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Festival de verano Puppyshipping por LizzieVidal

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Notas del fanfic:

Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes me pertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi♥ yo solo los ocupo para mis locas historias. :3

Notas del capitulo:

Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes me pertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi♥

Un nuevo fic Puppy *-* espero les agrade, hace mucho que no hacía uno de este bello par y gracias a un mensajito que me mandó a mi página una bella lectora les traigo este :3 ojalá lo disfruten n.n

 

PD: Pasen a darle like a mi página en Facebook https://www.facebook.com/LizzieVidal0809/ Para estar más en contacto con ustedes mis queridos lectores♥, mi página ya se convirtió más que nada en una linda comunidad donde nos une un mismo amor, Yu-Gi-Oh!♥ así que si quieren formar parte de esto tan lindo que se ha creado los espero por allá.♥

 

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“No te esfuerces tanto, las mejores cosas suceden cuando menos te las esperas”.

 

Como cada verano los chicos habían dicho que iríamos al festival de la ciudad, estábamos en el último día de clases así que durante las vacaciones sería un poco difícil vernos por diversas situaciones, por lo tanto, tendríamos que disfrutar del festival y de nuestros amigos, todos habíamos aceptado ir con gusto de cualquier manera a quién no le gustaban los festivales…

—Deberíamos vernos mañana a las 7 en el reloj del parque -Dijo mi amigo oji-amatista feliz.

—Yo concuerdo con mi Aibou -Dijo su novio asintiendo.

—¿Qué dices Jono? -Me preguntó el albino sonriéndome cálidamente.

—Claro, a esa hora me parece bien -Dije sonriendo volteando a verlos ya que mi vista era acaparada por cierto castaño de ojos azules que había cautivado a mi corazón.

Aunque odiara admitirlo, desde hace algunos meses me sentía atraído por Seto Kaiba, el chico más frío, antipático y ególatra de toda la escuela y bueno, siendo el CEO más importante de todo Japón tal vez eso era normal… De cualquier manera, a pesar de eso, en mi corazón se había creado un sentimiento de cariño hacia él, aunque para este solo existiera cuando solíamos pelear por cualquier cosa sin sentido que yo ocupaba para llamar su atención.

—Entonces a esa hora iremos -Dijo nuestro amigo egipcio sonriendo sacándome de mis pensamientos.

—¡Si! -Dijeron los demás felices a coro.

—¡Pueden callarse! ¡Hay gente que intenta leer! -Si esa era la voz antipática de mi amado Seto.

—Ya vas a empezar neko roñoso, nosotros no tenemos la culpa de que seas tan amargado y no hagas planes con nadie -Dije frunciendo el ceño.

—¡Nadie está hablando contigo perro! -Dijo mirándome fríamente, tal vez de esa forma era como me miraba, pero al menos me sentía dichoso de que me estuviera mirando.

—No, pero estás intentando molestar a mis amigos -Dije cruzado de brazos fingiendo molestia.

—¿Huh? Te contestaría, pero no tengo tiempo que perder con un perro perdedor como tú -Dijo volviendo su mirada al libro que tenía, me sentí triste, siempre teníamos peleas que duraban mucho más.

—Idiota -Dije finalizando la pelea, mi corazón también se entristeció de no haber tenido un poco de más atención de su parte.

 

Al termino de las clases me fui a mi casa, llegué y fui directamente a mi habitación, me sentía cansado por un extraño motivo que no entendí así que en cuento dejé mis cosas a un lado y me acomodé en mi cama me quedé dormido hasta el otro día, increíble, pero había dormido un poco más de doce horas.

Cuando revisé el reloj me di cuenta que darían las 8 de la mañana, me sentí perdido, pensé que el reloj estaba mal ya que marcaba la mañana en lugar de la noche, hasta que abrí lentamente la ventana y vi como el sol comenzaba su recorrido por la cúpula estelar.

—¡¿Heeeeh?! -Grité impresionado, no podía creer que había dormido tanto.

Revisé mi celular y vi millones de mensaje de mis amigos diciéndome que nos veríamos antes para ir a comer algo, así que les respondí a todos ellos, me sentí apenado al explicarles que me había quedado profundamente dormido.

A las 5 de la tarde los tricolores pasaron por mi casa para irme con ellos, ya en Burger World veríamos a los demás.

Cuando llegamos al lugar pude ver a mis amigos, Honda y Otogi junto a Ryo y Marik quienes llevaban a sus pares oscuros, al principio me sentía cohibido con la presencia de esos tipos, pero con el tiempo al ver el cambio que iban teniendo gracias a nuestros amigos me fui habituando más a ellos.

Después de comer nos dirigimos al festival, no estaba muy lejos de Burger World por lo tanto en 10 minutos ya estábamos en el lugar.

Recorrimos todo el lugar para ver qué haríamos primero, al final los yamis terminaron compitiendo en el tiro al blanco con la esperanza de ganarle algo a sus parejas, a mí me divertía verlos, los minutos iban pasando y de ratos me ponía a buscar a alguien especifico con la mirada, si, estaba buscando a Seto, sabía que mi idea de que él pudiera estar por ahí no tenía ni pies ni cabeza, pero mi corazón se aferraba a querer verlo.

Seguimos caminando hasta un lugar donde vendían manzanas de caramelo, raspados y otras cosas, los chicos aprovecharon para comprar, me sentí frustrado, y estaba a punto de declinar mi idea por ver por ahí a mi neko.

Hasta que escuché la voz de Ryo quién mencionaba algo sorprendido.

—Chicos ¿qué ese no es Kaiba? -Dijo señalando levemente la dirección contraria a nosotros, voltee rápidamente sintiendo como mi corazón latía rápidamente, no me creía la idea de que Seto realmente estuviera por ahí.

Cuando vi a Seto vi la más hermosa visión que nunca pude haber visto antes, venía vistiendo una yukata blanca con detalles azul eléctrico y azul naval, realmente se veía muy guapo, me sentí embelesado, él venía en compañía de Mokuba, quien vestía una yukata roja con detalles negro, amarillos y blancos, ambos se veían tan guapos.

—Buenas noches Kaiba-kun, Mokuba-kun -Dijo mi oji-amatista amigo saludándolo una vez que llegó a nuestro lado, este solo hizo un movimiento de cabeza como saludo.

—Buenas noches chicos -Dijo el peque sonriéndonos dulcemente -No pensé que los encontraría aquí -Dijo feliz.

—Ya vez Moki, lo que son las cosas -Dije sonriéndole cálidamente.

—Que de tiempo Jono -Dijo saludándome feliz, adoraba a Moki, él era todo lo contrario a Seto.

—Iremos a tallar figuras en la parte de allá -Dije mencionándole un lugar alejado de los puesto -¿Quieres ir con nosotros? -pregunté sonriéndole.

—Claro, ¡Vamos nii-sama! -Dijo jalándolo de la yukata, me sentí feliz, eso de invitar a Moki saldría mejor.

—De acuerdo vamos -Dijo siguiendo a su hermanito quien nos seguía a nosotros al lugar.

Llegamos y pagué por Moki y por mí para comenzar con los tallados, mis amigos también estaban haciendo lo mismo, los mejores en eso eran Yug y Ryo, pero los demás no lo hacíamos tampoco tan mal.

Mientras tallábamos un chico de nuestro salón que difícilmente hablaba con nosotros se acercó a mí.

 —Jonou...chi -Mencionó tímidamente y con un gran sonrojo en sus mejillas.

—¿Takeda-kun? ¿Qué se te ofrece? -Pregunte extrañado.

—Po…podríamos hablar un momento -Dijo sonriéndome tímidamente.

—Mmm claro -Dije levantándome -Ahora vuelvo chicos -Dije comenzando a caminar junto a él hacía un lugar apartado.

Nos detuvimos para sentarnos en unas bancas que estaban un poco alejadas, realmente parecía un buen lugar para decirle a los chicos que viéramos los fuegos artificiales, pero primero debía saber que quería este chico.

—Bueno Jonouchi… yo… -Comenzó a decir torpemente, realmente no entendía que es lo que él quería.

—¿Qué pasa Takeda-kun? Vamos, dímelo sin miedo -Dije sonriéndole cálidamente provocando un sonrojo más grande en él.

—Bueno, yo quería decirte que me gustas -Dijo finalmente, yo me sorprendí un poco ante eso -Desde hace mucho tiempo estoy enamorado de ti, solo que tenía miedo de decírtelo, yo realmente te quiero -Dijo mirándome fijamente a los ojos, de repente su nerviosismo se había marchado.

—Yo… -No sabía que decir o que responderle, me sentí en shock, nunca me hubiera imaginado que ese chico hubiera estado enamorado de mí.

—Solo te pido una oportunidad -Dijo tomando mi mano.

—Takeda… -Mencioné cabizbajo, qué podía hacer si yo amaba a Seto -Lo siento, pero no puedo corresponderte -Dije jalando mi mano para que me soltara.

—¿Hay alguien más? -Me preguntó haciendo que diera un pequeño salto por su pregunta.

—S…Si -Respondí finalmente -Estoy enamorado de alguien más -Dije bajando mi rostro ocultando mis ojos en mi flequillo.

—No te preocupes, entiendo -Dijo con un tono de voz animado así que subí mi rostro para verlo.

—Me da gusto que lo entiendas -Dije sonriéndole levemente.

—Espero que esa persona pueda corresponderte -Dijo sonriéndome cálidamente.

—Eso sería imposible -Dije riendo tontamente pensando en que sería hermoso si tuviera la posibilidad.

—Ánimo, solo quiero que sepas que si algún día necesitas a alguien yo siempre estaré para ti -Dijo levantándose de la banca.

—Muchas gracias Takeda-kun -Dije sonriéndole, él solo asintió y comenzó a caminar, pude notar como iba con su cabeza gacha, limpiando algunas lágrimas, seguramente se había aguantado las ganas de llorar para no hacerme sentir mal.

Me quedé sentado en la banca por unos minutos, hasta que escuché un extraño ruido que venía desde atrás.

—¿Quién está ahí? -Pregunté levantándome rápidamente.

—¿Desde cuándo los perros salen sin sus dueños? -Preguntó mi neko sonriendo ladinamente.

—No empieces idiota -Dije tratando de ocultar un leve sonrojo en mis mejillas al escucharlo autonombrarse mi dueño.

—Vaya ese idiota de Takeda sí que se merece un premio por su valentía al habérsele declarado a alguien que ya tiene amo -Dijo acercándose a mí.

—¡Escuchaste lo que hablamos! -Dije molesto -¡Que mal educado eres! Además… ¿qué diablos haces aquí? -Pregunté extrañado.

—Ya te lo dije, no podía dejar que mi cachorro anduviera por ahí sin una correa y mucho menos sin su amo -Dijo llegando a mi lado mirándome fijamente, no entendía de que iba ni que estaba pasando.

—No me trates como si fuera un animal Kaiba -Dije molesto, aunque en parte me sentía feliz de poder estar “hablando” de nuevo con él.

—Tú tienes la culpa de ser tan hermoso como un cachorro, cachorro -Dijo jalándome hacia él para abrazarme -No entendía que estaba pasando, me sentía atolondrado, sus palabras… su abrazo, ¿realmente era mi neko?

—Ka…Kaiba -Pronuncié sorprendido levantando mi rostro para mirarlo fijamente a los ojos, no pude pronunciar nada más porque en ese instante sentí sus labios en los míos, el corazón me latía demasiado fuerte y la alegría no me cabía en el pecho, seguramente estaba soñando, si, esto no era más que un sueño, un hermoso sueño.

Comencé a corresponder su beso pasando mis manos tras su nuca para enredar mis dedos suavemente en su cabello, eso hizo que nuestro beso se volviera mucho más demandante, de un momento a otro escuché como los fuegos artificiales comenzaron a explotar llenando de diferentes colores el cielo nocturno, ahí debajo de esas luces artificiales estaba recibiendo el mejor de todos los besos del mundo.

Abrí lentamente mis ojos cuando nuestros pulmones comenzaron a reclamar oxígeno, realmente era el mejor sueño del mundo, lástima que tendría que terminar.

—Cachorro… -Mencionó juntando nuestras frentes dulcemente.

—Kami… no quiero despertar -Mencioné mientras lo abrazaba a mi cuerpo con más fuerza.

—Cachorro no estás soñando -Mencionó mi neko sonriendo burlescamente.

—Claro que estoy soñando -Dije a la defensiva -De otra forma es imposible que Seto me quiera -Dije mientras recargaba mi rostro en el pecho de mi amado neko.

—Si aún no crees que esto es real, entonces siente esto -Dijo alzando mi rostro dándome un nuevo dulce y demandante beso que finalizó con una mordida en mi labio inferior.

—Auchhh -Me quejé un poco de la acción -Dolió -Dije poniendo mis dedos en mi labio sobándome.

—¿Te das cuenta que esto no es un sueño cachorro? En verdad te quiero -Dijo mirándome divertido.

—¡Ahhhh! -Grite sorprendido, no era un sueño, por fin lo había comprendido, todo lo que estaba viviendo era cierto, mi neko me quería.

—Que escandaloso eres cachorro -Dijo abrazándome posesivamente -Así que debo entender que tú también me quieres -Dijo sonriendo ladinamente.

—Si… te quiero Seto -Dije mirándolo fijamente a los ojos.

—¿Serías mi pareja? -Preguntó lo que siempre quise escuchar de sus labios, sentía que iba a morir de la felicidad.

—Neko… si… si quiero -Dije abalanzadome a sus labios mientras finas lágrimas caían de mis ojos, este era el mejor día de la historia de mi vida.

—Te amo cachorro -Mencionó al terminar nuestro dulce beso.

—Yo también te amo neko -Dije feliz, no podía creer que algo así me estuviera pasando.

Después de unos minutos regresamos con los demás, por ahora no les hablaría a mis amigos de la relación con mi neko, pero se los diría con el tiempo, por ahora solo me sentía feliz de saber que él me quería tanto como yo lo quería a él, era dichoso, tenía la mejor de las suertes del mundo, por siempre iba a agradecerle a Kami la ida a ese festival.

Notas finales:

¡Espero que les haya gustado! *-* Ya saben como el romance se me sale por los poros :$ así que bien, no tengo más que decir por ahora, perooo... espero que nos leemos pronto en otra de mis locas historias, hasta luego :3


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