-“¿Por qué estoy aquí otra vez?”- se preguntaba aquel demonio de cabello largo azabache y tez pálida, que estaba sentado sobre el techo de una casa de dos pisos.
Su mirada oscura y afilada, seguía con fervor todos los movimientos del hombre que corría solo en la pista de carreras un poco alejada de donde él se encontraba.
Aquel alto moreno de cabello negro con un mechón platinado, había llamado su atención desde hace ya más de un mes y ya era habitual que se sentara en ese lugar para verlo entrenar.
Suspiró mientras se puso de pie –“No lo entiendo”- dio un salto para llegar al piso, pero al tocar el suelo, ya estaba en el lugar envuelto en llamas llamado inframundo –Ya volví- saludó a los bellos gemelos de cabello gris que eran sus sirvientes y lo esperaban al lado de la puerta de su habitación.
-Bienvenido Lord Blaise- hablaron al unísono mientras hacían una reverencia –Esperamos que la noche haya sido provechosa-
-Sí, lo fue- después de responder, abrió la puerta y entró a su cuarto. Suspiró mientras se sentaba en la orilla de la espaciosa cama –“Provechosa”- se quitó los zapatos y la ropa para ir a su baño privado y meterse bajo la ducha.
Mientras las gotas de agua fría recorrían su delineado cuerpo, recordaba la mañana en que comenzó su nueva rutina.
Flash Back
El demonio de cabello largo, se encontraba sobre el tejado de un edificio de departamentos de Feisbukcity. Reía gustoso mientras el tibio viento veraniego jugaba con las hebras azabaches haciéndolas ondear –“La estupidez humana siempre me causa gracias”- pensaba observando a las pocas personas que paseaban a esa hora de la madrugada.
Esa noche, otra vez fue a molestar a sus dos humanos favoritos que siempre se asustaban ante su presencia y la de sus grandes íncubos. Bueno, uno de ellos era el que mas se aterraba.
Rió otra vez –“Ya me divertí lo suficiente por esta noche, así que iré a dormir”- iba a dar media vuelta, pero el grito de una mujer en la calle junto al edificio le dio curiosidad.
Se acercó a la cornisa y pudo observar como un hombre vestido de blanco y rojo, amenazaba a una mujer rubia que estaba de espaldas a la pared.
-“¡Ooooh! ¿Un ladrón?”- vio al hombre intentar subir la falda de la mujer que estaba apunto de llorar –“No. Un violador… Imbécil, te iras directo al infierno”-
Seguía mirando el espectáculo, cuando de pronto, un alto hombre moreno vestido con ropa deportiva, agarró al tipo por los hombros y lo tiró contra la otra pared dejándolo inconciente.
El demonio se sorprendió un poco –“Valla ¿Un héroe?”- rió a carcajadas –“¡Mortal idiota!”-
Continuó observando. El moreno levantó al tipo inconsciente para ponerlo sobre uno de sus hombros mientras hablaba con la chica. Ambos comenzaron a caminar hasta que llegaron a una estación de policía donde entraron. Después de mas o menos una hora, ambos salieron sin el tipo. La chica tomó un taxi y después el moreno se puso a correr hacia el lado contrario.
-“Mmmm…”- al demonio, que los siguió sigiloso durante todo el camino, le entró curiosidad por aquel moreno –“¿La ayudó sin pedir algo a cambio? ¿Realmente es tan tonto?”- bajó para pararse justo frente a él.
El moreno se detuvo cuando alguien cayó del cielo para interponerse en su camino -¡¿Qué mierda?!-
-Buenas noches insulso humano- saludó cortés -¡Ah! ¿Por qué llevas unas gafas si aun está oscuro?- suspiró.
-Qué te importa weon- el moreno se acomodó las gafas -¿Quién te crees para criticar las weas que uso?-
El demonio carraspeó un poco y después habló –Disculpa mi descortesía- abrió los brazos exageradamente y luego los cerró poniendo la mano derecha en su abdomen y la izquierda en su espalda baja –Yo soy Lord Blaise, el jefe del inframundo…- hizo una mediana reverencia -… y e venido a hacer un contrato contigo-
El moreno cruzó los brazos -¿No eres muy enano para ser el jefe del inframundo?-
Al demonio le salió una gotita en la sien y se irguió –Cualquiera se ve enano junto a ti.
El moreno sonrió –Ya, dime que wea querí para poder seguir entrenando-
-Bueno, como ya dije, vengo a hacer un contrato contigo- chasqueó los dedos y tres hermosos seres masculinos vestidos provocativamente, aparecieron a su lado –Te ofrezco todo el sexo que puedas soportar…- volvió a chasquear los dedos y aparecieron otros diez seres masculinos que en sus manos traían deliciosos postres y comidas -… y todos los placeres que desees a cambio de tu alma-
-No quiero ni una de estas weas- pasó por el lado del demonio para seguir trotando.
-¿Eh?- los chicos desaparecieron -¡E… espera!- corrió para volver a detenerlo poniéndose frente a él.
-¡Ya te dije que no! ¡Deja de webiar!- lo empujó levemente para sacarlo del camino sin detenerse.
Observó la gran espalda irse -¡De verdad es un idiota!- pateó una piedra molesto y se fue al inframundo.
Fin Flash Back
Se terminó de acomodar la corbata y se miró en el gran espejo frente a él –“Perfecto”- acomodó su cabello y salió de la habitación –Esta noche, ustedes vienen conmigo- le habló a sus dos sirvientes que aun estaban al lado de la puerta.
-Como deseé Lord Blaise- contestaron al unísono.
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Continuara...