-¡No puedo voy tarde al instituto!-responde un Taemin agitado a un amigo que le había propuesto ir a un soda bar
Y es que quien quisiera llegar tarde los días lunes, miércoles y viernes, días en que le tocaba clases con su maestro más estricto de todos, el de literatura, puede sonar una materia fácil pero de la manera en que la hacía ver el profesor era lo más complicado del mundo incluso llegaba a pensar que física, matemáticas y química eran pan comido en comparación.
Era su maestro más estricto, era el que si llegabas medio segundo tarde a clases quedabas fuera de ella y llamaba a tus padres.
Era el maestro que no hablaba con nadie, no interactuaba con sus alumnos después de clases a menos que tuviera una duda sobre la tarea.
Y es que sentía que su maestro lo odiaba porque la rara vez que lo volteaba a ver era con una mueca en su rostro como si sola presencia le molestase.
Llega corriendo al instituto los alumnos no están dispersos en el patio, clara señal de que las clases están a punto de empezar o, para su desgracia, ya han empezado. Estudiaba en un instituto solo para varones donde las reglas y maestros eran extremadamente rígidas, sus padres lo habían puesto en este porque consideraban que su hijo estaba "fuera de control" lo cual para él era ridículo más bien sonaba a una excusa de sus padres para deshacerse de él por más horas de las que pasaría en un instituto normal.
Estando a solo unos cuantos metros de su salón alguien lo detiene
-Oye...-un chico topa su hombro haciendo que se detenga-disculpa soy nuevo y... ¿me podrías indicar dónde queda la oficina del rector?
En otra ocasión habría ignorado el pedido pero aquel chico se veía tan perdido que tuvo la paciencia de decirle con exactitud el camino que debía seguir
Llega a la puerta del salón pero toca la campana, las clases han iniciado, escogió un mal día para llegar tarde era viernes el día en que su maestro se portaba aún más insoportable, pero tenía que intentar entrar así que abrió la puerta lentamente rogando internamente que su maestro no se encuentre allí adentro.
Sus suplicas no dieron frutos al abrir la puerta el profesor se encontraba pasando la lista, el maestro al escuchar la puerta abrirse volteo sorprendiéndose de encontrar a un alumno allí cuando todos saben sus reglas acerca de llegar tarde, suspiro, mientras masajeaba el puente de su nariz cansado, se dirigió hacia la puerta apoyándose con una mano en la pared mirando a su alumno de pies a cabeza con su clásica cara inexpresiva, aburrida más bien.
Mientras que a quien había osado llegar tarde sus compañeros lo miraban con compasión a uno, pudo jurar, que lo vio rezando supuso que por él, otro gesticuló con la boca un "pobre de ti"
"Ya valí “pensó, cerró los ojos para esperar el regaño, que había visto le otorgaba su maestro a quienes llegaban tarde, incluso en una ocasión había pasado media hora hablando sobre la importancia de la puntualidad.
-Y bien... que espera para entrar alumno Lee
-¿Qué?-no pudo evitar preguntar
-¿No me escucho? adelante la clase está a punto de empezar
-Pe-pe-pero
-Adelante-repitió exasperado
Sin decir más entro con sus compañeros sorprendidos unos con la boca abierta, literalmente, confundido tomo asiento su compañero de pupitre se le acerco mas
-Tae porque te dejo entrar-le dijo susurrando
-No lose
A decir verdad Taemin ni siquiera creía que su maestro supiera su nombre o lo reconociese
-Supongo que hoy está de buen humor
-Quizás pero…
-Debo decir que no me gustan los murmuros en mi clase-dijo el maestro llegando detrás de su escritorio, mirándolos acusatoriamente-son molestos-bajo la cabeza buscando una página en especial en un libro-bien el trabajo acerca de escribir una historia-redacción que contenga todos los elementos que vimos en nuestra última clase sáquenla-todos obedecieron-y...¿quién desea comenzar leyéndolo?
Nadie salió como voluntario con justa razón una de las partes más temida de la clase era exponer un trabajo en frente de aquel maestro que te observaba expectante como esperando que te equivoques
-Ya que nadie se ofrece yo escogeré- entrecerró los ojos observando a su clase Taemin no se sentía con temor a que lo escogiesen no porque no temía exponer su trabajo frente a aquel hombre que imponía temor sino porque jamás lo escogía quizás por ese odio que suponía su maestro le guardaba-Alumno Lee usted inicia
Abrió los ojos de par en par sería la primera vez que hablaría en esa clase, quizás esto de exponer puede sonar pan comido pero cuando tienes a un maestro así hasta eso puede ser un verdadero reto. Sus compañeros incluso pensaban que aquel maestro tenía una mirada tan penetrante que dejaría sin habla a cualquiera.
Se levantó con una hoja entre sus manos, las cuales temblaban, miro a su maestro por última vez quien con asentir le di permiso para que comience.
Y lo hizo, bien supuso, sus compañeros lo escuchaban atentamente incluso, pudo asegurar, vio que su maestro hizo una sonrisa imperceptible, era signo de aprobación.
La clase transcurrió lentamente al sonar la campana todos se habían retirado menos Taemin que aún recogía sus cosas
-Alumno Lee venga un momento-le dijo su maestro que estaba sentado en la silla tras su escritorio obedientemente fue hasta allí su maestro sonrió un poco más, era la primera vez que lo veía hacerlo
-¿Siii profesor?-se apoyó en el escritorio
-Felicidades trabajo fue muy bueno fue casi...wao cuando era aún más joven también me gustaba escribir
-Gracias-sonrió satisfecho
-Pero hasta un gran escritor puede tener un gran defecto... ¿usted conoce mis reglas sobre la puntualidad?
-Si
-Y sabe que no está permitido llegar tarde
-Si
-Se arrepiente de haber llegado tarde
-Si
-Bien es todo lo que quería escuchar puede retirarse
"Porque no me regaño o me castigo” pensó, prefirió irse sin preguntar más, pero cuando llego a la puerta la voz de su maestro lo detuvo
-Que no se repita-volteo a verlo, estaba escribiendo en un cuaderno-no quiero que los demás alumnos se den cuenta del trato especial que le doy a usted
-¿Trato especial? yo considero que me trata como a todos-vuelve hacia él quien al verlo acercarse cierra de golpe el cuaderno en donde escribía, mientras lo escondía
-¿Sabe usted cual es mi nombre completo?
-No
-Choi Minho
-Oh no lo sabía
-Ahora en este momento no soy ni maestro ni profesor solo Choi Minho un adulto de 25 años que está hablando con usted señor Lee y como adulto diferencio las cosas con más tino que usted que solo es un adolescente de 16 años
-17-corrigio-bueno casi 17, los cumpliré en dos meses
-Como sea...
-Bueno no entiendo a qué se refiere con trato especial
-Simple ¿sabe por qué no lo regañe porque llego tarde a clases cuando a los demás el regaño los dejo fuera y mando a ver a sus padres?
-No lose
-¿Sigue pensando que no tiene un trato especial?