En la casa de los Marufuji.
Un joven de cabello castaño ha ido a visitar a su amigo para hacer un trabajo de equipo.
O más bien que este le ayude con la tarea porque se ha dormido en clase como siempre, mientras él tiene una sonrisa en el rostro, el otro solo suspira pesadamente.
-Eres todo un caso aniki, ¿cuándo vas a cambiar? Un día de estos Chronos-sensei se va a enojar contigo de verdad y van a terminar por expulsarte del colegio.
-Ja ja ja ja se seas exagerado Sho, no es para tanto...creo, si pudieran hacerlo ya lo hubieran hecho ja ja ja además, para eso está mi confiable amigo ¿no crees?
-Eres un tramposo-dijo resignado.
El par continuó con la labor un buen rato hasta que el oji marrón comenzó a quedarse dormido.
-¡Aniki!
-Ah lo siento, no soy muy bueno en las labores escolares-articulo somnoliento.
-Ya me di cuenta, como sigas así no vamos a terminar nunca...¿qué te parece si vamos por un pequeño tentempié? Mi madre compró camarones fritos.
-¡Sería genial!
Los ojitos del mayor brillaban de emoción, bien sabía el otro que ese platillo es su debilidad, sonrió complacido y abandonaron la alcoba en dirección a la cocina, todo por un bien mayor, que el castaño terminara su tarea por primera vez en la vida.
Como era de esperar, Sho fue quien preparó los camarones, con su amigo casi en los brazos de Morfeo quería asegurarse de que este no provocará un accidente, capaz que se carga la cocina con todo y casa, jamás subestimen a Yuki Judai y su poder de destrucción masivo...o era su ¿distracción sin sentido? Bueno lo que sea sentado en el comedor no causará problemas.
El peli celeste sale con un gran recipiente que contiene los camarones, para su sorpresa su amigo se ha dormido en la silla, lo cual es extraño considerando lo mucho que le gusta ese platillo, está casi seguro de que podría comerlo todos los días sin aburrirse.
-Ya decía yo que si bien te duermes en clase parecías tener más sueño de lo normal, seguramente te desvelaste con los videojuegos.
Se escucho el sonido de la puerta permitiendo la entrada de su hermano.
-Bienvenido onisan.
-Gracias Sho...¿Judai se volvió a quedar dormido? Ya no debería jugar esas cosas-sonrió levemente-es un niño.
-Ni que lo digas, pero es divertido.
-En eso tienes razón, son amigos desde el preescolar y jamás me canso de sus ocurrencias.
-¿Cuándo le vas a decir? ¿No crees que ya esperaste mucho?
-Como te dije Judai es muy infantil, podría ocasionarle un trauma si le digo lo que siento.
-¿Así que no piensas decírselo nunca?
-Tampoco dije eso, pero no creo que sea el momento.
-Ya veo...¿sabes? Asuka me pidió un libro y tengo que ir a entregárselo, no creo tardar más de media hora ¿crees que podrías cuidarlo en lo que vuelvo?
-Por mí no hay problema.
-Y...
-¿Y?
-Deberías darte un baño. ¿Qué te pasó en el cabello?
-A esto-dijo señalando un poco de pintura roja-otra de las bromas de Fubuki, el si es un niño, al menos Judai no daña a nadie con su actitud.
-¡¿Y yo qué?! Siempre tengo que ayudarle con la tarea.
-Eso no es algo malo, porque así puedo verlo.
-No tiene caso discutir el tema, me voy, si necesitas algo ya conoces el número de mi móvil.
-Ve con cuidado.
El más joven se retiró, dejando solo al par, el peli azul tomo al joven con delicadeza entre sus brazos para llevarlo a su habitación y permitir que se recostará en su cama, porque de seguir dormido en la silla podía lastimarse.
Ya en el sitio le deposito en el lecho y cubrió con las sábanas, mientras él iba a tomar una ducha para quitarse la graciosada de su amigo en el cabello, por fortuna en baño se encuentra en su recámara, por lo que si el chico despierta podrá notarlo.
..........................
El castaño abre poco a poco los ojos, notando que esta recostado en una cama, seguramente se ha quedado dormido otra vez...pero ese aroma...no es la habitación de su amigo, donde siempre suele despertar...¡Es la recámara de Kaiser!
Se sonroja cubriendo su rostro con las sábanas, pero así solo consigue que tan agradable aroma llegue a él con más intensidad, siempre ha admirado al hermano de Sho, pero hace un par de años se dio cuenta de que ese sentimiento se convirtió en amor, el peli azul le gusta, y le gusta mucho, pero alguien tan maravilloso como él no se iba a enamorar de una persona que todos tachan de infantil, por lo que ha tenido que fingir que no le gusta ¿quién diría que sería tan buen actor?
Pero estar en la cama del mayor va más allá de sus dotes actorales, tiene que salir de ahí antes de que...demasiado tarde, el oji azul ha salido del baño, y si bien esta completamente vestido, la humedad en su cabello y las gotas de agua que perlan su rostro solo provocan que se vea muy sensual, ahora si se ha puesto todo rojo, y lo peor de todo el mayor se ha dado cuenta al juzgar por la manera en que lo mira.
Se acerca a el por lo que su pulso se acelera, ruega porque no adivine sus pensamientos, lo que sería complicado considerando la inteligencia e intuición de ese hombre, se ha sentado a un lado suyo y extiende una mano para tocar su mejilla, que en estos momentos debe ser del mismo color de la chamarra de su uniforme.
-Judai-dijo el mayor con una voz condenadamente sensual-¿me equivoco al pensar que has reaccionado de esta manera porque te gusto?
El castaño comenzó a sentirse muy inquieto, tal y como esperaba, se ha dado cuenta, y ahora tiene miedo, si fingió todo este tiempo no estar enamorado era para que este no se alejara de él, pero ahora...todo estaba perdido.
-Yo...
No pudo pronunciar nada más, las palabras decidieron tomar un refugio seguro en el interior de sus labios, los que comenzaron a temblar de manera involuntaria, por fortuna para él, la persona de la que se ha enamorado es bastante inteligente, y ahora que ha mostrado su corazón, entiende lo que el joven siente por él.
-Me gustas Judai, tiene años que ha sido así, pero no pensé que sintieras algo por mí.
Los ojos avellana le miraron con sorpresa, era incapaz de hablar por la ola de sentimientos en su pecho, así que simplemente se lanzó a los brazos del mayor, este correspondió el abrazo para posteriormente tomar del mentón al chico y depositar un dulce beso en los labios de este, uno que duro una eternidad para ellos, era especial por ser el primero, cerraron los ojos y se entregaron por completo al amor, rompieron el contacto y se miraron, el castaño estaba sonrojado.
-También me gustas Kaiser, es solo...no creí que te gustara alguien como yo.
-¿Por qué?
-Tú sabes, suelen decirme que soy infantil.
-Lo eres, pero no pienso que sea algo malo, eres diferente a los demás, incluso me haces reír y eso ya es decir mucho, ¿cómo no voy a quererte si me haces tan feliz?
-¿Enserio?
-Sí, ¿quieres ser mi novio?
-¡Sí!
El chico se lanzó a sus brazos otra vez para continuar con los besos, pero un sonido en su estómago les distrajo a ambos.
-Vayamos a comer-dijo el oji azul.
El otro por su parte se avergonzó, que forma de matar el momento.
Bajaron al comedor y el más joven no pudo ocultar su nerviosismo, no era la primera vez que estaba ahí, pero habían dos cosas diferentes, la primera estaban solos, jamás lo habían estado, y segundo ahora son novios, tienen una relación formal, si el día anterior le hubieran dicho que algo así era posible, simplemente se hubiera reído.
Continuaron con la convivencia hasta que al poco llegó Sho y les hizo compañía, cuando llegó el momento en que Judai debía volver a casa, Kaiser se ofreció a llevarlo y al despedirse le dio un dulce beso en los labios.
.......................
El peli azul volvió a su hogar siendo recibido por una pícara sonrisa de parte de su hermano.
-Así que por fin se lo dijiste.
-¿Cómo te diste cuenta?
-Aniki estaba más nervioso que de costumbre.
-Ya veo, si, somos novios.
-Me da gusto por ustedes.
-A mi también.
En ese momento el menor vio una sonrisa que jamás creyó ver en su hermano, le tranquilizaba mucho que las dos personas que más quiere puedan ser felices juntos.
........................
Han pasado un par de semanas desde que iniciaron su relación, el castaño está emocionado con ello, pues Kaiser ha sido detallista, lindo, protector, amable, bueno se tardaría una eternidad para describirle, no puede evitar pensar en el cómo su príncipe, cada que salen a una de sus citas, se le ve lo enamorado por todas partes, y aunque siempre pensó en su novio como alguien que no muestra fácilmente sus sentimientos, también se le nota lo enamorado que esta, parecen un par de tontitos cuando están juntos, aunque en el caso del peli azul solo es Judai quien lo nota.
...........................
Ha pasado otra semana más de relación y el castaño ha vuelto a comportarse de manera completamente infantil como ya es su costumbre, y es que al principio trataba de seguir el ritmo de su amado, este notando que estaba tenso no dijo nada, pero pasado el tiempo le dijo que no había problema con su manera de ser, que es por ella que le ama tanto, y le pidió que fuera auténtico, que hiciera lo que su corazón le dictara porque el siempre iba a apoyarlo, ante tales comentarios el chico no pudo contener las lágrimas de emoción.
..............................
Después de dos años de relación, esta iba de manera increíblemente lenta, no habían pasado más allá de los besos, en parte porque Kaiser es todo un caballero, y el ser con más paciencia en el universo, y Judai es muy tímido, pero tiene ganas de llegar a más con su novio, solo que no encuentra la manera de decírselo a su pareja, notando que tienen problemas para continuar, Sho ha decidido ayudar al par, por lo que ha planeado un juego en casa con pistolas de agua.
Ambos están emocionados, el castaño por su simpleza natural, y el mayor por...bueno siempre termina contagiado por la energía de su novio.
Todos toman una de las pistolas, y se separan en el jardín, las reglas son simples, el que termine más empapado pierde.
Y con eso en mente deciden separarse para ponerse al asecho, el primero en localizar a su víctima es el peli celeste, que se ha colocado de espaldas a su amigo, desde ahí tiene un tiro certero, toma su arma y...¡o no su hermano le ha disparado por la espalda! Logró lanzarse a un lado para evitar que le mojara más.
-¡Eso ha sido ruin onisan!
-Tú querías hacerle lo mismo a Judai.
-Sho-dijo con voz quebrada el castaño-¿acaso planeabas...traicionarme?
-Claro que no...es solo que...-pero un disparo en su pecho por parte de su amigo le devolvió a la realidad-¡Aniki!
Sin duda ahí el más ingenuo es el pequeño.
Continuaron con el juego, pero el peli celeste decidió esperar, tenía que cobrar venganza por la humillación que le habían hecho pasar.
Y así pasaron los minutos sin que hiciera un solo movimiento, observando desde un sitio seguro, esperando...esperando...esperando ¡y ahí estaba su oportunidad! ¡Un tiro ineludible a su hermano! Apretó el gatillo y...
-¡Kaiser!
El oji marrón lanzó a su novio para evitar que este saliera mojado, y aunque el asunto parecía dramático, más bien lo hizo para evitar que este se empapara, no lo había pensado bien, pero seguro verlo así iba a provocar algo en su corazón, no se, un infarto por ejemplo.
El castaño se quedó sentado un momento en el suelo, pues se había lanzado con un poco más de fuerza de la necesaria.
-¿Estás bien?-le preguntó su novio extendiendo una mano para ayudarle a poner en pie.
-Si-sonrió inocentemente-es solo agua.
Todo el autocontrol de años se fue a la basura cuando el peli azul vio lo que Judai evitaba para sí mismo, estaba completamente empapado, provocando que se viera muy sensual.
Sin más lo tomo en sus brazos para asombro del menor, Sho entendió lo que haría su hermano y decidió dar un paseo para darles privacidad.
Ya en la habitación de Ryo este recostó al menor sobre la cama besando sus labios con pasión y respeto, mientras con sus dedos acariciaba sutilmente la piel de su cuello, estuvieron así varios minutos, en los que el más joven pensó que harían el amor, por el no había problema, era algo que deseaba.
Pero se sorprendió cuando su amado se detuvo por lo que no pudo evitar mirarle confundido.
-¿Qué sucede?
-Ve a darte una ducha, enfermaras si continuas con la ropa húmeda.
El castaño siguió el consejo más por confusión que otra cosa, mientras su novio se quedaba pensativo sentado en la cama.
<<-Eso estuvo cerca, fue difícil controlarme, pero si quiero hacer las cosas debo hacerlas bien.>>
El menor volvió después de un rato con la misma expresión, necesitaba saber lo que estaba pasando, pero como siempre no fue necesario decir nada para que ese hombre entendiera la situación.
-No es que no quiera hacerlo contigo, pero sabes que ante todo te respeto, por eso-se arrodilló sacando una caja de su bolsillo de donde tomó un anillo-¿quieres casarte conmigo?
El joven cayó sin más al suelo, sin oponer la más mínima resistencia a ello, y terminó tirando a su novio que tratando de evitar que se lastimara cayó con el debido a la incómoda postura que tenía.
-¡Judai! ¿Estás bien?
-Si, ja ja ja es solo que me sorprendiste ja ja ja ¡Claro que me quiero casar contigo te amo Ryo!
-Yo también te amo Judai.
El anillo fue colocado en su dedo, mientras volvían a besarse, después de un rato se alejaron un poco agitados.
-Habrá que...esperar a la...noche de bodas-dice el oji azul.
-Tienes... razón-responde su prometido.
Poco después llega el hermano de uno y cuñado del otro, le comentan que van a casarse, y les sonríe, vaya que son un par complicado de unir, se aman pero es difícil hacer que vayan de un paso al otro de la relación, ¿cuántas veces no tuvo que intervenir para ayudar? Después de esto se tomara unas vacaciones, aunque le da gusto saber que compartirán su amor para siempre, no hay nada mejor para ese par que siempre piensa en otros antes que en si mismos, Ryo siempre preocupado por el, sus padres, Judai, Fubuki y Asuka, y su Aniki por el mundo en general, ya era hora de que el destino les diera algo a cambio, y notando que vuelven a besarse, decide retirarse para darles privacidad, aunque no importa que tan lejos vaya, siempre escucha la risa de su amigo, pero eso solo significa que ha encontrado la felicidad.