Capitulo 1:Adios rutina.
El sol elevándose a paso lento por el cielo comenzaba a dominar el día, logrando colar pequeños rayos en cada casa de la ciudad, entonces en una casa normal pero sombría la mañana ya se hacia presente, el silencio dominaba cada rincón de la habitación, logrando entremezclarse con unas auras sumamente negras, miradas frías se encontraron y no se despegaban mientras que se sentaban frente al otro.
-Buenos días Sarada.
-Buenos días papá.
Ambos azabaches pronunciaron exclusivamente aquello para ´rápidamente retornar al silencio de siempre, ambos de manera cautelosa y calmada se servían el desayuno, ambos Uchihas se mantenían comiendo como todos los días, a la misma hora y a la misma velocidad, cada movimiento accionado que era rutinario pero fríamente calculado, ambas mentes e encontraban en una paz incalculable, pero en segundos una vena se marco en la frente de ambos.
-¡Papá mira, mira!- se escucho desde afuera, a lo cual fue seguido en seguida por mas voces las cuales gritaban en un tono sumamente irritable, al menos así era para la cabeza de los Uchihas.
-¿Porqué hay tanto alboroto?- exclamo la menor al escuchar con cansancio más gritos y el sonido de un incesante motor.
-Deben de ser los nuevos vecinos- dijo calmadamente pero con cierto tono de molestia.
-Vaya vecinos que tenemos ahora papá- dijo irritada mientras terminaba de desayunar, el mayor se mantuvo en completo silencio mientras seguía comiendo- esta no es manera de empezar un sábado- exclamó enojada abandonando la mesa, en el mismo instante el mayor también terminó la comida.
Ambos siguieron sus caminos, no era necesario preguntarse qué es lo que harían, pues simplemente ya lo tenían todo extremadamente calculado, al igual que siempre hacían los mismo, a la misma hora, en la misma cantidad de tiempo, todo de cierta manera “perfecto”. Sasuke levanto los platos mientras que la menos se dirigía a hacer su cama y en minutos, casi como si tuvieran un cronometro, terminaron en la misma cantidad de segundos a como lo habían hecho la semana pasada, entonces con el mismo semblante frio continuaron con las mismas actividades que habían realizado el sábado anterior, al menos así fue hasta que a las 3 de la tarde exactamente, un sonido chillón interrumpió con irritación sus actividades, Sarada no necesito un grito diciéndole “¡anda tu Sarada!”, pues ambos Uchihas se turnaban para cosas así, por lo cual esta vez le tocaba esta vez abrir la puerta a la menor, con cierta irritación se dirigió hacia el frente mientras que el timbre resonaba una y otra vez en sus oídos.
-Tsk, que molesto…- susurro para sí, entonces abrió la puerta, los ojos de la azabache no atinaron a nada más que abrirse a más no poder, pues lo que estaba frente a ella la dejo paralizada-que brillante…- susurró para sí mientras que delante de ella una inmensa sonrisa se presentaba.
-¡Buenas tardes!- dijo con emoción e inmensa alegría, la menor simplemente se quedo parada frente a él, la cabeza de ella se veía por completo en blanco.
-¿Sarada quien es?- preguntó el mayor acercándose, pero al estar al lado de la menor se quedo de igual manera estático- que brillante…- susurró para sí.
-¡Buenas tardes, soy su nuevo vecino, me llamo Naruto Uzumaki!- con una sonrisa mas amplia que nunca provoco un vuelco en los simétricos latidos de los azabaches, entonces el Uzumaki elevó su mano en señal de presentación- ¡Es un placer conocerlos1- y por primera vez en sus vidas los Uchihas no podían calcular que hacer después.
Continuara…