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Este cuerpo no es mio por deathotel22

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Notas del fanfic:

Este fic esta basado en una novela que se llama lalola, con varios cambios que hice para que se acomodara a mi conveniencia....los personajes no me pertenecen los tome de la novela, sin más disfruten  

Notas del capitulo:

Les traigo un fic un tanto extraño espero que les guste

Hola. Mi nombre es William Kaulitz, tengo 25 años, soy Director de la revista “Don”, una revista hecha por hombres, para hombres - ¿Las mujeres?- Las mujeres son para mí un pasatiempo, un invento de Dios para que los hombres no nos aburramos y como yo tiendo a aburrirme muy pronto, trato de cambiar de modelo a diario- ya saben lo que dicen- son 7 mujeres por cada hombre y yo vengo por las que me pertenecen- aunque si puedo superar la cuota designada por el universo- no me molestaría, de todas formas no creo que los demás hombres se enteren. Hay 2 mujeres que están prohibidas para mí: mi madre por obvias razones y mi mejor amiga Graciela; somos amigos desde que estábamos en la secundaria, ella es como mi hermana pequeña. Ahora Grace- así le digo yo de cariño- vive conmigo, al parecer su novio resultó ser un idiota- no es que a mí me guste hablar mal de los de mi gremio- pero el tipo parece un chango con camisa.

Soy un joven soltero muy codiciado- y no las culpo- soy sexy, soy atractivo, soy muy bueno en la cama –pero eso ya lo sabias- tengo un departamento en una zona exclusiva, poseo un auto del año, me encanta mi trabajo y amo como soy, cualquier chica haría lo que fuera por mí- por eso ¿Para qué limitarse a una sola?- Bueno muñeca ahora ya sabes sobre mí, ¿Por qué no me cuentas algo de ti?            

Bill despertó semidesnudo junto a una mujer-¿Cómo se llama?, da igual- cuidadosamente se deslizo por la cama para vestirse e irse, no quería que la tipa -¿Cual quiera que fuera su nombre?- se despertara y empezara con arrumacos y gestos de amor falso que le causaban acidez. 

Salió del hotel a donde llevó a su amante sintiéndose todo un ganador-una más que cae ante los encantos de este toro- se alago a sí mismo-

Iba camino a la editorial en donde trabajaba, sus faenas nocturnas casi no le daban tiempo de ir a su casa a cambiarse, eso no le importaba, de todos modos así fuera en taparrabos las mujeres siempre babearían por él.  

Como era de costumbre, cuando las mujeres con las que acostumbraba dormir se percataban que Bill las había dejado, empezaban a llamarlo desesperadas y como ya era de costumbre él nunca las atendía.

Gastón Zack-Subdirector de la revista y mano derecha de Bill- lleva más tiempo en la revista pero jerárquicamente está por debajo de él. Sus únicos propósitos en la vida son el sexo y el dinero, o si lo ponemos en orden: el dinero y el sexo.   

Bill es el estereotipo de joven ganador: alto, guapo; de cabello negro, corto; que le daban un aire de modelo internacional, su cuerpo está bien trabajado, era un egocéntrico musculoso, ojos café claro, pestañas largas que hacían suspirar a cualquiera, labios carnosos con los que aprovechaba para seducir a la mujer que quería, se sentía confiado y esa era su arma de seducción más letal.

Al llegar a su oficina escucho como-Aguirre, su jefe- quien estaba a punto de separarse, hablaba por teléfono con su futura ex mujer.

-          La familia ya sabes- apuntó a su teléfono intentando excusarse.

-          Ni me lo digas…. Mujer, hijos, una desgracia que yo no pienso conocer- movió la mano como si espantara moscas.

-          Nunca digas nunca-

-          Quizás en la otra vida, pero me voy a morir joven.

-          Muérete cuando quieras, pero que no sea mañana- Aguirre se quejaba de sus zapatos apretados- ¿Cómo vamos?- se refería al proyecto que presentarían la siguiente mañana- 

-          Perfecto, perfecto, tu tranquilo todo marcha sobre ruedas-

-          Hace un año que estoy tras estos inversores- volvió a acomodarse el zapato- tranquilo voy a estar el día que compren las acciones- sin más se retiró a su oficina para seguir lidiando con sus zapatos. 

Su teléfono empezó a sonar, ya estaba acostumbrado al acoso por parte de las féminas- Hola Bill, ¿cómo estás?, te llamaba para saber qué había pasado, llámame cuando puedas, te mando un beso- mensajes así siempre aparecían en su contestador a toda hora.    

«La emoción, es el motor que mueve a cada uno de los que trabajan en esta editorial y si bien, todos saben que el trabajo en equipo es importante, todos quieren demostrar que el suyo es el más importante. La presentación ya está lista, mañana este equipo se juega la vida.»

Después de un día ajetreado de trabajo Bill y sus compañeros siempre solían acudir a un bar llamado “Cero”-el purgatorio entre el cielo y el infierno en donde las almas se encuentran al salir del trabajo, en cuestiones de conquistas, este es el campo de batalla.-

Esa tarde decidieron festejar por adelantado la firma de los inversores.

-          ¿Hola?- Bill contestó su celular- ¿Quién es?-

-          ¿Cómo que quien es? Soy Romina- 

-          Ah, Romina…. ¿Qué pasa? ¿Cómo estás?-

-          Bien ¿Qué paso hoy en la mañana, te desapareciste?-

-          Estoy en una reunión de trabajo, no puedo hablar ahora-

-          Bill, tengo ganas de verte, te he estado llamando todo el día-

Si algo le fastidiaba a este casanova era que las mujeres lo ahorcaran con sus llamadas de novia controladora, no lo dudo y cortó la llamada. La tarde era joven y ningún revolcón de una noche le iba a impedir que se divirtiera de lo lindo.

En medio de todo el alboroto del bar, apareció una mujer despampanante que Bill no hubiera dejado pasar si no fuera porque ya se acostó con ella.

-          No puede ser- dijo el pelinegro fastidiado, mientras se terminaba otro trago-

-          Bill-

-          Romina- le dedico una sonrisa lasciva.

-          ¿Puedo hablar un minuto contigo? Por favor-

-          Ahm- le dio un vistazo a la mujer- Que linda estas-

-          ¿Terminaste tu reunión?- observo conteniendo la rabia, su novio estaba rodeado por dos tipos igual o más borrachos que él.

-          Uhm…- lo pensó un segundo- No, todavía no termino, es más estamos empezando. Tú y yo ya pasamos nuestro momento juntos-

-          Tu momento, querrás decir- aclaró Romina.     

-          A ver linda- se acercó a ella- yo no te pedí que vinieras, estoy aquí con mis amigos, la estoy pasando muy bien y no me pienso mover…si quieres tómate un trago, relájate… haz lo que quieras- lo dijo sin mucha importancia- 

-          ¿Me ves cara de estúpida?- quería matarlo por impertinente- pasamos la noche juntos o se te olvida, por ti deje a mi novio-

En ese momento intervino Gastón, tratando de ayudar a su amigo y más que nada tratando de coquetear con la chica, Romina no iba a permitir que se burlaran de ella, le quitó el vaso a Gastón y se lo derramó en los pantalones.

-          ¡Oye!, ¿Qué te pasa, te volviste loca?- Bill empezaba a enojarse con la tipeja.

-          Tú no tienes idea con quien te metiste William- se veía amenazadora- No tienes ni idea-

La loca salió del bar dejando al conquistador un tanto intrigado, después se riño mentalmente por prestarle atención a una mujer ardida- porque después de todo, ¿Qué podría hacer?-

Notas finales:

diganme si les gusta o de plano es un asco!!! 


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