Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Detrás de un Rompimiento por Ashmina

[Reviews - 23]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Que les digo, es una historia que tengo pensada desde hace bastante tiempo, pero mi inpiración no llegaba como debería (y aún sigo esperando que regrese completamente), por lo que mis ideas de como realizarlo no estaban por completo.

Quiero adradecer a mi queridísima Gorgobina, amiga gracias por impulsarme a seguir escribiendo y estar conmigo.

Espero sea de su agrado.

Notas del capitulo:

“Si te lastimaron, no alimentes tu dolor ni te alejes de esa persona, si quieres ser un gran humano, simplemente olvida”.                  (Anonimo)

 

El inicio del fin no siempre es como lo crees, a veces no estaba esperado, simplemente sucede...

 

 

Esta de más decirles que ninguno de los personajes que describo me pertenece.

Detrás de un Rompimiento

 

(Saga & Aioros)

 

 

Tiene tiempo que hacemos esto, algunas noches nos vemos a escondidas y de día solo somos amigos, talvez con lo sucedido en el pasado deberíamos ser solo compañeros de armas y estar lo más alejados el uno del otro, pero no es así.

 

Mi novio de toda la vida había sido Shura, nos llevamos más que bien, entre nosotros se sentía magia, pasión, amistad pero sobre todo el amor reinaba en nuestra relación.

 

Al volver a la vida todo marchaba más que bien, continuamos nuestro noviazgo, uno que se veía fuerte, solido, además que él es un caballero en todos los sentidos, una persona sensible, honesta, amoroso y todas las virtudes que se le puedan adjudicar a su persona.

 

Pero eso de morir y revivir, cambia las cosas, la perspectiva es diferente, todo en mi era distinto y bueno no era para menos, me había perdido muchas cosas, 13 años cambian todo, los chicos eran más grandes, más altos de lo que los recordaba, me costaba reconocer a mi propio hermano, me había perdido la mejor parte de mi vida.

 

Todo empezó como siempre, cuando menos lo esperas, las cosas en el Santuario iban más que bien, la paz era decreto, las pequeñas diferencias que hubo entre compañeros quedaron en el olvido y todos ocupamos los lugares que nos correspondían.  Al estar todo tranquilo nuestras tareas eran más sencillas, las misiones eran cada vez menores y sin peligro visible, a veces existía alguna excepción.  Vigilábamos los alrededores y ayudábamos a la gente que nos necesitaba.

 

ü  Shu ¿estás aquí? – pregunte al entrar a Capricornio, pero no obtuve respuesta alguna, comencé a adentrarme en las estancias del templo - ¿amor dónde estas? – Me dirigí directo a la cocina, la hora y el reinante silencio solo significaba que estaba sumergido en el mundo culinario que tanto le gustaba.  Y sí, lo conozco tan bien que no me equivoqué, me recargue en el marco de la puerta observando como disfrutaba el cocinar.  Era un deleite verlo feliz.

 

ü  ¿No piensas pasar a ayudarme?  - Pregunto sin siquiera voltear a verme.

 

ü  Lo siento, claro, ¿en qué te puedo ayudar?  - Sin duda encajábamos a la perfección -  no quise distraerte, te veías muy concentrado en lo que haces.

 

ü  Sabes que cocinar me encanta y si es para ti, lo hago con más gusto  - nos besamos fugazmente, una distracción larga con la estufa encendida no era muy buena idea  - ¿qué te parece si me ayudas a ir colocando todo en la mesa?, esto está casi listo.

 

ü  Bien y se puede saber qué fue lo que preparaste, huele riquísimo.

 

ü  Hice fasolada, mousakka y para acompañar un poco de vino rosado  - Cocinando no hay quien le gane a Shura, su espero en la cocina se nota en cada bocado.

 

ü  Eso suena exquisito mi amor, sabes que me tienes muy consentido  - Se acerco para besarme, sin desaparecer su característica y bellísima sonrisa.

 

ü  Te consiento solo por que te amo.

 

ü  También te amo Shu.  Buen provecho

 

ü  Oye por cierto, ¿para qué solicito tu presencia el Patriarca?

 

ü  Me encomendó una nueva misión, nada complicado, solo revisar el pueblo al sur del Santuario.

 

ü  No suena tan mal, además todo ha estado muy tranquilo últimamente, ¿Cuántos días vas a estar lejos?

 

ü  Van a ser 5 días… -  Metí una cucharada de fasolada a mi boca… … mmm…, quedó sencillamente deliciosa.

 

ü  Es poco tiempo para recorrer tu solo el pueblo, sus dimensiones son grandes.  Mmm… esto quedo riquísimo

 

ü  Tienes razón te quedó delicioso, pero amor no voy a ir solo, Shion decidió que iría acompañado de Saga, para abarcar más lugares en menos tiempo.

 

ü  ¿Saga?, ¿te parece una buena idea hacer equipo con él?, se que es un buen elemento, pero después de todo…

 

ü  Al principio no estaba muy de acuerdo, pero si el Patriarca ya decidió que las cosas deben hacerse de ese modo, es por algo, es solo una misión y además, todo es cosa del pasado, Saga ya mostró arrepentimiento por lo que hizo y se disculpó con todos, así que no veo porque seguir dudando de él.

 

ü  Tienes razón Aio, además Saga ha cambiado mucho en los últimos tiempos.

 

ü  Yo diría que regreso a ser quién realmente era, solo que no me he dado el tiempo de hablar con él, después de todo cuando niños éramos muy amigos, no veo porque no serlo ahora.

 

ü  Y a todo esto ¿Cuándo tienes que irte?

 

ü  Mañana  - No te pareció para nada la idea que me vaya tan pronto, tu cara lo decía todo -  Cambia esa cara Shu, solo son 5 días, se van a pasar rapidísimo, además el riesgo es prácticamente nulo, entonces no tienes de que preocuparte.

 

ü  No estoy preocupado  - Tomo mi mano y la beso -  cualquier cosa que tengas que hacer, lo vas a lograr, por algo eres uno de los más fuertes entre los 12.

 

La comida transcurrió como si nada, pero el tenía la razón, aún no sabía que hacer o cómo actuar al estar cerca de Saga, por lo regular él y yo no estábamos muy juntos, solo nos saludábamos y nos dirigíamos unas palabras amables, pero nada más.  Después le ayudé a recoger la mesa y lavar los trastes que usamos.

 

Por la noche nos acostamos a dormir, tenía que estar descansado para emprender el viaje muy temprano, conciliamos el sueño muy rápido y como era un deleite dormir con Shura abrazado a mí, el significaba mi realidad, mi pasado y mi presente.

 

La luz del amanecer fue entrando poco a poco por la ventana, un día muy brillante no esperaba además de caluroso, con mi mano comencé a buscar mi compañía, pero nada, abrí mis ojos solo para confirmar que en realidad me encontraba solo, no me sorprendió, mi español siempre había sido madrugador, pero me gustaría despertar con él a mi lado más seguido.

 

ü  Buenos días dormilón  - dijo acercándose a mí para besarme -  ya es hora de levantarse, sino partirás tarde, además el desayuno ya está listo y servido.

ü  Buenos días amor, ya voy  - dije con una enorme sonrisa, estirando mi cuerpo un poco para volverme a acomodar  - pero 5 minutos más ¿sí?  - te jale hacia mí y bese tus labios, que me sabía de memoria.

 

ü  Te amo Aio, más de lo que te imaginas  - me beso nuevamente -  pero ya levántate, no creo que quieras que Saga venga por ti, ¿verdad?.

 

ü  Es cierto!!!  - me levante de golpe, empujando un poco a Shura -  ya lo había olvidado  - con todo y prisa me dirigí al baño, necesitaba una ducha y arreglarme -  lo siento amor, estaba muy cómodo acostado a tu lado.

 

ü  Lo sé cariño  - salí del baño buscando una toalla y mi ropa, pero con las prisas que tenía no encontré nada -  vamos báñate, yo te acerco las cosas, anda!  - le hice caso, después de todo.

 

ü  Tienes toda la razón, no sé que haría sin ti, te amo  - me di un baño rápido pero de lo más fresco, el agua a pesar de estar fría se sentía de maravilla, después de todo el calor de Grecia era sofocante.

 

Cuando salí de bañarme, tal como había dicho Shura, la toalla y mi ropa estaban en el baño, me vestí a prisa y al salir de la habitación, mi español ya se había hecho cargo de levantar lo del suelo, arreglar la cama y llevarse los vasos de la mesita de noche.  Todo un estuche de monerías, es más ordenado que yo, incluso creo que podría competir con Camus, si es posible, claro.

 

ü  Aio se te hace tarde y Saga ya está aquí esperando  - ¡rayos!!! ¿Tan tarde era?, ¿Cómo era posible?, me apresure a ponerme zapatos y salí corriendo al recibidor, donde de seguro me esperaban.

 

ü  Entonces, ¿no crees que el compartir misión conmigo sea incómodo para él?  - oí a Saga preguntar, aún se siente culpable a pesar del tiempo que a pasado.

 

ü  Saga tranquilízate, ya has hablado con él y te ha dicho que dejes de culparte, que todo está en el pasado y no tiene importancia, además si le molestara hubiera hablado con Shion para cambiar de acompañante o de plano para ir solo ¿no crees?  - y pensar que Shu tenía sus dudas la noche anterior.

 

ü  Listo, disculpen la demora, buen día Saga, es hora de irnos.

 

ü  Claro, vámonos se hace tarde  - comenzó a caminar hacia la entrada.

 

ü  Oye, ni un beso para tu novio  - sonrió mientras se acercaba a mí  - cuídate mucho caballero  - me beso -  te amo.

 

ü  Estás loco si crees que voy a darte solo un beso  - lo bese entre cortando la oración -  además tengo que volver a tu lado, sino ¿quién va a cuidarte? Te amo cariño.

 

ü  Jajaja amor yo soy el que cuida de ti, no se te olvide eso, anda, buen viaje, te amo.

 

ü  También te amo, no vemos a mi regreso  - y con eso salí del templo de Capricornio, tenía que alcanzar a Saga que ya se había adelantado.

 

Cuando alcance a Saga, ya estaba en la entrada del Santuario, me pregunto ¿Por qué subir a Capricornio, si de todas formas se iba a adelantar y esperarme en la entrada donde ya aguardaba un auto por nosotros?

 

ü  Tardaste mucho  - su tono era serio, pienso que es enigmático -  debimos estar aquí hace más de 10 minutos.

 

ü  Lo sé Saga, créeme no es necesario que me regañes, además no vamos lejos y el coche acaba de llegar.

 

ü  Deja de perder el tiempo excusándote y vámonos, no hay por qué perder tiempo  - a veces es tan odioso, ya se porque los chicos lo imitan cuando no está a la vista -  ¿Qué? ¿acaso esperas que te abra la puerta?

 

ü  ¡Claro que no!  - conteste molesto y me subí, recorriéndome hasta el otro extremo del asiento, con el genio que tenía en este momento me parecía una gran idea estar lo más lejos de él.

 

Todo el camino lo hicimos en silencio, estaba claro que su humor no era bueno y no había porqué amargar el mío.

 

Bueno, no tardamos mucho en llegar, si acaso fueron 30 o 40 tormentosos minutos, aunque fue un deleite, el paisaje maravilloso, no lo voy a negar de vez en cuando volteaba a ver al gemelo, viéndolo bien es apuesto, cuando éramos chicos así lo veía, los pocos años que habían transcurrido solo acentuaron eso, ¿estará mal que yo piense eso?.  El auto se detuvo y antes de que el geminiano volviera a regañarme salí seguido por él.

 

ü  Gracias por todo  - dijo al conductor amablemente  - debemos buscar donde quedarnos, dejar las cosas y comenzar, tenemos poco tiempo y muchos lugares por revisar…  - espontáneamente comencé a reír -  ¿qué es tan gracioso?

 

ü  Disculpa Saga  - dije tras calmarme un poco -  es solo que sigues sonando igual que hace años, cuando salíamos a nuestras primeras misiones ¿recuerdas?

 

ü  ¡Jajaja!!! ¿cómo olvidarlo?, siempre era la misma rutina  - ahora si esta el mismo de antes  - tenía que subir a tu templo a despertarte, casi arrojarte un balde de agua fría, aventarte tu ropa y corretearte hasta que estabas listo y cuando llegábamos… … …

 

ü  Tampoco exageres, eso solo paso en 2 o 3 ocasiones, las demás ya estaba listo.

 

ü  Y aun así esperabas a que subiera por ti  - ya tenía bastante tiempo que Saga y yo no teníamos una discusión de amigos -  ¿qué tienes que agregar en tu defensa?

 

ü  Que era agradable bajar todos esos escalones en compañía de mi amigo, ¿Qué dirás en la tuya griego?  - la pregunta lo tomo por sorpresa.

 

ü  Simplemente quería pasar más tiempo contigo ¿eso es malo?  - ahora el sorprendido era yo y él lo noto -  ¿Qué te parece este lugar?  - dijo deteniéndose frente a un mesón.

 

ü  Parece cómodo  - entramos, el lugar parecía tranquilo, agradable y acogedor.

 

ü    Muy buenas tardes caballeros, bienvenidos ¿en qué puedo ayudarlos?  - dijo la recepcionista muy amable.

 

ü  Buenas tardes  - contestamos los dos casi al mismo tiempo.

 

ü  Gracias señorita, queremos 2 habitaciones sencillas para 4 noches.

 

ü    Claro, solo permítanme un momento y enseguida estarán listas.

 

Ya después de registrarnos, nos entregaron las llaves de cada habitación y ahora si a dejar todo.

 

ü  Nos vemos en 10 minutos, es buena idea empezar lo antes posible, abarcar más sitios en menos tiempo.

ü  ¡Sí señor!!!  - Saga sonrio y entro en la puerta junto a la mia.

 

Me di prisa, a fin de cuentas solo iba a dejar mis cosas en la habitación, solo bastaban 3 minutos a lo mucho.  8 minutos acababan de pasar y me dispuse a salir, para mi sorpresa detrás de la puerta ya estaba mi acompañante, sonrojado y sorprendido.

 

ü  En mi defensa, todavía me quedaban 2 minutos.

 

ü  Lo sé, por eso aún no he dicho nada  - fue lindo verlo así, por primera vez puedo decir que vi a mi amigo de otra manera.

 

ü  Entonces nos vamos, mi plan es regresar al anochecer o antes de ser posible.

 

El día paso rapidísimo, a pesar de revisar de prisa, la vista del lugar era bellísima, llegamos al hotel entrada la noche, merendamos algo en el restaurant y a dormir se a dicho.  El día siguiente paso desapercibido, no hubo nada notable, y el siguiente fue lo mismo.  Después de todo la tranquilidad podía sentirse en el aire, el peligro existente para nada era extra normal, solo lo clásico descuidos, accidentes nada de que preocuparse.

 

Tan pronto 3 días habían pasado, cada rincón del poblado que habíamos revisado estaba más que bien, la gente nos saludaba, era genial, debo admitir que al principio Saga se veía un poco incómodo, no lo culpo esta en todo su derecho, después de todo no puede olvidarse por completo de lo sucedido, es algo que aún en estas fechas lo atormenta.

 

f ¿Cómo lo haces Aioros?  - conversamos a nuestro regreso.

 

f ¿A qué te refieres con esa pregunta?

 

f Por culpa mía perdiste muchos años de vida, momentos inimaginables con tu hermano y aun así no has tratado de matarme por ello, es más en ningún momento me lo has reprochado.

 

f Tal vez te parezca extraño, pero estoy contento, el pasado es historia que ya dejamos atrás, no hay nada nuevo en ella, así que para que revivirla a cada rato, hay cosas maravillosas en este presente.

 

f Haz alcanzado una madurez impresionante.

 

f Mira aunque sea difícil de creer, no te guardo ningún rencor, no eras tú cuando tomaste esa decisión, además somos amigos, así que tómalo con calma y olvídate de toda culpa que aún tengas, la vida es maravillosa y corta, por eso no podemos darnos el lujo de desperdiciarla.

 

f No cambias, siempre has hablado de esta forma  - su sonrisa era sincera, pero guardaba cierta tristeza todavía -  vamos a comer algo ¿te parece?

 

f Me parece bien, después de que me has traído caminando toda la tarde, ya me dio hambre, y si no me equivoco tú también debes estar hambriento.

 

Solo note un leve sonrojo en su rostro, es extraño normalmente el caballero de géminis no es así, ahora que lo pienso algo en él es diferente.

 

Caminamos tranquilamente conversando los pormenores de la misión, que hasta el momento era de lo más tranquila, sin nada de espectacular, pasar la tarde a su lado fue único, como regresar en el tiempo, nuevamente como amigos la pasamos muy bien.

 

f ¿Qué te parece si vamos por un helado?, como están las cosas no creo que una tarde libre nos complique  - propuso con un poco de la seriedad típica en él.

f Espera, estoy escuchando bien  - dije en son de broma -  el gran Saga de Géminis, propone evadir una misión por un rato  - dijo con falso asombro -  para comer helado, esto debe ser el fin de los tiempos  - lo sé, exageré un poco -  no me veas así  - su mirada fue acusadora y levemente amenazadora -  es que es raro que tu sugieras algo así.

 

f Bueno, no tiene nada de malo distraerse un rato, al fin y al cabo todo esta demasiado tranquilo y no hay señal de un posible enfrentamiento con rebeldes.  ¿Entonces?  - sus ojos tenían un brillo especial, algo de lo que no me había percatado antes, incluso en el pasado.

 

f Con el calor que hace, me parece una gran idea  - pagamos la cuenta y continuamos caminando, no dijimos una palabra, pero no era incómodo, solo caminamos uno al lado del otro.

 

f Sabes…  - llamo mi atención pero su voz sonaba triste, voltee a verlo, se había detenido cerca de un pequeño muelle, su mirada se había perdido en el firmamento, en vez de continuar, guardo silencio.

 

f ¿Te sucede algo?  - no sé, pero en ese momento y al ver su rostro, sólo quería saber que tenía.

 

Camino un poco más, deteniéndose frente al barandal y recargándose en el sin dejar de mirar al frente, creo entender que este así, de cierta forma a de ser lo más normal después de todo, el pasado debe seguir dando vueltas en su mente.

 

f No creí que después de tanto tiempo pudiéramos compartir una misión nuevamente  - sus ojos transmitían tristeza, melancolía -  ya lo sí, dijiste que estábamos bien y sé que es así, pero no puedes culparme por sentirme así, siempre estuviste a mi lado, fuimos muy cercanos.

 

f Y en definitiva no te culpo, pero es momento que lo dejes atrás, nuevamente te lo repito, olvídate de todo, no permitas que el pasado continué ensombreciendo tu ahora, eres muy buen hombre, un caballero como ninguno, uno de los guerreros más fuertes, un gran amigo  - decía con total sinceridad -  y luces mejor cuando sonríes  - inmediatamente levanto su vista hacia mí -  Siempre hemos sido amigos y nada lo va a cambiar.

 

f ¡Ya!!! No toquemos más el tema, ya te entendí, entonces siguiendo tu consejo, la vista al frente sin mirar atrás, ¿contento?

 

f Como no estarlo si por fin me vas a hacer caso.

 

Los 5 días habían pasado demasiado rápido y sin un atisbo de problemas, este día por la tarde debíamos regresar al Santuario por lo que decidí darme un baño antes de bajar a almorzar con Saga, que por fin y tras varias platicas – regaños había vuelto a ser y actuar de la misma forma en que lo conocí, ese chico que a pesar de mostrarse serio y duro con todos, conmigo era alegre, confiado y en ocasiones parlanchín.

 

Toc, toc, toc, toc  - tocaron mi puerta una vez.

 

f Maldición, uno no se puede bañar a gusto.

 

Toc, toc, toc, toc  - segunda vez.

 

f ¿Qué prisa?, parece que no pueden esperar  - me queje enredando una toalla a mi cintura, salí del baño y comencé a caminar a la puerta, mientras con otra toalla me secaba el cabello y el cuerpo, para dejarla reposar sobre mis hombros una vez terminado.

Toc, toc, toc, toc  - tercera vez, ¿en serio? ¡qué desesperado!

 

f Ya voy  - gire el picaporte y logre abrir esa puerta -  ¿qué es tan urgente que no puede esperar a que termine de bañarme tranquilamente?  - pregunte sin siquiera ver quien estaba al otro lado de la puerta.

 

f En realidad ya tengo hambre y pensé que querrías acompañarme, sé que es un poco antes de lo que habíamos quedado  - para ser sincero, no lo esperaba y en ese momento Saga era la última persona que espere ver, si ya habíamos quedado en el lobbie.

 

f Lo siento  - dije apenado -  no creí que fueras tú el que tocará.

 

f Discúlpame si fui insistente, es solo que creí que seguirías dormido  - se sonrojo al darse cuenta que estaba prácticamente desnudo -  no pensé que estarías bañándote, y no quise interrumpir, me disculpo nuevamente  -dijo mientras daba media vuelta, para volver en sus pasos.

 

f En realidad ya había terminado  - sonreí, en ese momento ví al Saga con el que crecí, el que era mi mejor amigo -  que te parece si te sientas, me visto rápido y nos vamos en 10 minutos.

 

f Creo que si ya estoy aquí, no me cuesta nada esperar a que te arregles  - pude notar un leve sonrojo en su rostro -  estaba pensando ¿Qué te parece si después de almorzar y antes de irnos, damos una última vuelta por el pueblo?

 

f No suena mal  - conteste mientras terminaba de vestirme con algo cómodo -  listo, vámonos.

 

f Nada mal, te vestiste más rápido de lo que recordaba.

 

f No puede ser que lo recuerdes, fue hace mucho tiempo  - seguimos platicando mientras caminamos.

 

f Lo dices como si fuera la gran cosa, además todos los recuerdos que comparto contigo los atesoro con mucho cariño  - su nuevo sonrojo era más evidente que los anteriores.

 

Dejamos las cosas así, ninguno dijo una palabra más al respecto, durante la comida solo platicamos de la misión y de lo que esperábamos que sucediera con ella, después caminamos un poco por los alrededores. Llegamos a una pequeña plaza, bellísima por cierto, con un pequeño kiosko al centro, como si nos hubiéramos puesto de acuerdo, nos dirigimos hasta ahí.  Nos recargamos en uno de los barandales viendo hacia afuera.

 

f Es muy tranquilo aquí  - rompió el silencio con un comentario muy sencillo.

 

f Sí, es muy bello  - increíblemente me sentía un poco intranquilo.

 

f Aio… … yo… …  - dijo tímidamente, extraño en él.

 

f No vamos a comenzar nuevamente con eso ¿ver… …?  - sin dejarme terminar, Saga me beso suave, lento y por alguna extraña razón no lo detuve, no me aleje, al contrario, correspondí su beso.

 

f Lo siento… …  - se alejo lentamente sin abrir los ojos -  es que… … yo… …

 

f Saga… … yo… … por… …

 

f ¡Sshh!!!  - colocó uno de sus dedos tapando mi boca -  déjame hablar por favor  - solo asentí, no sabía que más hacer -  ya es hora, te amo, llevo mucho tiempo amándote  - tomo una de mis manos -  te amo desde que éramos aprendices, a sido una tortura verte en brazos de Shura, saberte feliz con él, ví una pequeña oportunidad cuando regresamos a la vida, tenía esperanzas y luego otra vez estabas a su lado y yo no sabía que hacer y me aleje, todo para que estuvieras bien, pero ya no puedo, esto que siento es más grande y fuerte que yo y tenía… … quería decírtelo.

 

Me quede callado, no sabía que responder, estaba abriéndome su corazón.

 

f ¿Bien?, dime algo, lo que sea  - Su semblante era sincero, preocupado, estaba esperando que dijera algo.

 

No dije nada, inesperadamente solo lo bese, me deje llevar por la situación, por lo que había dicho, por lo que me había hecho sentir y para ser sinceros Saga me gusta desde que éramos pequeños.

 

f No juegues conmigo Aio, no lo soportaría, te dije lo que he guardado en mi corazón con tanto recelo.

 

f Y nunca podría jugar contigo  - desvió la mirada, soltando mis manos -  Saga, mírame por favor  - busque su mirada -  ahora escúchame tú  - solo guardo silencio y así que decidí continuar -  desde que llegamos al Santuario y te vi, lo primero que cruzo por mi mente fue un “que niño tan apuesto”, debo admitirlo, me gustas desde entonces, tuvimos la fortuna de crecer juntos, cosa que agradezco, todos los días despertaba con la firme intención de decírtelo y todos los días fallaba por que prefería tenerte como amigo a no tenerte.

 

f Justo así me sentía yo  - lo vi con una sonrisa en el rostro -  lo siento continua.

 

f Después apareció Shura  - su rostro ensombrecio –  con sus atenciones, mimos, palabras y demás me fue enamorando y acabe aceptándolo, amándolo, pero él no era ni será tú  - sus ojos recobraron su brillo, lo sé, le di una esperanza -  cuando despertamos en esta nueva vida, en la primera persona que pensé fue en ti  - mi mano acaricio suavemente su mejilla -  quería verte a ti antes que a cualquiera, incluso antes que a mi hermano, tu nombre fue lo primero que dije, pero no estabas, te fuiste y Shura se quedó a mi lado, así que retomamos nuestra relación donde la habíamos dejado y ahora estamos en esta situación, me entiendes que no puedo hacerle esto.

 

f Lo entiendo, es solo que ya no puedo contenerme  - mi rostro estaba entre sus manos -  es verte y aguantarme las ganas de besarte.

 

f Saga… … yo… …  - me beso nuevamente, lento, suave pero intenso a la vez.

 

f Sé que tienes una relación, lo entiendo perfectamente, Shura es un gran hombre, un caballero ejemplar, te ama eso es cierto  - bajo la mirada antes de seguir -  Aioros, te amo más que al aire que respiro…, y solo quería que lo supieras, llevo callándolo por mucho tiempo, he intentado alejarme, desaparecer de tu vista, pero todo es imposible, eres lo primero que pienso cuando despierto y lo único que invocó en mis sueños mientras duermo.

 

No sé qué paso en ese momento, no sé si fue su mirada, sus palabras, talvez fue el ambiente o el momento, pero solo me deje llevar, lo bese como siempre quise hacerlo y nunca me atreví, me tomó fuertemente en sus brazos, sin quererme soltar.  El viento soplaba meciendo su cabello, era un instante que parecía irreal, único entre los dos, pero como todo, tenía que terminar, a pesar de no quererlo.

 

f Tenemos que irnos… … …  - no quería que las cosas quedarán así, pero no había otra opción -  … … debemos regresar… …

 

f Se hace tarde y nos esperan… …  - rozó mis labios una última vez.

Notas finales:

De todo corazón les agradezco que hayan dedicado un poco de su tiempo en leer esta historia, como pueden notar queda inconclusa aún.  Haré todo lo posible por actualizar pronto.

 

Bien ¿que les parece si me dan su opinion, alguna sugerencia, comentario o lo que sea?.

 

Hasta pronto. Besitos.

Ciao!!!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).