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Amor ficticio por Tatsuki Neko

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Notas del fanfic:

Los personajes no son de mi propiedad.

Notas del capitulo:

Este One Shot es una precuela del fanfic que hare despues, solo que el protagonista sera Len.

 

Repito los personajes no me pertenecen.

Kaito


Con pesar miro la cama en donde compartimos nuestro amor. Tomo asiento en una esquina y me aferro con ardor a la pañoleta amarilla que colgaba de tu cuello. Tan solo ha pasado una semana desde que te has ido, pero para mí ha sido como un siglo, esperándote, ansiando estar de nuevo a tu lado y acurrucarte entre mis brazos…


-Len…-susurro al vacío, con la esperanza de que quizás mi voz te alcance. Entonces rememoro el día que nos conocimos hasta tu partida


---------------------------Flash back---------------------------------------


No había pasado más de 2 años desde mi creación. Aquella vez caminaba junto a Miku sobre un paisaje lleno de flores y praderas decorado a gusto por mi adorable compañera, en nuestro mundo virtual podíamos alterar la realidad como quisiéramos siempre y cuando no dañáramos el sistema. Miku parloteaba efusivamente sobre unos nuevos vocaloid que se integrarían a nuestro grupo, hablaba tan rápido que no podía entender todo lo que decía.

 

Entonces el tiempo se detuvo, abrí aún más mis ojos porque no podía dar crédito a lo que veía. Bajo un árbol un encantador pequeño de cabellera rubia y orbes azules se sonrojaba furiosamente por como una corona de flores era puesta sobre sus mechones dorados. De repente, levantaste la cabeza y nuestras miradas se encontraron. Por más loco que suene, en aquel momento pude escuchar el latido de nuestros corazones, tan frenéticos que creí que algo fallaba en mi programación.


-¡Kaito! ¡Hey despierta! ¡Mira son los nuevos vocaloids!- me zarandeó Miku mientras volvía a la realidad.


Nos acercamos al árbol, nos presentamos y antes de poder iniciar una conversación contigo una copia tuya hablo:


-M…mi nombre es Rin…Kagamine Rin!- se presentó algo tensa y nerviosa- Y este enano de mi lado es Len…


-¡¿A quién llamas enano?!- te levantaste de golpe del suelo- ¡Tenemos la misma edad y es claro que soy más alto que tú!


-¡Increíble tienen la misma edad, entonces deben ser gemelos!-gritó emocionada Miku.


Aquello llamó mi atención, tu presencia había nublado de tal forma mis sentidos que no me había percatado del gran parecido que compartían, los miré detenidamente y en efecto eran como 2 gotas de agua. Si no fuera por el peinado y su vestuario os hubiese confundido. O quizás no, en realidad sentía que tus ojos me absorbían, como si quisieran llevarme hasta lo más profundo de…


-Deja de mirarme.


-¿Qué?- tu voz me sacó de mis pensamientos.


-Que dejes de mirarme- vociferaste- tu mirada me incomoda.


Note un pequeño rubor en tus mejillas, algo que me pareció además de adorable muy gracioso. No pude contener la risa.


-¡¿Qué te parece tan gracioso?!-gritaste exaltado- ¡¿Acaso tengo algo en la cara?!


Como respuesta me acerqué a ti y quité la corona de flores que yacía en tu cabeza. Era de esperarse, el sonrojo aumento de tal manera que toda tu cara se encendió.


-Además de enano también idiota- Comentó entre risas tu hermana.


-Dejen de pelear-intervino Miku- Mejor vengan con nosotros, les presentaremos al resto de los vocaloids, estarán encantados de conocerlos.


Tenía el presentimiento de que este encuentro seria el comienzo de algo más allá de la amistad e incluso más allá de nuestra realidad.


************** . *****************


¿Recuerdas aquel dueto?

 


Aunque en un principio me evitabas porque supuestamente te había humillado frente a tu hermana, terminamos siendo buenos amigos, inseparables diría yo. Si no te encontrabas con tu hermana, estabas conmigo practicando alguna canción o preguntándome sobre si me interesaba alguna de nuestras compañeras. Pacientemente te expliqué sobre la relación que tenia con Miku, éramos muy buenos amigos ella fue quien me dio la bienvenida y quien me guio por este mundo virtual. El tiempo pasaba con suma tranquilidad, hasta que un día tu querida hermana nos grabó mientras cantábamos y la subió a la red. La reacción del público, en especial del femenino no se hizo esperar y nos pidieron un dueto. Cuando te enteraste del tema tus piernas flaquearon y terminaste sentado en el piso.


-¡¿Magnet?!- Gritaste mientras estrujabas incrédulo el papel que contenía las partiduras.


-Vamos Len todo estará bien-intenté calmarte- Ya vez que le fue bien a Miku y a Luka…


-¡Pero es que ellas se aman!-respondiste exasperado- ¡Se gustan desde hace muchísimo tiempo…!


-¿Y?


-Que para cantar esta canción debe haber un sentimiento de por medio…


-¿Y si te enamoras de mí solo mientras dure esta canción?- Sugerí con una sonrisa.


-¡¿Que?!


-Imagina que estás enamorado de mi Len, solo mientras dure la canción.


La discusión se extendió, pero minutos más tarde aceptaste el trato.
El día de la grabación llegó, te noté muy nervioso. Apenas toque tu hombro para llamar tu atención y preguntar si te encontrabas bien, en respuesta diste un salto y pegaste un pequeño grito.


-Cálmate Len


-No puedo…-susurraste mientras agachabas la cabeza- No puedo fingir que estoy enamorado…


-Entonces cree que yo si lo estoy de ti.


-¿Qué?- me miraste de nuevo con esos zafiros que denotaban inquietud.


-Len yo te amo-declaré sin apartar la mirada- Por eso canta esta canción conmigo.


Si no me equivoco, luego de que lancé aquellas palabras quedaste en shock. Extendí mi brazo hacia el tuyo, tomé y bese el dorso de tu mano. Sabía que era un acto egoísta de mi parte, un capricho mío que lleno mi pecho de euforia y felicidad. Entonces un sentimiento floreció, uno que por un segundo tuve la esperanza de que algún día fuese correspondido. Pero en el fondo sabía que debía considerar los tuyos, que había la posibilidad de que me odiaras luego de este día.


-Está bien- dijiste mientras apartabas tu mano- s…supongo que estará bien decir que te amo solo para interpretar esta canción ¡No pienses mal! ¡Esto solo lo hago por el público y las fans!-alegaste en tu defensa.


“Es tan adorable”- pensé para mí mismo mientras te dedicaba una sonrisa.
Cantamos la canción como si fuésemos dos amantes desesperados en busca del otro. Como si el mundo nos diese la espalda por seguir nuestros sentimientos. Como si te fuera a perder de un momento a otro. No tenía idea de que en un futuro aquello se volvería realidad, una amarga realidad.


****************** . **************


¿Recuerdas aquel beso?

 


Justo antes de que la música de fondo se terminase, te tome entre mis brazos y pose mis labios sobre los tuyos. Fue un beso casto y corto, pero cumplí mi cometido.


“Te había robado tu primer beso”


No obstante, luego de aquello me evitaste por al menos 2 meses. Tiempo que pasé pensando en alguna manera de disculparme contigo. No soportaba la manera en que me tratabas, dejaste de visitarme y ya no respondías ningún mensaje que te dejaba.Te echaba tanto de menos, me carcomía los remordimientos, quizás no debí haber actuado tan impulsivamente.

 

Tiempo después empecé a reunirme con Meiko, no le dije que estaba enamorado precisamente de ti, pero sí de que había una persona especial que movía mi mundo con una sola mirada. Necesitaba sus consejos tanto para dejar de culparme por tu ausencia como también para llegar a tu corazón sin herirte, algo que luego entendí que era imposible:
“El amor duele, de lo contrario no es real”- Que irónico usar aquella palabra “real” cuando somos y vivimos en un mundo ficticio.


-Muchas gracias Meiko, al menos tuve la oportunidad de desahogarme un poco- le agradecí mientras salíamos de una cafetería de nuestro mundo virtual.


-No es nada Kaito para eso estamos los amigos-me respondióanimadamente- Aunque, tengo curiosidad de saber quién es la “afortunada” vocaloid que se ganó tu corazón.

-Bueno, en realidad…


-No tenía idea de que ya tenías novia- formuló una voz que me tomó por sorpresa- De haberlo sabido no habría aceptado cantar aquella canción contigo…soy un idiota.


Saliste corriendo como si de ello dependiese tu vida. Maldije mi suerte y salí tras de ti ¿Por qué justo cuando deseo aclarar las cosas contigo te apareces y malentiendes todo?
Para empeorar la situación recordé que hoy estaba programada una tormenta, según el sistema hoy llovería para darle un toque más “realista” al panorama virtual que tenemos. Tome más impulso y aumenté la velocidad, debía alcanzarte antes de que iniciase el aguacero.


Entramos al jardín donde nos conocimos, de repente tus piernas te fallaron y tropezaste, caíste de frente sobre el pasto.


-¡Len!- reduje la velocidad, me acerqué y te tomé del brazo.


-¡Deja de burlarte de mí!- gritaste mientras rechazabas con un manotazo mi ayuda- ¿Por qué? Si tenías novia…si no hubieras dicho esas palabras…. ¡sino me hubieras besado!


-Para, déjame explicarte.


- ¡Te odio!- proferiste- ¡te odio! ¡Me odio a mí mismo! ¡Odio cuando te acercas! ¡Odio lo que siento cada vez que te veo! ¡Yo...!


De repente el cielo tronó y silenció tus palabras. Las gotas empezaron a caer lentamente, mezclándose con tus lágrimas. No soportaba verte en ese estado, llegue a pensar que mi pecho explotaría de tantas emociones guardadas. Me arrodillé y tomé tu rostro entre mis manos.


-No tengo idea de cuánto daño te he causado como para que me odies tanto y mucho menos como enmendarlo-dije mientras los truenos seguían llenando los cielos- Pero, si pudiese volver en el tiempo no cambiaría nada. Lo que trato de decirte Len, es que no me arrepiento de mis actos en especial de “ese” día porque…estoy enamorado de alguien a quien he besado y en estos momentos me odia.


-…
-Y ahora voy a besarle una vez más.


Ladee el rostro y uní mis labios con los tuyos, el cielo dejó de tronar y la lluvia empezó a caer con más fuerza. Aun así no te solté, antes de apartarme sentí tus delgados brazos enroscándose en mi cuello, apenas nos separamos unos centímetros y tú volviste a unirlos tomando esta vez la iniciativa. Al fin este acto dejo de ser egoísta para pasar a un mutuo y silencioso acuerdo. Empapados, nos refugiamos en los árboles del parque, bajo sus copas seguimos con nuestras sesiones de besos y caricias. Fue algo completamente nuevo para nosotros y que fuimos descubriendo poco a poco.


************** . **************


¿Recuerdas aquella noche?


En verdad me duele mucho recordarla, no porque haya sido mala, al contrario fue como tocar y fundirte con el mismísimo sol. Sino porque fue la última vez que me dedicaste un “te amo”.


Para nosotros los vocaloids, que vivimos en un mundo virtual donde todo se mantiene y nada envejece, los años pasan desapercibidos y en un abrir y cerrar de ojos nos hallábamos a 150 años de nuestra creación.
Creíamos que nuestro amor seria eterno, que nada ni nadie podrían obstruirlo pero nos equivocamos.


La ambición de los humanos no tenía límites, buscaban más poder, más control y más formas de demostrar su superioridad. Los años no habían mermado aquello, fue todo lo contrario. Así empezó un monstruoso proyecto que consistía en traer a seres de la realidad virtual, es decir, de nuestro mundo al suyo. Hacía tiempo habían logrado teletransportar y materializar objetos, pero ahora se proponían en materializarnos a nosotros y, si el proyecto tenía éxito pasaríamos de ser seres ficticios a humanos de carne y hueso. No nos dieron más información, salvo los riesgos que traían consigo…si el proyecto fallase en uno…la memoria, los datos de dicho vocaloid se borrarían y jamás podría volver al mundo virtual.

Existe una palabra exacta para ello: “muerte” algo que nunca antes habíamos visto o experimentado.
Una ola de sufrimiento nos abatió cuando el proyecto dio inicio pues, no hubo ningún resultado positivo. Presenciamos un sin número de muertes, vimos como nuestros compañeros nos abandonaban para siempre.Fue una época de dolor y pesar que afrontamos juntos.

-Tranquilo, ya verás que un día el proyecto funcionará y esta pesadilla terminará- Te animé mientras te acurrucaba entre mis brazos.


-Incluso si el proyecto diese resultado nos sacarían de este mundo, de nuestro hogar… Nos separarían Kaito…


-Shhhhh- te silencié posando un dedo sobre tus labios- Eso no sucederá, pase lo que pase yo siempre estaré a tu lado.
-Pero…


-Aun cuando nos separasen te buscaría sin cesar - Nos besamos y nos fundimos en un abrazo.


Quizás no podía prometerte una solución inmediata, pero si darte mi palabra de que nunca te dejaría solo.


“Si tan solo las promesas bastaran…”
“Si tan solo tú también me hubieses prometido lo mismo”


Días después  nos anunciaron que el siguiente en la lista de pruebas sería un vocaloid conocido omitieron el nombre pero sabiamos que seria uno que estuviese dentro de nuestro círculo de amigos. Aquello fue como un balde de agua fría que caía sobre nosotros, sobre nuestras promesas…sobre nuestras esperanzas. Solo podía rogar internamente que no fueses tú.


Debí haberme dado cuenta, las señales eran tan claras. De un día para otro empezaste a dedicarme un te amo a cada momento, en cada oportunidad que nuestras miradas se conectaban. Todo sonaba a una despedida.


Ese día llegó sin previo aviso. Como de costumbre cuando caía la noche nos sentábamos en el sofá, cantábamos alguna canción y luego nos llenábamos de besos hasta que llegase la hora de acostarnos. Sin embargo, esa rutina fue cortada. De repente me llamaste desde nuestro dormitorio.
Cuando entré lo primero que visualice fue que la habitación estaba iluminada únicamente por velas, lo segundo y más resaltante fue que solo traías puesto la bata de baño.


-Len ¿me puedes explicar de qué se trata todo esto?


-Yo…-musitaste tímidamente mientras el sonrojo aumentaba en tus mejillas- P…podemos esta noche…


-Escucha si esto es otra idea de Miku y Luka para aumentar la pasión en nuestra relación…


-¡Ellas no tienen nada que ver! Es solo que quiero estar contigo y - te tomé de la barbilla, obligándote a mirarme a los ojos.


-¿Realmente no estas ocultándome nada, verdad?


-Yo te amo Kaito- respondiste aún más sonrojado- es solo que este proyecto me hace pensar en lo vulnerable que soy de perderte y….


-Está bien, te creo – respondí mientras desataba de un tirón el nudo de tu bata y esta resbalaba por tus hombros- hoy voy a devorarte por completo así que atente a las consecuencias.


Delinee tus finos labios con el pulgar de mi dedo, se veían tan apetecibles, tan tentadores que no pude contenerme y te besé con desenfreno.


Jamás imagine que sería nuestra última noche en aquel cuarto, no me percate que tu cuerpo se aferraba al mío mas por desesperación que por placer, ni que tu mirada evadía la mía para no ver las lágrimas que caían de tus orbes azules. Ahora que lo pienso esa noche fui egoísta, deseaba tanto olvidar la situación en la que nos encontrábamos que me dedique a disfrutar del placer que nos proporcionamos.


Recuerdo que repartí besos y caricias por toda tu anatomía, enfocándome en tu torso y tus pezones pues tenías gran sensibilidad en esas zonas. Intentaste sofocar tus gemidos con tus manos pero fue inútil, en cuanto atendí con deleite tú miembro estos cobraron mayor fuerza. Estaba preparándote para lo que vendría pero…


-Len…. ¿Te duele mucho?


-No s…solo sigue- respondiste mientras cubrías tu rostro con tu antebrazo, intentando ocultar en vano tus ojos llorosos.


- Para – te rogué- No puedo hacerte el amor en estas condiciones, es mejor que descansemos por hoy y…


- ¡No!-gritaste y te aferraste a mis hombros- ¿No lo entiendes? En cualquier momento podríamos desaparecer para siempre como nuestros compañeros.


-Es normal que tengas miedo de morir pero…


-¡No lo tengo!- objetaste- No quiero verte morir… ¡No quiero perderte!


-Len….


- Quiero amarte hasta que el momento llegue, quiero amanecer a tu lado…


-Len….


-¡Quiero otros 150 años más para amarte….!


Mi corazón estaba a punto de estallar, te rodee entre mis brazos mientras llorabas en silencio. En ese momento algo dentro de mí se quebró y rompí a llorar. Ninguna palabra salió de mi boca, si hubiese sabido que nunca más volvería a hablarte, si hubiese sabido que no volvería a escuchar tu vocecilla llamándome.


-Kaito- me sacaste de mis pensamientos- continuemos.


-Pero


-Está bien Kaito, todo está bien ahora.


Silenciaste mis objeciones con un beso, tenía en mente parar y por esa noche dormir abrazados pero todo se vino abajo cuando tus pequeñas manos empezaron a trabajar con esmero en despertar nuevamente mi excitación. Hicimos el amor toda la noche, nos fundimos una y otra vez hasta caer exhaustos sobre las sabanas. Recuerdo que jugueteaba con uno de tus mechones dorados, aquellos que junto a tus orbes azules me cautivaron aquella vez que te conocí. “Te amo” susurré mientras perdía la conciencia y mi mente se dirigía a un mundo de ensueños, levemente sentí tus brazos envolverme. Te aferraste a mí y, antes de cerrar los ojos susurraste un “lo siento”.


Soñé con el día que nos conocimos, con nuestro primer beso, con el día que bajo la lluvia nos correspondimos y nos fundimos en uno. Finalmente me abrazaste con fuerza y te disculpaste nuevamente, “entonces todo cobro sentido”.


Desperté sobresaltado gritando tu nombre, regulé mi respiración y observé la habitación, estaba más oscura de lo usual. Tantee con la mano izquierda encontrándome con tu sitio vacío. El corazón empezó a palpitarme con desenfreno, mi mayor temor estaba haciéndose realidad. Me levante con rapidez y me dirigí hacia las ventanas, estaban tan cerradas que obstruían cualquier filtración de luz. Cuando las abrí, la luz me segó y comprendí la situación.


Me vestí lo más rápido que pude y te busqué por cada rincón de la casa, cada puerta que abría confirmaba más mi temor. Salí apresurado por la puerta dejándola abierta. Corrí sin parar gritando tu nombre y buscándote desesperadamente con la mirada. De repente el panorama cambio, el cielo empezó a nublarse como si algo malo fuese a pasar, y entonces oí tu voz. Te escuché cantar junto a tu hermana y supe inmediatamente donde te encontrabas.


-“El jardín”
Corrí, sentí el viento contra mi rostro y un agudo dolor punzando mi pecho.


-“No por favor”


En algún momento deje de oír tu voz, una luz azulina inundo el jardín. Me adentre al lugar y te vi


-¡Noo!


Todo sucedió tan rápido, pero yo lo percibí en cámara lenta. Como si se tratase de una pesadilla corrí hacia ti pero no lograba alcanzarte, apenas noté que estabas rodeado por todos de nuestros amigos. Soltaste las manos de tu hermana y miraste al cielo contemplando un punto azul. Como si un rayo cayese sobre ti la luz te envolvió y te desplomaste en el pasto. ¿Por qué? ¿Por qué no me lo dijiste? ¿Por qué tenía que ocurrir esto? ¿Qué hicimos para que tal castigo cayese sobre nosotros?


-Len, responde ¡Len!- Gritaba mientras me aferraba a tu cuerpo.
-Ya no puede oírte- dijo Miku llorosa con voz casi inaudible- Sus datos están siendo borrados, no puede reconocer a ninguno de nosotros, lo lamento tanto.


-¿¡Porque no le detuvieron!? ¡¿Por qué tenía que ser él?!- Grité con rabia e impotencia- ¡Len!


Mis lágrimas cayeron sobre tu frente surcando tus mejillas y perdiéndose en tu barbilla. Tus ojos habían perdido todo rastro de vida y solo reflejaban mi triste rostro. Entonces, mi bufanda cayó sobre tu pecho, se había soltado de tanto movimiento y correteo. La envolví en tu cuello, desee que si bien tus datos fuesen borrados y olvidaras todo te llevases aunque sea esto de recuerdo. Tu cuerpo empezó a desparecer, una luz amarrilla comenzó a extenderse desde tus piernas llevándose cada parte de tu existencia.


-Te amo Len, también me hubiera gustado vivir a tu lado otros 150 años…


Despareciste entre mis brazos y todo el dolor que había acumulado salió a flote. Grité, grité hasta quedar sin voz. Poco importaba que mi programa se dañase. Le había perdido para siempre, había perdido aquel ser que no solo me acompañó por décadas, él le había dado vida y sentido a este ser irreal que estaba destinado a cumplir solamente para lo que había sido creado.


-----------------Fin del flashback-------------------------------


Y ahora me encuentro aquí en nuestra cama, desde ese día empecé a responder solo con gestos y monosílabos, poco después deje de interactuar con los demás vocaloids. En cuanto terminaba mi rutina me dirigía a nuestra casa y me encerraba en nuestro cuarto. No he movido nada desde tu partida, todo está tal cual la dejaste.


Según los humanos lo que estoy experimentando es una depresión por la pérdida de un ser querido. Según yo, estoy muriendo de manera lenta y tortuosa. Pese a que realizo las órdenes de mis maestros estoy roto. Canto  sin ninguna expresión en el rostro, como un muñeco, como debió ser desde un principio.


Seguí cavilando en mi mente hasta que unos pasos me sacaron de mis pensamientos. Alguien venia corriendo buscando cuarto por cuarto hasta dar conmigo.


-¡Kaito!


-Rin…


-¡Kaito no vas a creerlo!- gritó efusiva mientras me zarandeaba de los hombros.


-¿Qué está pasando?


-¡Es Len!-lo nombró con tanta alegría- ¡Esta vivo!


De pronto mi mente quedó en blanco, abrí aún más mis ojos llenos como si la vida volviese a mi cuerpo.


-¿De que estas hablando? Es imposible, él…


-¡Len lo logro! El proyecto funcionó ¡Len es finalmente un humano!
No sé cuál se manifestó primero, la sonrisa que crecía a medida que me hacia la idea de que Len aún no se ha ido del todo, o las lágrimas que empezaron a salir sin permiso.


-Kaito, muy pronto abandonaremos este mundo virtual, pronto te reencontraras con él- note como fruncia el seño-Solo que hay un pequeño detalle de por medio…


-¿Qué?


-Según lo que nos dijeron, como Len es el primer vocaloid en lograrlo no podía salir bien del todo- dijo con un dejo de tristeza- Se perdieron muchos datos durante el proceso de materialización-suspiró- lo que trato de decir es que Len no recuerda nada.


La alegría que antes fluía por todo mi cuerpo se detuvo, y de un momento para otro fue sustituido por un agudo dolor en mi pecho. Len no recordaría nada de lo que vivimos en este lugar, no recordara nada de lo que yo he rememorado estos días.


-Lo siento Kaito.


-Pero está vivo- respondí más para mí mismo- Len está vivo, podré volverlo a ver.


Rin no dijo ninguna palabra más,se acercó y me abrazó  mientras lloraba en silencio. Hacía tiempo que no dejaba que nadie se me acercase, me había hundido en mi propio dolor en soledad. Cuando se fue quede más tranquilo pero no en paz. Entonces abrí un holograma y miré la imagen que Rin me había pasado. Ahí estaba Len recostado en una camilla, sus rasgos eran aún más delicados y hasta infantiles. Bajeé la mirada y noté que traía la misma ropa del día de su partida.


-Esa es…


Ahí estaba la bufanda que le puse aquel día, la misma que sería una recuerdo mío junto con mi corazón. Caí de rodillas y algo nació en mi pecho, una calidez que hace mucho que no sentía; esperanza.


-No me ha olvidado, no por completo-susurré- quizás no recuerda a detalle lo que vivimos pero él no ha olvidado ese sentimiento. Aún tenemos una oportunidad.


Desde entonces espero ansioso mi turno para materializarme, aunque primero estaba programada Rin. No importaba si pasaran años yo iría y le demostraría nuevamente un amor de 150 años.


“Te amo”

Notas finales:

Gracias por tomarse su tiempo en leer este corto fanfic.


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