Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La llave por SilverCamil

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holaaa! ¿Cómo están?

Espero que les guste este mini escrito. Es muy corto y por esa razón lo demás se repite pero es por la cantidad de palabras. Bueno eso es todo.

!DISFRUTEN!

Lo estoy esperando.
El cielo se mantiene nublado pero el color amarillento de los fresnos ya es característico. Pasan los minutos, saco las llaves de mi bolsillo, empiezo moverlas en mi mano, chocan entre sí, hacen música, son cuatro llaves, tuve tiempo de apreciarlas cuando las encontré de sorpresa en una de mis camperas, no son mías, son de Claus, al encontrarlas me sorprendí no recordaba cuando pudo haberlas guardado, el tema es que hace unos veinte minutos me avisó que venía a buscarlas.
Dejo de moverlas, las miro, una es chiquita, de candado, imagino de que puertas pueden ser las demás, recuerdo su casa, las veces que fui, sonrío.
- Gracias Isma-. Su voz me llega de sorpresa, lo miro y se ve relajado como siempre.
- No es nada-. Y mi sonrisa se agranda. - ¿Queres subir?-. Apunto al edificio.
- Dale-.
Caminamos a la entrada, estamos ingresando al ascensor. – Creo que voy a tener que perder la llave más seguido-. Ambos reímos.
- No vendría mal-.

_______________________________________________________



Lo estoy esperando.
El cielo se mantiene nublado pero el color amarillento de los fresnos ya es característico. Pasan los minutos, saco las llaves de mi bolsillo, empiezo moverlas en mi mano, chocan entre sí, hacen música, son cuatro llaves, tuve tiempo de apreciarlas cuando las encontré de sorpresa en una de mis camperas, no son mías, son de Claus, al encontrarlas me sorprendí no recordaba cuando pudo haberlas guardado, el tema es que hace unos veinte minutos me avisó que venía a buscarlas.
Dejo de moverlas, las miro, una es chiquita, de candado, imagino de que puertas pueden ser las demás, recuerdo su casa, las veces que fui, sonrío.
- Gracias Isma-. Su voz me llega de sorpresa, lo miro y se ve relajado como siempre.
- No es nada-. Y mi sonrisa se agranda. - ¿Queres subir?-. Apunto al edificio.
- Dale-.
Caminamos a la entrada, estamos ingresando al ascensor. – Creo que voy a tener que perder la llave más seguido-. Ambos reímos.
- No vendría mal-.





Lo estoy esperando.
El cielo se mantiene nublado pero el color amarillento de los fresnos ya es característico. Pasan los minutos, saco las llaves de mi bolsillo, empiezo moverlas en mi mano, chocan entre sí, hacen música, son cuatro llaves, tuve tiempo de apreciarlas cuando las encontré de sorpresa en una de mis camperas, no son mías, son de Claus, al encontrarlas me sorprendí no recordaba cuando pudo haberlas guardado, el tema es que hace unos veinte minutos me avisó que venía a buscarlas.
Dejo de moverlas, las miro, una es chiquita, de candado, imagino de que puertas pueden ser las demás, recuerdo su casa, las veces que fui, sonrío.
- Gracias Isma-. Su voz me llega de sorpresa, lo miro y se ve relajado como siempre.
- No es nada-. Y mi sonrisa se agranda. - ¿Queres subir?-. Apunto al edificio.
- Dale-.
Caminamos a la entrada, estamos ingresando al ascensor. – Creo que voy a tener que perder la llave más seguido-. Ambos reímos.
- No vendría mal-.


Lo estoy esperando.
El cielo se mantiene nublado pero el color amarillento de los fresnos ya es característico. Pasan los minutos, saco las llaves de mi bolsillo, empiezo moverlas en mi mano, chocan entre sí, hacen música, son cuatro llaves, tuve tiempo de apreciarlas cuando las encontré de sorpresa en una de mis camperas, no son mías, son de Claus, al encontrarlas me sorprendí no recordaba cuando pudo haberlas guardado, el tema es que hace unos veinte minutos me avisó que venía a buscarlas.
Dejo de moverlas, las miro, una es chiquita, de candado, imagino de que puertas pueden ser las demás, recuerdo su casa, las veces que fui, sonrío.
- Gracias Isma-. Su voz me llega de sorpresa, lo miro y se ve relajado como siempre.
- No es nada-. Y mi sonrisa se agranda. - ¿Queres subir?-. Apunto al edificio.
- Dale-.
Caminamos a la entrada, estamos ingresando al ascensor. – Creo que voy a tener que perder la llave más seguido-. Ambos reímos.
- No vendría mal-.



Lo estoy esperando.
El cielo se mantiene nublado pero el color amarillento de los fresnos ya es característico. Pasan los minutos, saco las llaves de mi bolsillo, empiezo moverlas en mi mano, chocan entre sí, hacen música, son cuatro llaves, tuve tiempo de apreciarlas cuando las encontré de sorpresa en una de mis camperas, no son mías, son de Claus, al encontrarlas me sorprendí no recordaba cuando pudo haberlas guardado, el tema es que hace unos veinte minutos me avisó que venía a buscarlas.
Dejo de moverlas, las miro, una es chiquita, de candado, imagino de que puertas pueden ser las demás, recuerdo su casa, las veces que fui, sonrío.
- Gracias Isma-. Su voz me llega de sorpresa, lo miro y se ve relajado como siempre.
- No es nada-. Y mi sonrisa se agranda. - ¿Queres subir?-. Apunto al edificio.
- Dale-.
Caminamos a la entrada, estamos ingresando al ascensor. – Creo que voy a tener que perder la llave más seguido-. Ambos reímos.
- No vendría mal-.
Notas finales:

MUCHAS GRACIAS POR LEER! BESOS


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).