Jungkook corría alegremente por todo el parque, sabía que no debía alejarse demasiado, o su hermano mayor, Jimin, podía preocuparse, ya no era un niño, tenía 13 años, pero su hermano era más que sobreprotector con él, sin embargo, trataba de ir lo más rápido posible para que...
-¡Te tengo!-sintió a alguien abrazarlo desde su espalda y suspiró
- ¡No es justo Tae!
- Claro que es justo- respondió el otro niño con una linda sonrisa en su rostro- no es mi culpa que seas tan lento- le saco la lengua juguetonamente, haciendo que Jungkook riera
- Aun así no soy tan infantil como tu
- ¡No soy infantil! ¡Soy tu Hyung!
- Si, si, lo que digas-respondió el pelinegro sonriendo, vio a lo lejos a dos personas acercarse, Jimin, su hermano y Yoongi, el hermano mayor de Tae, venían tomados de las manos hacia ellos
- ¡Minnie! Kookie está diciéndome infantil- se quejó Taehyung corriendo a los brazos de su hermano, Yoongi rio y le revolvió el cabello
- Es porque lo eres Tae, ya tienes 14 años y sigues teniendo amigos imaginarios
-Crecer no quiere decir ponerse aburrido
- Claro que si-sonrió Jimin- Por eso no debes crecer nunca-le guiño el ojo y Jungkook gruño
-Que mal consejo Jimin
- Cállate enano, y ven, ya debemos volver a casa
-¿Tan pronto?-dijeron Tae, Jungkook y Yoongi al unísono, este último se sonrojó fuertemente y se apresuró a decir:
-Q-Quiero decir, acaban de llegar, los niños a penas se han visto
-Tengo que ordenar un poco la casa, pero pueden venir si quieren- Contestó Jimin y dejó un suave beso en la mejilla de su novio, Yoongi sonrió muy levemente y asintió, mientras los niños celebraban- Y...si quieren pueden quedarse a dormir- susurró en su oído y mordiendo el mismo, ganándose un fuerte golpe en el estómago.
Jimin y Yoongi, ambos tenían apenas 18 años cuando se conocieron, ambos con historias sumamente parecidas, Jimin y su hermano menor Jungkook, habían quedado huérfanos recientemente, y al tener la mayoría de edad, Jimin estaba haciendo todo lo que estuviese en sus manos para quedarse con la custodia, mientras tanto, Yoongi y su hermano Taehyung, no corrieron con la misma suerte, ellos habían perdido a sus padres cuando el menor estaba a muy corta edad, por lo que un orfanato se hizo cargo de ellos, pero cuando Yoongi cumplió sus 18, se dispuso a darle una mejor vida al pequeño Tae.
Se conocieron un día en que ambos se encontraban haciendo trámites para legalmente hacerse cargo de sus hermanos, Min Yoongi se encontraba perdido, y Jimin no dudo en ayudarle a encontrar el camino, después de todo, no todos los días ves a un chico tan lindo necesitando tu ayuda, ¿Verdad?.
No pasó mucho tiempo para que se enamoraran, y naturalmente, comenzaran a salir, ya habían pasado cinco años desde ese entonces, y aún estaban enamorados como la primera vez, juntos salieron delante de muchos problemas que les dio la vida, juntos trabajaron para formar sus hogares que a pesar de no ser mucho, les alcanzaba para que sus hermanos tuviesen una infancia tranquila y feliz.
...
-¡Ja! ¡Volví a ganar!-rio Jungkook mientras miraba a Tae junto a el
- Es que este juego es muy aburrido Kook-gruñó el tirando las cartas al piso de la habitación de su amigo, Jungkook lo miró y suspiró
-¿Y qué quieres hacer?
-Tengo hambre...
- Pues vamos por algo de comer-respondió Jungkook ofreciéndole una mano, Taehyung la tomó sin dudar y caminaron hacia la cocina, pero se detuvieron de golpe al escuchar extraños ruidos que venían de dentro de ella
- Ese es... ¿Yoongi?- preguntó temeroso Jungkook al escuchar unos quejidos extraños, Taehyung asintió y ambos se acercaron un poco para encontrarse con Jimin y Yoongi besándose apasionadamente, este último sentado en el mesón de la cocina y abrazando la cintura de Jimin fuertemente con las piernas, Los dos chicos solo retrocedieron y volvieron a la habitación, cerrando con cuidado.
-Siempre se están besando- dijo divertido Taehyung, recostándose en la cama del menor, quien se tumbó sobre el como si nada, mirándolo
- Si yo pudiera, también estaría siempre besándote-susurró en su oído, haciéndolo sonrojarse
- Pero si puedes...
Jungkook solo sonrió ante eso y dejo un tierno beso en los labios de su Hyung, el cual pasó de a poco las manos por su cuello, correspondiendo con cuidado esa suave caricia, se quedaron así un rato, solo mimándose y dando suaves besos al rostro del contrario, Jungkook apoyó su cabeza en el pecho de Taehyung, sintiendo su corazón latir
-Te quiero...-susurró, haciendo a Tae sonrojarse más y abrazarlo
-Y yo a ti Kook...
- Oye...
-¿Hm?
-¿Quieres ser mi novio?
La sonrisa de Taehyung nunca estuvo más grande, y casi pudo jurar que las comisuras le dolieron de tanto ensancharlas
-¡Claro que sí!
... Dos meses después...
-¡ERES UN MENTIROSO DE MIERDA PARK JIMIN!- Gritó Yoongi más fuerte de lo que jamás había gritado
- No, bebe por favor, déjame explicártelo- Habló el pelirrojo, tratando sin éxito de abrazar a su pareja- Ella no significo nada para mi
- ¿AH SI?- Yoongi lloraba, odiaba hacerlo, había prometido, para estar fuerte para Tae, que jamás lo haría de nuevo, pero en ese momento, era simplemente imposible detener las lágrimas que caían por su rostro- ¿ENTONCES PORQUE TE ACOSTASTE CON ELLA?
- Yo... yo solo...-Jimin no sabía qué hacer, hace poco había empezado a trabajar como portero en un hotel, la hija de su jefe, una joven y hermosa señorita, había estado insinuándosele en varias ocasiones, las primeras veces no fue duro con ella por miedo a perder su trabajo, pero las siguientes... le había seguido el juego solo por gusto. Una cosa llevaba a la otra, y se había terminado acostando con ella, no contaba con que la muy perra, le enviaría fotos a su novio como venganza por haber terminado todo con ella.
- ¿Cuántas veces Park?- dijo duramente Yoongi, mirándolo con toda la frustración y dolor que sentía, el otro guardó silencio- PREGUNTÉ QUE CUANTAS VECES MIERDA
- NO LO SÉ- Jimin se arrepintió en ese mismo momento de haber gritado- Yo... no lo sé, cinco o tal vez seis veces
Yoongi sintió, como su trizado corazón, se rompía aún más, se tapó la cara, luchando sin éxito para detener los sollozos que salían desde lo más profundo de su corazón
Jimin lo miraba con el corazón destrozado, quería abrazarlo, quería besarlo y hacer que lo perdonara, pero la había cagado y mucho
-Mi amor por favor... haré lo que quieras, lo que me digas- se arrodillo frente a él y abrazó sus piernas, sin dejar de llorar- te amo, jamás ame a nadie más yo solo....
-Eso no te detuvo para metérsela a la primera zorra que se te ofreció ¿verdad?
Jimin lo miró a los ojos, las palabras, habían salido tan duras, tan frías, sintió el odio de la persona que amaba, y juró no haberse sentido tan miserable y repudiable en toda su vida.
-No quiero volver a verte Park Jimin, nunca más en mi vida.-intentó que sus palabras no salieran cortadas como lo hicieron, intentó mantenerse fuerte cuando abría la puerta del cuarto de Jungkook y separaba a Tae de sus brazos, intentó dejar de llorar cuando compraba los boletos de avión, y por sobre todo, intentó olvidar que alguna vez había amado a Park Jimin, pero por supuesto, no logró ninguna de esas cosas.
Taehyung no sabía que pasaba, su hermano mayor lo había despertado en medio de la noche llorando, diciéndole que volverían a casa, recordaba vagamente como Jimin se había puesto frente a la puerta de entrada, diciendo que no lo dejaría irse, y como Yoongi, se había ido de todos modos.
Solo a la mañana siguiente, cuando despertó en un avión, con todas sus cosas empacadas y su hermano sosteniendo su mano, se dio cuenta de que tal vez, nunca volvería a ver a Jungkook, quiso reclamarle a Yoongi, quiso llamarlo egoísta, pero ninguna de esas palabras salió de su boca al ver el estado del mayor, ya no había brillo en su mirada, ya no sonreía, aun después de años de vivir en otra ciudad, su hermano no volvió a ser el mismo, el intentó comunicarse con Jungkook mediante lo que fuese, y lo logró el primer año, hablaban por teléfono seguido y se mandaban mensajes, aún amaba a ese chico, pero todo cambió de la nada, Jungkook ya no contestaba, ya no tenía un perfil en Facebook, su número dejo de estar avalible después de un tiempo.
Ya cuatro años habían pasado desde esa noche, y Taehyung creía por fin haberlo comprendido, Jungkook debía tener su vida hecha, sin él, probablemente tendría una linda novia o novio, probablemente ya ni siquiera pensara en él.
Pero Taehyung lo hacía, y demasiado, no podía olvidarlo, Yoongi siempre le decía cosas como "Tienes 17 Tae, ¡diviértete! ¡Sal a bailar!", pero el simplemente no podía, no quería hacerlo, estaba enamorado, y a pesar de la distancia y del tiempo que llevaban separados, Taehyung aún llevaba a ese niño adorable con dientes de conejo, muy, muy guardado en su corazón.
-Taehyung- llamó suavemente Yoongi desde la puerta de su cuarto, Tae lo miró y le sonrió vagamente, no le sorprendió verlo serio, desde que se habían mudado esa era la expresión que más estaba en su rostro.
Yoongi había estudiado para ser profesor de música, mientras Jimin para enseñar Historia, antes estudiaban juntos pero ahora, Yoongi había terminado sus estudios en la sede de la universidad de esa cuidad y ahora se encontraba trabajando en una escuela de la zona, al menos eso es lo que pensaba Tae
-¿Qué pasa Minnie?
-Tae... Volveremos a Seúl.