Capítulo 1: Una Tranquila Vida Normal
Era una tarde de verano, las vacaciones estaban comenzando y yo daba final a mi romance numero 16 si numero 16 no es que los enumere no es que sea una prueba de presumir simplemente estaba nuevamente frente a mi pareja y finalizando una relación que prometía bastante.
Anahí Rosst, 17 años, fanática de las series y películas de Disney tengo el cabello de un color castaño claro soy de una estatura media 1.65 mi cabello es corto y a la altura de mi cuello y mis ojos son de un color esmeralda similares a los de mi padre. No soy popular ni una chica problemas son muy tranquila y seria al menos así me conocen familiares y amigos. No me cierro en pensamientos e imaginaciones de hecho acepto a todo tipo de personas y con un pensamiento más estrecho que el mío me refiero a que todo tipo de personas para mí son asombrosas ya sea por su forma de pensar por su forma de ser e incluso ideales creo que la personas siempre van a tener algo nuevo que las vuelve diferentes y especiales pero para los ojos de los demás es anormal e incluso raro.
Para mi suerte era lo que había encontrado en el Allan era un chico que cursaba el semestre conmigo, digo cursaba porque estas vacaciones decidió cambiarse de colegio ya que no quería estar cerca de mí, creo que nuestro rompimiento lo afecto bastante, trate de hablar con él pero sus amigos y familiares me lo negaron no paso más de 2 días y estoy ya era un alboroto me resigne y volví a mi rutina, porque terminaba mis relaciones tan pronto por el hecho de ver que las personas que conocía eran asombrosas pero de una mente tan estrecha que me enamoraba su forma de expresarse su forma de actuar y su ideología en cuanto Filosofía me enamoraba pero él no era lo que mis ideales esperaban ya que más allá de su corazón era muy cerrado.
Lo cual me desilusiono y finalice esto que pal era perfecto y para mí una pérdida de tiempo.
Era el comienzo de las vacaciones por lo cual mis padres decidieron mandarme a casa de una tía mientras ello trabajaban ya que ellos creen que la casa para mi es una gran responsabilidad mi tía no vivía tan lejos de mi casa a unos 15 minutos caminando era demasiado cerca pero fui a instalarme un tiempo ahí, tome mis pertenecías más preciadas, mi teléfono, mi laptop, libretas, colores,plumones,marcadores, tizas, bolígrafos, acuarelas, amo dibujar es mi pasión ya sean personas, paisajes, personajes y más así que todo esto llevaría conmigo aparte de mi ropa, mi tía me instalo un cuarto en una recamara vacía me puso un escritorio con una silla de madera, una cama ya tendida con sábanas y colcha una almohada, un ropero de madera bien cuidado, y lo mejor era que lo había puesto todo bien ya que de mi escritorio tenía enfrente una ventana que me dejaba ver la calle.
Desempaque todas mis cosas y fui a la cocina donde me esperaba con un plato de espagueti mi tía dio varios comentarios y sermones sobre mi relación con Allan pero no le di importancia cuando acabe coloque mis trastes sucios en una tina donde colocábamos los trastes sucios luego de eso le dije "Gracias por la comida" y le pedí permiso para salir.
Vi a varios vecinos que estaban jugando patinetas y algunos fútbol también otros que estaban solo conversando sentados en una banqueta otros comiendo cosas que acaban de comprar en la tienda, pero todos convivían eso me llamo mucho la atención, a pesar de que tenía amigos en vacaciones no hablamos bastante ya que salían de "vacaciones" con sus familias o a pasar el tiempo ellos solos pero no frecuentábamos ver aquellas personas me inspiro a ir por mi libreta y un lápiz dibujar ese escenario mientras nadie se diera cuenta ya que me da vergüenza mostrar mis dibujos.
Cuando regrese me senté debajo de una árbol que hay afuera de casa el único lugar donde no llamaría la atención de los demás y comencé a dibujar me gusto como iba quedando que no note cuando alguien llego a mi lado.
Cerré mi libreta por impulso y voltee a verle era una chica de un aspecto agradable cuando vi su sonrisa en sus labios, su cabello era un rubio que estaba despeinado pero arreglado por eso podía deducir que su personalidad era extrovertida y solo nos miramos sus ojos no paraban de brillar o solo era mi ilusión eran de un azul cielo, mar, eran lindos. Quien diría que esa tarde de mis vacaciones todo cambiaría...
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