Llevó la mirada hacia arriba a la par que sus dedos dejaron de deslizarse sobre el teclado de la computadora, suspiró y su mirada ahora se poso en todas las puntas, ahora cianóticas, de sus dedos, una vez más su mirada se poso casi en el borde superior de la habitación, la cortina de tonos amarillos no paraba de ondear ante sus ojos como si estuviese burlándose de él, el aire frio se colaba por el par de ventanas que alguien había olvidado cerrar, un escalofrió recorrió su cuerpo entero y se levantó sintiendo como sus músculos se quejaban por el continuo reposo al que habían sido sometidos tan cruelmente el día de hoy, él solía dormirse lo más pronto posible, amaba dormir, pero el trabajo no le había dejado hacer eso el día de hoy; intentó en vano estirarse a todo lo largo de su cuerpo para alcanzar la ventana por sobre la computadora y cerrarla, está era una de las desventajas de su corta estatura además, claro está, de las constantes bromas a las que era acreedor, no solo de sus compañeros, si no del todo el mundo durante todo el día, pero ya estaba acostumbrado y la mayoría de las veces no suponía ningún problema para él pasar todo por alto, sobre todo cuando sus compañeros sabían muy bien a que se atenían cuando hozaban lanzar algún tipo de comentario que tuviese que ver con su estatura.
Se dio por vencido en tratar de cerrar, solo con ayuda de su cuerpo, la ventana e intento de nuevo concentrarse en su trabajo pero sin volver a tomar asiento, simplemente se quedo parado en el mismo lugar frente a la pantalla del computador, tenía muchas ganas de ir a dormir; una nueva ráfaga de viento le hizo estremecer y abrazarse a si mismo rodeando su cuerpo con sus delgados, pero no por eso menos fuertes, brazos, un nuevo suspiro salió de sus labios y miró de reojo la hora en la pantalla antes de que una de las voces que conocía a la perfección lo sobresaltará.
-JiHoon, son las tres y media de la mañana ¿No piensas dormir? ¿Y por qué demonios hace tanto frío aquí?- SoonYoung se froto los brazos con las manos para darse calor, parado en el marco de la puerta, mientras observaba a su pequeña pareja.
-¿Porque estas despierto?- en realidad JiHoon no pensaba responder ninguna de las dos preguntas, especialmente la segunda, no tenía intenciones de dejarse a sí mismo en ridículo.
-Pasaré por alto el que solo estés evitando contestarme- sonrío de lado, conocía muy bien a JiHoon para no darse cuenta de sus intenciones, en otras circunstancias seguro se habría burlado de él pero ahora eso no era posible, no si quería seguir vivo -pero si te contestaré- le guiñó un ojo y se acercó a él, ahora se encontraba mucho mas despierto que hace unos segundos -estoy despierto porque mi pequeño gran demonio no ha llegado a irrumpir en mi cama y estoy muriéndome de frio- cuando llegó solo a un par de cortos centímetros lejos del cuerpo ajeno, se detuvo súbitamente y su cuerpo tirito mientras observaba la mirada divertida y los hermosos labios de JiHoon curvarse en una sonrisa burlona -con un demonio, vas a enfermar si estás aquí en estas condiciones ¿quien te dejo abierta la ventana?
JiHoon intentó contestar pero SoonYoung enseguida le interrumpió con un movimiento de mano, restándole importancia, frunció el ceño y se cruzo de brazos.
-Olvídalo, no tiene importancia ahora- SoonYoung se estiró por sobre la pantalla del computador y logró cerrar la ventana, enseguida las cortinas detuvieron su ondular.
JiHoon pensó que aunque SoonYoung no le llevará tantos centímetros, a su parecer, estos eran muy necesarios a la hora de la realización de algún menester tan simple como éste que comprobado estaba le podría salvar de un buen resfrío.
-Gracias- esperó que SoonYoung se quitará de enfrente la pantalla e intentó sentarse en su cómoda silla, pero su brazo derecho fue atrapado por una gran mano y su cuerpo enseguida se encontró siendo atrapado entre los brazos de su hyung; calló por ahora, esperaría a saber la razón de esta acción.
-Ni creas que dejaré que regreses a aplastar tu trasero en esa silla mientras regreso solo a la habitación, por supuesto que no, tú vendrás conmigo y dormiremos hasta que alguien nos despierte.
Arqueo una ceja al escucharle, no le gustaba que le dijeran que hacer y SoonYoung lo sabía más sin embargo al parecer era masoquista porque incluso osaba hacerle bromas como a todos los demás, aunque secretamente eso le gustaba un poquito; se movió lo suficiente para que sus labios tocarán uno de los hombros ajenos y segundos después dio un fuerte mordisco en ese lugar.
-¡Hey! ¿Porque me muerdes?- estaba solo un poco sorprendido por la reacción de su pareja, con su pequeño demonio nunca sabia que esperar, aunque definitivamente no abría esperado que le mordiera, más bien estaba esperando algún golpe, eso era lo normal.
-Sabes que no me gusta que me den ordenes, yo solo iba a guardar el trabajo y apagar la computadora así que suéltame- JiHoon se deshizo del agarre y volvió a su silla, al mando de la computadora para hacer exactamente lo dicho.
-No demores cariño- SoonYoung se inclino y mordió suavemente la punta de la oreja de JiHoon para irse enseguida a la habitación, está era una pequeña venganza por la mordida que mañana seguro dejaría una marca purpura en su cuerpo, lo bueno es que con este clima tan gélido no tendría que preocuparse mucho por el tipo de ropa que cubriera la evidencia.
JiHoon detuvo enseguida todo movimiento al sentir la suave mordida en su oreja, ese era un punto sensible de su cuerpo y SoonYoung lo sabía, enseguida sintió la calidez extenderse por su rostro y maldijo por lo bajo a su novio que sabia como hacerle sonrojar; minutos después termino de guardar y cerrar todo, acomodo las cosas en el escritorio, una vez todo en orden apago la luz y salió de la habitación caminando en la penumbra hasta el cuarto donde estaba la cama de SoonYoung.
Con el leve resplandor de la luna que se colaba por la ventana pudo ver como una delgada silueta con cabellos rosas entraba en la habitación y se dirigía hacia el, encendió la pantalla de su celular para alumbrar el camino restante de su pareja, no querría que se tropezara con alguna cosa que alguien había dejado tirada por el piso.
Se abrió camino entre calcetines, cables y una manta, la recogió y antes de meterse a la cama con su novio se paro en el borde de esta y miró hacia la cama de arriba donde había una persona en posición fetal, lanzó la manta hacia ahí y el cuerpo enseguida se movió para abrigarse con ésta; puso los ojos en blanco y bajo metiéndose en la cama junto a SoonYoung.
Mantuvo alumbrado siempre a su pequeño demonio viendo como la camiseta se elevaba lo suficiente para apreciar la suave piel lechosa del vientre y parte del pequeño ombligo que gustaba de besar, lamer e incluso dar pequeñas mordidas; teniendo por fin a su novio junto el dejó el celular en la esquina de la cama bajo la almohada y envolvió a su pareja con sus brazos, JiHoon enseguida se pego a su pecho dejando sus brazos flexionados entre ambos, está era la posición en que solían comenzar a dormir, a veces despertaban de la misma manera pero generalmente era de una forma diferente, JiHoon solía ponerse sobre el o incluso correrse hasta el borde de la cama casi a punto de caer, era demasiado inquieto pero su sueño era profundo.
-Buenas noches Youngie- JiHoon susurro y cerró los ojos dispuesto a dejarse vencer por el cansancio, sintiéndose tan cálido y protegido como solo lograba hacerlo sentir su madre y su novio.
-Buenas noches amor- SoonYoung respondió al susurro de su pareja con una sonrisa en sus labios, pocas eran las veces que JiHoon le llamaba de una forma especial, eso no era típico de él pero ahora con todos durmiendo él podía perder la vergüenza a hacerlo; le abrazo un poco más fuerte contra su cuerpo y cerró los ojos, disfrutaría de las horas que le quedaban para mantener a JiHoon entre sus brazos
Antes de caer rendido al sueño, JiHoon pensaba entre el sopor de su somnolencia que podrían ser muchas las desventajas de su corta estatura pero sin duda el poder estar completamente envuelto por el cuerpo de su novio era una de las ventajas que superaban con creces a todas la demás nimiedades.
FIN