Despierto... Y veo el mismo techo blanco. Suspiro, me siento y la sabana que me cubre cae hasta mi regazo, dejando al descubierto mi piel desnuda no me importa, y a ti tampoco, ya que te veo sentado frente a mí. Al verme despierto sonríes, me sonríes, con esa sonrisa cálida y resplandeciente como los rayos del sol... ¿Por qué lo haces? NO SONRIAS, YO arruine tu vida, es mi culpa que ahora tu vida sea así... Tus manos, aquellas que me acarician y consuelan... Aquellas que jure proteger para que nunca cambiaran, para que siempre desprendieran calor y amor.... Ahora están bañadas en un líquido carmesí, están manchadas de sangre.
OH! Pero no de cualquiera, esta sangre que cubre delicadamente tus manos, es la sangre de aquella gente que se atrevió a lastimarte, a dañarte... Pero aun así no les guardas rencor; a mí tampoco. ¿Por qué? Odias la violencia, no te gusta el pelear, pero para mí el golpear, patear y hacer sufrir a la gente es pan de cada día.
Yo que nací de ti, de tu soledad, tristeza y desesperación de no querer estar solo, y que esa gente te lastime, pero no solo tu cuerpo... No, no se conforman con eso, lastimaron también tu corazón dejando en el... Huellas que con el tiempo me he encargado de suturar y cerrar, tratando de que solo queden encerradas para siempre y no las veas. Y yo en tu lugar enfrento al mundo mientras sueñas...
Piensas positivo, piensas que algún día todo cambiara... No te puedo decir ingenuo, aunque lo eres, no te puedo decir inocente, aunque lo sabes, sabes la verdad pero te niego la realidad... Prefiero que vivas en una realidad que creo para ti y así no veas como cada día limpio el mundo de la basura de gente que una vez te lastimo... Para que cuando despiertes, veas el mundo que quiero mostrarte...
No quiero verte llorar! Nunca me ha gustado, lo odio... Vive esa fantasía, vive feliz y déjame a mí limpiar el mundo para ti... Y cuando el mundo cambie, tal vez pue-
-Tal vez no cambiara. – Hablas por primera vez desde que despierto y me sacas de mi ensoñación.
Me sorprendió, aunque eres yo y yo soy tu, trato de ocultar lo que pienso para no molestarte con mis problemas, al ver cada día más este mundo tan podrido, ya suficiente tienes con esos recuerdos que aunque trato de borrar siguen ahí, clavados en tu corazón como una espina que lastima. Me esfuerzo porque no te enteres-
-Lo sé, no te esfuerces. A mis ojos eres un libro abierto.
Como detesto eso! No me leas! No veas a través de mí! No quiero que ahora sepas que esas hermosas alas tuyas, tan blancas como la nieve, tan puras, tan suaves, que guarde celosamente para que solo yo pueda verte con ellas... Que esas alas ahora gotean el líquido vital que todo ser necesita para vivir. Estas manchado y es mi culpa, deberías odiarme, maldecir, pedirme que desapares-
-No lo digas! – veo que te enojas, eso es raro. Respiras y abres otra vez tus labios, vas a hablar... - Te quiero, eres importante para mí, te perdono aunque no haya nada que perdonar.
Y sonríes.
Vuelvo a pensar que tu sonrisa es sin duda alguna los más hermoso que hay en el mundo, una luz entre el infierno del mundo, una luz que quiero solo para mí.
-Ven, recuéstate en mis piernas y duerme, te ves cansado... - Ja, ¿Dormir? Pero si acabo de despertar y aunque lo hiciera mis sueños no son placenteros, no te imagi-. – Y tranquilo, yo velare tus sueños...
En definitiva, no puedo contra ti. Hago caso, no puedo ni quiero negarme, me recuesto en tus piernas dobladas, apenas mi cabeza toca, la que ahora es mi almohada, acaricias mi cabello, "suave" te oigo susurra, te inclinas y besas mi frente, siento sueño... Siempre me pregunto ¿Cómo lo haces? Cierro los ojos, ahora se sienten pesados...
-Tú tampoco quieres ver la realidad, duerme y sueña que yo alejare de ti esas pesadillas que te atormentan. No lo olvides... No importa lo que hagas o digas, no te culpo de nada y tampoco te odio, te quiero y eso es algo que nunca va a cambiar... Ahora descansa y olvídate de todo...
Su voz tan suave y aterciopelada, se vuelve un susurro agradable, como una droga, mi realidad se esfuma y siento que floto, me duermo...
Y lo sé, cuando despierte una y otra vez será igual... Estarás aquí! Otra vez aquí. Y no me molesta, lo ansió, me calmas, me complementas y me haces sentir único; y tú te relajas, te permites soñar y te alejas de tu prisión de soledad.
Una vez más... Estas aquí!