realidad me perdí en medio de tanta gente en esta tienda, ¿Qué es eso que escondes?- pregunta muy curioso el cisne (en realidad la bolsa con el conejo la escondió entre unos árboles muy altos, por eso tardó)
-¡nada!- la esconde detrás de su espalda- por cierto, parece que Shiryu y Seiya terminaron
-Entonces ¿nos adelantamos a la mansión?- pregunta el caballero de hielo
- ¡Esta bien!, por cierto.. ¿Qué paso con mi hermano?
-Ni idea, dijo que se adelantaría a la mansión
-bueno entonces ¡vamos!- dice mientras toma la mano de Hyoga y lo arrastra mientras corre -¡e espera Shun!- dice el cisne algo cansado
-ok, pero eso te pasa por no salir a entrenar más seguido- exclama con tono burlón
Mientras en la mansión Kido, estaba Ikki sentado en una mesa escribiendo.
–Más le vale que lo lea si valora su vida- luego Ikki se dirige al cuarto de Hyoga (que estaba luego del de Shun) y lo clava con un alfiler en la puerta
De vuelta con Seiya y Shiryu que ya se habían percatado del “escape” de sus dos amigos
-Inicio el plan “violeta” ¿no caballo?
-Así parece lagartija
A unas cuadras de la mansión se encontraban alegremente caminando los dos santos de bronce -¿Te acuerdas de cuando nos conocimos Hyoga?- dijo alegremente el peliverde
-si, esos chicos se habían ido después de molestarte por tu hermano y tu viniste a refugiarte en el lugar donde a mí me gustaba relajarme y subir a los arboles, entonces al ver que alguien había descubierto mi lugar bajé y te encontré- dijo mientras recordaba ese día -y luego me enseñaste como trepar a los arboles y me dejaste ir allí cada vez que estuviera en peligro- exclamo con una sonrisa -mira ya llegamos

Abrieron la puerta y rápidamente Shun subió a su habitación, para resguardar el regalo de Hyoga, mientras este último no se le ocurre ni un mínima idea de que será lo que Shun tanto quiere esconder, el cisne sube hasta su habitación y deposita en su cama el regalo de Shun. Al abrir la puerta para salir se encuentra en la parte interna de la puerta, clavada con un alfiler una nota:
“Estimado Hyoga: Te estarás preguntado que hace una nota aquí, pero eso es lo de menos, aquí lo importante es Shun y suponiendo que por alguna maldición del destino y la suerte mi hermano te llegara a corresponder, lo que menos querría es verlo sufrir o verlo infeliz así que te dejare algunas cosas que debes seguir para que Shun este feliz y yo no te mate
1: Cada caballero en esta mansión tiene un cuarto PROPIO designado, mas te vale que siga así
2: Si quieres salir con Shun, aparte de mi permiso tendrás que asegurarme que volverán a aquí antes de la 1:00
3: No trates de engañarme y decir que vuelven a las 12:30 y en realidad tienen planeado venir a las 3:00 a.m. Pensando que yo estoy dormido y entrar sigilosamente, porque yo no me duermo hasta ver cómo llega mi hermano sano, salvo e igual que cuando salió
4: Si te quieres llevar bien con migo, lo mejor que puedes hacer es traer temprano a Shun, cuidarlo con tu vida y no alterar los horarios de mi hermano solo por querer salir
5: Cuando Shun vuelva más te vale que vuelva peinado, con su ropa en orden y con su cara igual que antes
6: Si otra batalla llegara a venir, te aseguraras de estar siempre, SIEMPRE con Shun sin importar las instrucciones que te den, y procurar que nadie lo lastime
7: Cuando Shun este enojado contigo, ni se te ocurra pedirme consejo o que te haga de mensajero porque eso no pasara
8: Nunca, NUNCA entraras al cuarto de Shun, ni lo llevaras al tuyo, si quieres hablar, o mostrarle algo, lo tendrás que hacer de día y en la sala con mi supervisión
9: Si aprecias tu vida no debes ni soñar estar con alguien a solas, porque yo me confundo muy fácil los amantes de los amigos y no solo te matare a ti sino que también a tu acompañante
10: Si Shun te pide algo y tú se lo prometes, me asegurare de que lo cumplas sin falla ni tarde
ATTE.: Ikki De Fénix”
-Ahora ya veo el costo que tiene el estar con Shun, pero igualmente pienso cumplir todos sus deseos, con tal de estar con él- Pensó el cisne y luego miró la hora- ya es tiempo de llevar a cabo el plan “día violeta” y con suerte todo saldrá como lo planeamos Seiya, Shiryu y yo
Hyoga sale de su habitación dejando sobre su mesa la carta de Ikki, camina unos pasos hasta llegar a la habitación de Shun, toca la puerta, no hay respuesta
-Shun ¿puedo entrar?- no hubo respuestas así que pensó que podría estar abajo junto con los otros, baja las escaleras, llega al salón y no ve a nadie más que Ikki.
-¿Leíste mi nota?- pregunta el Fénix
-Si – responde el rubio
-¿y?
-Pienso que son demasiadas condiciones pero… Shun lo vale
-¿A si? Bueno… por haber contestado como esperaba, y aunque me cueste decirlo, por ahora te doy ventaja con Shun -¿Enserio?
-Sí, ¡Pero que ni sueñes que te voy a dejar entrar al cuarto de mi hermano o volver más tarde! -Ya me lo venia venir…. Pero no te preocupes, que yo no tengo esas intenciones
-Igual te advierto que no te hagas muchas ilusiones, porque todavía no sabes si Shun corresponde a tus sentimientos -Lo sé, pero tengo confianza en el plan “violeta”- y con esto Hyoga da por terminada la conversación, para dirigirse a la cocina donde Ikki le indico que se encontraba Shun junto con Seiya y Shiryu. El cisne camino por el extenso camino y sus amigos (excepto Shun) al ver al ruso acercarse inventan una escusa anteriormente planeada para dejar solos a los dos santos y dar comienzo a “violeta”
-Shun lo siento pero Seiya y yo debemos irnos a bañar- dice el Dragón
-¿Juntos?- pregunta el joven Andrómeda
-“rayos se dio cuenta”- pensó Seiya- eh.. ¡No! Quiso decir que tenemos que irnos a dormir
-Pero si todavía no cenamos- responde confundido Shun
-“Uh Hyoga cada vez está más cerca”- Quiso decir que…. ¡Nos tenemos que ir!- seguido de eso el Dragón arrastro a Seiya fuera de la habitación
En el pasillo…
-Suerte y no la jodas, e eh Shiryu ¡más despacio! ¡Me estas arrastrando por el suelo! ¡Aaah Shiryu! -Mejor suerte para vos, que Shiryu te está usando de trapo
Unos minutos después Hyoga llega a donde esta Shun
-Hola Shun
-Hola Hyoga ¿no ves a Seiya y Shiryu actuando extraño?
-¿Qué? No, yo los veo igual que siempre
-Jajajaja, si tienes razón
-Bueno Shun… tengo algo que decirte, pero no sé como lo vas a tomar-dice algo tembloroso el Cisne -¿Qué es?- pregunta curioso el santo
-Antes ¿me puedes prometer algo?
-¡Claro!
-¿Me prometes que por más de lo que pase seguirás siendo mi mejor amigo?
-¡Sí! ¿Por qué me lo dices?
-Por nada en especial, bueno….. Lo que voy decir es muy difícil de explicar pero…-Pasan unos cuantos minutos hasta que el ruso se decide por decirlo y terminar con todo
-Shun… yo… -de repente es interrumpido
-¡Te amo! –Exclama Shun
-¿Qué?- Logra decir Hyoga
-¡Te amo!, ¡por fin logre, encontrar las palabras para describir lo que siento por ti! Te amo, te amo, te amo, te…- es interrumpido -t te amo, desde hace mucho tiempo, pero nunca tuve le valor de decirlo
-en ese caso Hyoga… ¿quieres ser mi novio?- pregunta algo tímido Shun
-¡Sí! ¡Si quiero!- responde alegremente Hyoga
-¿Enserio? ¡Gracias! Estoy tan feliz, eh estado mucho tiempo tratado de descifrar lo que sentía y ahora que por fin lo sé, es correspondido…- luego de hablar, no pudo contener las lágrimas y rompió a llorar
-¿Qué pasa Shun? ¿Estás bien? - exclama Hyoga mientras atrae a su pecho a Shun para tratar de calmarlo -S si… e es que t te quiero mucho o…-Logra decir mientras se aferra a Hyoga
-Yo también Shun…-dice mientras acaricia la cabeza del peliverde
En el pasillo, espiando la sin exagerar preciosa, hermosa, adorable, perfecta e incomparable escena están Shiryu y Seiya -*Snif, snif*- Sh Shiryu alcánzame los pa pañuelos, ¡waaa e es tan emotivo!- dice el Pegaso -A aquí tienes-*snif, snif*- si... es ¡muy emotivo!- Le pasa los pañuelos a Seiya
-Gr gracias –se suena la nariz- pe pero ya cállate la la ¡Lagartijaawaaa! que me di distraes ¡que emotivo o! -T tu también cállate a a asno o ¡waa!
De repente los dos santos sienten un cosmos inquietante detrás de ellos y al voltear
-¿I Ikki?- dicen al mismo tiempo
-con una lágrima- ¡dame esos pañuelos!- y se los arranca a Shiryu
De vuelta con Hyoga y Shun que ya se habían calmado
-Hyoga ¿quieres quedarte a dormir conmigo esta noche?- le pregunta Shun (solo dormir)- de un minuto a otro a Ikki se le fue toda la “emotividad” para lanzarse de pleno a la cocina y terminar la tierna escena con un
-¡Ni se te ocurra ganso decir que si, a menos que no aprecies tu vida!- dijo muy enojado Ikki -¡Nissan! ¿Por qué no? Si yo lo estoy invitando- dice decepcionado el joven Andrómeda
-Ikki al ver a su hermano tan triste deja una excepción- Esta bien – y se dirige a la puerta no sin antes susurrarle a Hyoga –“no te asustes si ves un rostro en la ventana o en la esquina de la habitación que seré yo y te estaré vigilando”
Luego de que Ikki se fuera, Hyoga y Shun se dirigieron a la habitación de este último. Cuando llegaron Hyoga paso de largo a su habitación para cambiarse (porque si se quedaba mientras Shun se desvestía Ikki en la mañana lo mata), llego a su habitación y se cambio con una remera azul manga corta y unos pantalones celestes (en realidad acostumbra dormir en ropa interior pero Ikki…).

Mientras Shun se cambiaba su ropa habitual (remera verde y pantalones de tirantes blancos), por su pijama que consiste en una camisa blanca con rayas muy pequeñas color azul y un pantalón igual que la camisa. Cuando Shun termino de cambiarse salió de su habitación y fue a buscar a Hyoga para saber si ya estaba listo.
-Hyoga ¿ya estas?
-¡Si! Ya salgo- “no puedo creer todavía que vaya a dormir con Shun, es demasiado bueno para ser un sueño, solo espero eso”- Luego de un par de minutos Hyoga salió y casi se desangra al ver el pijama de Shun.
Al entrar a la habitación del peliverde, Hyoga nota la tenebrosa cara Ikki en la ventana pero trata de ignorarla -¡yo pido al lado de la pared!- grita Shun mientras se tira de pleno en su cama
-entonces yo me quedo del lado de afuera, ¡yo pido esta almohada!- exclama Hyoga sabiendo que a Shun le encanta esa almohada porque es la mas cómoda -¡no se vale! Esa es la almohada mas comoda, ¡quédate con esta!- le dice dándole la que almohada de su lado -y vos elegiste ese lado yo elijo esta almohada-dice burlón el cisne
-¿a si? Entonces dormí en el suelo con la almohada- y seguido de eso empieza a tratar de tirar al cisne haciendo fuerza con la pared -peso mucho mas que tu, te costara mucho tirarme…- resulta que justo hay Shun puso toda su fuerza y lo logro tirar -¡ja! ¿Qué decías? Aaaa- al tirar a Hyoga quedo muy al borde de la cama y justo se cayó envolviéndose en las sabanas y desarmando completamente la cama -¡no siento la espalda! ¡Shun me estas aplastando!
-¡si pudiera me movería! Pero me enrolle en las sabanas y me esta costando salir…- dice el joven Andrómeda forcejeando para tratar de salir -¿y si tratas de hacer fuerza para un lado y rodar?
-¡buena idea!- obedientemente el peliverde se tira para la izquierda y logra salir de encima de Hyoga, pero todavía sigue cautivo de las sabanas -aaaa mi espalda- dice tirando para atrás su espalda y dejando escuchar una serie de cracks- ahora déjame que te ayudo…- seguido de eso toma un extremo de la sabana y logra liberar al pobre santo
-luego de armar de vuelta la cama- ¡tengo una idea! Pongamos al medio esta almohada y la compartimos- Exclama Shun mientras se vuelve a acomodar en su lado -Esta bien- dice mientras ubica la almohada y luego se ubica en su lado
-Buenas noche Hyoga
-Buenas noches Shun, te quiero
-yo también te quiero
Mientras los dos caballeros dormían apaciblemente Ikki estaba fuera, sobre un árbol, con un rostro de enojo muy notable y como era de esperar en ese mismo árbol se encontraban Shiryu y Seiya presenciando su nueva “novela”
-Shiryu, dime que ese sonido que escuche no fueron las palomitas cayéndose- exclama Seiya -Lo siento, se me cayeron cuando Ikki grito “Hyoga si llegas a tocarle un solo pelo a Shun mientras duerme te matare antes de que te des cuenta” -¿Puedo preguntar porque se andan de metiches?- pregunta enojado Ikki
-Lo siento Ikki- menciona sarcástico- pero nosotros somos los responsables de que ellos dos estén juntos- dice Seiya -ya tengo a alguien mas en mi lista de personas que querría matar – revela Ikki -De nada, no nos agradezcas- dice sarcástico Shiryu -Bueno yo me voy bajando, porque mañana tengo cita con Saori y no pienso que le guste verme con ojeras como las de Ikki- seguido de eso Seiya baja del árbol -Aunque me cueste, yo también debo ir a dormir, adiós Ikki- y baja del árbol
El único que quedo toda la noche hasta la mañana ,cuando Hyoga se levanta, es Ikki

Dentro de la habitación Hyoga se despertó y quedo mirando a Shun hasta que después de un rato se despertó -*bostezo*- Oh hola Hyoga, buenos días- exclama Shun adormilado y despeinado
-“como quisiera besarlo ahora pero… *mira a la ventana* Ikki… me tiene en la mira”- Hola Shun, lo siento ¿te desperté? -¿que? No…- dice aun medio dormido
-Bueno me voy así te puedes cambiar tranquilo
-¡ah! Espera- menciona el peliverde antes de que el cisne se levante
-¿Qué?
-¡feliz san Valentín!-lo besa en la mejilla y sonríe adormilado- ¿acaso te habías olvidado?
-sonríe- ¡Feliz san Valentín!- se levanta- te espero en la cocina para desayunar
-¡esta bien!- ve como su amigo se marcha y se pone a cambiar con su ropa habitual
En ese momento Hyoga hace lo mismo, al terminar baja las escaleras y se dirige a la cocina a preparar el desayuno, mientras espera a que Shun y los demás bajen a desayunar.
Cuando ya todo estaba servido, Ikki se apareció por la mansión, tenia un mal aspecto, tenia el pelo desordenado (probablemente por los pájaros), grandes ojeras y bolsas en los ojos también se podía notar que a duras penas se mantenía despierto.
–Ikki tienes un aspecto terrible- le dice el Cisne
-¿Sera porque yo pase la noche en un árbol y no dormitando con mi hermano?- dice con el peor humor de todos -De cualquier forma, ven siéntate a desayunar que Seiya y los demás no tardan en bajar
Minutos después bajan Shiryu, Shun y Seiya, luego de que cada uno le mencione sobre su aspecto a Ikki, se sentaron Seiya al lado de Shiryu, Hyoga al lado de Shun y en la punta Ikki.
-que raro de Hyoga preparando el desayuno- menciona Seiya
-y pato ¿Cuánto te tardo hacerlo?- exclama Shiryu
-ah cierto Seiya y yo les tenemos una sorpresa
-¿una sorpresa?- dice asombrado Ikki
-para ti no Ikki sino que para la famosa pareja patoneja- dice alegre Seiya
-¡¿patonejo?!- exclaman asombrados Ikki, Hyoga y Shun
-Si, es una palabra que nos la pasamos inventando toda la noche Shiryu y yo, combinamos sus sobrenombre Hyoga es el pato y Shun el conejo si las juntas patonejo ¿les gusta?
-¡si!- dicen Shun y Hyoga al enterarse del nombre que ellos dos forman
-¡síganle echando leña al fuego nomas!- expresa Ikki sarcásticamente- me iré a dar un paseo- se levanta y se va

Luego de desayunar, las siguientes horas pasaron rápido, hasta que llegaron las 11:00 p.m. y como era parte del plan “violeta”, excepto que, Seiya y Shiryu decidieron darles un regalo a los enamorados, esos últimos días se la habían pasado adornando una habitación mas o menos cerca de la mansión, antes de irse ambos, le dijeron a Hyoga que valla a un jardín cerca de la mansión junto con Shun. Ya vestido con su smoking le pide al peliverde que se vista con algo para salir, El peliverde algo confundido se viste rápidamente con un buzo color celeste con felpa en los extremos de las mangas, un par de pantalones color marrón claro y escondido entre sus ropas el regalo del cisne. Hyoga lo guía hacia una pequeña habitación, que sus amigos le habían indicado, color marrón adornada con luces y flores. –¿Qué tal?, parecen que se esmeraron en hacerlo ¿no?
-¡me encanta!, no debieron molestarse
-bueno, parece que hasta nos dejaron la cena- dice mientras saca la comida que había en una fuente de plata, luego de cenar -No debieron haberse molestado tanto…- exclama el peliverde
–No creo que les haya resultado un problema, Shun yo te –fue interrumpido por un beso de parte de Shun, que no dura mas que unos minutos ya que el asombro los dejo sin aire.
–Ten – Hyoga le da un ramo de brillantes rosas rojas y una bolsa con un objeto envuelto, Andrómeda asombrado y con el ramo en brazos decide abrir el paquete, al abrirlo ve al pato de peluche que tanto le gustaba.
-¡Hyoga! ¡Gracias! No se si te gusta... pero ten –le entrega una bolsa con un paquete envuelto dentro, el cisne curioso lo abre y al abrirlo se encuentra con el hermoso conejo verde que había visto en la juguetería muy feliz exclama
-te amo conejito -Yo también te amo patito
Notas finales:

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