La historia es narrada por Saruhiko
Eh mantenido una relación con Misaki por 5 años, nos casamos cuando ya teníamos 3 años de noviazgo, ese fue el momento más hermoso de nuestras vidas, por primera vez me sentí realmente completo, se podría decir que todo era miel sobre hojuelas.
Paso 1 año en el cual vivimos felices y sin preocupaciones, se podría decir que todo era perfecto en nuestras vidas, hasta que nos llegó la noticia más importante de toda la vida, Misaki... mi Misaki tenía en su interior el pequeño fruto de nuestro amor, no voy a mentir al principio me sentí muy nervioso con todo esto pero, Misaki por su parte estaba muy feliz y emocionado.
El primer trimestre fue un cambio rutinario bastante grande, entre las náuseas, los cambios de humor y el hecho de que Misaki dormía gran parte del día por el cansancio que provocaba el embarazo, aunque no podía negar lo hermoso y raro que se veía, me encantaba verlo dormir, pero me seguía resultando raro el hecho de que el hiperactivo de Misaki estuviera tan tranquilo y relajado.
El segundo trimestre no estuvo tan mal, Misaki iba recuperando sus energías y volvía a ser el Misaki de siempre, al poco tiempo llegaron los antojos, principalmente lo que mas me pedía era helado, habían veces en las cuales tenía que comprarle 2 o 3 litros de helado por día, realmente no era una molestia para mi, lo que mas me encantaba era ver a Misaki acariciando su barriga, me emocionaba el hecho de que cuando yo tocaba su barriga podía sentir como se movía el bebé dentro.
Ya a mediados del cuarto mes nos enteramos de que nuestro bebe seria un niño, rápidamente Misaki quiso buscar un nombre adecuado para el ya que según el quería que el niño tuviera un nombre perfecto y al final solo me calenté la cabeza buscando un buen nombre.
-¿Qué te parece, Mitsuki?.
-No es muy de niña, no me gusta.
-¿Miyuki?.
-No.
-¿Mutsuki?.
-Que no.
-Pues si no te gusta ninguno de los nombres que te digo, entonces tu inventa uno.
-¿¡Ah!? ¡¡No me vengas con esa mierda Saru!! el nombre de un niño es algo muy complicado e importante, no se puede tomar a la ligera, tenemos que estar de acuerdo los dos con el nombre.
-Tsk... Bien de acuerdo, pero todavía nos quedan poco mas de 4 meses para elegir un nombre, no veo la necesidad de apresurarse.
-Por lo mismo Saru, mientras mas tiempo tengamos para escoger un nombre mejor.
-Que molestia... Misaki iré a dar una vuelta.
-¿Ha? y ¿el nombre del niño?.
-Por lo mismo, tal vez si tomo algo de aire fresco mi mente se despeje, ¿no crees?.
-Bueno si creo que tienes razón, pero ¿cuando vuelves?.
Su voz sonaba algo triste demasiado para mi gusto y es ahora que me acuerdo que con el embarazo se ponen mas sentimentales. Pude haberme acordado de eso antes de sugerir la idea, pero realmente necesito despejarme así que no me queda de otra mas que salir.
-Misaki.
-Uh ¿que?
-Volveré dentro de poco, traeré helado - pude llegar a notar como sus ojos se iluminaban un poco- así que por ahora solo espérame y aprovecha de pensar un nombre tu también.
-¡¡Hai!!.
Saliendo de casa me dirijo al único lugar en donde pueden aclarar mis dudas... a Homra.
Al llegar me senté en un taburete en la barra frente a Kusanagi-San, ya allí le conté a el problema que teníamos.
-Um, bueno creo Yata-Chan tiene razón, no se puede tomar el nombre de un niño a la ligera, después de todo es el nombre que llevara un niño y lo tendrá que mantener durante toda su vida, si eliges un muy mal nombre la persona perjudicada no serás tú, será el.
-Bueno eso es cierto, pero a ninguno puede decidirse por un nombre, esto es demasiado complicado-tras decir esto pude escuchar la voz de Totsuka-San detrás de mi.
-Creo que sería mejor si todos ayudáramos a elegir un nombre ¿no crees?.
-¿¡Ha!? no creo que sea buena idea, sería aún mas complicado, ya que todos tiene gustos muy diferentes y raros.
-Por lo mismo Saruhiko, si lo hacemos entre todos será todo mas fa- Pude ver como Anna le tapaba la boca antes de terminar.
-Saruhiko.
-Dime.
-¿Que tal Haruka?.
-Um, ese nombre no suena tan mal, sería mejor que lo consulte con Misaki.
-De acuerdo, pero ¿no crees que Misaki te esté esperando?.
-Mierda se me olvido que tengo que regresar pronto, bien me voy, gracias Anna.
-De nada.
Salí rápidamente del lugar y por suerte me acorde del helado, ya que cuando llegue a casa Misaki estaba un poco molesto, aun así logre apaciguar a Misaki con el helado.
-Oi... Misaki.
-Um, dime.
-¿Que te parece el nombre Haruka?.
-Oh, ese nombre si me gusto- Pude ver como se sentaba a mi lado mientras sonreía- Realmente salir a caminar aclaro tu cabeza Saru.
-De hecho Anna eligió el nombre.
-¿Anna?.
-Si.
-Bueno, no importa sea como sea me encanto, ya quiero que nazca.
-Yo también- acariciaba su barriga mientras le decía eso- Misaki... Te amo -al decir eso un hermoso color rojo tiño su rostro, me sorprende que a pesar de todo el tiempo que llevamos juntos siga reaccionando así, bueno aunque se ve hermoso en el.
-Bu-bueno..n-no puedo negar...que yo también.. T-te amo- Intento ocultar su rostro en mi hombro como pudo, realmente mi Misaki es demasiado tierno.
Los meses pasaron demasiado rápido y el día tan esperado llego.
Me desperté en medio de la noche a eso de las 3:20 de la madrugada al sentir unos quejido muy fuertes provenientes de Misaki, me levante y llame a la ambulancia, en cosa de unos minutos nos encontrábamos en el hospital, el tiempo paso tan lento demasiado a mi parecer, estaba demasiado nervioso y como no estarlo en esta situación, hasta que vi salir a una enfermera la cual se acercó a mí con un pequeño bulto entre sus brazos.
-Felicidades señor, es un niño fuerte y saludable-dijo eso mientras me entregaba el pequeño bulto
-H-hola pequeño- no iba a mentir al verlo entre mis brazos más de una lagrima cayo por mis mejillas, estaba realmente feliz- Haruka, mi pequeño y hermoso Haruka.
Con la llegada del bebé a la familia se podría decir que la nuestro hogar y nuestras vidas se iluminaron por completo, pero hay algo que me recuerda que la vida con el bebé acaba de comenzar.