Agosto 2012 – Casa Stilinski
La noche se encontraba más oscura que las demás, en el aire se respiraban el desasosiego y melancolía, mientras unos ojos verdes no apartaban la mirada de una ventana abierta, de cierto chico pecoso. El sinsabor era envolvente en el ambiente, el cual hacia que el lobo tome control en ese momento.
Tenía ante sus ojos aquel muchacho, desbordando el desamor en cada poro de su piel. Pocas veces se encontraba con personas que merecieran un final feliz… y ante él se encontraba una en extinción. Sus pasos eran silenciosos, y solo pensaba el desaparecer el desconsuelo del entorno.
No podía el controlar sus movimientos, sus manos fueron a su rostro y sus labios sellaron aquellos suspiros. Pudo sentir la sorpresa del menor desvaneciéndose ante una sensación agradable. Todo su ser pedía marcar cada centímetro de esa piel salpicada de lunares apetitosos.
Las ropas se desgarraron ante el anhelo a sentir el cuerpo ajeno, los sonidos obscenos no tardaron en escucharse. Se podía respirar la libido desbordante de ambos seres, que les hipnotizaba a volverse uno.
Se encontraba en trance al profanar aquel virginal cuerpo... sintiéndose rodeado por la calidez de su interior, esa estreches abrumadora. Si tendría que nombrar del cómo se sentía… se declaraba adicto a la sensación, nunca lo diría… pero había hallado una droga, una de exquisito sabor y la cual dudaba abandonar. Por ello se adentraba con agresivas estocadas, resonando en el cuarto el impacto de los cuerpos en una intimidad indescriptible.
Dejándose llevar por la lascivia, tardo en percatarse de un olor metálico, su mirada se dirigió al rostro del menor; y vio las lágrimas recorrer sus mejillas y sentir el dolor de aquel cuerpo bajo el suyo… y oyó los jadeos de placer de sus labios hinchados perlados… Había lastimado su cuerpo, había manchado aquel ser de pureza, pero ambos estaban disfrutando de la satisfacción carnal.
Los susurros de su cabeza le pedían exigir como suyo al muchacho. Llegando al clímax, pero aun así sus caderas no paraban las embestidas, queriendo profundizar su esencia en él.
03 de Noviembre 11:57 pm - Estación de Trenes
Vio al resto de su manada bajar por las escaleras mientras escuchaba a Scott reclamarle el trato que tenía con su amigo, a veces el mismo se cuestionaba si necesita al latino en su manada… lo más rescatable del menor era que paraba al lado de Stiles.
- De repente se fue con su amiguita – dijo el exkanima a la ligera.
Sin evitar le dirigió su mirada patentada “en serio?” pero ninguno lo comprendía, no se encontraba quien si entendía su lenguaje de cejas.
- Ya estará en problemas por irse solo – dijo en tono hostil.
- Porque tú lo botaste! – grito Scott
- No soy su niñera.
- Quería organizarte una fiesta!
- No se la pedí
Aunque la verdad le había sorprendido que averiguase su cumpleaños, hace años que nadie se tomaba la molestia de saber algo sobre él, que no fuera donde se encontraba en una noche de un asesinato. Ese detalle le hizo sentirse especial, por algo tan simple… pensó que si podría festejar su cumpleaños, claro no al lado de adolescentes ni mucho menos en una fiesta. El estar debajo de cierta piel repartida de pecas… esa era una mejor idea.
Deseo darle gusto en algo al niñato, pero esas fulanas mitológicas debían ser exterminadas ya! Y aunque ahora se ve como el Villano al estar manchado de sangre, no lo era. Stiles siempre le repetía que él no era el malo de la historia.
El como Alpha debía ver de la seguridad de su manada y del pueblo. Las muertes repentinas puede que hayan sido por una bruja, la cazaron pero al ver que se largó desecharon la idea. La muertes seguían y las ninfas nunca se fueron… ellas eran las verdaderas culpables. De seguro sedujeron a Stiles para que las defendiera… atreviéndose a retarle más de lo acostumbrado.
Si, definitivamente debían ser eliminadas… para que todo volviera como antes. Así dejar de sentir esa inquietud al ver que no llegaba a sus encuentros el menor. Todo volvería como antes ahora que ellas ya no estaban…
02 de Noviembre 07:15 pm - Centro Comercial de BH
El cielo se veía raro, y más raro era que él se percatara de ello. De pronto vio la pantalla de su celular alumbrarse, un mensaje de Derek. El día seguía de Raro y Extraño. Al parecer mañana tendría salida de manada, genial… perros suelto a la luz de la luna llena.
Mientras intentaba prestar algo de atención a su Pelirroja favorita… pero a quien engañaba? mejor seguía con su frappuccino y la vista a la nada. Tal vez esa pareja podría ser interesante, las pelirrojas eran intensas, ese debilucho tenía suerte. Aunque se le hacía conocido, no era Stilinski?
Bueno para bien dejaba su fantasía con su novia, o se volvería asexual. Aunque lo rarito no se le va a quitar. Definitivamente los días anormales de Beacon Hills estaban de vuelta.
03 de Noviembre 10:38 pm - Bosque
Intentaba ocultar su sonrisa enamoradiza, pero los mensajes de su Scott le iluminaban su rostro. No iba a negar que por un momento pensó que iban a ser enemigos naturales por lo sobrenatural que les rodeaba. Pero siempre hay un Plan B y un amigo bocazas que de pronto apoyaba su relación… y daba porras para seguir luchando por su amor.
Le hubiera gustado ayudarlos en su fiesta, pero que su padre le pidiera de pronto que le acompañara a su ronda le preocupaba algo. Aunque de por sí ya le daba malas sensaciones el hacer esas rondas entre cazadores. Quería una vida tranquila de adolescente con su novio hombre-lobo, si todo normal en su día a día.
Se percató que se había alejado del grupo, por suerte se habían detenido. No quería quedarse sola en el bosque, por lo menos esta noche no, que se sentía tétrica, con el viento helado susurrando en su cuello.
- Estén atentos, la noche se impregno en muerte.
Escucho decir a su padre, y el derramamiento de sangre la dejo desconcertado. El ver los cuerpos de mujeres hermosas quietas pareciera como una sección de fotos pero estas eran pálidas y ensangrentadas con arañazos alrededor de su cuerpo. La vista era de una película muy gore.
No habían tenido noticias de la bruja hace semanas, y Scott le había comentado que Derek afirmaba la huida de la bruja… así que si no era un ritual perverso, un psicópata estaba suelto.
- Pobre muchachas – Había dicho el nuevo cazador, David era?
- Eran Ninfas – había respondido otro cazador.
03 de Noviembre 10:55 pm – Bosque
El menor no aguanto más su rabia, ese deprecio hacia su mejor amigo/hermano por parte de Derek era imperdonable, y se lanzó a darle alguna golpiza a ese remedo de Alpha. Pero Body lo paro, antes de llegar siquiera a tocarlo.
- Ey, mira que las brujas aun están sueltas.
- Las Brujas y las ninfas ..
- Ahora la amiga stiles – ironizo Issac
Érica observo a su amigo rubio, el hacía quedar muy mal a los rubios… de pronto recordó que Stiles si le había mencionado una amiga, que había conocido desde hace unos días. Una mujer que apareció de pronto y se ahora era amiga de su Batman.
- Desde hace un mes, vienen estos atentados McCall – expreso Body
- Tal vez la amiga de Stiles era la Bruja – seguía de bocazas Issac
- U otra Ninfa .. una sexy pelirroja – Dijo Jackson.
El mayor de los presentes, empezó a ignorar a sus betas y aquel sentimiento de inseguridad, Stiles con sexy pelirroja? Ha de ser broma, ya había superado su amor platónico. No era posible que el niñato le fuera infiel, el no… aparte lo hubiera sentido u olido. Solo a veces detectaba el olor de ninfa rodear lo que era suyo.
Pero tenían razón en algo, hace un mes que sentían la presencia de la bruja y las ninfas… pero desde hace unos días las ninfas se habían vuelto agresivas y los asesinatos apuntaban a… “son seres de naturaleza no homicidas” sintió susurrar a su pecado andante.
- Trama, era una trampa
- Como?
Y recién se percató que no lo sentía, y la verdad es que desde ahí lo sentía sin importar la distancia. Cuando se alejaban luego de sus encuentros podía vigilarlo, olerlo, escucharlo y sentirle como si lo estuviera acompañando hasta su casa. Pero ahora no alcanzaba a oler su exquisita piel, escuchar su palpitar dinámico, no sentía nada. Solo un frio de soledad.