Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

The Family Jewels por Yatziriid

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Porque si hay una cosa que puede hacer por Bucky Barnes es darle la maldita oportunidad de elegir.

Noreste de Europa, cerca de Lituania.

 

Han estado moviéndose durante días y su determinación obstinada es lo único que los mantiene en pie. Sus costillas rotas han sanado, pero todavía le duelen y sabe que su cara es un lío de contusiones a medio desvanecerse. Bucky está peor, su factor de curación no es tan rápido ni fuerte como el suyo, todavía se siente fuera de balance sin su brazo y se apoya en Steve al momento de entrar a la abandonada base de HYDRA.

Esta base es similar a la de Siberia: Oscura, húmeda y abandonada.

Un escalofrío recorre la espalda de Steve cuando las puertas se cerraron detrás de ellos y piensa de manera absurda, que puede sentir el mal rondando este lugar.

— ¿Estás seguro de esto?—Murmura inconscientemente, hundiendo sus dedos en el costado de Bucky.

Bucky asiente y su voz se escucha cansada cuando responde.

—Tiene que haber un repuesto aquí, la base está casi intacta.

Steve aprieta su agarre y juntos bajan a tropezones por las escaleras en lo que él cree y está bastante seguro, es la boca del infierno. Intenta no mirar las varias piezas de equipo quirúrgico esparcidas por el lugar, que le recuerdan a los campos de concentración nazis durante la Segunda Guerra...

Dios, Dios

Su estómago se revuelve al mirar la silla, con las restricciones y los nodos eléctricos que están diseñados para adjuntarse a la cabeza de alguien. Puede imaginarse a Bucky aquí, con tremenda facilidad y el pecho le duele ante la furia y la impotencia que siente.

Está sintiendo todo esto, décadas más tarde.

Bucky mira a los instrumentos de tortura con lo que sería una calma antinatural, si Steve no pudiera sentir su miedo.

—Los gabinetes—Bucky rompe el silencio, señalando al fondo de la habitación—Allá, en la pared.

Steve deja a regañadientes a Bucky sobre la mesa de cirugía metálica y va a inspeccionar los armarios. Son viejos y el metal se ha oxidado lo suficiente para sellarlos. Los abre con dificultad, sus dedos sangran y él maldice y repentinamente desea su escudo, pero entonces, con la misma rapidez se dice a si mismo que no piense en eso.

Aún no.

El tercer gabinete le da lo que buscaba: Un brazo de metal de repuesto. No es tan sofisticado como el que Bucky perdió, pero está en buenas condiciones y, sinceramente, no pueden permitirse ser tan rejegos sobre esto.

Mucho menos cuando son fugitivos internacionales.

— ¡Lo tengo!—Le dice a Bucky y cuando se da la vuelta, lo ve enroscado sobre sí mismo, con las piernas flexionadas hacia su pecho y la frente recargada en sus rodillas. Le duele, verlo tan perdido— ¿Buck?—Pregunta, acercándose con cuidado.

Bucky levanta la cabeza y cuando le mira sus ojos están agotados.

—Lo siento—Responde en un murmullo, frotándose la cara. Sus dedos se contraen de manera sutil al ver el brazo en manos de Steve—Bien, lo encontraste.

A Steve le duele, le duele mucho ver a Bucky en ese estado. Le dolió desde que le vio caer de ese maldito tren, le duele ahora y le dolerá siempre. Comienza a acostumbrarse a la sensación.

— ¿Cómo se hace esto?—Termina por preguntar y ahuyenta sus pensamientos. Bucky le sonríe sin humor y se encoge de hombros.

—No tengo idea—Es su sencilla respuesta y hace que Steve resople frustrado, desde que esto comenzó, nada ha sido fácil ¿Por qué habría de empezar a serlo ahora?

—Está bien, ¿Crees que las instrucciones se encuentren en alguna parte?

—Tal vez…—Bucky vacila mientras inspecciona la sala cavernosa—No puedo recordar. Todo es un desastre…—Niega llevándose la mano a la frente con exasperación.

—No te preocupes, lo buscaré—Steve detiene con rapidez a Bucky mientras le aprieta con suavidad el hombro sano.

Bucky se encorva con derrota, pero asiente. Se le ve pálido y muy frágil bajo las tenues luces fluorescentes. Y Steve lo ama y le llora en la misma medida, pero eso es otra cosa a la cual se está acostumbrando.

Busca por todos los gabinetes, armarios y cajones dispersos en la habitación y se encuentra con archivos en ruso que no puede entender, fotos que…

Dios, Dios, Bucky; quemaría a todos y todo si pudiera, pero es jodidamente tarde para lamentarse.

Al final, logra encontrar una especie de diagrama para el brazo de metal. Devuelve las fotos y archivos de nuevo en el cajón, sabiendo que van a estar en sus sueños durante años, y coloca el diagrama sobre la mesa. La mirada de Bucky es malditamente cómplice, pero Steve supone que no está haciendo un buen trabajo en esconder la palidez de su cara o lo mucho que aprieta su mandíbula. Por fortuna, él no dice nada, solo alcanza a arrancar el diagrama de las manos (demasiado apretadas) de Steve.

—Hay una oportunidad…—Dice después de un momento de silencio y luego susurra un leve y derrotado “Mierda”.

— ¿Qué pasa?—Steve se inclina de manera instintiva para ver el diagrama, a pesar de que no tiene idea de lo que dice.

—Está conectado a un manojo de nervios—Responde Bucky sombrío—Dolerá. Y mucho—Claro que va a doler. Bucky inhala y exhala con profundidad y con su mano de carne y hueso, agarra con firmeza el borde de la mesa—Haz esto…—Comienza a instruir a Steve, cortando las palabras tranquilizadoras sin sentido que este le iba a decir—…Gira lo que queda del brazo hacia atrás y tira, con fuerza.

Eres la persona más valiente que he conocido en mi vida, Steve lo piensa y se promete a sí mismo, decírselo más tarde a Bucky. Cuando ambos vuelvan a respirar con normalidad. Respira hondo y murmura un par de veces “Está bien”, “Está bien” como un mantra al cual aferrarse en este momento tan complicado.

Él puede hacer esto. Él tiene que hacer esto.

Toma los restos del brazo antes de que pueda arrepentirse y lo hace girar hacia atrás y tira. Con fuerza.

Bucky grita.

Steve aprieta la mandíbula para soportar el sonido, para mantener a Bucky acostado en la mesa y poder retirarle el brazo dañado. Bucky pelea con él, trata de separarle a la vez que grita porque el dolor que siente le desgarra desde dentro y amenaza con no detenerse. Grita, como si Steve lo estuviera matando.

LosientoLosientoLosientoLosiento

El brazo, por fin, es retirado y Bucky se desploma sobre la mesa, jadeante. Su rostro esta surcado en lágrimas y Steve puede sentir el suyo de la misma manera. Así que limpia sus mejillas y se inclina hacia Bucky en donde enreda los dedos en su húmedo cabello, en una leve caricia porque esto le está consumiendo.

— ¿Sigues conmigo?—Le pregunta con suavidad y sigue inclinándose hasta presionar sus frentes con delicadeza.

Los ojos de Bucky están cerrados con fuerza debido al dolor, pero asiente. Permanecen en esa posición por un largo momento, cerca del otro. Bucky es el primero en romper el contacto.

—Sería mejor, colocar el nuevo brazo—El sentimiento implícito en sus palabras, prometía más dolor. Y Steve ya no quería provocárselo y se detiene a sí mismo de besarlo, porque eso es otra cosa de la que no han hablado y no tiene idea de si Bucky le besara de regreso o lo estrangulará. Lo primero sería bueno, pero Steve ha trabajo muy bien en enterrar todos estos impulsos así que la solución fue plantarle un beso en la sien antes de alejarse.

El brazo nuevo es más sencillo de colocar pero Bucky aun solloza en agonía por el dolor y Steve no se siente en absoluto sorprendido cuando al acabar de colocárselo, el otro vomita sobre el borde de la mesa. Le frota la espalda mientras espera a que las arcadas de Bucky se detengan. Y piensa que esto es lo peor aun cuando sabe que no lo es.

—Lo siento—Se disculpa Bucky al tiempo que se recuesta con desgana en la camilla de nuevo.

Steve odia verlo tendido en ella sobre todo, con los instrumentos de quirófano tan cerca, pero cierra la boca y niega, tomando la mano de carne y hueso de Bucky.

—No es tu culpa.

Bucky aprieta su mano brevemente, dándole una sonrisa triste. Sus ojos se cierran de nuevo y Steve le da un momento, entrelazando sus dedos mientras observa el ascenso y descenso del pecho de Bucky y se recuerda a sí mismo que están vivos y por primera vez en años tienen un futuro por delante.

— ¿Ahora qué?—Bucky pregunta sin abrir los ojos.

Y Steve sonríe, irremediablemente cariñoso y con el corazón roto.

— ¿Qué quieres hacer?

Porque si hay una cosa que puede hacer por Bucky Barnes es darle la maldita oportunidad de elegir.

—Tengo que cortarme el cabello—Decide después de una pausa embarazada e inclina su cabeza mientras ve a Steve con ojos enrojecidos—Probablemente, deberíamos de teñir el tuyo y he escuchado que París es agradable en esta época del año.

 Steve se ríe, triste y asiente.

—Yo también lo he escuchado, no he ido desde la liberación.

— ¿Y qué estamos esperando?—Pregunta Bucky y sonríe y esto le parte el corazón a Steve porque le hace parecer como lo que solía ser. Y cuando se trata de poner de pie, tambalea pero no cae y Steve se acerca a ayudarle con algo parecido  a la admiración inundando su pecho.

Te amo piensa con desesperación Y mucho

—Debemos hacer estallar la base—Es lo que dice en su lugar y la expresión de Bucky se endurece y una mueca de sombría satisfacción se forma ante la sugerencia.

—Buena idea.

Así que colocan lo que parece una sobreabundancia de explosivos, pero el infierno que provocan y que pueden admirar desde el exterior les produce una satisfacción oscura.

Por los menos, él puede darle a Bucky esto también. Esta cosa pequeña e insignificante. Patética.

Notas finales:

Esto será una compilación de one-shots que por alguna razón no prosperaron o bien, fueron partes recortadas de mis otros fics publicados. 

Se actualizará de manera ocasional. 

¡Gracias por leer!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).