SOLO... MELLO
Por: Hell Girl Ai Emma.
Parejas: MxM (Mello x Matt). Leve LxL (Light x L).
El chico da una última calada a su cigarro antes de tirarlo al suelo y apagarlo con su zapato. Se coloca correctamente los googles en sus ojos y luego inspira hondo antes de entrar por esa sucia puerta.
-¡Matty!-lo saluda una efusiva chica castaña de coletas vestida con una corta falda-Llegaste temprano hoy, el investigador aun no llega-
-Puedo esperar-dice sonriéndole como siempre con esa gran sonrisa. Toma asiento en una de las mesas más alejadas. Con la chica sentándose a su lado.
-Mail...-lo llama insegura por su nombre-No crees que... ¿sería mejor si ya lo dejas?-dice sonriéndole con un poco de lastima en sus ojos-Solo te estás...-
-¿Podrías... dejarme solo? Puedo esperar al investigador sin compañía-dice tajante casi ignorándola mientras trata de distraerse un poco con su psp.
Lo sabe, sabe que no debería seguir con eso, pero inevitablemente simplemente no puede dejarlo ir, los recuerdos siempre llegan a él.
-¡Mello!-grita con la euforia en su punto más alto mientras brinca y baila en aquella pista y luego siente como es tomado por la cintura.
-Perro-le susurran al oído antes de morderle un poco, las hebras rubias le hacen cosquillas en el cuello-¿Estuviste extrañándome este tiempo, cachorro?-le susurra de nuevo pero esta vez sobre sus labios antes de atraerlo un tanto brusco de la nuca hasta besarlo, fuerte y con prisa, como todo Mello.
-Mn... ¿Qué hacías...-trata de recuperar el aire que hace poco le fue robado-¿Qué hacías hace rato tan cerca de Near?-pregunta sin poder evitar hacer un pequeño puchero.
-¿Yo? Nada-responde el rubio sonriendo de medio lado balanceándose al compas de la música tan cerca del cuerpo del otro que parece que van a fundirse-¿Estabas celoso o alguna de esas cosas cursis?-
-¿Yo? No-le responde el pelirrojo con otra sonrisa de esas que hacían que las chicas a su alrededor suspiraran.
Mi amante de Heavy Metal, debí haber aprendido a cuidarte.
No me querías todo el tiempo, pero fuiste digno de todas formas.
-Buenas noches-saluda el hombre alto antes de sentarse frente al gamer, sacándolo de sus pensamientos.
-Mikami-saluda sin mucha emoción, pero sonriendo, como siempre sonriendo-¿Hay nuevas noticias?-pregunta ansioso retirándose sus googles y dejando a la vista aquellos hermosos ojos verdes.
-Tienes ojeras-es lo primero que dice el de lentes-Y las hay, tal vez mejores de las que esperabas-
-¿Mello, cómo esta?-pregunta bebiendo un largo trago de su cerveza.
-Como siempre, envuelto en carreras clandestinas de motocicletas... Va a volver-suelta con lentitud esperando una reacción del oji-verde-Va a volver a esta ciudad, aunque aún no sé si es permanente, cosa que creo no es posible-
-Ah, va a... volver-el pelirrojo parece meditar las palabras, muerde su labio inferior antes de contestar de nuevo-Y... ¿Near? ¿Qué ha sucedido con él?-
-No está más con Mihael si es a lo que te refieres-le responde claro y viendo la sorpresa en los ojos ajenos-Nunca creí que durarían tanto, tampoco-
-Bien... gracias por la información-dice el oji-verde antes de sonreír un poco triste y extenderle un sobre con dinero-No creo necesitar más investigaciones. Gracias de todos modos, Mikami-
Le sonríe una vez mas y pasa de largo a Linda cuando esta trata de detenerle, hasta llegar a su auto. Tiene que dejarlo y lo sabe, sus ojos se aprietan fuertemente cuando da la primera calada de un nuevo cigarrillo, recordando las últimas palabras del rubio hacia su persona.
-Maldigo el maldito día en que te conocí, Mail Jeevas-
Deja las llaves a un lado cuando entra a su departamento, asegurándolo por dentro. Su departamento se ven tan frío, tan oscuro. No tarda en deshacerse de sus zapatos y luego poco a poco de su ropa, dejándola regada por todos lados hasta llegar a su habitación solo con su bóxer, poco le importa, la verdad. Se recuesta en la cama con la cajetilla de cigarros en una mano y el encendedor en la otra, pero, eso tampoco le sabe bien en ese momento así que solo deja ambas cosas en su mesita de noche.
-Mihael Keehl-susurra para sí, extendiendo la mano hacia arriba y curvando sus labios en una sonrisa al recordar como lo conoció.
-¡Es muy bueno!-grita emocionado mientras ve junto a sus amigos Light y Elle una carrera clandestina de motocicletas-Es fantástico-
-Supuse que te gustaría ver algo así Matty, salir de tu aburrida rutina-contesta el castaño sonriéndole y atrayendo al pelinegro de la cintura hacia sí-¿Qué ocurre, bebé?-
-No sé si deberíamos estar aquí... no, no debemos estar aquí, Light-responde el oji-negro mordisqueando su dedo pulgar-Estamos estudiando leyes, digo no es lo más lógico que estemos apoyando esta clase de reuniones clandestinas-
-Elle, es tu primo-le responde el castaño dirigiendo su vista al rubio.
-Lo sé, y eso lo hace peor-responde dejándose hacer por su novio hasta que se dan un beso.
-No coman pan enfrente de los pobres-se queja el pelirrojo ignorando por completo lo que dijo su amigo al estar tan concentrado viendo al rubio sexy frente a sus ojos-La carrera terminó-dice casi para sí mismo al ser ignorado por los otros dos-Iré por... allá-se aleja sin un lugar al que ir en específico. Sin darse cuenta termina buscando el baño, pero se pierde en el camino y entra a la que parece ser la habitación donde los competidores se cambian, está a punto de salir cuando escucha voces.
-Te dije que ibas a acabar con ellos muy fácil-la ronca voz se deja oír-Últimamente muchos jóvenes inexpertos que se creen soñados son los que se inscriben-
-Una jodida mierda ¿no?-responde la otra voz aburrida, erizándole la piel.
Hay un corto silencio antes de que vea entrar por la puerta a ¿Elle? quien se le queda viendo un poco antes de hablar.
-¡Mello, hay otra fan loca por acá!-grita acercándose hasta el pasmado pelirrojo-Espera... tú no eres una chica-dice muy cerca de él.
-Y... Y t-tú no eres Elle-le dice apenas viéndolo.
-¡Ja! ¿Mi hermanito?-pregunta burlándose el otro-Así que lo conoces-dice hasta que escucha pasos acercándose rápido-Suerte con mi temperamental amigo-dice desapareciendo luego.
-¿Cómo es eso de que otra...-el chico rubio deja las palabras al aire cuando entra y se encuentra con el cuarto vacío a excepción de un chico de mechones rojizos que parece verlo, no puede saberlo con esas cosas en sus ojos puestas-¿Quien diablos eres tú?-pregunta mordiendo una barra de chocolate.
-Yo... yo solo estaba buscando el baño-se excusa rápido el oji-verde, emocionado y asustado a la vez. ¡Es el chico de las motocicletas, el que ganó y llamó su atención desde un primer momento!-Lo siento. Y-Yo te vi, eres el chico que gano la carrera-dice un poco nervioso-Es la primera vez que yo vengo a a-algo así-
La sonrisa en el otro chico se incrementa al ver el nerviosismo en el otro acercándose solo un poco mientras da otra mordida a su barra.
-Ý dime ¿cuál es tu nombre?-pregunta acercándose cada vez un poco más-Yo soy Mello, solo Mello-dice hasta quedar frente al tembloroso chico.
-Yo soy... Matt, solo Matt-
El rubio sonríe al escuchar la respuesta del pelirrojo, si, definitivamente no lo conocía.
-Y dime "solo Matt"-su mano libre se poso en una de las mejillas ahora rojizas-¿Quieres saber dónde está el baño?-
-Yo, p-por favor-pide sintiendo su cuerpo caliente ¡diablos! No es para nadie que lo conozca un secreto sus preferencias sexuales, pero jamás un hombre le había hecho sentir así.
El rubio le sonríe antes de terminarse de un bocado su dulce y aventar la envoltura en algún lugar no importante, mientras lo toma de la mano para guiarlo hasta el baño. Oh Dios, Matt siente que puede morir allí.
Y cuando llegan al baño y el rubio abre la puerta para él, sabe que está perdido. El chico de ojos azules se abalanza sobre sus labios y el no duda en corresponderle. Mello cierra la puerta del amplio baño y luego lo toma de los muslos hasta dejarlo sentado a un lado del lavabo con él entre sus piernas.
Mello lo obliga a agacharse solo un poco pare reclamar sus labios de nuevo, separándose un poco solo para retirarle aquellos molestos googles.
-Verdes-susurra sobre los labios del menor, introduciendo sus manos por debajo de la polera a rayas tocando sus pezones que se ponen al instante duros, escuchando los suspiros ajenos mientras se dedica ahora a mordisquear su cuello.
-M-Mello-susurra tratando de no gemir, no tan pronto, mientras se deja hacer.
-Quiero que hagas algo por mí, perro-susurra el rubio a su oído haciéndolo solo temblar mas al quitarle la polera-¿Lo harás?-dice mordiendo fuerte su cuello.
-Ah! y-yo... mh, e-está bien-dice para sentir como el cuerpo del otro se aleja de sí.
El oji-azul se aleja para dejar que el chico se baje del lavabo hasta quedar frente a él, quitándose su chaqueta y luego su playera dejando a la vista su muy formado torso. Desabrocha con prisa sus pantalones y luego se detiene en el cierre.
-Puedes hacer el resto ¿no?-dice sonriendo y dejando a un choqueado Matt quien se queda estático. Acaso... ¿le esta pidiendo una felación? Vaya que no es que jamás haya dado una, pero ¡apenas y se conocían! Entonces, ¿por qué se estaba arrodillando y estaba bajando el resto del cierre?
Sin más por lo que esperar, el chico de ojos verdes baja solo un poco la ropa interior del otro junto con un poco de sus ajustados pantalones, dejando a la vista aquel miembro tan... grande ¡Por Dios! Ya no le parecía tan buena idea estar donde estaba. Lo toma entre sus manos porque la vista que recibe del rubio le dice que no lo va a dejar retroceder. Comienza a pasar su lengua por los costados de aquella erección, y luego la mete en su boca comenzando poco a poco a subir y bajar constantemente. Se ríe por lo gracioso que le parece la situación pensando en cómo terminó en menos de 10 minutos, arrodillado y mamándosela a otro hombre. Mientras tanto los dedos del rubio se enredan en aquellos mechones rojizos, aferrándose y con sus caderas embistiendo más adentro, follandole literalmente la boca ¡que, diablos! era tan malditamente acogedora. Los movimientos aumentan poco a poco y a Mello no le importa casi ahogar al chico de rodillas, cuando en un último movimiento se deja ir, llenando la boca y garganta de Mail con su esencia.
-Cof cof-Matt se retira instantáneamente tragando lo que puede y con la cara roja por el esfuerzo-O-Oye tu...-trata de quejarse, pero el oji-azul no de la tiempo de hacerlo cuando ya lo tiene de pie de nuevo y besándolo. Matt cree que puede volverse adicto a aquella forma tan peculiar de besar.
-No te traje aquí precisamente para hablar-dice el rubio mordiendo sus labios-Aunque tampoco se suponía que venías para esto-
-No hablar... lo entiendo-susurra ahora ansioso el pelirrojo aventurándose ahora a iniciar el beso, el rubio parece sonreír dejándole el control unos segundos antes de besarlo con más fuerza mientras desabrocha los pantalones y luego los baja junto con la ropa interior dejando al gamer al descubierto, la vista se vuelve mejor cuando lo vuelve a subir al lavabo metiéndose entre sus piernas friccionando ambas erecciones sin romper el beso.
El blondo se separa un poco para meter tres dedos en la boca del muy sonrojado gamer quien no duda en comenzar a llenarlos de su saliva, el primer dedo desaparece en la entrada del pelirrojo sin mas preámbulos, luego un segundo y al final son los 3 los que se dedican a prepararlo.
-Ngh mn M-Mello-susurra sosteniéndose fuerte del cuello del otro-Oh nm, D-Dios...-sus ojos están cristalizándose pero de puro placer-P-Por favor yo l-lo necesito-
-¿Necesitas el qué?-pregunta el rubio sonriendo con malicia-Dímelo, Ma-tty-
-Fo-Follame p-por favor-dice el oji-verde acercándose mas al rubio-D-duro-
Y esa maldita voz tan provocativa hace que el rubio saque sus dedos de aquel lugar, para bajar solo un poco mas su ropa y luego masturbar un poco su miembro hasta llevarlo a la entrada del fumador.
-Como pidas-dice por último antes de introducirse de una sola estocada-Jo...der-
-¡Ah!-grita Matt cuando lo siente dentro suyo por completo-M-Mello-
Sin esperar mucho Mello comienza a moverse en el interior del otro, tan jodidamente apretado, hace mucho no se sentía igual de bien. Sostiene de la cintura al otro arremetiendo contra él con fuerza, cada vez más rápido. Mail mientras tanto se sostiene como puede de los hombros del rubio.
-AH Ngh! M-Mas rápido-pide ansioso con el éxtasis alcanzándolo-P-Por favor-
-Tan jodidamente ah... apretado-dice entre dientes Mello para aumentar el ritmo de las estocadas, saliendo casi hasta la punta para arremeter de nuevo hasta el fondo llegando a tocar la próstata del menor-G-gime mi nombre... v-vamos-
-¡Me-Mello! ¡Oh Dios justo a-allí!-
Las estocadas son en el mismo punto por un poco mas hasta que el rubio siente como el otro comienza a contraerse apretándolo mas, toma el miembro del oji-verde en sus manos para comenzar a masturbarlo al ritmo de las embestidas y luego en pocos segundos siente su mano y abdomen ser llenados por la esencia caliente. El interior de Matt se contrae de una forma deliciosa aun con su miembro adentro y hace que llegue al orgasmo más espectacular que ha tenido en su vida... claro que no va a decirlo.
Luego de eso, lo hacen varias veces mas y luego todo para el pelirrojo es confuso, solo recuerda siluetas del rubio llevándolo en sus brazos hasta un coche y... después despierta en una habitación que no es la suya, con los rayos del sol golpeándole insistentemente.
-Buenos días, perro-saluda el dueño de la habitación, a su lado con un computador y una taza de chocolate-Vas a decirme ya tu nombre-pide con esa mirada que ahora que están lejos del placer vuelve a ser dura.
-Mi nombres es Mail Jeevas-responde apenas, soportando el dolor en sus caderas-¿Y el tuyo?-
-Mihael Keehl, para el mundo... solo Mello-
Matt sonríe luego de recordar aquella primera ocasión, luego de eso todo volvía a repetirse sin compromisos y sin nada más que sexo. Hasta que un día el rubio simplemente le afirmó que era de su propiedad y que no iba a dejar que absolutamente nadie más lo tocara, no sin recibir su respectivo castigo. Esa fue la primera vez que alguien lo reclamó como suyo y la única. Su sonrisa se borra al recordarlo.
Porque fuiste mucho mejor, que el resto.
A comparación de los otros, tú fuiste el hombre honesto.
Él amaba Guns and Roses, él amaba Guns and Roses...
-¡Lo lograste de nuevo!-el efusivo chico de ojos esmeralda se lanza sobre su novio hasta colgársele como koala-Yo sabía que lo harías-le da un corto beso.
-¿No será porque siempre lo hago?-dice obvio el rubio sosteniéndolo hasta dejarlo encima de su preciada motocicleta-Vayamos a celebrarlo-
Sus cuerpos se mueven al compás de la música, saltando y bailando casi como si estuvieran solos.
-Mello...-la voz del gamer se oye un poco triste-Yo te admiro jugando en la pista... p-pero es peligroso, hoy casi, estuviste a punto de caer-dice con un nudo en la garganta-¿En algún momento... vas a dejarlo?-
-Cállate, Matt-le dice mientras lo atrae a un beso-Te diré un secreto, perro-le dice el rubio mientras toma un trago de su cerveza y se acerca a su oído, tomándolo de la cintura-Te quiero-susurra con una pequeña risita probablemente resultado de tanto alcohol, pero Mail no esta tan tomado y se asusta un poco.
-M-Mello-susurra alejándose un poco-¿Hablas enserio?-una parte de él quiere que el rubio le diga que es verdad y otra casi mas fuerte quiere que se ría y le diga que es una broma.
-Si no te quisiera, hace un rato te hubiera mandado a la mierda-vuelve a decirle para dar otro trago a su bebida-Huyamos juntos entonces, lo dejo si te largas de esta mierda, conmigo-
-M-Mello yo no...-
Divino amante de las motocicletas, debí haber aprendido a dejarte jugar.
Yo no era de "los que se casan", debería haberlo hecho de todas formas.
-No, Elle yo no quiero... por favor-dice casi suplicante, solo quiere superarlo de una vez por todas.
-Mail-su amigo y ahora jefe le contesta aun pegado a su computador ocupado con un caso seguramente-Mi primo Mello es un muy buen detective ahora-le rebate-En algún momento ibas a necesitar un compañero, no siempre puedes trabajar solo-
-Pero Elle tu no...-
-Trabajo es trabajo, Matt-ahora es Light el que le contradice-Si ustedes terminaron bien hace dos años, eso ya no debe importar-
"Es solo que no lo hicimos"
-Como sea entonces-dice dándose por vencido y tratando de encender un cigarrillo.
-Sabes que no puedes hacer eso con Elle aquí-lo regaña Light, recordándole el estado de su ahora esposo.
-Iré afuera entonces-dice colocándose sus googles y saliendo un poco estresado del lugar-Ya fue suficiente, ya pague lo que tenía que pagar-dice apretando los dientes-
-No puedo... yo, me iré de aquí, pero no contigo Mello-
-¿De qué demonios estás hablando, estúpido perro?-
-Un amigo me ofreció un lugar para vivir con él, lejos de aquí también-
-Estas... diciéndome que enserio ¿estas prefiriendo a un imbécil, antes que a mí?-dice apretando los puños-Sabes lo malditamente molestas que se me hacen las cosas cursis a comparación de ti y aun así, aun así ¡te di lo que querías, joder!-
-L-Lo siento-las lágrimas comenzaban a acumularse en sus ojos-Pero no me siento de la misma forma que tu.
-¿Enserio?-dice riendo un tanto amargo-Bien, como quieras-dice el rubio viéndolo con esos fieros ojos azules-¿Sabes algo gracioso? Maldigo el maldito día en que te conocí, Mail Jeevas-
Deberíamos haber dejado Las Vegas, y haber comenzado otra vez.
Llevándote de vuelta, de vuelta a la tierra prometida.
"Pero si lo hacía"
Claro que nunca nadie iba a enterarse de que solo lo hizo porque en realidad lo amaba tanto que no creía el poder soportar una vida como la que el rubio tenía, llena de peligro todo el tiempo, arriesgando su vida. Luego vio que Mello comenzó a salir con Near, cosa extraña si pensabas en que ambos siempre competían referente a su inteligencia y se insultaban.
-Estúpido-dice mientras se burla y se lo dice a manera de insulto a sí mismo, dando otra fuerte calada de su cigarro. Porque terminó siendo un detective, y aunque diga que es más seguro, siempre arriesga su vida, las formas distintas de morir no importan al final del camino.
Él amaba Guns and Roses, él amaba Guns and Roses...
-Bien, eso es todo lo que tenemos que anunciar y por lo que nos hemos reunido hoy-acaba de decir Light, vestido con un elegante traje negro igual al de su esposo-Esperamos que puedan llevarse bien con nuestro nuevo compañero-
-La fiesta puede iniciar-dice por último Elle dando paso a la música, claro que la reunión no era tan alocada como una disco o algo, solo una simple reunión con los detectives y policías mas importantes de Japón y una velada llena de música relajante y para bailar en compañía de alguien.
La vista del gamer instintivamente viaja hacia donde el rubio, quien parece estar platicando con muchas personas que se arremolinan a su alrededor, una ligera risilla sale de sus labios, al percatarse del estado del rubio, seguramente obligado a mostrarse feliz. Pero él lo conoce mejor que nadie, y esa sonrisa falsa y el ceño ligeramente fruncido le dicen que está comenzando a cansarse.
Se lleva su champagne a los labios aun viendo a la distancia al chico de ojos azules.
-Se puso mejor mi primito, ¿no lo crees, Matty?-la voz repentina a su lado hace que casi se atragante con su bebida.
-¡Beyond!-grita sin importarle mucho si llama la atención o no-Al menos avisa cuando estés cerca-
-Saliste igual de miedoso que el castaño, no sé como mi hermanito pudo casarse con él si me tiene a mi-se lleva una mano a la barbilla como si lo estuviera pensando realmente-¡Debería robármelo?-
-Estas enfermo-dice el gamer riendo divertido al fin y BB lo acompaña en su risa.
-Enfermo y también soy muy observador-dice sonriéndole extrañamente-El rubio no ha despegado sus ojos de ti desde que vio que dejaste de observarle-
-¿De qué...-sin poder evitarlo voltea su vista hasta donde recordaba esta su blondo ex-novio viendo como este desvía la vista rápidamente. Ignora al oji-rojo diciéndole algo como que va a irse a molestar a Light y solo se concentra en el rubio. Tan sexy e imponente como siempre, las mujeres y hombres se arremolinan a su alrededor, como si fuera un famoso... una deidad.
Puedo verte bañándote en la luz de verano, bronceándote por completo.
Creo que tienes juego, chico, juego*, chico... (Capacidad de seducción)
Matt está en el balcón, un poco alejado de todo el alboroto allá adentro, fumándose un cigarrillo acompañado del silencio de la noche y las estrellas. Siente como su cigarro le es arrebatado de las manos, voltea su rostro y parpadea un par de veces... no ha tomado tanto ¿o sí? El rubio da una fuerte calada al cigarro antes tirarlo al suelo y aplastarlo. Se quedan así en silencio un tiempo, mientras Keehl ve hacia el horizonte y Jeevas no puede despegar su vista del rubio.
-Me enteré de que nunca te fuiste-dice el blondo sin dejar de mirar hacia el frente en un punto sin específico-De hecho me enteré de que nunca hubo un "amigo" y tampoco pensabas marcharte-dice ahora viéndolo con los ojos fríos.
-Yo... M-Mello yo solo quería...-no encuentra las palabras mientras sus ojos vuelan hasta el piso-Lo siento-es lo único que puede decir.
La sonrisa del chico de ojos azules lo asusta mas, porque es una sonrisa de esas sinceras que solo muy pocas veces le dio, su corazón comienza a latir más fuerte cuando el rubio le extiende la mano.
-Mucho gusto, cachorro. Seré tu compañero-dice extendiendo su brazo-¿Cuál es tu nombre?-
-Mi nombre...-dice el gamer con sus ojos brillando de nuevo-Mi nombre es Mail Jeevas... solo Matt. ¿El tuyo?-dice tomando su mano para estrecharla.
-Mi nombres es Mihael Keehl... para el mundo, solo Mello-
Y es así, tal vez solo tenían que volver a empezar de cero y ser buenos compañeros y dejar el pasado atrás... O solo, tal vez volver a empezar recordando tan solo los buenos momentos y ser quizá, algo más que amigos.
Él amaba Guns and Roses, él amaba Guns and Roses...