Se sentía realmente frustrado a esas alturas de la noche, bueno lo cual no parecía en realidad, caminaba por las llenas calles de la cuidad en busca de un estúpido lugar donde poder pasar la noche, pero nada, o no era de su agrado o no era de su accesibilidad económica, tampoco podía darse el gusto sólo por una noche ya que no sabía cuanto tiempo estaría así, cesante de un techo.
Debió haber hecho caso a su madre cuando le recomendó lugares para hospedarse, creía que iba a ser más fácil puesto que en vacaciones muchos lugares están abiertos para el publico, pero existía la opción de que al igual estos estén colapsados, así era exactamente, suspiró y miró el reloj en su muñeca, otra hora más andando.
Lo único que podía motivarlo en ese instante era el hecho de que las calles estuvieran tan iluminadas y justo al lado de la playa hubiese una feria, cosas simples, juegos, comida, golosinas, juguetes, etc... Decidió entrar en esta y así quizá quitarse el estrés.
El ruido no era lo suyo, tampoco la luz penetrante y mucho menos los tumultos, pero no se podía quejar, en realidad si le subía un poco el animo ver tanto niño corriendo y emocionado por estar en la susodicha feria, se preguntaba, ¿cómo podían estar tan despiertos?, el se moría de sueño, necesitaba reanimar su cuerpo de una u otra manera, así que se fue por la opción más cercana.
"Un café Latte, por favor." Pidió a la dueña del pequeño local, la mujer le sonrió con amabilidad y accedió a prepararlo sin reparos, el mientras esperaba se había sentado en una de las mesas que estaban alrededor del pequeño local, con sus manos frente a el jugueteando sobre la mesa.
Hasta ahora su llegada había sido un total fracaso, se fue diciendo a su madre que encontraría un buen trabajo y así costearía el mismo sus estudios, mala idea, ahora se veía en un aprieto tremendo, si no encontraba casa muchos menos hallaría trabajo con facilidad.
Un nuevo y milésimo suspiro escapó de sus labios al pensar eso, se estaba deprimiendo de nuevo, pero muy al contrario de esto su atención fue captada por algo muy extraño, bueno no precisamente extraño, sino...Interesante, frente a el y esquivando toda persona en la feria pasaba un chico, cabello negro, frente a la vista, traía un traje al parecer lo bastante costoso y por otro lado tenía un rostro muy atractivo, a pesar de que lo vio solo de pasada.
Parecía que escapaba...Y en efecto, así era, tras él a unos metros venían cuatro hombres más, perseguían a aquel joven con desesperación gritando cosas que el no llegaba a comprender, se preguntaba; ¿Qué sucedía?, parecía un tema complejo, pero el ya estaba en un tema así para pensar en otro.
"TaekWoon." Llamó de pronto la vendedora, el mencionado levantó su mirada y extendió su brazo para ir por su café y proseguir con su camino, claro no sin antes pagar e intentar hacer una mueca lo más agradecida posible y agradecer.
Ese era su nombre, TaekWoon, Jung TaekWoon, a sus 22 salió de casa en busca de una aventura, aquí lo ven frustrado y exasperado por su perdida de tiempo, poseedor de un cabello negro azabache, unos ojos del mismo color, piel blanca como la nieve y labios delgados pero apetecibles.
Se colgó el bolso mejor al hombro y con ambas manos sobre su café prosiguió con su camino, ya había acabado su recorrido por la feria y lo único que había al final era una de las entradas para bajar a la playa, estaba cansado y no tenía ganas de seguir caminando, así que iba a hacer caso a los instintos y a su destino que le pusieron dichoso lugar en frente.
Mala idea, otra vez, ¡no habían más que parejas!, parejas y más parejas, se sentía avergonzado de pasar por su solo entre ellos buscando un sitio fuera de la vista humana, deseaba que viniera una ola gigante y los empapara a todos. Finalmente encontró un lugar a su gusto casi al terminar la playa, muy cerca de unas grandes rocas donde olas chocaban.
"Perfecto.."Se susurró a si mismo, acomodando su trasero contra la arena.
Otro suspiro más, pero esta vez por la la tranquilidad del momento, la brisa nocturna chocaba contra su rostro y le producía una sensación agradable de paz, podría dormir ahí y despertar al otro día, pero su vida estaría en peligro, el café humeante seguía en sus manos y bebía de tanto en tanto disipando ese sueño tan potente.
Pasó unos 30 minutos admirando esa amplia profundidad que se veía en la orilla, pero muy indiferente a esto su atención fue captada por pasos fuertes y presurosos que se dirigían a el, su mirada se levantó con violencia y cierto miedo al ver frente a si una persona no conocida y tampoco lograba diferenciar su rostro gracias a la oscuridad.
Planeaba alejarse sigilosamente, pero este no lo dejó puesto que se inmediato se abalanzó sobre el, puso sus manos a los costados de su cabeza y miró a sus alrededores, tal parecía en busca de algo, TaekWoon con su espalda contra la arena lo miró con miedo, sentía una violación venir, pero el temor era tan grande que no alcanzó ni siquiera a mover un musculo.
El sujeto desconocido se alarmo tras sentir más pasos cerca, muy parecidos a los suyos pero en más cantidad, por esto mismo no perdió tiempo y sin avisar, sin anticipar, sin siquiera pensar en el contrario...Lo besó, lo besó con tanta intensidad que TaekWoon sintió su alma salir de su cuerpo, su corazón intentar escaparse y su cuerpo darle una tremenda patada en la entrepierna, y eso lo iba a hacer.
Tras escuchar los pasos pasar a una gran velocidad e ignorando su estancia en ese mismo lugar, el desconocido levantó su vista separando sus labios de los ajenos, sus perseguidores ya estaban lejos y esto le hizo sonreír con burla y satisfacción, cosa que no duró mucho puesto el fuerte golpe contra sus partes genitales lo hicieron caer de lleno contra el piso, a un lado de un muy asustado TaekWoon.
"¡¿P-Pero quién diablos eres tú?!." Comenzó TaekWoon retrocediendo con miedo, el joven seguía retorciéndose con dolor, apretando dicha zona con sus manos.
"Mierda, pero que bruto." Dijo el que yacía en el piso intentando incorporarse con dignidad.
"¡Mira quien lo dice!, depravado, cochino, abusador, delincuente." Podría haber seguido,pero el otro le cortó.
"¡Hey!, mira quien lo dice, me has dado un rodillazo magnitud luchador de sumo." Seguía con su queja, pero el dolor estaba pasando y ahora se pudo sentar sin mucha dificultad.
"¡Tu me besaste!." Exasperado TaekWoon siguió retrocediendo.
"¡Sólo fue un beso!, como si nunca hubieses besado a nadie antes."
TaekWoon guardo silenció, quizá por su comentario o tal vez por que ahora que se había incorporado y sus ojos estaban más acostumbrados a la oscuridad podía diferenciar de quien se trataba, era el mismo chico que anteriormente era perseguido por los hombres de negro, el chico del traje costoso, pero ahora sólo vestía una camisa de color negra al igual que sus pantalones y su cabello estaba todo despeinado.
"WonSik." Dijo de pronto el ajeno ante el silenció, su mirada divagaba en la playa, TaekWoon lo miró con extrañeza.
"¿Qué?." Preguntó con su característico tono suave.
"WonSik, me llamo WonSik, así dirás que un extraño no te beso en la playa por nada." TaekWoon miró de nuevo al mar, estaba sintiendo vergüenza.
"TaekWoon..." Susurró.
"¿Mh?." WonSik realmente no había escuchado puesto que el otro hablaba tan bajo que debía tener orejas de elefante para captar.
"¡TaekWoon!," Alzó su voz, dejaba su orgullo en juego por un tonto como ese. "Para que digas que no besaste a un extraño en la playa por nada..."
WonSik sonrió, como si el otro al fin captara sus intenciones de haber pasado desapercibido, a estas alturas seguramente sus perseguidores ya estarían lejos, buscando por esas áreas que solía visitar con frecuencia, podría afirmar que no estaba en 'peligro', por lo menos en ese momento.
Miró a su costado al notar movimiento, tal parecía que el pelinegro se iba a marchar ya que se colgaba el bolso a su espalda y tomaba lo que parecía ser un vaso vacío de café, Wonsik levantó una ceja con mera curiosidad.
"¿Ya te vas?." Preguntó directamente, el otro no siquiera le miraba.
"Tengo cosas que hacer." Respondió al instante, en realidad no, pero le incomodaba mucho estar así, era un fanático del silencio, pero con un extraño a su lado no podía acomodarle este hecho.
"Pues para estar en la playa observando el mar no lo parecía."Respondió el otro con burla e indiferencia.
"Dice el que podría correr la maratón." Bufó, sin decir nada más se puso en marcha, estaba decidido a encontrar un lugar donde dormir, no se quedaría en la playa con un acosador.
"¡Hey, espera!."
Le gritaba WonSik, el joven de iguales cabellos negros se puso de pie, claro no sin antes sacudir su ropa de la arena, camino tras de él a paso veloz, pero el otro de igual manera aumentaba su velocidad al verse perseguido, no le gustaba que lo corretearan así.
"¿Donde vas?." Preguntó WonSik.
"Que te importa." Respondió TaekWoon a la defensiva.
"Que pesado eres." Le recrimino, pero no dejó de seguirle, finalmente había subido la escalera para salir de la playa y ambos cruzaron la calle para proseguir por los locales de en frente. "¿No me vas a responder?."
TaekWoon hacía oídos sordos mientras caminaba, intentaba no poner atención a lo que WonSik hacía o decía puesto que le des-concentraba de leer los carteles que ponían, insistía, ninguno se allegaba a sus limitaciones, ¿por qué la vida era tan cara?.
"¿Buscas donde quedarte?." Le preguntó una vez más WonSik. El otro suspiró, no le costaba nada responder.
"Si."
"¿Eres nuevo por aquí?." Siguió, llevaba sus manos en sus bolsillos y se mantenía a cortos pasos de TaekWoon, casi a su lado.
"¿Sabes que eres un acosador?, invades mi espació privado." Le contestó TaekWoon, al mismo tiempo se alejó un par de pasos de él pero hacía su costado.
"Oye, la curiosidad no es un crimen."
"No, el crimen eres tu por andar suelto." Una pequeña carcajada salió de WonSik. "Enserio, ¿no tienes nada mejor que hacer?."
"No." Respondió WonSik, seco.
"Pues yo si tengo mejores cosas que hacer que hablar contigo, ¿sabes?." Le dijo TaekWoon, está vez más molesto que antes, pero al momento se girarse notó que estaba sólo, buscó con su mirada a WonSik quien se había detenido pasos más atrás.
Creía que esa era su oportunidad de escapar, pero muy fuera de eso WonSik le hizo un gesto algo extraño con la mano y próximamente apunto un cartel con su dedo, TaekWoon no entendió hasta que esté le gritó.
"Este hostal es barato." Fue suficiente para que TaekWoon se acercara.
En efecto, el presupuesto estaba a su alcance y además podría continuar su camino desde donde lo dejó, tal parecía que WonSik le había interrumpido demasiado como para no captar esa opción que tenía tan a mano, al dar el primer paso dentro, se detuvo, puesto que WonSik venía tras de él.
"¿Tu piensas venir conmigo?." Le dijo TaekWoon cortante.
"Créeme, si tuviera donde llegar no estaría aquí contigo." Respondió el otro con una sonrisa burlona, avanzó por delante de TaekWoon y tal parecía que hablaba con la recepcionista.
TaekWoon imaginaba que estarían bajo el mismo techo, pero no tendría necesidad de hablarle o verlo, cosa que en realidad no quería, era un alivio total, pero apenas de acercó la sorpresa le saltó encima, WonSik pasó de él con una llave en la mano y le dijo un "Tu pagas." que resonó en su cabeza.
Miró a la mujer de la recepción y esta al igual le sonreía con cierta curiosidad, tras aclarar lo sucedido concluyó que WonSik había abusado de él, sin tener más opción pagó por los dos y siguió por el pasillo, cuando lo encuentre le haría un berrinche de los mil demonios.
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