Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Asgard - Las crónicas universitarias por Kalivhya

[Reviews - 118]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno, pues aquí estoy con una historia nueva después de un laaaaargo tiempo, espero que les guste.

Oh y los disclaimers, Avengers, y todos los nombres de los personajes son propiedad del estudio MARVEL Comics y la presente obra se publica sin ningún animo de lucro.

I


 


Bien, ya estaba ahí y las cosas no parecían tan malas cuando las veía desde otra perspectiva, si, había tenido que abandonar su vida y dejar a sus amigos a muchísimas millas de distancia, pero bueno, el viejo se lo había ordenado y no había mucho que hacer al respecto, así que, tomándolo con filosofía y resignación, no estaba tan mal.


Mientras conducía el auto por el camino de grava contempló los alrededores, todo estaba perfectamente cuidado, los árboles se levantaban como soldaditos a los costados, y ahí donde posara la vista no había más que césped perfectamente recortado.


Miró el edificio victoriano que se alzaba a la distancia dominando un pequeño monte, tan perfecto como el resto, adoquines rojos, más césped perfecto, macetones adornando la entrada, incluso la hiedra que decoraba parte de los muros había sido podada para que respetara los marcos de los amplios ventanales.


Entró al estacionamiento a desnivel y no tardó mucho en descubrir el espacio rotulado con su nombre, dejó el auto, se echó la maleta al hombro y subió las escaleras que dirigían a los dormitorios, sacó una bola de papel de su bolsillo, en la cual, garabateado con letra apenas legible (culpa del viejo por haberle dictado todo por teléfono) venía su horario de clases, los nombres de sus profesores y su número de habitación, revisó la hoja y paseó la vista por los números dorados en cada puerta, si las cuentas no le fallaban su habitación era la última.


Acomodándose por enésima vez la correa de la maleta llegó al final del pasillo, al lado derecho del número 17 había espacio para dos placas, pero solo estaba la que llevaba su nombre, así que el viejo también había cumplido, antes de salir había impuesto como condición que solo se cambiaría de universidad si no tenía que compartir habitación, y que tal, se había salido con la suya.


Con una sonrisa de satisfacción giró el pomo de la puerta y entró, quedándose asombrado un momento por las dimensiones del cuarto, más bien era un pequeño departamento, a la izquierda había una pequeña cocina, con una barra y un pequeño desayunador, una estancia central, a la derecha dos sofás y una televisión de tamaño decente, y al frente una pared que dividía las estancias de la recámara. Lanzó la maleta al sofá y se dedicó a explorar un poco, bien, el refrigerador estaba lleno y había incluso algunas cervezas, agarró una Corona y se dirigió a la habitación, la cama era enorme en la extensión de la palabra, pero no fue eso lo que lo dejó descolocado, ni lo que hizo que la lata se le escapara de las manos.


Cerró los ojos unos segundos, quizá era el calor de verano que lo había hecho alucinar, o el largo viaje desde casa. Abrió los ojos despacio, no, no era una alucinación, tendido sobre su nueva y flamante cama había una persona esposada, con los ojos vendados y casi desnuda, y colgando sobre la cabecera un cartelito que decía “BIENVENIDO A LOS AESIR, DISFRUTA TU REGALO DE BIENVENIDA” y como firma “TU NUEVO EQUIPO”.


Se quedó helado, ¿regalo de bienvenida? ¿a qué rayos se referían? ¿era la novatada del equipo? Sabía que al llegar a la escuela se integraría de inmediato al equipo de americano de Asgard, los “Aesir”, el viejo lo había hecho entrenar durante todo el verano para que estuviese en plena forma para la temporada de otoño-invierno, pero jamás pensó que se encontraría algo así al llegar. Además, el tipo en su cama estaba ¿dormido? ¿ebrio? Un sudor frío le recorrió la espalda, no estaría muerto ¿verdad? Solo eso le faltaría, ser acusado de homicida apenas llegando al campus.


Consideraba las opciones de acercarse cuando el cuerpo en cuestión se removió, tirando de las esposas con tal fuerza que el cabezal de la cama crujió en agonía.


- ¡¡BANNER!!! ¡¡SUELTAME O JURO QUE TE CORTARÉ LAS PELOTAS Y ME HARÉ UN LLAVERO CON ELLAS!!


Bueno, había que alegrarse de que el chico no estaba muerto, y más aun de que él no era el susodicho Banner, se acercó despacio a la cama, tratando de hacer el menor ruido posible, aunque claro, normalmente cuando intentas ser sutil el destino normalmente juega en tu contra, de tal suerte que a la duela se le ocurrió crujir justo en ese instante, el chico se volvió hacia la fuente del ruido con la velocidad de una cobra.


- ¡BANNER! ¡Suéltame! ¡No tengo ni idea de que lo que pasa por tu diminuto cerebro, pero si aprecias la integridad de tu cuerpo será mejor que me liberes de una buena vez!


- Hola… - dijo simplemente, aunque de inmediato deseo poder darse una patada, ¿hola? ¿en serio?


- ¿Quién eres? – preguntó el esposado - ¿eres un aesir?


- Algo parecido


- Entonces lárgate – dijo y tiró de nuevo de las esposas, el metal había comenzado a encarnarse en sus muñecas.


- Mira, no sé ni quien eres, ni tampoco quien es Banner, pero te estás haciendo daño y no quiero que te desangres en mi cama.


Se sentó en la cama y con cuidado le quitó la venda de los ojos, el joven parpadeo rápidamente algunas veces, tratando de acostumbrarse al exceso de luz.


- ¡Óyeme bien pedazo de…..! - la retahíla de mentadas que estaba preparando murió en sus labios - ¿Thor? – parpadeó de nuevo, y la furia se desvaneció de sus mirada.


- ¿Loki? ¿qué? ¿c-cómo?¿qué haces aquí? ¿estudias aquí? – preguntó con cierto pasmo.


- No Thor, solo me gusta pasar el verano esposado a una cama en un sitio desconocido – contestó Loki, alzando la comisura de su labio en una media sonrisa.


- C-claro, que torpe – dijo el rubio, alborotándose el cabello mientras un ligero rubor teñía sus mejillas – es solo que, ¿hace cuanto que no nos vemos? ¿diez años? ¿cómo está tu padre?


- Thor...mira, aunque es fantástico verte estoy en un pequeño aprieto, ¿crees que podríamos hablar de cosas familiares una vez que me sueltes?


- Oh...¡OH! - dijo finalmente recordando la situación - claro, déjame buscar la llave, seguro que está por aquí.


Thor se levantó de la cama, hurgó en los cajones de las mesas de noche, debajo de las lámparas, buscó en el baño, en el botiquín de primero auxilios, incluso bajo la cama, pero la llave no aparecía.


Quitó el cartel de "bienvenida" y notó el mensaje escrito detrás:


"Esperamos que el regalo te guste, si puedes amordázalo porque tiene la lengua filosa como navaja y seguro que si te distraes muerde, ya darás con la llave una vez que te empieces a divertir"


- ¿Qué dice? - preguntó Loki, mirando el papel con recelo.


- Dice que encontraré la llave cuando me empiece a divertir, y básicamente que eres mi regalo de bienvenida - lo miró pensativamente - ¿de qué va todo esto Loki?


- Ahora que estas en Asgard debes saber algunas cosas Thor, verás, existe una vieja rivalidad entre dos equipos, los Aesir, a los que ahora perteneces y los Jotun, que es el equipo de natación, básicamente son mis chicos, por razones que ya nadie recuerda nos odiamos a muerte, y los aesir se dedican a "cazarnos" si consiguen atraparnos tiene derecho a... - soltó el aire de golpe - bueno, ya te imaginarás.


- Entonces.... - Thor se ruborizó hasta la punta de las orejas - ¿ellos pretenden que tú y yo...más bien que yo te...? ¿ya sabes?


- Si, más o menos esa es la idea.


- ¡Pero yo no soy gay! Digo...disfruto el sexo pero ¿con hombres? no señor, ni pensarlo.


-Claro – dijo Loki con un suspiro – que los dioses nos libren de los homosexuales, eso ya se lo podrías ir diciendo a Banner, además, no se trata de si te gustan los hombres o no Thor, simplemente se trata de humillar a los demás, de demostrar su "hombría" - Loki remató la frase haciendo un símbolo de comillas con las manos esposadas.


- Espera…. – el rostro de Thor se tornó mortalmente serio – eso quiere decir que alguien, alguno de los aesir te ha… ¿ya sabes? – de repente la idea lo hizo enfurecer, aunque tenía años sin verlos, sin siquiera saber una palabra de él, seguía pensando en Loki como aquel niño de inocentes y enormes ojos verdes, al que tenía que proteger a toda costa.


- Thor, dilo, di ¿“alguno de los aesir te ha follado”?, la respuesta es no, porque no habían conseguido atraparme, además, aunque odie admitirlo, ese jueguito perverso no les desagrada demasiado a mis chicos, que te puedo decir, se pierden por los músculos, siempre me mantuve al margen, era como una especie de acuerdo sin palabras, uno que Banner se ha encargado de romper – crispó los puños hasta que se pusieron blancos – y me encargaré de que pague por ello.


- Ok Loki, primero te soltamos y luego planeamos venganza ¿de acuerdo?


- Thor, tú no puedes planear nada, después de todo, eres uno de ellos ¿no? El hecho de que esté aquí esposado lo prueba.


- ¿Insinúas que sabía de esto? La verdad…ni siquiera sabía que estudiabas aquí.


Loki lo miro por un minuto, esperaba ver señas de mentira, pero no las encontró y eso hizo que el nudo que se había estado formando en su pecho se aflojara de golpe.


- Lo lamento – dijo apenas en un susurro – ahora ¿podríamos buscar esa llave?


- Claro – Thor le sonrió sinceramente y se puso a la tarea de recorrer de cabo a rabo la habitación, después de trastear con cajones y revolver de nuevo todo lo que encontró en el pequeño departamento, regresó a la cama sintiéndose miserable – lo siento Loki, no está.


El silencio cayó entre ellos y Loki siguió forcejeando con las esposas, sus muñecas ya tenían varios cortes que comenzaban a sangrar.


- ¿Podrías parar con eso? Vas a lastimarte – súbitamente un chispazo de entendimiento brotó en la cabeza del rubio – Loki….cuando dice “empieces a divertirte”, ¿se refieren a lo que creo?


- Supongo, ¿aunque tu punto es?


La forma en que el rostro de Thor se tornó rojo granate le indicó malas noticias, no tardó mucho en seguir la misma línea de pensamiento.


- Ay no… - suspiró mortificado


- Es el único sitio donde no he buscado – la mirada de Thor se mantenía en el suelo.


- Ese maldito… - apretó de nuevo los puños – pero es más que factible, bueno, supongo que no queda más que averiguarlo.


- ¡¿Qué?! – Thor casi se disloca el cuello por la velocidad a la que volteó - ¿es broma cierto?


- No – giró la cabeza mirando el reloj despertador – aunque son casi las siete de la mañana, si vas hasta la piscina encontrarás a mi equipo entrenando, pídele a alguno de ellos que venga.


- Loki, casi necesité un mapa para llegar a mi habitación, no tengo ni idea de donde está nada en este lugar- admitió avergonzado – bien, buscaré la llave.


El colchón crujió cuando el rubio se sentó al lado de Loki, dándole la espalda.


- E..estira las piernas.


- Thor, espera, no es necesario, no debí obligarte – dijo Loki con voz suave, pero aun así obedeció la orden.


- No tenemos otra salida.


Los siguientes segundos pasaron en cámara lenta para el moreno, vio como la mano de Thor resbalaba por su estómago y sus músculos se contrajeron automáticamente cuando pasaron debajo del elástico de su ajustada ropa interior, los dedos súbitamente se detuvieron y juraría que escuchó como Thor soltaba el aire de golpe.


- ¿La hallaste? – preguntó con voz cortada


- Lo siento…me distraje


El rubio no lo miraba, pero por el color rojo de sus orejas Loki creía saber en qué estaba pensando, seguro Thor esperaba toparse con una mata de vello ahí debajo, pero no, por razones de estilo y comodidad Loki se afeitaba.


- Cuando practicas natación es más cómodo así.


Thor no respondió, solo asintió con la cabeza suavemente y continuó su exploración, cuando sus dedos llegaron al tallo del miembro se detuvo de nuevo, palpando la piel suave y tersa del moreno, recorrió los costados y bajó un poco más, jodida llave no estaba ahí tampoco.


- ¡Ya sé! – dijo trepando a la cama de golpe – levanta las caderas Loki – dijo palmeándole el costado.


- ¿Qué? – una ceja negra se disparó a toda velocidad - ¿para qué?


- Si te quito la ropa será más fácil hallar la llave, donde sea que este – respondió simplemente, en tono casual como de “¿y que hay para desayunar?”


Había lógica en la petición de Thor, pero aun así Loki dudó, pensando que el rubio de verdad era despistado o disfrutaba torturándolo, miro hacia abajo, su miembro estaba ligeramente endurecido por la exploración previa pero la ropa mantenía las cosas en sitio, estar desnudo frente a él iba a ser otra historia.


- Anda, o no te podré soltar nunca – lo palmeó de nuevo, como dándole ánimos.


No respondió, apretó los ojos, giró la cabeza hacia el muro y lentamente subió las caderas, y si, ahí estaba la cámara lenta de nuevo, y sus sentidos parecían magnificados por cien. Sintió como Thor encajaba los dedos en la cinturilla del slip negro, y como éste se deslizaba fácilmente por sus caderas, en algún momento de forma inconsciente recogió las piernas para facilitar la tarea, la prenda pasó por sus muslos, por sus rodillas, y finalmente por sus tobillos.


Se mordió la lengua para no jadear cuando el frío de la mañana recorrió su cuerpo desnudo, y al sentir la mirada celeste del rubio sobre él pegó las rodillas al pecho, apoyando las plantas de los pies sobre su miembro que parecía estar muy a gusto con la recién ganada libertad.


Esperó un minuto, dos, vio a Thor revisando concienzudamente la prenda negra.


- Me impresiona que quepas en esto – dijo extendiéndolo, jalando la tela para probar que tan elástica era – a mí no me cabrían ni en una pierna.


- ¡THOR!


- Ah sí, la llave – sonrió a modo de disculpa y revisó de nuevo la prenda.


Hubo silencio y luego sintió las manos del rubio amoldándose a la curva de su trasero, levantándolo de la cama con suma facilidad, una mano lo mantenía arriba mientras la otra rebuscaba cerca de su coxis.


- ¡Aquí esta! – gritó Thor triunfante – se debe haber resbalado cuando te quité la ropa.


Cuando las esposas se abrieron con un ligero “clic” su corazón latió de nuevo y los pulmones al fin se decidieron a hacer su trabajo.


Se incorporó sobre la cama, se sentía ligeramente mareado por estar en esa posición sabrá cuantas horas, las muñecas mostraban bandas púrpuras y en algunas partes se había levantado la piel que sangraba ligeramente, no quería ni pensar cuando se metiera a la alberca y el agua clorada le lamiera las heridas.


- Toma – dijo Thor tendiéndole la prenda negra – iré a buscar una camiseta


Loki asintió, pasándose el slip a toda velocidad cuando el rubio dejó la habitación, vaya momento más vergonzoso, no lo había visto en más de diez años ¿y así era su reencuentro? Vaya con la mala suerte. Al cabo de un minuto Thor regresó con una camiseta y un par de shorts.


- No creo que sean tu talla, pero es mejor que salir casi desnudo, por cierto, ¿dónde vives?


- Cerca, en los apartamentos para estudiantes – su voz salía amortiguada por la prenda sobre su cabeza.


- ¿Quieres que te lleve? – preguntó el rubio mientras hacía tintinear las llaves del auto.


- No gracias, puedo caminar – se pasó la mano por el cabello un par de veces tratando de que este se acomodara.


- Bien…


Thor dejó las llaves en la mesita cercana, aunque su tono decepcionado hizo que el corazón de Loki se encogiera.


- Aunque hagamos esto, podemos caminar hasta mi apartamento, me daré un baño y podemos recorrer el campus, así mañana cuando empiecen las clases no necesitaras un guía de turistas.


Thor le sonrió, Loki asintió y empezaron a caminar hacia la salida, cuando el rubio súbitamente le echó los brazos encima, apretándolo con la fuerza de un oso no supo que hacer.


- ¿Thor?


- Me da tanto gusto volver a verte


- Igual a mí – su mano subió automáticamente hasta su espalda, con toda la intención de estrecharlo, pero le pareció incorrecto, por tanto se quedó ahí plantado – ojalá hubiese sido en otras circunstancias.


- Que dices, somos como hermanos, no hay nada de qué avergonzarse – dijo sacudiendo la mano, restándole importancia al asunto – además ya te he visto desnudo antes, no eres tan impactante.


- Thor, teníamos como cinco años.


- En eso tienes razón – Thor se acercó tanto a él que sus pechos casi se rozaban – vaya que has crecido mucho.


- ¿Y eres tu quien lo dice? Mírate – dijo apartándose un paso – eres enorme.


- ¡Al menos tengo algo de musculo pegado a los huesos! – pasando la mano por el vientre plano de Loki se quedó callado – estás muy delgado, ¿comes apropiadamente?


- Si mamá – respondió el moreno con sorna – hago tres comidas diarias, pero sorpresa, los nadadores somos delgados, de tener tu complexión me hundiría como una piedra.


Cuando salieron de la habitación Loki necesito unos minutos para orientarse, miró por la ventana del pasillo, podía ver el edificio principal de la facultad de administración y parte de los jardines, no le quedó duda, estaba en el edificio de los aesir.


- Así que, después de tu habitación, ¿qué más vas a mostrarme?


- No sé, podríamos ir al edificio principal para que sepas cuáles son tus salones, a conocer a mis chicos, lo que quieras.


Un rugido, parecido al de un león llenó el espacio del pasillo reverberando por los muros, Loki se le quedó mirando fijamente, cuando notó el rojo en la cara del rubio estalló en carcajadas.


- Creo que primero debemos ir a buscarte algo para desayunar.


- ¡Si por favor! ¡Gracias gracias gracias!


Thor se colgó de él dramáticamente y aun riéndose empezaron a bajar las escaleras, cuando Loki se quedó callado y su cuerpo se tensó visiblemente se detuvo, los ojos verdes del moreno destellaban con rabia contenida.


- ¿Loki?


Siguió la línea de su mirada, al pie de la escalera estaban parados varios chicos, uno de ellos parecía una versión humana de una excavadora Caterpillar.


- ¡Ah al fin llegaste! Thor Odinson ¿verdad?


El señor Caterpillar se adelantó, subiendo algunos peldaños y le tendió la mano.


- Bruce Banner, full back de los Aesir - su boca formó la sonrisa más perversa y desagradable que Thor hubiese visto cuando notó que Loki estaba de pie detrás de él – eh Laufeyson, ¿qué haces en nuestro edificio? ¿no deberías estar en tu ensayo de nado sincronizado?


Puede que Thor no supiera muchas cosas sobre Asgard, pero si estaba seguro de una, detestaba a Bruce Banner, apretó los puños dispuesto a asestarle tantos puñetazos como fuesen necesarios para borrarle la sonrisa de la cara, pero Loki se le adelantó, con la gracia de una pantera esquivó su enorme cuerpo y bajó los peldaños restantes con absoluta calma.


- Ya me iba, Brucie – al pasar junto al él Loki pasó la mano por el hombro desnudo del chico - solo vine a avisarte que las faldas de danza que pediste ya están en la oficina de clubes deportivos.


Thor tuvo que morderse la mejilla para no reírse, así era Loki, mientras él se habría camino con puños y patadas, Loki lo hacía con gracia y sutileza.


- No te esfuerces buscando una respuesta ingeniosa Banner, se te fundirá el cerebro – Loki volvió el rostro para mirar a Thor sobre el hombro y le guiño un ojo antes de salir del edificio, dejando a Banner y al resto del equipo en stop motion.


Pasaron unos segundos antes de que Banner registrara el hecho de que Loki había hecho burla de él, se giró con toda la intención de vociferar algo, pero el moreno ya no estaba siquiera a la vista.


- Tsk….odio a ese pomposo relamido – masculló entre dientes, volviendo la atención a Thor – así que, ¿Odinson verdad?


- Así es – dijo forzando la sonrisa y finalmente estrechando la manaza que se le ofrecía.


- ¿Y? ¿te gustó? – preguntó, esbozando de nuevo esa sonrisa que hacía enfurecer al rubio.


- ¿El qué?


- ¿Jugando al inocente?, vamos, todos se mueren por follar con Laufeyson, pero te dejamos el privilegio a ti, solo por ser el nuevo quarterback.


- ¿Follármelo? – sintió como la rabia fluía por sus venas, pero simplemente se encogió de hombros – no sé de qué hablas, cuando llegué a mi habitación el venía por el pasillo, simplemente topamos y le estaba preguntando la dirección a la cafetería, me muero de hambre.


- Te dije que era hábil – un moreno con bigote y barba de tres días entró en el campo de visión de Thor – Tony Stark, linebacker.


Estrecharon las manos y Thor terminó de salir del edificio, afuera un par de autos estaban estacionados, de uno de ellos brotaba “Paranoid” de Black Sabbath.


- Ven ricitos – dijo echándole el brazo sobre el hombro - sigamos las presentaciones en la cafetería.


Stark lo empujó al interior del Jeep y el resto del equipo se dividió en los dos autos, diez minutos más tarde se encontraron frente al edificio de la cafetería.


 

Notas finales:

Les dejo un link para que escuchen "Paranoid" una canción buenísima https://www.youtube.com/watch?v=hkXHsK4AQPs


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).