Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¡DISPÁRAME! por 691396

[Reviews - 36]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este fic contiene incesto, violación, violencia y Mpreg.

CAP. I

 

Era una noche tranquila en la asociación de almas, cuando el llanto de un niño se escuchaba, lo cual llamo la atención de todos los presentes en la mansión, los cuales esperaban impacientes la noticia, en especial un hombre pelinegro de aproximadamente según su apariencia de 30 a 33 años, el cual estaba caminando de un lado a otro enfrente de una puerta, hasta que esta se abrió mostrando a una joven con un bebe en brazos.

-felicidades, uchiha-sama, es un niño.

El hombre al escuchar esto se le formo una gran sonrisa en los labios, raro en él, yendo a recibir al niño, mirando lo hermoso y pequeño que era, el hombre entro a la habitación dirigiéndose específicamente a la cama, mirando una figura durmiente, se le acerco aun con el niño en brazos tratando de despertarlo, pero no pudo, el hombre se estaba desesperando, hasta que una mano le tomo el hombro.

-lo lamento uchiha-sama; no resistió el parto, lamento decirle que murió.

El hombre no lo podía creer, se desespero.

-MINATO!!!!

Gritaba el hombre desesperado moviendo el cuerpo de su esposo, aun sosteniendo al bebe, el cual comenzaba a llorar, el hombre comenzó a llorar, pero se detuvo cuando la primera lagrima salió de sus orbes negras, volvió a su semblante frio; salió de aquella habitación, sin ninguna muestra de que había llorado, viento a todos los presentes mirarlo al salir.

-Fugaku-sama, que sucede?

Pregunto preocupado uno de los que se encontraban en la habitación.

-Minato murió

Respondió fríamente el mayor, sorprendiendo a todos los presentes, menos a uno de ellos, el cual parecía, interesarle un comino lo que sucedía.

-pero él bebe ¿está bien?

Preguntaba otro azabache que aparentaba entre 20-25 años, con el cabello algo largo amarrado en una cola baja, y en su rostro una especie de ojeras.

-sí, él está bien.

Respondió Fugaku mientras miraba al niño que aun estaba en sus brazos.

-Puedo verlo?

Pregunto de nuevo el azabache menor.

Fugaku asintió, entregándole al bebe delicadamente.

-es hermoso, ¿Cómo se llamara?

Pregunto el ojeroso con una sonrisa.

-su nombre será sasuke, uchiha sasuke.

-me parece bien, es un lindo nombre, especialmente, porque sé que crecerá y será muy fuerte, el mejor shinigami de todos los tiempos, yo me asegurare de eso.

-sí, tú te harás cargo de él, críalo como si fuera tú hijo itachi, te pido que protejas a tu hermano.

-y tú padre, que harás?

-yo me iré por un tiempo, necesito estar solo.

-entiendo.

Al escuchar esto, el mayor se fue de la mansión, sin que nadie supiera a donde iba, pero nadie dijo nada respecto a la ida de su señor, comenzando a irse de los terrenos de la familia uchiha, dejando a dos azabaches en la sala, itachi se levanto y se adentro en la mansión, siendo seguido por el otro.

-qué harás ahora itachi?

Preguntaba el otro azabache que aparentaba de 15 a 16 años.

-que mas que criarlo, y tú me ayudaras a hacerlo sai, como buenos hermanos de este niño debemos cuidarlo, sai asintió, para que ambos se adentraran en la mansión y se perdieran en la oscuridad.

Algunos cientos de años después…

Un niño de aproximadamente, según su apariencia 15 a 17 años  practicaba con su arma, disparándole a su hermano (XD).

-maldito, vuelve aquí, gritaba un chico con un extraño peinado y su cabello de color negro azuloso.

-no soy idiota como, para hacerle caso a un desquiciado como tú.

Respondió el otro.

-ITACHI!!!

Grito sasuke ya muy cabreado, mientras comenzaba de nuevo la persecución, pero no se dio cuenta por donde corría, chocándose con alguien y cayendo al suelo, el menor ya estaba más que cabreado, iba a desquitarse con quien sea que fuera esa persona, se levanto rápido dispuesto a gritar, pero su hermano le tapo la boca, y lo hizo bajar la cabeza.

-lo siento padre, esto no volverá a ocurrir.

Decía el azabache mayor aun bajando la cabeza.

-espero que así sea

Respondió cortante el mayor.

-por cierto, bienvenido a casa.

Pero no recibió respuesta del mayor, solo una mirada indiferente y la vista de la espalda del mayor alejándose.

-por qué hiciste eso?

Replicaba el menor.

-no debes ser irrespetuoso con tú padre sasuke.

Al oír esto el azabache quedo inmóvil.

-e…el, es mi padre?

Preguntaba con notoria alegría en su voz.

-sí, pero no lo molestes, si lo haces es capaz de matarte.

-entiendo.

Decía el pequeño agachando la cabeza.

-oye, no te desanimes, aquí estoy yo.

-lo sé.

-anda vamos a practicar, no por nada, eres el único shinigami que tiene como arma unas hermosas pistolas.

-eso es porque soy el mejor.

Decía sasuke con el ego hasta las nubes.

De pronto apareció sai con su sonrisa falsa.

-oigan, padre dice que nos necesita, parece que paso algo importante.

Los hermanos al oír esto se dirigieron rápidamente al salón, en donde ya los esperaba su padre.

-lamentamos la tardanza

Dijeron los hermanos a la vez que se sentaban el suelo de madera.

-vamos directo al grano.

Dijo cortante el mayor.

-han pasado 1.600 años desde la última vez que estuve aquí, y han pasado muchas cosas, entre ellas, les comunico que tienen un nuevo hermano, encontré la rencarnación de Minato en el mundo humano, volviéndome a casar, y volviendo a tener un hijo, el cual he traído, pero no a mi esposo, ya que él tuvo el mismo destino que su yo anterior, el murió en el parto, dejando a naruto conmigo.

En ese momento entra una niña con un bebe en brazos.

Los hermanos estaban sorprendidos ante tal noticia, pero más el menor de los hermanos, el cual lleno de rabia salió de la habitación.

-sasuke!

Grito itachi.

-déjalo!

Le ordeno Fugaku, tiene que aceptar que tiene un hermano.

-si padre.

Respondía sumiso el pelilargo.

Después de eso pasaron 7 años, él bebe, crecía como un humano, ya que para un shinigami, siete años no son nada, ellos cumplen un año cada siglo, el rubito, el cual, era idéntico a su “madre” excepto por tres marcas en las mejillas a cada lado, crecía rápido bajo el cuidado de sus nanas, ya que ninguno de sus hermanos lo reconocía, su belleza volvía loco a cualquiera que lo mirara, y eso estaba pasando con su padre, el cual, lo miraba con una expresión de lujuria y deseo, creando miedo en el pequeño, el cual ya estaba acostumbrado a esas miradas, pero no de parte de su padre.

Un día se le ocurrió al rubito pasear por toda la casa, quería recorrerla sin ser molestado por sus nanas, paso por unos arbustos rasgando el fino kimono que lo cubría, y haciéndose algunas heridas, pero ni sintió, estaba divirtiéndose mucho como para quejarse, hasta que encontró una especie de claro en el bosque en el que se había metido, encontrando a un azabache durmiente, esto le llamo mucho la atención al rubio, acercándose silenciosamente al pelinegro, quedando enfrente; el rubito, no pudo aguantar la tentación acariciando ese suave rostro, del cual lo cubría un poco su cabello azulado, el cual mecía el viento, el rubio se fue acercando poco a poco a ese melodioso rostro, uniendo sus labios en un casto beso, pero con lo que no conto es con que el azabache le tomara la cabeza y profundizara el beso, asustándolo mucho, y comenzando a ponerlo en el suelo.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).